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Grafiti clásico vs Arte Urbano
Reportaje en profundidad sobre las dos tendencias artísticas que hay en la calle
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El grafiti clásico
Lunes. Son las ocho de la mañana del 9 de julio de 1975. Parece raro que una estación de metro esté plagada de chavales en periodo de vacaciones. Pero estos chavales escriben grafiti y quieren observar qué se cuece en las líneas 2, 4 y 5 del metro de Nueva York. Estas líneas confluyen en la estación del Grand Concourse, ubicada en el cruce de la 149-este y el Concourse. El punto más caliente del momento.
Cuando los trenes están parados durmiendo en sus garajes y apartaderos, seguro que aparecerán maquillados por la mañana. Los escritores emplean mucho tiempo en observar, seguir y cuantificar los lugares a los que los trenes irán cuando terminen su servicio. Lo registran todo en sus memorias. Conocen los horarios de todas las líneas, sus recorridos, el tiempo que pasan los trenes en las estaciones… todo. Trabajo de observación y planificación. Una vez que saben el margen de horas que un tren no circulará por las vías, planearán la noche. Saltarán las alambradas o se introducirán por los andenes en los apartaderos subterráneos y pintarán toda la noche allí a oscuras. Más tarde, cuando el tren para en las estaciones, buscarán la obra hasta fotografiarla antes de que las autoridades la reduzcan a la nada.
Por eso, los escritores que llegan- cada vez hay más-, no pierden de vista los trenes que van pasando. Algunos traen cámaras de fotos porque seguramente esos trenes no vuelvan a circular con esas obras. Entre ellos se reconocen aunque no sepan sus firmas (tags), ya que no hay ninguna razón para que un lunes de vacaciones a las ocho de la mañana unos chavales de instituto se encuentren despiertos. Existe una camaradería tácita entre ellos, aunque no se conozcan. Todos llevan sus blackbooks consigo, los libros encuadernados en pasta negra gruesa que se pasan unos a otros para conseguir incluir en ellos las firmas de los mejores de la ciudad, de los maestros del estilo.
Entre la multitud de chavales que pululan por Grand Concourse y lo calientan -porque cada vez llegan más y más escritores- se encuentra LEE con sus colegas, los demás FABULOUS FIVE (MONO, SLAVE, SLUNG y DOC). Son los reyes del momento, sin ninguna duda; de los primeros en aventurarse a vagones enteros con estilo y técnica, los wholecars. El pionero PHASE 2, que inventó las letras en forma exagerada y redonda, estilo pompa o bombing, mira siempre sus obras y se ha dejado caer por el Grand Concourse también. LEE está en la cumbre, todos le admiran. Es el rey del estilo. Acaba de pintarse un wholecar con una inmensa pintura mural durante el fin de semana.
Se corrió el rumor y dos de los antiguos EXPERIENCE VANDALS han venido a verlo: DINO-NOD y WICKED GARY. Los EX/VANDALS, primeros escritores en actuar en grupo, gozaban del respeto hasta de los “Black Spades” (principal banda callejera violenta de Brooklyn en los 70). Los EXPERT VANDALS surgieron a finales del año 1971 y su actividad cesó en 1972. Compitieron con los VANGUARDS a ver quién escribía más veces su tag y ganaron la batalla. Sus siglas más famosas, inscritas en la calle junto a “EX/VANDALS” eran “WBYA”: We Bust Your Ass. Todo el mundo los conocía, se organizaron como un ejército y su sello se leía por toda Nueva York. De pronto, muchos escritores aseguraban formar parte de los EX/VANDALS, pero mentían. Ya no quedaba claro quién pertenecía realmente al grupo. Los originales aún visten su chaqueta decorada al estilo de las bandas callejeras violentas- característica de los EX/VANDALS, a pesar de que ellos nunca usaron la violencia- para diferenciarse de los demás escritores.
Por fin, a las ocho y media, llega el tren que los FABOULOUS FIVE han pintado durante la madrugada del sábado. La gente que en ese momento espera al tren queda extremadamente sorprendida. Gente que va a trabajar, por un momento ha dejado de pensar en el trabajo y han quedado boquiabiertos con la obra. “¡Los FABULOUS FIVE, tenednos en mente!” grita un orgulloso LEE.
Los escritores más pequeños comienzan a rodear a LEE, abren sus blackbooks, todos quieren su firma. Puede, si hay suerte, que LEE vea algunos de los dibujos del dueño y decida “apadrinar” al escritor más pequeño si le gusta su estilo o ve algo en él. Le enseñará todo lo que sabe sobre los trenes y cómo pintarlos. Sin embargo, LEE se pone un poco nervioso, están llamando la atención. Entre los escritores se rumorea que policías camuflados vestidos de paisano merodean por el Grand Concourse… Incluso ha llegado a escuchar que algunos escritores chivatos hablan con la policía… Él no tiene peleas con nadie, pero nunca se sabe… Entonces, les manda callar a todos. Esto calma rápidamente los ánimos, pero cada vez vienen más escritores. En círculos y en voz baja comentan y critican el estilo FABOULOUS FIVE. Usan muy bien el estilo y queman los vagones. Así, PHASE 2, los elogia doctamente bajo sus gafas de sol−. ¡Esto sí que arde! Han aplicado bien los brillos y han degradado los colores. Qué vicio, chico.− Otro de los EX/VANDALS un poco receloso, dice−Ya no eres un toy, eh LEE… sin errores.−Le da la mano y le guiña el ojo. El tren que acaba de pasar era una locura. Las letras se apreciaban, pero son parte del paisaje dibujado. El color rojo, el amarillo y el azul llenan las letras robóticas y metalizadas desde arriba hasta abajo del vagón de tren sobre un fondo espacial. Todos los allí presentes, escritores o no, se han quedado mirándolo.
El estupor dura hasta que pasa otro tren. Esta vez inscrito con unas pompas desiguales y feas, solo se pueden leer dos letras la “I” y la “N”. Entonces PHASE 2 se cabrea, cualquiera se cree que puede usar su estilo.−¡Mirad a ese toy…!−exclama con rabia.
Este fue el inicio de lo que más tarde se consideraría “la vuelta del bombardeo”. IN, un desconocido que coloreaba y trazaba mal, poco a poco comenzó a multiplicar sus throw-ups, obras de pésima calidad y estilo. Pero en poco menos de tres semanas, LEE ya no es el centro de atención aunque siga siendo de los mejores en cuanto al estilo. Todo el mundo habla de IN.
En el mundo del grafiti La Fama es más importante que El Estilo. IN sería condecorado de manera informal, en el Grand Concourse, como el “Rey de Todas las Líneas”. Las dos letras que componían su firma llegaron a inundar Nueva York entera. Durante la “Era IN” los maestros del estilo, los artistas hábiles y originales con el bote de espray, quedaran desplazados durante un tiempo de La Fama.
¡IN llegó hasta los 10000 throw-ups…!
Si el throw-up está por todos lados, aunque sea de baja calidad, los escritores de grafiti no tienen más remedio que respetarlo porque inunda todos los sitios, sus firmas se cuentan por miles, se deja ver y todos los conocen. Además, la práctica conduce a la perfección. Más tarde, IN se retiró, no sin antes completar un wholecar con unas letras más bonitas para demostrar que él también sabía cómo dominar el estilo.
Nunca se sabe lo que puede pasar en el mundo del grafiti. Siempre nacen nuevas tendencias con algo que las distingue que derroca a las vigentes.
El pionero PHASE2 en los trenes del metro de Nueva York a mediados de los 70. Se inventó el enormemente popular estilo pompa. Un estilo grafiti que hasta los mas toys copian.
Un difícilmente olvidable LEE, tío que pintaba un vagón entero una noche.
Un gran wholetrain por LEE
SLUG otro de los FABULOUS FIVE
Un throw-up de IN,el rey de todas las líneas
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Características del grafiti clásico
Las características del estilo clásico, por tanto, son las siguientes:
A. Al margen de la legalidad.
B. La relevancia en el individuo que lo lleva a cabo
C. La fama tiene un papel crucial entre los que lo practican
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Al margen de la legalidad
El grafiti clásico presenta cierta vertiente antisistema o contraria a lo establecido. Un(x) chaval(x) que coge un bote de pintura y pinta algo por ahí se salta la ley. Pese a eso, ocurre en todas las partes del mundo. Raro es quien no tuvo “firma en el instituto” (minuto 3:13). Algunos practican por moda, por ligar, por presumir, o porque realmente albergan la necesidad de sentirse libres o de decir/ dibujar algo en el espacio público...un sinfín de razones. Lleva ocurriendo desde hace miles de años, tal y como se reconoce en el documental “Mi firma en las paredes” (2:25).
La mayor parte de gente no espera a que el dueñ(x) de la pared (público o privado) otorgue el permiso. El hecho de ser escritor de grafiti no se considera “orden” o buena conducta. Dentro y fuera de los trenes que circulan por cualquier tipo de vía en fachadas, en monumentos, baños, marquesinas, contenedores, lugares abandonados, carreteras… en todos estos sitios hay pintadas y aunque las autoridades se esfuercen en eliminar siempre amanece nuevamente pintado. “Si no lo haces, no sabes si te dan permiso o no” reconoce SEMIYAKA, una experimentada grafitera afincada en el sur de la Comunidad de Madrid.
Algunos lo usan explícitamente como instrumento de lucha contra un sistema que les oprime, haciendo pintadas con críticas a la sociedad, fastidiando adrede a los comercios o demás entidades pintando en ellos sus mensajes con carga política/ social buscando la mofa o que la gente se conciencie.
Cartel de publicidad y negocio takeados
Claro ejemplo de que el grafiti expresa, la calle habla.
En las canciones del colectivo de grafiti y rap COSTRA RAP queda patente el odio hacia las clases dirigentes y su pésima gestión del planeta y de sus recursos y una fuerte crítica al consumismo, al trabajo y a la manipulación de los medios. Ejemplos claros son: “Mundo de locos” o “Cerdos”.
En algunos casos, a la gente le gusta esta vertiente de crítica o contraria al sistema de los escritores. El enigmático “art terrorist” BANKSY goza de popularidad entre algunos sectores aficionados al arte. Muchas teorías circulan acerca de su identidad, las últimas apuntan a que detrás del tag BANKSY podría esconderse el cantante del grupo
británico Massive Attack, Robert de Naja. Sus pintadas grafiti, que en ocasiones superan la pared, tienen un significado, un mensaje positivo o que desprecia al “estado de las cosas”: la forma de vida y los pilares de todas las sociedades tales como el patriarcado, la propiedad, la jerarquía del poder o incluso los hábitos alimenticios. En el documental “Banksy does New York” (2014) el espectador puede observar la expectación que genera entre la gente saber dónde va a aparecer el próximo Banksy.
Otros documentales sobre BANKSY
*Exit through the gif shop (2010)
*Graffiti wars (2011)
Actúa con la clandestinidad característica del grafiti, al igual que alguien que pinta en frente de la embajada Palestina en Berlín mensajes contrarios a la política del gobierno. Este es el caso de Mohammed Tayeb:
“Comencé a pintar grafiti en la calle en 2009, como una manera de expresarme. Reflejando la identidad de un refugiado. El grafiti en sí mismo es una forma de arte que coge el espacio público y lo convierte en un mensaje directo a la gente. Esto me inspiró a hablar de temas como los problemas de los refugiados y dar visibilidad a los problemas de los que no había nadie hablando.
Como para la autoridad el arte grafiti es algo mezquino no puedes crear trabajos en el espacio público. Esto te limita un montón y hace que estés siempre pensando en el riesgo que puede venir. No puedes ir solo a pintar porque necesitas a alguien que vigile. Solía escribir “me gustan los gatos porque no hay gatos policía”. Es la sensación de que la policía se convierte en tu enemiga porque estás haciendo arte fuera del “lugar apropiado”. Tuve un par de problemas con la policía en Madrid pero por suerte no tuve que pagar ninguna multa, ellos solo me hicieron irme porque estaba pintando en lugares abandonados. Hay un método diferente en Alemania, hay algunos muros que te permiten ir a pintar si puedes hacer un arte mejor que el que estaba antes, sería genial si esto llega a España.”
En las siguientes partes del mundo el grafiti es legal. En estos lugares, si otro artista llega, puede tapar libremente lo que otro artista plasmó con anterioridad.
youtube
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Relevancia en el individuo creador
El sujeto que lo practica lo aprende por su cuenta. No existen escuelas de grafiti. Como mucho un grupo de amigos, pero el estilo es algo que se adquiere practicando individualmente. Además, si se quiere llegar a maestro del estilo, no se puede copiar a nadie.
El escritor de grafiti clásico siempre lo hace de manera clandestina. Esto da pie a que el sistema nervioso se hiperactive de una forma natural. Incrementa el ritmo cardíaco, la respiración y las pupilas; dilata los vasos sanguíneos de los órganos más importantes, detiene la actividad intestinal y echa mano de las reservas de glucógeno para que los músculos puedan responder al máximo: máxima capacidad humana. Esto causa adicción. El grafiti se asocia con la locura, la adrenalina y un estado salvaje humano de los que practican algo que está prohibido y necesitan estar alerta.
Nadie, en el grafiti clásico, realiza una obra sin identificarla. Es por eso que la mayoría de obras siempre constan del nombre bien destacado del que lo ha hecho. Hay grafiteros que consideran que contribuyen con un servicio público a la sociedad. Pintar, decorar y en definitiva llenar de color las calles no son actos dañinos. La madrugada del 4 de julio de 1976 CAINE, MAD 103 y FLAME ONE no se conformaron con un solo vagón sino que quemaron el primer wholetrain. La obra se tituló “The freedom train” y constaba de varios motivos pictóricos en relación a los 200 años de los Estados Unidos conmemoraban historicamente. Los autores fueron arrestados porque alguien los identificó ante la policía.
Por eso, muchos de quienes pintan solo se divierten y le dan su toque personal a los espacios urbanos. Surge de la necesidad humana de expresarse y muchos estudiosos lo consideran como una parte muy viva del arte contemporáneo que no se puede ignorar. Así lo reconocen Juan Camilo Chacón Cervera y Óscar Julián Cuesta- Moreno, investigadores Colombianos, en su artículo “El grafiti como expresión artística que construye lo político: pluralidad de mundos y percepciones”.
“Las expresiones artísticas reflejan las relaciones y dinámicas sociales y culturales (…) En oposición con la política, el arte no obedece a esos parámetros institucionales establecidos por un orden determinado, los cuales visibilizan aspectos y características desde perspectivas hegemónicas. Observar la expresión del grafiti en el espacio público, como creación artística que posibilita la memoria cultural, como universo simbólico que permite la construcción de mundos propios y, desde allí, la tensión y el diálogo con otros mundos posibles.”
BEYKON es un artista revival que hace gala de un estilo neo-vomitado. El estilo vomitado o feo trata de imitar una estética fea o mala. De los más difíciles de dominar. En los primeros tiempos de grafiti era un estilo bastante extendido.
Ejemplo de un mural del interior de la Tabacalera.
GUOS, escritor muy famoso en Madrid por su presencia en muchos cierres del centro de la capital nacional.
MENDA es otro de los que más se dejan ver actualmente. La reminiscencia a MUELLE queda más que clara.
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La fama tiene un papel crucial
Otra característica del grafiti clásico: la importancia que en él alberga la fama. Cualidad reservada solo para los que se hallan en la cumbre, por ser maestros del estilo o por la omnipresencia de sus tags o sus throw-ups.
Aquí abajo, un ejemplo de uno de los Grandes de España: SMAK 47. Está ubicado al lado de una comisaría de Policía nacional
Llegar a la fama, encontrarse entre los nombres principales de un país requiere de muchísimas dosis de riesgo y locura pero trae como consecuencia lo que en el mundo del grafiti se considera ser The King: ostentar respeto máximo y ser la moda entre los escritores. Una posición privilegiada labrada con horas y esfuerzo que pocos están dispuestos a soportar durante mucho tiempo.
KORS: el más famoso de los escritores españoles
Todos los grafiteros desean darse a conocer pero pocos realmente lo consiguen. Esta tarea requiere una actividad constante y prolífica. Encontramos escritores cuyo tag se puede ver en un pueblo, pero fuera de los límites de éste no hay ninguno. En cambio, otros escriben sus nombres con letras de cinco metros cuadrados cada una por varios lugares de una región, de un país e incluso por diversas partes del mundo. La fama conlleva problemas legales y entraña peligro.
Hay un portal en internet llamado CENDOJ, con un agregador para buscar sentencias judiciales en una base de datos. En el año 2005 un menor de edad llamado Lázaro pintó un tren en Llerena, (Badajoz). Resulta que el chaval, además, necesitaba contarlo en internet, un peligroso vicio si tienes en cuenta que se considera un delito. Lázaro subió una foto a ESflog.com junto con su tag ACK en un vagón de tren de 25 metros cuadrados y su cara.
Esa foto acabó siendo la imagen número cuatro de la página treinta del informe pericial de la Guardia Civil. Y a pesar de no existir “pruebas directas” de la realización del grafiti, la jueza de instancia y el guardia civil pertinente lo identificaron porque ellos también tenían acceso a internet. Así que solo necesitaron que descargarla porque Lázaro había creado un perfil en Esflog.com con el mismo nombre con el que firmaba, y no le quedó más remedio que reconocerlo en el juicio.
POR MIS PROS Y MIS BLACKS, EN LAS CALLES REAL, YO LUCHANDO POR CASH- comentario real
El poder judicial se pone serio cuando has infringido el artículo 263 del código penal que tipifica el daño a la propiedad. Y no es una falta, porque el “daño” se suele tasar como superior a los 400€. Según la sentencia de Lázaro, el daño no implica que los elementos dañados “pierdan definitivamente su aptitud para servir al fin a que se destinaban, bastando solo un menoscabo o alteración con respecto a su estado anterior”. El tribunal obligó a Lázaro a “asistir a un curso de capacitación profesional, control de horarios y vinculación con actividades de ocio que le posibilite crear una nueva red de amistades”.
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Grafiti postclásico o patrocinado
Pinta Malasaña (segunda edición) tuvo lugar el 23 de abril de 2017 en el emblemático barrio de Madrid. Lleno de curiosos con sus teléfonos móviles apuntando y corriendo de un lado a otro, tomándose selfies con los artistas urbanos. Sus perfiles en redes sociales describían detalladamente su ubicación y qué era lo que veían. Publicar, etiquetar, ubicación…
Un loco adicto a las redes sociales diría lo siguiente:
“A ver cuántos likes me dan en esta foto. Mi Instagram Stories lo va a petar hoy. Todo el mundo me verá en Pinta Malasaña, tomámdome fotos con artistas. Hoy voy a destacar. La mayoría graba tonterías o se hacen fotos a ellos mismos. Yo difundo el arte. Soy lo más.”
Incluso algunos medios de comunicación generalistas acuden a la llamada del “Urban Art”, cámaras de oficio con su equipo de 5000 € alquilado y los redactores buscando las declaraciones oficiales de los artistas, al pie del cañón. Ellos son la noticia. Una señora muy arreglada, en torno a los 50- 55 años, con gafas de sol tipo mosca- de las que tapan media cara-, peluquería, manicura y pedicura recién hechas, vestida de boda, se acerca a Mariano Vilallonga, de 26 años, que subido en una escalerita, pinta una persiana de la Calle la Palma:
−Hola, perdona (risa nerviosa), soy Teresa, del canal TEN, de Secuoya. Estamos haciendo un programa de TENdencias. ¿Te puedo hacer unas preguntas?
Mariano se retoca su peinado casual, coge su pincel y su paleta y mira intensamente a Teresa. Su mirada es penetrante. Como su arte. Casi puede atravesarla.
−Lo que estoy pintando es una metáfora de la sociedad.−Entonces desvía la mirada hacia su obra. Se trata de un caracol sin cabeza de caracol, él lo ha transformado en… ¡una mano victoriosa!
Teresa mira expectante, el maquillaje se transforma en sudor, el corazón le late a toda pastilla... En otras circunstancias correría a retocarse, pero es que ha oído la palabra metáfora. Casi evadida, rejuvenecida. Escucha a un Mariano que la está transportando a otra etapa de su vida:
− Quien sale de su coraza y es como es, al final sale victorioso. Se titula: ”Caracol-col-col saca tus dedos al sol.”
− ¿Tienes un teléfono, un Instagram o algo con lo que pueda localizarte? −Teresa está pletórica. Para sus adentros piensa “Mmm este chico es perfecto para mi programa… “
−Sí. Está ahí al lado.
−¿A qué te dedicas?
−Soy arquitecto y artista…Cada lienzo lo vendo a 200€. También hago escultura. No suelo pintar en grande, mis dibujos son a la acuarela.
− ¿Qué te inspira?
−La naturaleza, con darme un paseo me vale.
En otra calle, otro artista, Sánchez del Castillo, con el look de moda a lo samurái, decora con marcadores de colores y de punta gruesa sobre otra persiana, con la cabeza girada unos noventa grados. Su concentración, de ritual. “Nunca he pintado un tren. No soy grafitero, yo soy artista”. Sánchez del Castillo no comparte la manera en que a veces intervienen los trenes cree que “es intrusivo y una falta de respeto.” Él, como profesional del arte, trabaja para comer. Se quiere dedicar a ello. “Puedes hacer algo sin pedir dinero a cambio, claro, pero porque no te queda otra, debes que enseñar tu trabajo a la gente y aprender nuevas cosas para vender. Tienes que producir primero, obviamente, así es como funciona”.
A veces, algunos colegas le llevan a sitios abandonados a pintar murales. Pero normalmente él pinta en lienzos y en principio trabaja solo. Su máxima prioridad pasa por darse a conocer. Trabaja con patrones, busca la calidad, un resultado final y no se queda en el proceso.
Han transcurrido casi 50 años desde que nació el grafiti clásico. El “sistema”, el poder o como quieran llamarlo, y sus instituciones se han fortalecido contra lo que siempre han denominado crimen y han terminado por absorberlo. De hecho, han generado un nuevo elemento en el mundo del grafiti:
“El arte urbano”
El arte urbano es grafiti (pintada en el espacio público) que no cuestiona la autoridad. Por tanto, no necesita de la clandestinidad porque la ley lo permite. De pronto, la pintada tiene valor económico y nuevas entidades se encargan de gestionarlo.
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El arte urbano y patrocinado tiene las siguientes características
A.En él tienen suma importancia las redes sociales y el hecho de darse a conocer.
B.Profesionales de las artes gráficas y de estudio
C.Las autoridades y dueños del espacio lo permiten.
D.Está asociado a grandes eventos el hecho de practicarlo.
E.Es odiado por el mundo del grafiti clásico
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Redes sociales, darse a conocer
Los autores buscan darse a conocer para pintar a cambio de dinero. Quieren vivir de sus obras, como reconocía Sánchez del Castillo, producir para comer. Muchos son muralistas, que ponen su arte al servicio de los negocios para decorarlos. De esta manera, ambos sacan tajada: los negocios se adornan de una manera alternativa y los artistas ganan reconocimiento y dinero. Claramente, un nuevo nicho de mercado. Algunos, como Kerudecolorz, uno de los ganadores del evento Pintando el Sur hacen gala de una visión más emprendedora y han creado marcas de ropa “skarface kolors clothing” (@skarfacekolors.clothing). En resumen, una reconversión del grafiti a un oficio. A muchos grafiteros les salen trabajillos de vez en cuando para decorar sitios y los integran sus obras totalmente en estos negocios. Por ejemplo, en una tienda como la siguiente:
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Profesionales de las artes gráficas y de estudio
La gente del mundo del Urban Art muchas veces no quiere decorar el espacio público o llegar a la fama y muchas veces no han aprendido de manera autodidacta. En su día a día, trabajan con formatos más pequeños y el urban art para ellos es un pasatiempo o una afición. El caso de Ser Sinsentido (Sergio Ariño): estudió dirección de arte y diseño gráfico. Trabaja realizando diseños gráficos para proyectos emprendedores. A Sergio le gusta, de vez en cuando, realizar alguna pintada en algún sitio abandonado. Pero con calma. “En esos sitios pintas tranquilo, sin estrés. El otro día intervine en un monasterio abandonado, con permiso, claro”. En Pinta Malasaña completó un dibujo en una persiana de unas tijeras en referencia a la niña que da nombre al barrio de Madrid: Manuela Malasaña.
Fuente: Instagram @sinsentidoser sergioarino.es
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Permitido por las autoridades
El arte urbano surge también de la urgente necesidad de canalizar, en términos capitalistas/ legislativos, algo que ocurría en todas las partes del mundo y nadie controlaba.
“Es que, claro, no estás solo en el mundo. Imagínate que tú has invertido dinero para abrir un restaurante. Entonces una noche llega alguien y te lo pinta con unas tetas. Obviamente, no te va a gustar. Igual si hablas con el que dibuja las tetas y le dices que el restaurante vende comida vegetariana y coles y zanahorias es lo que necesita…. Pues genial: a ti te beneficia y el otro ha pintado“. Las palabras de una mujer que pasaba por Pinta Malasaña.
Algunas intervenciones en Pinta Malasaña 2017.
Esta intervención ganó el concurso. Se puede ver en el MADKLIN, obra de PARSEC!
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Eventos,convocatorias y preselecciones
Han comenzado a tener lugar eventos de Urban Art o Street Art que se desarrollan dentro de unos cauces y límites preestablecidos. Atraen a gente que no tiene absolutamente nada que ver con el mundo del grafiti clásico, tal y como nació. Los organizadores de este tipo de eventos, como Madrid Street Art Project, reconocen que los Eventos de Urban Art suelen tener las siguientes características.
En primer lugar, piden permiso para pintar a los propietarios de los espacios o a los ayuntamientos. En segundo lugar, este tipo de eventos funciona por convocatoria y preselección, es decir, los artistas que deseen participar deben realizar un trámite. Tienen que enviar su propuesta para el concurso pertinente, de acuerdo con los requisitos, y en muchas ocasiones su porfolio con otros trabajos (eventos como C.A.L.L.E o Pinta Malasaña) con la esperanza de ser seleccionados por los negocios que han cedido “su” espacio; en otras ocasiones la entidad organizadora quien escoge directamente a los artistas en “comisariado cerrado”, como ha ocurrido con los muros externos de la Tabacalera.
Muchos artistas, por tanto, se quedan fuera.
Gonzalo, miembro de MSAP, habla sobre los artistas que no han sido seleccionados para pintar en un evento de Street Art:
“El no haber seleccionado su propuesta no las desprovee de valor y que es complicado seleccionar 100 propuestas de entre en torno a 500 presentadas”.
Gonzalo reconoce lo siguiente acerca del grafiti clásico:
“Desde MSAP no estamos en contra del grafiti. Entendemos que puede haber opiniones diversas y encontradas en torno a él, pero el grafiti como tal está en el origen del arte urbano y no podemos ignorarlo. Lleva asociado un lenguaje más críptico y un componente tal vez más complicado de entender por un mayor número de personas si lo diferenciamos del arte urbano (en principio más entendible y disfrutable por todo el mundo), pero no deja de ser una manera de intervenir en la calle que tiene también su valor. En cualquier caso, se trata de una tipificación que no compartimos, que viene de fuera y sobre la que puede haber diversidad de opiniones. “
Estos eventos engloban a todo un barrio, como es el caso de Pinta Malasaña, en el que hasta los bares realizan promociones especiales para el consumidor
y actividades de muy diverso tipo.
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El grafiti clásico se opone
En Pinta Malasaña 2016 (primera edición) algunos de los grafitis patrocinados y seleccionados por los comercios amanecieron tapados por gente del mundo real del grafiti al día siguiente. En uno incluso se podía leer la inscripción “No cuela”. No ha sentado muy bien que el espray se mercantilice, y es que en tres de las diez obras de Pintando el Sur aparecía la palabra “Mahou”.
Por otro lado, en muchas ocasiones, los que realizan el grafiti patrocinado y legal son los primeros que asumen que éste puede llegar a durar muy poco. Así lo reconocía Nikita Rodriguez en unas declaraciones publicadas en el Huffington Post: “(...) todo el mundo tiene el mismo derecho que nosotros a intervenir en una pared o cierre comercial (...) su carácter es efímero, por eso no me sorprende que nuestros trabajos hayan sido intervenidos por otras personas(...).”
Los medios autonómicos -como Telemadrid-hablaban de “destrozos”, de “vandalos”, de la ausencia de respeto y la indignación de los vecinos.
El diario.es reconoce que pese a que los artistas reciben un pack valorado en doscientos euros y no cobran nada para ellos, muchos de ellos nunca han pintado en la calle y se autodenominan artistas urbanos. El diario progresista asegura, mediante unas declaraciones de alguien “cercano a los grafiteros,” que mucha gente pisa a los que “llevan toda la vida en la calle”.
Este año, la novedad era la plantilla sobre algunas piezas de urban art que rezaba: “Gentrificado”.
La calle sigue y seguirá expresándose en la misma calle; el fenómeno de gentrificación asola a los centros de las ciudades de todo el mundo y está siendo estudiado por sociólogos. Bajo la máscara de regeneración económica, los barrios céntricos se acaban convirtiendo en lugares estandarizados, donde el precio del suelo crece porque atrae a los negocios y la gente con menos recursos ha tenido que marcharse.
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¿Es tan caro limpiar?
José Alhambra es jefe y fundador de la empresa Urban Restoration SPAIN. Esta empresa se dedica a limpiar grafitis comercializando unos productos biodegradables, no corrosivos. De hecho, en el propio canal de Youtube de la empresa, José usa los productos sin máscara protectora. Según su catálogo, las botellas de líquido limpia-pintadas cuestan entre los 75- 80€ y da para limpiar en torno a 20 metros cuadrados de superficie pintada.
José opta por la prudencia y, aunque reconoce que todo lo que dicen los grandes titulares de los gastos millonarios en limpieza de grafiti, probablemente sea mentira y se podría reducir el gasto, tendría que verse cada caso en específico. Según él, que gestiona una empresa que limpia grafitis, a parte del coste líquido (75-80 €) se añade el coste de la mano de obra y la maquinaria necesaria.
Aun así “¿cómo es posible que valga tanto dinero limpiar un tren, por ejemplo, si la garrafa que se utiliza es de etiqueta azul (productos World Best, comercializados por Urban Restoration Spain), que aumenta el rendimiento en superficies lisas? Si se tratase de tags normales con rotulador podría servir hasta para eliminar 180 metros cuadrados de superficie de tags. Si una garrafa vale 75 euros, de ahí hasta llegar a 1000 o 2000 €… ¿cuánta mano de obra tienen que emplear para limpiar un tren? A no ser que lo pinten luego. Ahí ya me callo, ni idea.”
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