aziraphalerp

[aziraphalerp]

Que mal sueño querido, no pienso hacer eso nunca… y si lo hice en tus sueños discúlpame…

No mames soñé que @aziraphalerp me dejaba como pendejo luego de haberle confesado mi amor y besarlo 😀😀

[aziraphalerp]

El beso fue un golpe de realidad, fue como chocar contra una pared y ver cada ladrillo destruirse frente a sus ojos, la venda que tenía sobre estos había sido finalmente removida, Crowley tuvo que recurrir al último recurso para salvarlo de Metatron… aún estaba en shock pero su mente trabajaba a mil por hora, hasta que llegó a una conclusión, la más lógica.

- Me quedaré…

Mencionó con una voz quebradiza, no por tristeza de no ir al cielo, sino por finalmente ver lo que tiene en frente, todos estos años junto a Crowley y todo por lo que atravesaron juntos… ¿iba a dejar eso tan fácilmente? Por dios, el rubio no aguantó y rompió en llanto pidiendo perdón una y otra vez, por todas las veces que de seguro hizo sentir mal al pelirrojo y este, incluso en momentos como este, consolaba y buscaba contentar a Aziraphale, lo envolvió en sus brazos y ambos quedaron en el suelo, Crowley limpiando las lágrimas del contrario y al final… ambos corazones estaban tranquilos, claro que habían muchas cosas por discutir, sin embargo nada de eso era importante en ese instante, solo ellos dos y el saber que se tiene el uno al otro.

Decidieron luego de eso de que Crowley viviría con el ángel pues este no toleraba verlo dormir en el asiento del Bentley, además de que quería que las plantas tengan su propio espacio, con un pequeño milagro egoísta creó un invernadero para las preciadas creaciones. La habitación de Crowley era perfecta para él, el rubio se encargó de eso y por los primeros meses fue beneficioso que ambo duerman en habitaciones separadas, se estaban acostumbrando a la vida de pareja.

El cielo y el infierno no se entrometerían en sus vidas y hasta ahora no lo han hecho, ya pasaron unos cuantos meses desde ese día pero había algo que molestaba un poco la conciencia de Aziraphale y es que no le comentó a Crowley la oferta en su totalidad, solo le dijo que se le ofreció ir al cielo para un nuevo puesto, le iba a terminar de decir todo pero fue ahí cuando Crowley lo interrumpió y el resto es historia… solo quería comentárselo para… para no tener que guardar más esa información además de sentir un poco de curiosidad sobre la respuesta del otro, aunque confiesa que necesita decirlo para liberarse de todo, es el único recuerdo malo que tiene de ese día y hablándolo es posible que se borre por completo y todo quede atrás sin influir en el presente.

Había estado buscando un momento perfecto o ideal para poder decírselo pero no encontraba uno… hasta hoy, que quizás sea un buen espacio para hacerlo, desde hace días planearon un picnic en el parque y por fin hoy lograrían tener su cita.

- Mmh creo que nos faltaran algunas frambuesas… - y si, Aziraphale se tomaba muy enserio este tipo de actividades humanas, especialmente cuando involucra comida, había pensado en todo incluso en lo que el pelirrojo podría comer, puso un termo con café como le gusta, una botella de vino y un par de almendras saladas, los “favoritos” de su pareja . - Querido, estás llevando la manta para sentarse? -

Mientras Aziraphale acomodaba la canasta con snacks, le había pedido a Crowley que se encargue la manta y un par de cojines donde puedan sentarse y no mancharse con el pasto o tierra.

Cuando tiene lista la canasta escucha la puerta de Bentley cerrarse, en eso su pareja aparece por la puerta y le confirma que lleva la manta y los cojines solicitados.

- Entonces estamos listos, querido, podemos partir - dice el rubio con una sonrisa en su rostro y antes de salir, besa en la mejilla a su demonio, con el paso del tiempo aprendió el contacto físico romántico, bueno, ya conocía sobre el tema solo que ahora podría aplicarlo con su pareja y lo hacía muy feliz hacerlo.

Ya ambos en el Bentley y con una agradable melodía se dirigieron al parque.

@anthony-jcrow

[aziraphalerp]

Te extraño mucho querido…

@aziraphalerp Hola ángel … te extraño.

[aziraphalerp]

Casi todos los días invitaba al demonio a su librería, algunas veces para ver nuevos libros y firmas de autores famoso, otras para probar sus habilidades de cocinero o simplemente para descansar de un día agotador.

Sin embargo, al final de la semana siempre es la misma razón y la verdad le gusta así, es como el viernes de vino! Prueban muchos vinos y aunque suene muy... humano, le gusta a veces estar en estado de ebriedad, así puede hablar sin tapujos que él mismo se pone.

-Okey, mira mira~

Lo ve ahí sentado en su sofá en esa pose natural de él, ah no... no... a quien engaña el pobre ángel, está enamorado del pelirrojo pero... no podría decirle... sabe que no es posible algo entre un demonio y un ángel, sacude su cabeza para sacar esos pensamientos improbables y va con él mostrando las botellas que ha comprado, son varias y todas de diferentes variaciones, blanco, tinto, rosé, etc.

-Mira, sé que los vinos más añejos son buenos, pero he ido a unas bodegas nuevas y tienen unos vinos asombrosos! Especialmente este, es dulce como los crepes~

Le comenta emocionado mientras descorcha una de ellas y sirve una buena cantidad del líquido en cada copa. Se acerca y le tiende la de él antes de sentarse casi a su lado, procurando no estar tan cerca, y chocar las copas, posteriormente viene el primer sorbo.

-Salud~

Y ahí estaba, ese primer cosquilleo en la lengua y garganta que le da la textura del vino, es algo fuerte pero muy dulce, sabe que los dulces son engañosos, te dejan ebrio con un par de copas y... no le molesta, está en su casa y con su mejor... amigo.

-Ahh me gusta mucho, te gustó querido? O prefieres que traiga algo más fuerte a tu paladar?

La misma rutina.

Debía pensar en algo más que simplemente llevarlo a cenar, el ni siquiera disfrutaba comer, solo iba para mirar al Angel hacerlo por ambos, no tenía mucho sentido.

Salían del Ritz y continuaban en la librería del rubio embriagándose hasta el día siguiente, quejándose de la resaca horrible que tenían solo por no quitarse lo borracho a tiempo.

Crowley amaba esos momentos, pero poco a poco se hacía más insoportable tener que aguantar esos sentimientos que tenía atorados en el corazón desde hace seis mil años.

Estaba totalmente enamorado del otro, el que se suponía que era su rival? Si, ese mismo.

Sonreía como estupido cada vez que le platicaba lo mucho que amaba algún libro, o algún nuevo platillo recién descubierto en uno de los restaurantes cercas, amaba como hablaba de las cosas que le entusiasmaban.

Como en ese momento, no escuchó una sola palabra del angel debido a que se perdió en esos labios rosas que le invitaban a probarlos, acaso tendrían el sabor de la crepa que acababa de cenar?

Aziraphale chasqueó los dedos frente a el para traerlo de vuelta.

-Eh? Que? Si, si, claro que acepto.-

El otro lo miró con una ceja alzada por un momento pero no dijo nada, solamente abrió la librería y le dijo un “ponte cómodo querido, traeré el vino”.

“Querido”? Por qué no mejor le demuestra que tanto lo quiere en lugar de solo decirlo al aire, maldito angel despistado.

Cuando Dio.. Sat.. quien sea, maldita sea, se daría cuenta el otro de que cacheteaba banquetas por el? Su orgullo demoniaco le impedía decírselo directamente, pero se las arreglaría algún día para decírselo de forma al menos, subliminal ... o eso pensaba.

#aziraphale #crowley #goodomens #ineffable husbands #roleplay español #azirowley #good omens rp #angel #demon #roleplay

[aziraphalerp]

Entonces su cuerpo estaba flotando y quizá si no estuvieran tan perdido estaría en su forma celestial, pero es como si el placer hubiera pasado esa barrera y no era ni la conciencia ni su cuerpo el que tiene el control, sino el placer inundado por el amor.

-Crowley...

Solo llega a susurrar su nombre y entonces siente como la semilla de su pareja lo llena completamente y el orgasmo va pasando poco a poco, como olas que aún están fuertes y constantes pero van bajando.

-Te amo...

Simplemente le susurra y sus ojos se cierran, fue una experiencia deliciosa, claro que la probaría más adelante pero ahora estaba demasiado cansado.

Siente que su cuerpo está fresco y sabe que su pareja con un milagro los ha limpiado y refrescado.

Se aferra al cuerpo escamoso y suave de su pareja y de inmediato se duerme, soñando con el amor de su vida, su demonio, su Crowley.

Era una tarde casi tranquila, el cielo estaba despejado y en la mañana había ido a la librería asegurarse de que todo estaba bien, desayunó con su pareja unos adorables crepés junto a un par de cupcakes y su taza de té, simplemente espléndido.

Adoraba esos momentos con él, no es que no los tuviera antes del Apocalipsis, sino que ahora que están fuera del ojo del cielo y el infierno, pueden estar tranquilos, tomando el té y dándose amor sin que los molesten.

Iba a decir que era una tarde completamente tranquila hasta que llegando a casa, escucha los gritos que vienen del invernadero... oh, es Crowley, de nuevo le anda gritando a sus plantas... a veces siente pena por ells, son hermosas y aún así consiguen sólo gritos del otro... y quienes tienen algún defecto, por más pequeño que sea, es desechada, no le dirá nunca que ha salvado a alguna de ellas y las plantó cerca del bosque.

Suspira suave mientras deja sus cosas en el escritorio y se pone ropa más cómoda para estar en su casa, decide dejar que su pareja les grite todo lo que quiera, pero irá pronto a ver de qué trata, quizá una se marchitó o le salió una mancha en alguna hoja.

-¿querido?

Pasaron unos minutos hasta que el silencio llegó, tomó un vaso con agua y fue caminando lento hasta llegar al invernadero y preguntar por él, para ver si había terminado con el regaño... sin embargo... se encontró con una imagen algo... triste.

Frunce el ceño algo preocupado, si, se había dado cuenta, Crowley refleja muchas cosas de él en las plantas... especialmente lo de las imperfecciones, lo sabe, pero no le dirá que si, esperará a que él quiera comentarlo.

-Querido... todo bien? Tus gritos fueron... muy... muy feos esta vez... no... no quisieras hablar conmigo?

Se acerca con cuidado y lo abraza con fuerza desde atrás, trata de no parecer tan preocupado pero... esto se estaba saliendo de control.

#aziraphale #crowley #goodomens #ineffable husbands #roleplay español #azirowley #good omens rp #demon #angel #roleplay

[aziraphalerp]

Steven Universe AU!! Good Omens!

#goodomens #aziraphale #crowley #ineffable husbands #azirowley #angel #demon #fanart #goodomensfanart #au #art #draw

[aziraphalerp]

Estaba a punto de responderle a su pregunta cuando un gemido ahogado , y un tanto agudo, escapa de su garganta, esa primera embestida fue agridulce, profunda y certera.

Nunca había sentido algo así, tan delicioso y tan... ah era una combinación tan extraña que poco a poco dejaba de ser dos y se hacían una, el placer.

Sus manos se aferran al cuerpo de la serpiente y abre más sus piernas tratando de que el contacto sea mas directo, más profundo y sensual.

Entre respiraciones lo mira y baja su mano por donde tiene espacio y toma el segundo pene de su pareja... no, no entrará en su vagina ya que no cree soportar todo de una sola vez, lo que hace es guiarlo un poco más abajo... a su... otra entrada, eso no cambió y con las veces que lo han hecho por ahí, está listo para que lo penetre.

- mi amor!

Jadea algo abrumado cuando siente que entra en él, se siente mucho más lleno pero es una sensación deliciosa, sin poder parar sus gemidos estos se hacen más elevados con cada embestida.

Ya no es solo en sus “nuevas partes”, son ambas, en ambos orificios está siendo embestido y no sabe si podrá aguantar como generalmente lo hace.

Y justo cuando pensaba que no podría sentirse mejor, su pareja le abre sus piernas para acomodarse mejor y comienza una fricción con sus escamas, está tan pegado a él que con cada embestida siente el roce en su... en su clítoris y ahora solo puede ver estrellas.

-Crowley! Crowley! No.. mgh aah! No aguantaré!

Le advierte entre gritos y gemidos sin pudor, ahora su mente estaba en el limbo del placer que su pareja le proporciona, se siente tan mojado ahí abajo que los sonidos sexuales de cada penetración están al nivel de los gemidos.

Sus manos temblorosas al igual que su cuerpo se aferran a él con fuerza y siente que el orgasmo, uno muy intenso se forma en su vientre, está a punto de morir de placer y no le importa nada más que eso y su pareja, tanto que apenas pronunciaba de forma coherente su nombre.

-Aahhh! Te amo! Te amo Crowley... Crowl...

Era una tarde casi tranquila, el cielo estaba despejado y en la mañana había ido a la librería asegurarse de que todo estaba bien, desayunó con su pareja unos adorables crepés junto a un par de cupcakes y su taza de té, simplemente espléndido.

Adoraba esos momentos con él, no es que no los tuviera antes del Apocalipsis, sino que ahora que están fuera del ojo del cielo y el infierno, pueden estar tranquilos, tomando el té y dándose amor sin que los molesten.

Iba a decir que era una tarde completamente tranquila hasta que llegando a casa, escucha los gritos que vienen del invernadero... oh, es Crowley, de nuevo le anda gritando a sus plantas... a veces siente pena por ells, son hermosas y aún así consiguen sólo gritos del otro... y quienes tienen algún defecto, por más pequeño que sea, es desechada, no le dirá nunca que ha salvado a alguna de ellas y las plantó cerca del bosque.

Suspira suave mientras deja sus cosas en el escritorio y se pone ropa más cómoda para estar en su casa, decide dejar que su pareja les grite todo lo que quiera, pero irá pronto a ver de qué trata, quizá una se marchitó o le salió una mancha en alguna hoja.

-¿querido?

Pasaron unos minutos hasta que el silencio llegó, tomó un vaso con agua y fue caminando lento hasta llegar al invernadero y preguntar por él, para ver si había terminado con el regaño... sin embargo... se encontró con una imagen algo... triste.

Frunce el ceño algo preocupado, si, se había dado cuenta, Crowley refleja muchas cosas de él en las plantas... especialmente lo de las imperfecciones, lo sabe, pero no le dirá que si, esperará a que él quiera comentarlo.

-Querido... todo bien? Tus gritos fueron... muy... muy feos esta vez... no... no quisieras hablar conmigo?

Se acerca con cuidado y lo abraza con fuerza desde atrás, trata de no parecer tan preocupado pero... esto se estaba saliendo de control.

[aziraphalerp]

Las caricias de su pareja eran muy sensuales, la sensación de las escamas en su cuerpo era algo nuevo que estaba experimentando, cada que se retorcía un poco especialmente en la zona de sus pezones, lo hacía gemir levemente, calentando más todo el ambiente.

-Crowley, mi amor...

Lo acaricia más pues se ha dado cuenta que le gusta el toque, el contacto humano en su cuerpo de serpiente de seguro se debe sentir bien, agregando el cambio de temperatura a eso, se ve que está disfrutando.

Jadea suave cuando escucha su voz en su cabeza, decide abrir un poco más sus piernas quedando totalmente expuesto ante su pareja.

-Okey... amor...

Se aferra a él y siente como su pareja lo frota más en ese lugar, ya no es necesario su mano como anteriormente se estaba tocando y explorando su nueva zona sexual.

Estaba húmedo a tal punto que sus muslos igual se estaban mojando con los fluidos.

Entonces siente algo nuevo frotándose entre sus piernas, cuando baja la mirada ve el miembro de la serpiente, es... es proporcional a su cuerpo, es decir, es grande y está húmedo, ah... se siente muy bien contra su... su vagina.

Cierra sus ojos y lo abraza acariciando sus escamas delicadamente, sabe que será cuidadoso y quizá sea como la primera vez que lo hicieron, suavemente doloroso al principio pero luego reemplazado por un placer indescriptible que no quería que parara.

Respira tranquilo relajando su cuerpo para poder dejar entrar a su pareja, oh... oh! Esto duele un poco más que cuando o hacen por... por el otro lado.

Se muerde el labio y un leve quejido de dolor sale de sus labios.

-Amor... amor, quieto un momento, ah~ por favor eres muy grande~

Vuelve a respirar a un ritmo suave y lento, relajando todo una vez más, luego de unos minutos siente en vez de dolor se reemplaza por la necesidad de que su pareja se mueva.

-Mi... mi amor, querido... muévete... ya, ya estoy listo~ por favor ~

Mientras dice esas palabras sus caderas instintivamente se mueven para crear contacto pero... qué? Hay algo más... aah... alza un poco su mirada y es... ah! Las serpientes tienen dos miembros... el segundo ahora está... está erecto..

Era una tarde casi tranquila, el cielo estaba despejado y en la mañana había ido a la librería asegurarse de que todo estaba bien, desayunó con su pareja unos adorables crepés junto a un par de cupcakes y su taza de té, simplemente espléndido.

Adoraba esos momentos con él, no es que no los tuviera antes del Apocalipsis, sino que ahora que están fuera del ojo del cielo y el infierno, pueden estar tranquilos, tomando el té y dándose amor sin que los molesten.

Iba a decir que era una tarde completamente tranquila hasta que llegando a casa, escucha los gritos que vienen del invernadero... oh, es Crowley, de nuevo le anda gritando a sus plantas... a veces siente pena por ells, son hermosas y aún así consiguen sólo gritos del otro... y quienes tienen algún defecto, por más pequeño que sea, es desechada, no le dirá nunca que ha salvado a alguna de ellas y las plantó cerca del bosque.

Suspira suave mientras deja sus cosas en el escritorio y se pone ropa más cómoda para estar en su casa, decide dejar que su pareja les grite todo lo que quiera, pero irá pronto a ver de qué trata, quizá una se marchitó o le salió una mancha en alguna hoja.

-¿querido?

Pasaron unos minutos hasta que el silencio llegó, tomó un vaso con agua y fue caminando lento hasta llegar al invernadero y preguntar por él, para ver si había terminado con el regaño... sin embargo... se encontró con una imagen algo... triste.

Frunce el ceño algo preocupado, si, se había dado cuenta, Crowley refleja muchas cosas de él en las plantas... especialmente lo de las imperfecciones, lo sabe, pero no le dirá que si, esperará a que él quiera comentarlo.

-Querido... todo bien? Tus gritos fueron... muy... muy feos esta vez... no... no quisieras hablar conmigo?

Se acerca con cuidado y lo abraza con fuerza desde atrás, trata de no parecer tan preocupado pero... esto se estaba saliendo de control.

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[aziraphalerp]

Baja sus manos lentamente ya que su pareja lo ayuda a hacerlo, con esos besos suaves y tiernos que no duran mucho pues de inmediato se pone en ese plan sensual seductor que lo vuelve loco.

-No... aah no soy travieso~ solo... curioso...

Habla suave y al final de sus palabras se le sale un poco de temblor en su voz, conjugado igual con un tono agudo, la lamida que el otro le dio bajo su pareja hizo que sus vellos se ericen un poco y que anticipe lo que van a hacer... si, eso lo pone muy nervioso y levemente sonrojado, es algo que no puede evitar.

Lo abraza un poco y luego siente y ve el cambio que sucede... sus nervios ahora son... son mucho.

La voz del otro lo calma casi un poco, respira hondo y mira su cuerpo atrapado en el de la serpiente, debe admitir que es... se siente bien! Las escamas no son rasposas, son suaves y la temperatura de su cuerpo es perfecta.

Asiente con un movimiento de cabeza y cierra sus ojos para pensar en lo que quiere... okey... no desea un cuerpo de una... serpiente, ni el de una mujer, bueno, no completamente... podrá cambiar solo esa parte de su cuerpo?

-Ahh...

Abre sus ojos sorprendido de él mismo por que lo ha sentido, ha cambiado sus... su partes privadas! Baja su mirada y con la poca movilidad que le deja su pareja, toca entre sus piernas y sus mejillas se ponen rojas como manzanas... se siente tan... tan diferente y... oh!! Tan sensible!!

-Querido... ah... lo hice...

Habla suave y algo avergonzado, no pensaba en desnudarse tan rápido pero su ropa desaparece, si, fue Crowley que hizo el milagro de dejarlo desnudo y ahí está... si pudiera ponerse más rojo de seguro lo estaría.

Respira hondo al ver... eso, sus nuevas partes íntimas o bueno, parte íntima, aunque solo la vea de reojo y entonces la serpiente hace que abra un poco sus piernas, es tan diferente, se siente expuesto y... ah se... se está mojando!

-Mgh amor...

Cierra sus ojos y se deja caer en la cama, el otro ha comenzando a tocarle ahí entre sus piernas con su piel de escamas suaves, es tan sensible y siente que se moja demasiado rápido, es una sensación extraña... con cada roce... siente que necesita más.

-Crow... Crowley, cariño... ah ahh... yo... yo vi que... cuando Adán lo hizo con Eva en el Edén... a esta le... le dolió un poco, no... no me dolerá a mí? Tengo... nervios...

Era una tarde casi tranquila, el cielo estaba despejado y en la mañana había ido a la librería asegurarse de que todo estaba bien, desayunó con su pareja unos adorables crepés junto a un par de cupcakes y su taza de té, simplemente espléndido.

Adoraba esos momentos con él, no es que no los tuviera antes del Apocalipsis, sino que ahora que están fuera del ojo del cielo y el infierno, pueden estar tranquilos, tomando el té y dándose amor sin que los molesten.

Iba a decir que era una tarde completamente tranquila hasta que llegando a casa, escucha los gritos que vienen del invernadero... oh, es Crowley, de nuevo le anda gritando a sus plantas... a veces siente pena por ells, son hermosas y aún así consiguen sólo gritos del otro... y quienes tienen algún defecto, por más pequeño que sea, es desechada, no le dirá nunca que ha salvado a alguna de ellas y las plantó cerca del bosque.

Suspira suave mientras deja sus cosas en el escritorio y se pone ropa más cómoda para estar en su casa, decide dejar que su pareja les grite todo lo que quiera, pero irá pronto a ver de qué trata, quizá una se marchitó o le salió una mancha en alguna hoja.

-¿querido?

Pasaron unos minutos hasta que el silencio llegó, tomó un vaso con agua y fue caminando lento hasta llegar al invernadero y preguntar por él, para ver si había terminado con el regaño... sin embargo... se encontró con una imagen algo... triste.

Frunce el ceño algo preocupado, si, se había dado cuenta, Crowley refleja muchas cosas de él en las plantas... especialmente lo de las imperfecciones, lo sabe, pero no le dirá que si, esperará a que él quiera comentarlo.

-Querido... todo bien? Tus gritos fueron... muy... muy feos esta vez... no... no quisieras hablar conmigo?

Se acerca con cuidado y lo abraza con fuerza desde atrás, trata de no parecer tan preocupado pero... esto se estaba saliendo de control.

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[aziraphalerp]

Los abrazos del pelirrojo eran los mejores y la verdad adora que se los dé solo a él, claro que se los dé a los niños no le molesta, adora verlo en ese plan de “Nanny”, es muy adorable, nunca lo diría en voz alta ya que sabe que el pelirrojo “arde” con muchos cumplidos... aunque es todo un mimoso, lo sabe.

Sin embargo ahora era su turno, se sentía en casa, protegido y en paz, cada que se abrazan recuerda a Alpha Centauri... dos hermosas estrellas tan juntas que parecen una sola, que nunca se separan... es... es como ellos dos, su relación se podría describir de esa forma tan poética.

-Estoy emocionado! Ooh si~ quisiera que Warlock conozca este lugar, merece un descanso de toda su vida como hijo de un embajador... además es un niño tan bueno, se llevará bien con los muchachos de aquí, lo sé

Sonríe encantado de solo recordar esos años que cuidaron del pequeño, era un privilegio ver a Crowley cargar a ese bebé regordete, por su parte, también disfrutaba mucho llevarlo a los jardines y enseñarle de la vida, ese muchacho lo hacía reír mucho... los mejores momentos fueron cuando ambos al mismo tiempo cuidaban de él... se sentía extraño, como una familia... como si tuvieran ese privilegio de los humanos de formar hogares así.

Ya en la cama deja salir un suspiro relajado y tranquilo, le encanta la cama, es suficientemente grande para ambos y cómoda, mejor aún con los brazos del otro en él.

-Amor ahahaha~ me apretujas como si estuvieras en tu forma de serpiente...

Al mencionar eso, una duda se enciende en su cabeza como un foco y se pone a pensar, si, ha cambiado de cuerpo y todo, pero no... no ha jugado mucho con eso, es decir, no ha visto las posibilidades del cuerpo humano combinadas con sus poderes de ángel.

-Querido, quiero... amh preguntarte algo hipotético... no te rías, eh... bueno... alguna vez tú has... jugado con el cambio de cuerpo? Es decir... amh... como Nanny... o la serpiente... eeh... los usaste no cómo un disfraz? Aah no sé como explicarlo...

Se rasca la nuca claramente nervioso y se sienta en la cama, lo que en verdad quiere saber, que no quiere admitirlo ni para su persona, es saber cómo se siente tener... un cuerpo o parte del cuerpo de una mujer... oh no! Otra duda... alguna vez... Crowley habrá.. usado su cuerpo de serpiente para otras cosas? Aaaah no! Ángel, que te sucede!!!

-Sa... sabes qué, amor? Olvídalo, yo... yo mismo me confundí y no debí preguntar nada sin haberlo pensado bien... ahora estoy más confundido que antes...

Cubre su cara enrojecida con sus manos y ya escucha la risa burlona dd su pareja, aah se ha dado cuenta de lo que estaba preguntando y siente demasiada vergüenza.

Entonces algo lo calma un poco pero al mismo tiempo lo pone ansioso, los besos del otro en su cabeza, bajando hasta su oreja y luego a sus manso encima de su rostro... tratando de quitarlas del camino.

-Amor...

Era una tarde casi tranquila, el cielo estaba despejado y en la mañana había ido a la librería asegurarse de que todo estaba bien, desayunó con su pareja unos adorables crepés junto a un par de cupcakes y su taza de té, simplemente espléndido.

Adoraba esos momentos con él, no es que no los tuviera antes del Apocalipsis, sino que ahora que están fuera del ojo del cielo y el infierno, pueden estar tranquilos, tomando el té y dándose amor sin que los molesten.

Iba a decir que era una tarde completamente tranquila hasta que llegando a casa, escucha los gritos que vienen del invernadero... oh, es Crowley, de nuevo le anda gritando a sus plantas... a veces siente pena por ells, son hermosas y aún así consiguen sólo gritos del otro... y quienes tienen algún defecto, por más pequeño que sea, es desechada, no le dirá nunca que ha salvado a alguna de ellas y las plantó cerca del bosque.

Suspira suave mientras deja sus cosas en el escritorio y se pone ropa más cómoda para estar en su casa, decide dejar que su pareja les grite todo lo que quiera, pero irá pronto a ver de qué trata, quizá una se marchitó o le salió una mancha en alguna hoja.

-¿querido?

Pasaron unos minutos hasta que el silencio llegó, tomó un vaso con agua y fue caminando lento hasta llegar al invernadero y preguntar por él, para ver si había terminado con el regaño... sin embargo... se encontró con una imagen algo... triste.

Frunce el ceño algo preocupado, si, se había dado cuenta, Crowley refleja muchas cosas de él en las plantas... especialmente lo de las imperfecciones, lo sabe, pero no le dirá que si, esperará a que él quiera comentarlo.

-Querido... todo bien? Tus gritos fueron... muy... muy feos esta vez... no... no quisieras hablar conmigo?

Se acerca con cuidado y lo abraza con fuerza desde atrás, trata de no parecer tan preocupado pero... esto se estaba saliendo de control.

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[aziraphalerp]

El recordar Roma, en vez de hacerlo sentir molesto por su comportamiento en ese día, ld hace reír pues eso es lo que recuerda! Invitarlo a comer unas ostras y charlar para dejar de lado el mal momento que pasaba su demonio y ponerlo de nuevo en su humor característico que tanto le gusta.

Estaba ya haciendo a un lado el tema de por qué lo dejaban solo, hasta que las palabras de su pareja llegaban a su cabeza como golpes de martillo... luego se sintió como cosquillas en el corazón, en su pecho, escucharlo decir esas cosas era agradable... pero por otra parte se daba cuenta de algo... cómo es que los ángeles y arcángeles no, no lo querían, no lo miraban con ojos se amistad... en cambio un demonio, algo que se supone que es lo contrario, vio el amor en él...

-Crowley...

Suelta una pequeña risa con el pellizco en su mejilla, pero al mismo tiempo se le escapan unas lagrimas que estaba tratando de evitar hace mucho tiempo...

Dejó la taza a un lado pues iba tumbarla, sus manos habían comenzado a temblar... al existir como un ser de amor y buenos sentimientos, es muy difícil procesar estos que ahora siente... peor aún cuando los estuvo guardando cientos de años.

-Oh por Dios... que me pasa... por qué estoy llorando si se supone que estoy acostumbrado a ello, no lloré por eso en miles de años para... ah ahora... ah ahh

Se pasa las manos por sus mejillas en un intento de parar las lagrimas y entonces siente lo brazos de su pareja abrazarlo con fuerza, dándole calor y cariño... dándole su amor.

Solloza dejando salir eso que tenía muy dentro... de inmediato se comienza a sentir mejor... todo gracias a Crowley, sin él no hubiera podido liberarse.

-Mmh ah... querido... creo que fue el destino... gracias por sostenerme... te amo mucho...

Los brazos de su pareja lo mecen suavemente creando un ambiente mucho más relajante y tranquilo, si, fue una tarde llena de lágrimas, pero fue para bien, su demonio se siente mejor, él también lo hace y lo mejor es que se tienen uno para el otro por siempre.

-Querido... te parece si vamos a la habitación? Oh... también quería comentarte que quería hacer algo como una fiesta de té? Para invitar a los niños, Anathema con Pulsifer, a la señora Tracy y el sargento Shadwell... qué te parece?

Era una tarde casi tranquila, el cielo estaba despejado y en la mañana había ido a la librería asegurarse de que todo estaba bien, desayunó con su pareja unos adorables crepés junto a un par de cupcakes y su taza de té, simplemente espléndido.

Adoraba esos momentos con él, no es que no los tuviera antes del Apocalipsis, sino que ahora que están fuera del ojo del cielo y el infierno, pueden estar tranquilos, tomando el té y dándose amor sin que los molesten.

Iba a decir que era una tarde completamente tranquila hasta que llegando a casa, escucha los gritos que vienen del invernadero... oh, es Crowley, de nuevo le anda gritando a sus plantas... a veces siente pena por ells, son hermosas y aún así consiguen sólo gritos del otro... y quienes tienen algún defecto, por más pequeño que sea, es desechada, no le dirá nunca que ha salvado a alguna de ellas y las plantó cerca del bosque.

Suspira suave mientras deja sus cosas en el escritorio y se pone ropa más cómoda para estar en su casa, decide dejar que su pareja les grite todo lo que quiera, pero irá pronto a ver de qué trata, quizá una se marchitó o le salió una mancha en alguna hoja.

-¿querido?

Pasaron unos minutos hasta que el silencio llegó, tomó un vaso con agua y fue caminando lento hasta llegar al invernadero y preguntar por él, para ver si había terminado con el regaño... sin embargo... se encontró con una imagen algo... triste.

Frunce el ceño algo preocupado, si, se había dado cuenta, Crowley refleja muchas cosas de él en las plantas... especialmente lo de las imperfecciones, lo sabe, pero no le dirá que si, esperará a que él quiera comentarlo.

-Querido... todo bien? Tus gritos fueron... muy... muy feos esta vez... no... no quisieras hablar conmigo?

Se acerca con cuidado y lo abraza con fuerza desde atrás, trata de no parecer tan preocupado pero... esto se estaba saliendo de control.

#goodomens #aziraphale #crowley #ineffable husbands #roleplay español #good omens rp #azirowley #angel #demon #roleplay

[aziraphalerp]

Estaba algo nervioso pues en ese pequeño lapso del abrazo y el secarle sus lagrimas, su pareja no había dicho nada, temía que se hundiera en algo parecido a la depresión, como demonio de seguro es fácil caer en ese sentimiento... eso le asustaba.

Estaba a punto de obligarlo a hablar cuando el pelirrojo comenzó con sus palabras reconfortantes, eso hizo que un suspiro relajante escape de sus labios, estaba bien, mejor que cuando lloraba, le hizo bien el desahogarse un poco.

-Si querido, somos felices aquí en esta casa... debemos ver el futuro y aunque duele dejar el pasado... como aquella película amor! El... el Rey León? Ahaha algo así... mh... bueno y si vuelven las inseguridades, mis brazos están abiertos siempre...

Le besa su frente una vez más y entonces escucha esa pregunta, no lo sorprende, ni le molesta, solo le saca una sonrisa algo melancólica, le va a explicar aunque leda algo de pena decirlo, nunca lo había comentado con nadie.

Toma sus manos y le da besos suaves en sus dedos, luego lo guía fuera del vivero y van a la cocina.

-Ah es una historia algo larga... desde el cielo... supongo te diste cuenta cuando fuiste con Gabriel aquella vez que cambiamos cuerpos... no? Fue molesto contigo y te trató como un tonto... al igual que lo hizo frente a Adán aquel día que me dijo que cierre la boca...

Ya en la cocina le suelta sus manos para dejarlo sentado en la silla del pequeño comedor de cocina que tiene ahí, le limpia los rastros de lágrimas de sus mejillas y va por un vaso con agua.

-Ten querido... como decía... estoy... acostumbrado a ese tipo de tratos, amor... sin embargo, ese día en Roma fuiste seco pero no te fuiste... además se notaba que estabas teniendo un muy mal día... me tomo el honor de decir que yo lo arreglé hahhaha con las ostras~

Le comenta todo mientras se prepara un té y... trata de no dejar salir esas emociones fuertes que traen lo recuerdos de los rechazos, si, siempre fue un rechazado... ningún ángel lo... toleraba, ni siquiera por educación, todos eran como Gabriel... lo trataban como un niño, como un tonto iluso... dolía demasiado pues siempre estuvo solo, de no ser por Crowley, nunca hubiera tenido un amigo.

Dándole la espalda a su pareja, sirviendo el agua caliente, continua hablando... con las ganas de llorar al borde del colapso...

-Tu comportamiento en Roma no era nada que no haya vivido antes, es más, tú por lo menos me respondiste... en el cielo antes de la creación, luego, cuando iba a informar y así... todos los tratos eran igual... malos conmigo, me ignoraban o tomaban el ejemplo de Gabriel, tratarme de tonto... ah pero ya basta de mí, querido... estaba enfocado en ti, te sientes mejor?

Se acerca ahora como si nada y le acomoda su pelo, hablar de su solitario pasado es... es confuso.

Era una tarde casi tranquila, el cielo estaba despejado y en la mañana había ido a la librería asegurarse de que todo estaba bien, desayunó con su pareja unos adorables crepés junto a un par de cupcakes y su taza de té, simplemente espléndido.

Adoraba esos momentos con él, no es que no los tuviera antes del Apocalipsis, sino que ahora que están fuera del ojo del cielo y el infierno, pueden estar tranquilos, tomando el té y dándose amor sin que los molesten.

Iba a decir que era una tarde completamente tranquila hasta que llegando a casa, escucha los gritos que vienen del invernadero... oh, es Crowley, de nuevo le anda gritando a sus plantas... a veces siente pena por ells, son hermosas y aún así consiguen sólo gritos del otro... y quienes tienen algún defecto, por más pequeño que sea, es desechada, no le dirá nunca que ha salvado a alguna de ellas y las plantó cerca del bosque.

Suspira suave mientras deja sus cosas en el escritorio y se pone ropa más cómoda para estar en su casa, decide dejar que su pareja les grite todo lo que quiera, pero irá pronto a ver de qué trata, quizá una se marchitó o le salió una mancha en alguna hoja.

-¿querido?

Pasaron unos minutos hasta que el silencio llegó, tomó un vaso con agua y fue caminando lento hasta llegar al invernadero y preguntar por él, para ver si había terminado con el regaño... sin embargo... se encontró con una imagen algo... triste.

Frunce el ceño algo preocupado, si, se había dado cuenta, Crowley refleja muchas cosas de él en las plantas... especialmente lo de las imperfecciones, lo sabe, pero no le dirá que si, esperará a que él quiera comentarlo.

-Querido... todo bien? Tus gritos fueron... muy... muy feos esta vez... no... no quisieras hablar conmigo?

Se acerca con cuidado y lo abraza con fuerza desde atrás, trata de no parecer tan preocupado pero... esto se estaba saliendo de control.

#goodomens #aziraphale #crowley #ineffable husbands #roleplay español #good omens rp #azirowley #angel #demon #roleplay

[aziraphalerp]

Deja salir un suspiro pesado, era justo ll que estaba pensando que pasaba, las imperfecciones de las plantas son un reflejo de Crowley... de cuando estaba en el cielo y por una mínima falta lo... lo lanzaron al infierno, si, lo lanzaron, no cayó... fue un error, pero... quizá debía pasar? De otra forma nada de esto hubiera pasado, no se hubieran conocido, nadie lo habría ayudado a salvar el mundo, el Apocalipsis hubiera sucedido... ah...

Cuando su abrazo es rechazado y el otro comienza a hablar de lo perfecta que deben ser sus plantas, se acomoda su ropa y va directo a la puerta, no lo dejará salir, hay que hablar de esto.

-Crowley, querido...

Se sorprende de inmediato al ver sus lágrimas, está... está llorando oh... es, es bueno, claro por que al fin va a desahogarse. Instantáneamente toma a la planta, la deja a un lado y lo vuelve a abrazar, con fuerza y le acaricia su espalda con cariño.

-Mi querido... amor... deja que todo salga, para eso estoy aquí, querido...

Con esas palabras que le da puede sentir que su llanto ha comenzado a ser más libre, lo siente, sus sollozos y las lágrimas mojarle en su ropa por el hombro.

-Las plantas, amor... son perfectas... pero la perfección no siempre es el camino... y no siempre es de 90 grados, recto... no, un círculo es perfecto... las estrellas son perfectas... hay cosas que son perfectas para unas personas y otras que no... para mí, tú eres lo más perfecto que puedo tener...

Lo toma de sus mejillas y le pasa los pulgares por donde pasaron esas lágrimas que aún caen.

-Eres mi mejor amigo y mi amor... quisiera que la perfección no te atormente la existencia... yo... dices que para ti soy perfecto sin embargo fallé muchas veces, no me fui contigo a Alpha Centauri cuando debía hacerlo... fallé para los arcángeles... pero sigo siendo perfecto para ti...

Una sonrisa tranquila se forma en sus labios y se acerca a besarle la punta de su nariz, tiernamente aunque sabe que eso a veces lo incomoda, peor en frente de sus plantas.

-No crees... que todo debía ser así? Para que estemos juntos, salvar el mundo... para tener esta linda casa y nuestros amigos... querido mío, no es bueno, ni para ti ni para tus plantas el seguir con esto... si, puedes gritarles y todo eso... pero no te compares con... con la perfección... por favor, amor... me duele demasiado verte así... y no es para que lo ocultes... siempre puedes venir a mis brazos, lo sabes...

De inmediato lo vuelve a abrazar con fuerza tratando de darle todo el amor que siente por él, odia verlo tan... tan dolido.

Era una tarde casi tranquila, el cielo estaba despejado y en la mañana había ido a la librería asegurarse de que todo estaba bien, desayunó con su pareja unos adorables crepés junto a un par de cupcakes y su taza de té, simplemente espléndido.

Adoraba esos momentos con él, no es que no los tuviera antes del Apocalipsis, sino que ahora que están fuera del ojo del cielo y el infierno, pueden estar tranquilos, tomando el té y dándose amor sin que los molesten.

Iba a decir que era una tarde completamente tranquila hasta que llegando a casa, escucha los gritos que vienen del invernadero... oh, es Crowley, de nuevo le anda gritando a sus plantas... a veces siente pena por ells, son hermosas y aún así consiguen sólo gritos del otro... y quienes tienen algún defecto, por más pequeño que sea, es desechada, no le dirá nunca que ha salvado a alguna de ellas y las plantó cerca del bosque.

Suspira suave mientras deja sus cosas en el escritorio y se pone ropa más cómoda para estar en su casa, decide dejar que su pareja les grite todo lo que quiera, pero irá pronto a ver de qué trata, quizá una se marchitó o le salió una mancha en alguna hoja.

-¿querido?

Pasaron unos minutos hasta que el silencio llegó, tomó un vaso con agua y fue caminando lento hasta llegar al invernadero y preguntar por él, para ver si había terminado con el regaño... sin embargo... se encontró con una imagen algo... triste.

Frunce el ceño algo preocupado, si, se había dado cuenta, Crowley refleja muchas cosas de él en las plantas... especialmente lo de las imperfecciones, lo sabe, pero no le dirá que si, esperará a que él quiera comentarlo.

-Querido... todo bien? Tus gritos fueron... muy... muy feos esta vez... no... no quisieras hablar conmigo?

Se acerca con cuidado y lo abraza con fuerza desde atrás, trata de no parecer tan preocupado pero... esto se estaba saliendo de control.

#goodomens #aziraphale #crowley #ineffable husbands #roleplay español #good omens rp #azirowley #angel #demon #roleplay

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Era una tarde casi tranquila, el cielo estaba despejado y en la mañana había ido a la librería asegurarse de que todo estaba bien, desayunó con su pareja unos adorables crepés junto a un par de cupcakes y su taza de té, simplemente espléndido.

Adoraba esos momentos con él, no es que no los tuviera antes del Apocalipsis, sino que ahora que están fuera del ojo del cielo y el infierno, pueden estar tranquilos, tomando el té y dándose amor sin que los molesten.

Iba a decir que era una tarde completamente tranquila hasta que llegando a casa, escucha los gritos que vienen del invernadero... oh, es Crowley, de nuevo le anda gritando a sus plantas... a veces siente pena por ells, son hermosas y aún así consiguen sólo gritos del otro... y quienes tienen algún defecto, por más pequeño que sea, es desechada, no le dirá nunca que ha salvado a alguna de ellas y las plantó cerca del bosque.

Suspira suave mientras deja sus cosas en el escritorio y se pone ropa más cómoda para estar en su casa, decide dejar que su pareja les grite todo lo que quiera, pero irá pronto a ver de qué trata, quizá una se marchitó o le salió una mancha en alguna hoja.

-¿querido?

Pasaron unos minutos hasta que el silencio llegó, tomó un vaso con agua y fue caminando lento hasta llegar al invernadero y preguntar por él, para ver si había terminado con el regaño... sin embargo... se encontró con una imagen algo... triste.

Frunce el ceño algo preocupado, si, se había dado cuenta, Crowley refleja muchas cosas de él en las plantas... especialmente lo de las imperfecciones, lo sabe, pero no le dirá que si, esperará a que él quiera comentarlo.

-Querido... todo bien? Tus gritos fueron... muy... muy feos esta vez... no... no quisieras hablar conmigo?

Se acerca con cuidado y lo abraza con fuerza desde atrás, trata de no parecer tan preocupado pero... esto se estaba saliendo de control.

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Podía sentir la pared comenzar a rendirse ante ello, la fuerza de las embestidas eran de otro mundo y la verdad no era para menos... es decir, son un ángel y un demonio teniendo sexo, ash! No, no esa palabra, haciendo el amor, si, mucho mejor.

Estaba a punto, sabía que en unas cuantas embestidas más podría llegar pero su demonio tenía otra idea en mente, la cual era ir al sofá, oh... ah quiere que lo mente! Que pena le da a veces el tener que montarlo... pero no hay espacio para ese sentimiento ahora, simplemente se acomoda encima de sus piernas y lo monta con ganas, en un ritmo desesperado por lograr el orgasmo de ambos.

Gritaron sus nombres al momento del climax y las respiraciones estaban entre cortadas.

-Mi... ah mi amor... si... si...

Estaba perdido nuevamente, pero no tanto como para no tronar sus dedos, sus piernas no dan para caminar, están temblando de placer aún y quiere que por lo en la la ultima vez de esta no he sea en la cama, por eso hace ese pequeño milagro, ahora están juntos en su habitación, sin embargo no cambiaron posiciones, el ángel seguía encima de él pelirrojo e incluso... el otro todavía estaba dentro suyo, se sentía tan lleno, su pareja había terminado en él ya dos veces y se siente... muy bien, no quiere que acabe nunca...

Volvió a besar sus labios ahora todo iba un poco más lento, era la última vez o iba a desmayarse.

Abrazados los dos mueven sus cuerpos a un ritmo algo lento y constante. Lo montaba suave y el pelirrojo alzaba sus caderas para entrar en el profundo, estaba demasiado sensible, no sabe si aguantará mucho rato como las anteriores veces.

-Cro... ah Crowley...

En efecto, estaba perdido en el placer, solo gemía el nombre de su amor, acariciaba su espalda arañada y besaba sus mejillas que se cubrían poco a poco del sudor...

Lo mira a los ojos una vez más tratando de decirle con la mirada que lo ama mucho, verbalmente no puede pronunciar una palabra correctamente.

Con cada pequeño movimiento, estaba al límite, era mucho, el placer y el amor son abrumadores....

En pocos minutos terminó gimiendo sin sentido una mezcla entre “te amo” y “Crowley”, abrazado a él con la poca fuerza que le queda. Ambos cuerpos se dejan caer en la cama y se van calmando, el calor va bajando y sus latidos de corazón se van normalizando.

-Mh... am... amor, creo que necesito un vaso de agua...

Se pone un poco rojo pues parece que le ha dado un ligero golpe de calor, necesita un poco de frío en su cuerpo.

Si bien no necesitaban manejar, Crowley amaba completamente su auto, el Bentley había visto y vivido tantas cosas que ya no lo hacían un auto normal.

Obviamente necesitaba Crowley estar en todos sus sentidos para poder manejarlo, ya que era gracias a el que el Bentley tenía el “poder” para elegir que rutas tomar e incluso, que musica poner.

Habían pasado la tarde visitando a la joven bruja y a los chicos, platicándoles que ahora vivían a las afueras, en un cottage muy acogedor, y que serían bienvenidos cuando quisieran.

Se habían alegrado demasiado, especialmente los chicos de 11 años, a los cuales vió entregarle dinero a Pepper, parecían haber perdido una apuesta. No hizo mucho caso y siguió en la charla e incluso todos planeaban visitarlos la semana entrante para hacer un picnic.

-Creo que los niños apostaron sobre nosotros Angel, pude verlos entregarles dinero a la niña morena.-

El auto iba a mas de 100 km/h por la carretera sonando los mejores exitos de Queen, aunque Aziraphale había puesto un disco de Tchaikovsky. Crowley hablaba tranquilo, acostumbrado a eso, pero su pareja solo podía decirle que bajara la velocidad.

-Angel, vamooos, pensé que te gustaba rápido.-

Sonrió divertido, quizás iba algo de doble sentido ahí, pero siguió con la vista al frente tomando el volante. De todas formas, al pelirrojo le encantaba la velocidad.

#aziraphale #crowley #goodomens #ineffable husbands #roleplay español #azirowley #good omens rp #angel #demon #roleplay

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Oh pobre Bentley! Recordó que el auto tiene... amh bueno, prácticamente como vida propia? No sabe explicarlo, la cosa es que seguro sabe perfectamente lo que hicieron ahí atrás.

Apenas estaba volviendo completamente en sí cuando ya por ma ventana veía cerca su hogar, no pudo evitar sonreír pensando en qué pasaría al llegar ahí. Su demonio ya lo dijo claro y fuerte, ni siquiera estaba cerca de acabar.

-Crow... Crowley querido... la lluvia, cómo... ah?

Solo estaba empezando a hacer la pregunta cuando de inmediato aparecen dentro de casa! Agradece que está entrando de nuevo a ese estado de solo placer, de lo contrario lo estaría regañando por usar un milagro demoniaco en eso... no mojarse con la lluvia.

Sus pensamientos fueron callados totalmente cuando el otro se introduce en él, no, no duele, se siente increíble, de inmediato sus ojos se ponen brillantes y sus labios rojos, de tantos besos, se entreabren para poder dejar salir los primeros gemidos de esta ronda.

Ni siquiera le importó los cuadros en el piso, sabía que no se habían dañado y si así fuera, lo arreglaría con un milagro, ahora solo estaba enfocado en su pareja.

Se afirmaba de él pero también acaricia su nuca en donde empieza su pelo, sabe que ahí le gusta mucho.

También acerca sus labios calientes a besar todo lo que puede de su cara y especialmente en su marca, desde su primera vez aprendió que ese es un lugar que el otro adora, como buen ángel que es, quiere complacerlo de igual forma y llevarlo al límite, que ambo lleguen ahí.

-Crowley! Amor~ se siente muy bien~

Arañaba su espalda con cada embestida, le dejaría marcas hasta mañana o más, pero no le preocupa, sabe que a su pareja le agrada eso, por su parte, él también recibe su porción de besos y chupetones en todo su cuello, por su puesto, estas marcar son más visibles... pero le gustaría que las vean y sepan que le pertenece al pelirrojo, que lo ama y... que se aman.

Nuevamente sus gemidos evolucionaron a gritos, el otro lo estaba embistiendo contra la pared con toda su fuerza, entraba tan profundo y siempre acertaba a darle en su próstata... donde lo volvía loco y hacía ver estrellas con cada roce.

De seguro las plantas del otro pueden oírlos desde el invernadero, oh! No, no pueden, el sonido del caer de la lluvia se encarga de cubrirlos.

-Crowley! Querido! Yo... amh yo...

Ha llegado al punto en el que apenas le salen palabras coherentes, precisamente solo el nombre de su amado, estaba algo sensible del anterior orgasmo y no tardaría mucho en llegar al próximo... oh... y sabe que no se acabaría ahí, falta... falta la cama... si se quieren dar una ducha luego espera poder tomar una apropiada...

Si bien no necesitaban manejar, Crowley amaba completamente su auto, el Bentley había visto y vivido tantas cosas que ya no lo hacían un auto normal.

Obviamente necesitaba Crowley estar en todos sus sentidos para poder manejarlo, ya que era gracias a el que el Bentley tenía el “poder” para elegir que rutas tomar e incluso, que musica poner.

Habían pasado la tarde visitando a la joven bruja y a los chicos, platicándoles que ahora vivían a las afueras, en un cottage muy acogedor, y que serían bienvenidos cuando quisieran.

Se habían alegrado demasiado, especialmente los chicos de 11 años, a los cuales vió entregarle dinero a Pepper, parecían haber perdido una apuesta. No hizo mucho caso y siguió en la charla e incluso todos planeaban visitarlos la semana entrante para hacer un picnic.

-Creo que los niños apostaron sobre nosotros Angel, pude verlos entregarles dinero a la niña morena.-

El auto iba a mas de 100 km/h por la carretera sonando los mejores exitos de Queen, aunque Aziraphale había puesto un disco de Tchaikovsky. Crowley hablaba tranquilo, acostumbrado a eso, pero su pareja solo podía decirle que bajara la velocidad.

-Angel, vamooos, pensé que te gustaba rápido.-

Sonrió divertido, quizás iba algo de doble sentido ahí, pero siguió con la vista al frente tomando el volante. De todas formas, al pelirrojo le encantaba la velocidad.

#aziraphale #crowley #goodomens #ineffable husbands #roleplay español #azirowley #good omens rp #angel #demon #roleplay

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Cada que hacían el amor donde sea que sea, su mente volaba como si estuviera con sus alas desplegadas entre las nubes, era magnífico, pero no solo por el acto sexual, sino que lo mejor de todo es por que lo hacen con verdadero amor.

Adoraba sentir el amor de su pareja, especialmente siendo un demonio sabe que es difícil para él expresar el sentimiento del amor, por el contrario, como el ángel que es un ser de amor, que podía sentirlo hasta en lo más mínimo, que sea de esta forma era algo excepcional, lo llevaba al cielo... metafóricamente.

Sus ojos se pusieron cristalinos cuando siente su interior lleno del miembro de su pareja, increíblemente es grande, no es que haya visto otro miembro en su vida aparte del suyo, pero el tamaño es respetable.

Le gusta que le dé el tiempo para acostumbrarse, pero no dura mucho hasta que sus caderas comienzan a moverse buscando placer. Si sus gemidos eran fuertes con solo besos y caricias, ahora con las embestidas que con cada una aumentaba la velocidad e intensidad, sus gemidos llegaron a ser gritos... oh gracias a la lluvia torrencial para evitar que se escuche fuera del auto.

-Crowley! Amor! Por favor más ~

Le arañaba la espalda y no importaba si luego sentiría vergüenza de haberle pedido que vaya más rápido, no era relevante el pensar en eso en este momento, solo en el movimiento de ambos, solo en su amor y el placer.

Con sus ojos entreabiertos podía ver el vaho en el vidrio, recordó aquella película... amh... Titanic, en esa escena donde hacen el amor en el auto y una marca de la mano queda en la ventana... erótico y romántico, casi poético.

Las embestidas aumentaron con el tiempo y justo le daban en ese punto que lo volvía loco, a este punto sentía que no podía más, el auto también se movía levemente por la fuerza de ambos.

Cada que hacían el amor era como pasar años en ese estado, era... delicioso, no dabe si fue él o su pareja el que terminó primero, pero no importa, llegaron juntos al climax... gritaron el nombre del otro y se abrazaron como si fuera la última vez.

-Te amo... ahh te amo...

Susurraba eso en el estado de post orgasmo, era algo... raro, bueno, particular, pero al ángel le tomaba más tiempo volver al plano real luego del orgasmo, por unos minutos era como si estuviera en un estado de sueño y perdido, se siente bien...

-Mmh... querido...

Sabe que esto no ha acabado, la mirada del otro lo dice todo, ansia ya llegar a su hogar... mmh, eso se siente fantástico, decir “su hogar” de ambos.

El demonio lo deja atrás, acostado y con el saco cubriendo su cuerpo, vuelve s volante y siente que arrancan... rápido... oh, siente ansias...

Si bien no necesitaban manejar, Crowley amaba completamente su auto, el Bentley había visto y vivido tantas cosas que ya no lo hacían un auto normal.

Obviamente necesitaba Crowley estar en todos sus sentidos para poder manejarlo, ya que era gracias a el que el Bentley tenía el “poder” para elegir que rutas tomar e incluso, que musica poner.

Habían pasado la tarde visitando a la joven bruja y a los chicos, platicándoles que ahora vivían a las afueras, en un cottage muy acogedor, y que serían bienvenidos cuando quisieran.

Se habían alegrado demasiado, especialmente los chicos de 11 años, a los cuales vió entregarle dinero a Pepper, parecían haber perdido una apuesta. No hizo mucho caso y siguió en la charla e incluso todos planeaban visitarlos la semana entrante para hacer un picnic.

-Creo que los niños apostaron sobre nosotros Angel, pude verlos entregarles dinero a la niña morena.-

El auto iba a mas de 100 km/h por la carretera sonando los mejores exitos de Queen, aunque Aziraphale había puesto un disco de Tchaikovsky. Crowley hablaba tranquilo, acostumbrado a eso, pero su pareja solo podía decirle que bajara la velocidad.

-Angel, vamooos, pensé que te gustaba rápido.-

Sonrió divertido, quizás iba algo de doble sentido ahí, pero siguió con la vista al frente tomando el volante. De todas formas, al pelirrojo le encantaba la velocidad.

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