#ya no quiero seguir sintiéndome así por las cosas más pendejas | Explore Tumblr Posts and Blogs

mylittle-lumiere · 2 years

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Hola, mi pequeño solecito.

Hoy estamos cumpliendo 3 meses juntos, espero te haga feliz el que estemos aún al lado del otro, se que no he sido la mejor pareja del mundo y cometí errores que aún me hacen sentir mal, pero estoy aprendiendo de ello y ser mejor para ti, para mi y nuestra relación.

Debo confesar que últimamente me siento un poco triste porque sient9 que ya no estamos siendo los mismos, nos siento alejados y sé que las cosas cambiaron por mi culpa, no quiero que la chispa que teníamos se apague porque no quiero llegar a perderte. Eres una persona muy importante para mi y te amo aunque se veces no me creas, se que no me crees a veces o eso es lo que yo siento.

Se que las cosas no han sido las mejores estos días y hoy no es un día en el que yo me sienta bien, incluso estos días he estado sintiéndome mal, pero aún así no dejó que esto influya en nuestra relación. Tal vez no sea la mejor en demostrar en si estoy estoy cambiando cosas con acciones, estos días he estado algo insegura.

Eres mi vida entera, eres mi niño precioso y se que te encuentras mal por cosas pero no quiero que esto afecte nuestra relación, nos dijimos que nos diríamos todo y es lo que quiero.

¿Sabes que eres muy importante para mi no? ¿Sabes que te amo con toda mi alma y eres el amor de ni vida? No quiero que esto se te olvide nuca apesar de lo que este pasando con nosotros, debi admitir que a veces me siento una mala novia y que no te merece por lo que te hice ya que aún me hace sentir mal, te amo tanto que me duele el sentirme así y que alguien mejor llegue a tu vida y tú llegues a enamorarte de alguien más, te aburras y decidas acabar con esto. Se que hay cosas que no me dices Hiro, yo necesito saber que es lo que pasa así como tu deseas saberlo.

Perdón si ya no estoy siendo la mejor pareja y estoy teniendo mis fallas, perdón por ya no saber que decirte y te aburras, perdón por no saber cómo hacerte sentir bien cuando estas mal, y perdón por pensar de más cuando no debería hacerlo.

Solamente quiero estar feliz a tu lado y sin que nadie haga daño a la personas que más amo en este feo y horrible mundo, eres lo primero que pienso al despertar, tú eres mi motivo por el cual quiero seguir y me hace sonreír, sabes que yo haría lo que sea para que estés feliz y metería mis manos al fuego por ti, odio ver al amor de mi vida triste.

Se que a veces puedo llegar a ser bien culera y lo he sido contigo cuando estoy enojada o sería, pero no es por hacerlo. Se que te hace sentir mal y me has sentido igualmente alejada, simplemente no se que hacer cuando tu lo estas, solamente se que no quiero perderte, perdernos y perder esto que aún siento por ti. Estoy luchando por nosotros aunque no se note, te estoy mostrando mi lado más honesto y enamoradiso, cuando estoy tan enamorada puedo ser lo más estúpida y eso lo llegaste a ver, suelo ser tan insegura y uno de mis problemas es cerrarme pero lo estoy mejorando de a poco, ¿pero sabes algo? Siempre que estoy mal con un solo mensaje tuyo me haces sentir mejor, haces que toda esa ansiedad y terror se vayan cada que me dices que me amas, sacas esos berrinches y te comportas como bebé. Me encantas tanto Hiro, y perdón por ser una pendeja jajaja, peo esta pendeja te ama tanto con locura que se vuelve loca por ti y el hacerte tan feliz, se que hoy no hice muchas cosas lindas para ti pero esto es lomas valioso que viene desde mi corazón expresarte cada cosa que siento y demuestro cada que cumplimos meses, adoro tenerte a mj lado y eres que la persona que esta conmigo es alguien hermoso con la que quiero seguir por el resto de mis días, amo escucharte cada que duermo y tu linda risita, odiaria perder al amor de mi vida, te amo Hiro, y no me cansaré de ello, te amo como desde el primer día que te conocí y me encantas también.

Verás que te ayudaré a que esa tormenta gris que esta atormentandote se vaya y vuelva a salir ese solecito y ser felices juntos. Vamos a mantener nuestra promesa de estar juntos por muuuucho mucho tiempo porque contigo quiero ser la primera vez en cumplir algo que digo y quiero que tú seas esa primera vez de muchas cosas que lo has echo, eres mi primera vez en muchas cosas y quiero que lo sigas siendo por más meses.

Te amo mi precioso osito, el niño de mis ojos y el futuro padre de mis hijos, feliz tres meses juntos, tres bellos y precioso meses al maravilloso chico de mi vida.

Nunca le he dedicado una canción de lana del rey a nadie porque estas canciones son sagradas y ni se le dedica a nadie, así que apreciala por que es de mis canciones favoritas. ♡

#Spotify

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mapita · 6 years

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Fin de Abril

Hace una semana estaba llorando a mares a esta misma hora.

Llegué después de un trajín horrible a Valle, solamente para entender que te había fallado. Nunca fue a propósito, de ahí el dolor. Porque anteriormente algunas personas me habían hecho lo mismo, me habían decepcionado y juré nunca ser una de esas personas. Lo malo es que uno no puede asegurar qué va a pasar en el futuro y por mucho que te esfuerces, no podemos controlar la realidad. Y la cagué. U_U

Me dijiste que no me querías ver, me dijiste que me regresara y yo no podía más de la culpa. Caminaba sin rumbo por las bellas calles de tejados rojos y banquetas enormes, buscaba algo de comer y buscaba un sitio para pensar y analizar qué hacer. Seguí tus deseos y no te busqué, tampoco me quedé, ni siquiera intenté hacer alguna locura para compensar que no estuve a tiempo. Que no estuve a tu lado, que no estuve para tapar un trauma más tuyo, que no te ovacioné como me hubiera gustado hacerlo y te hubiera gustado escucharlo. No pasó!

A pesar de todo llegué, tarde, molida, hambrienta, cansada, sin ánimos y sintiéndome mierda, ahí estuve. Estuve en el mismo pueblo que tu, tratando de solucionar un error. No me diste chance, no hubo manera de hacerlo. No contó el esfuerzo o la intención. Me fuí.

Tome el primer bus de regreso, con mi cora roto, mis ojos llenos de lágrimas y de tristeza. El pobre pasajero a mi lado se tuvo que chutar el moqueo y las palabras de odio que me la pasé repitiendo hasta que llegué a la ciudad.

Mis amigas no lo entendían, ¿por qué el drama !?

-"Ni siquiera tienen una relación, qué le pasa?!"

-"Pareces adolescente enamorada Mapita"

Lo único cierto es que sabía, porque mucho te conozco, es qué hay cosas que contigo no van y un error así, significaría el fin.

Te escribí, te pedí perdón y no dijiste nada. Te di tu espacio y a inicio de mes te volví a escribir. Te dije que todo estaba en tus manos, que solo tú sabías si me perdonabas y te pedí que no me recordaras por eso. Que no quería que todo se resumiera a una mala logística, que no soy eso, que me importas, que te quiero y que me dolería mil que todo acabara. Me dejaste en leído.

Hace una semana de todo esto y sigues en silencio. A veces dicen que el silencio también es una respuesta.

Después de unos días sin saber de ti, sin nada de nada, no me he caído en pedazos. Llegó el día en que sola me perdoné y acepté mi error y las decisiones o reacciones que vendrían después de eso. Me perdoné y seguí. Por supuesto que la he pasado mal, por supuesto que te pienso todos los días y me pregunto si tendrás la capacidad de arreglar esto o al menos terminarlo. Sabes lo mucho que odio la incertidumbre, el limbo. Pero entendí que todos cometemos errores y que el amor está en la capacidad de perdonar a alguien y supongo que si tu aún no lo haces es porque realmente no me querías o no hay forma alguna de compensar que no estuve en un momento chiquito de retos y esfuerzos; a pesar que he estado en muchos otros momentos, en lugares a tu lado y en situaciones que son más a tu favor que al mío.

Ahora entiendo que nuestro camino ha estado muy tropezado, desde el inicio. Que tal vez, el universo, como por milésima vez me está diciendo que todo se acabó y que siempre era mejor sin ti.

Soy muy aferrada y quisiera respuestas. Quisiera las cosas claras con simplezas como que si es verdad que ya se acabó todo para ti, me borres, me dejes de seguir, me olvides y nunca nunca jamás vuelvas a llegar o a aparecer en mi vida.

Soy tan aferrada que sigo esperando una señal para hacer algo, para no perderte, para solucionarlo todo. Pero es que no puedo hacerlo todo yo, no puedo hacerme trizas para que tú estés bien y contento. Yo también importo, yo también quiero cosas y tengo expectativas (pendejas si quieres) de que siempre vas a estar.

Hoy, a una semana quisiera invitarte a ver la película que queríamos ver, la de los perritos. Hoy me voy a inventar muchas excusas para olvidarme de esas ganas terribles de verte, de saber de ti, de estar contigo viendo la vida pasar.

El lunes es tu cumple y no sé qué voy a hacer. Casi siempre soy una persona intensa con el cumpleañismo y en mi mente ya tengo el plan a y maybe hasta un plan b para celebrarte y festejarte.

Pero llega un momento en la vida que lo arriesgas todo por alguien, yo lo hice ya una vez, por el alemán. Y aprendí a chingadazos que nada había valido la pena, que por más que hiciera, la cosas no iban a cambiar y que cuando alguien no te quiere, no te quiere y punto. Después de esa vez, no creo volver a intentarlo. Es más, apuesto a que de todos modos ni lo vas a apreciar ni va a valer para nada, porque bien me lo dijeron. Busco al mismo tipo de persona y a la larga todo es un loop infinito.

Me duele, otra vez me siento en revoltura porque si me conocieras, muy en el fondo sabrías qué tipo de persona soy y lo que realmente te estoy dando. ¿No lo quieres? Pues qué triste, que horrible, pero no me va a romper. Es tu rollo, no mío. Yo no soy la tibia y no me ando limitando por miedos o planes estúpidos.

Igual te seguiré pensando y poco a poco te iré borrando. Ya lo viví dude, ya sé que a pesar de todo, la vida sigue y no se detiene. Que todo forma parte de las lecciones de vida qué hay que aprender y que todo se vuelve un poco más fácil de aceptar.

Hoy, te invito al cine. Te llevo a comer palomitas y te regalo un abrazo. Es lo que hoy quisiera para mí. Pero a veces el ego no nos deja caer, ni modo.

A ver en qué acaba todo esto.

#cuentito corto #mapamunding #note to you fucker #la pinche vida #lefuckinglife #el pinche robot

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vivithinks · 4 years

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Tulum Parte II

Cuando conocí a Juanfer yo ya tenía un mes de haber llegado a Tulum y 3 de haber cortado con Luis.

Ese día Mariana, Jess y yo salimos a un bar en la playa y nos topamos a Hugo. Hugo era un amigo muy fantoche de Mariana que siempre insistía en que pasara algo entre los dos y me decía mi amor y cosas raras. A mí me incomodaba mucho su presencia y su vibra era todo menos agradable. Se veía a leguas que era un tipo que no era de fiar y luego lo comprobé (le quedó debiendo dinero a Mariana).

Hugo iba con varios amigos, entre ellos un tipo guapo de pelo negro, barba y ojos verdes. A Mariana y a mí nos llamó la atención y estuvimos toda la noche buscando su atención, hasta que finalmente me peló a mi. Primer redflag: yo no debía competir por su atención y lo hice.

Primero estuvimos en iScream Bar, luego a Diablito Chachacha y terminamos en la Malquerida, hasta la madre. Bailamos un rato Juan y yo y empezamos a platicar. Era doctor, de Jalapa, iba a poner un negocio, 32, viajero, guapo, era muy mi tipo. Al final me aplicó la clásica “¿me acompañas afuera?” y nos besamos, me dijo que si íbamos a su depa y después de cuestionarme, me encontré ahí, peda, disfrutando su compañía, sin ningún compromiso y por primera vez en mucho tiempo me dejé llevar. Fuimos a su depa y nos estuvimos besuqueando brevemente en la cocina hasta que salió su roomie de su cuarto y nos cachó en la oscuridad, así que, avergonzada, decidí que mejor nos fuéramos a mi casa.

La verdad después de eso yo ya me quería meter y dormir pero me aplicó la de “¿me prestas tu baño?” y se lo presté y cuando salió me encontró en una conversación telefónica muy desagradable con Luis donde me estaba diciendo pedísimo a sus 5am (mis 4) que SEGURAMENTE yo estaba con alguien porque ¿cómo es que estaba yo conectada en whatsapp tan noche? Y tenía razón, pero estaba en whatsapp porque tenía horas sin saber de Mariana. Y bueno, además sí estaba con alguien pero ¿a él qué vergas le importaba?

El punto es que le mentí a Luis y le dije que no estaba con nadie y le colgué muy digna porque obviamente él no estaba en posición de pedir explicaciones y menos de ponerse violento así que quedé como una fuckgirl ante los ojos de Juanfer y por alguna razón, se quiso quedar. Esa noche tuvimos un faje muy intenso pero el tipo no llevaba condones así que me contuve.

Después me invitó a salir un martes a un bar nuevo que había encontrado en facebook, pasó por mí en su Camry blanco y platicamos varias horas hasta que nos pusimos borrachos. Ese día creí sentir una conexión con él pero ya en retrospectiva y siendo muy honesta conmigo misma, creo que solo quería sentir algo a huevo. Me lo llevé a mi casa y ese día lo hicimos pero el muy pendejo se quitó el condón a media cogida y me di cuenta poco después y lo corrí de mi casa.

Me sentí MUY mal. Me sentí violada. Y FUI VIOLADA.

Sentí que no me había respetado y que a pesar de haber platicado con él muchas horas, de creer que teníamos una conexión, él simplemente había fingido interés todo ese tiempo para, ahora sí, llevarme a la cama y lo consiguió. Y caí, toda estúpida, caí.

Esa era la señal definitiva de que no debía seguir con eso, de que él no era una buena persona y no me escuché y hoy, un año después me sigo arrepintiendo tanto. Esa fue la segunda red flag.

Lo confronté al día siguiente, le escribí primero YO. Toda pendeja. Minimizó mi sentir: me dijo que “no debíamos de tomarnos todo tan a pecho” y aún así DECIDÍ PERDONARLO Y SEGUIR SALIENDO CON ÉL.

Ya con mi autoestima en el piso, con una co-dependencia culera hacia literalmente cualquier hombre que me hablara decentemente y sintiéndome de la verga, accedí después a ir a la playa con él y sus amigos. Cuando llegaron por mí, todos estaban no sé si pedísimos o crudos y descubrí por su actitud que cada uno había sacado a “una vieja” para llevársela después a la casa, para coger, obviamente. Esto lo supe porque, no es por ser culera pero la chava que acompañaba a su amigo era muy desagradable y le pregunté que desde cuando se conocían y dijeron que de “ayer”.

Por si eso no fuera poco, yo tenía la sospecha de que Juan ni siquiera se sabía mi nombre, porque descubrí que mi número de teléfono no estaba registrado en su celular. Tercera red flag.

Después de la playa, fuimos a Chedrahui y estuve incómoda todo el rato y pedí que me llevara a mi casa y no me hizo caso. Sus amigos me convencieron de que cero que ver y que me estaba maltripeando y terminaron convenciéndome de que todo estaba bien y yo estaba loca. Típico. Él me abrazó, me besó en el cachete y me dijo: “Vivi, ni al caso, no seas enojona, ándale vamos al depa”. ¿Y qué crees? Toda pendeja accedí. Compraron comida, llegamos a su depa, él cocinó (muy rico la verdad) y tratamos por todos los medios posibles de ver la final de GOT, cosa que no pasó porque el internet no funcionaba*

Y por no funcionaba, me refiero a que NO HABÍA. Y aun así, después de todo, me quedé a dormir en su casa, cogimos en el sofá y al día siguiente me fui a mi casa, toda estúpida, a ver la final.

Juanfer dormía en el sillón, igual que yo, y yo no quería pensarlo así pero la verdad me parecía patético, así que la mayoría de las veces que tuvimos sexo fue en el sillón del depa con los roomies en sus respectivos cuartos. Cada vez que me iba de su casa me sentía como si hubiera hecho algo malo porque yo sabía en el fondo que la estaba forzando.

La verdad es que el doctorcito, como le apodé secretamente, era muy bueno para hacer cosas culeras, hacerme sentir mierda y aun así salirse con la suya, haciéndome creer que eran pedos míos cuando me sentía rara o incómoda. La verdad es que estaba muy sola.

Mientras yo seguía cayendo en ese circulo vicioso, yo veía a Mariana cada vez más harta de mí. Sentía que odiaba entrar a la casa y verme ahí en el sillón, toda fracasada, mandando cientos y cientos de correos electrónicos con mi CV a cualquier empresa que lo solicitara, cumpliera o no con el perfil, sin éxito.

Yo estaba desesperada.

Mi situación económica era terrible. Mi papá me apoyaba y me mandaba dinero cada vez que podía, mi abuela también. Yo no salía a ningún lado para no gastar y cuando lo hacía me ponía hasta la madre para desquitar la salida. El hecho de no encontrar trabajo, ya no digamos de fotografía, ¡de lo que fuera! me hacía sentir como la persona más inútil del mundo y me dolía mucho sentir que Mariana cada vez me perdía más el respeto.

Por lo mismo, Mariana comenzó a hacer planes sin mí y a dejar de invitarme o a salir huyendo a Playa del Carmen para que no pudiera alcanzarla. Nunca lo intenté, yo sabía que quería su espacio y se lo daba, era muy entendible. Pero yo me sentía cada vez más tonta y más sola, por ello, quiero creer que cedí tantas veces con Juan.

En una ocasión, fuimos a su consultorio y en esa ocasión tuvimos sexo y estuvo muy bien, porque una de mis fantasías sexuales era coger en el consultorio de de un doctor, con un doctor. Pero, igual que todas las veces, cuando el tipo eyaculó, paró en seco y terminó el acto. Yo nunca tuve un orgasmo estando con él, ni le importó hacerme llegar.

A medio acto, estando adentro de mí, me dijo entre jadeos que quería “probar” con otras personas y me preguntó si a mí me latían también las mujeres. La verdad es que yo sí me he besuqueado con algunas mujeres, hasta ahí, pero jamás me he planteado seriamente chuparle la vagina a alguien, y ese día por convivir (o por idiota) le dije que sí y me quedé intranquila.

Cuando paró, le dije que yo no quería probar con más gente. Que él y yo lo que quisiera (fatal) pero ya meter una tercera persona, no me parecía bien.

Y me enojé. Duré todo el trayecto desde su consultorio hasta mi casa enojada y él sentía y me dijo: “Oye oye, tú me gustas, me la paso muy bien contigo y todo pero la verdad yo sí quiero seguir saliendo con más gente”.

Yo me las doy de muy openmind y chamana tuluminati cuando se trata de colas ajenas, pero la verdad es que eso de compartir A MÍ nunca se me ha dado y no sé si en algún momento de mi vida lo quisiera experimentar, siendo muy sincera. Eso que me dijo el doctorcito, sé que fue muy honesto y culero de su parte, y se agradece que dentro de todo me haya dicho, pero me lastimó y terminó de mandar a la verga lo que quedaba de mi autoestima.

Llegando a mi casa lo bloqueé y no hablamos por dos semanas... hasta que un día me puse peda y horny. Me dio mucha risa porque no se tardó ni medio día en darse cuenta y me escribió, seguramente también se sentía solo.

Volvimos a salir, me llevó con sus amigos de nuevo y salimos varias veces a cenar. Hablaba muy seguido de su ex. Su ex que era una chava super guapa de Jalapa, super inteligente, millonaria, blah blah. Según él, eran buenos amigos.

La plática no fluía mucho porque el wey era un tipo híper absorbido en sí mismo y repetía lo que ya me había platicado constantemente y yo fingía interés haciéndole más preguntas sobre los mismos temas para que siguiera platicando y sintiéndose bien. Ambos fingíamos con mucha hueva que nos interesaban nuestras respectivas vidas y terminábamos cogiendo mediocremente después. Y digo mediocremente porque su miembro tenía potencial. Era grande, grueso y siempre estaba duro. Lástima que lo portaba un pendejo.

El doctorcito seguía hablándome de su ex, creo yo porque ya tenía un plan trazado en su mente: quería presentarme con su ex porque quería que tuviéramos un trío. Esto lo deduje yo por lo que voy a contar a continuación:

Después de varias noches que Juan me escribió ya muy tarde para invitarme al Batey y después de yo decirle que no todas esas veces, –mitad porque seguía sentida y mitad porque secretamente me cagaba (me sigue cagando) que me inviten a los planes tarde, porque soy super needy y tengo tan baja autoestima que necesito que me hablen temprano para hacer plan para sentirme tomada en cuenta– me dijo un día que quería salir “a ligar”. Porque, como arriba comenté, el día del consultorio yo le dije que sí me latían las mujeres. O sea el wey se pasó por el arco del triunfo lo que yo le dije sobre la poligamia, etc. y todavía me invita a “ligar”. Y le dije que no.

Siguiendo esta idea, semanas después me invitó a acampar con la promesa de que irían un amigo y otra amiga suya. A mí el plan no me olía bien, sospechaba que estaba tramando algo y acabé de confirmar mis sospechas cuando me marcó para decirme a nada de irnos que casualmente su amigo le había cancelado, entonces que solo iríamos su amiga y yo.

¿Coincidencia? No lo creo.

Luego, cuando estuve trabajando para la revista en el área de fotografía y lifestyle, fui a cenar con el equipo editorial a Rosa Negra, un restaurante carísimo en la zona hotelera, y Juan me estuvo llamando todo ese día y el anterior porque me quería presentar a “una amiga”.

Bendito Tulum y su recepción telefónica pedorra en la playa, no pude contestarle pero yo sabía que esa amiga era muy probablemente su ex PORQUE en una ocasión, cuando estábamos en su depa (cuando el wey ya por fin tenía cuarto propio) me mencionó que su ex quería ir a visitarlo *pronto*

Dicho y hecho, después hablamos y sí había sido ella.

Dormí en su depa nuevo varias veces más y la última vez que lo vi llegó pedísimo a mi casa con dos argentinos guapísimos en su carro. Me llevaron a un bar y de ahí a un after y perdí el conocimiento. No sé si me drogué pero recuerdo haber tomado muchísima cerveza y confieso haber estado en mi casa tomando sola desde antes.

Al día siguiente amanecí desnuda en su cuarto, sin zapatos, sin bolsa y sin celular. Tuvimos que ir a buscar la casa de la fiesta al medio día para recuperar mis pertenencias. Ese día me invitó a pasar la tarde con él y comer juntos pero no quise y esa fue la última vez que lo vi.

Agradezco mucho que todo haya terminado porque hoy que vuelvo a recordar todos estos días con detalle, me doy cuenta que cuando estuve en Tulum, me perdí.

Y mira que no soy perfecta, ya otras veces han jugado conmigo y me he respetado muy poquito. Entiendo que los límites siempre los pone una. Una misma enseña a los demás a que te amen y yo no le enseñé nada a Juan. Yo dejé que él hiciera conmigo lo que quisiera y me hice pendeja muchos meses con tal de no estar sola.

Me da coraje haberlo sabido en el momento, haberme sentido mal y haber decidido pasar por alto cada uno de sus actitudes que disfrazaba con su buenpedez, así como quién no quisiera ser un culero pero lo es.

Me pienso sentada en una mesa del segundo piso de la Cervecería Chapultepec de avenida Tulum, forzándome a escuchar las historias piteras de grandeza que parloteaba el doctor guapo de 32 años con señales de alopecia prematura, sentado frente a mí. Me pienso fastidiada de su plática y de la no-química que había entre los dos.

Me imagino viéndome desde sus ojos, también aburrido y fingiendo interés solo porque sabía que tenía que llevarme a cenar o darme algo antes a cambio para que yo quisiera coger y me doy mucho asco porque los dos estuvimos jugando el mismo juego pero el iba ganando y por mucho.

Yo sé que el me veía como una princesita mimada y quizás lo era pero yo no despertaba en él nada más que un deseo de coger y ya. No había admiración, no había respeto y, por lo tanto, no había amor.

Y qué bueno que ya no estoy ahí.

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letropolis · 7 years

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3 de Octubre 2017

Camino sintiéndome un poco mareada, espero que la sensación acabe pronto. Jamás me había sentido así. No se si al fin los efectos de las pastillas estén haciendo efecto -pero sería muy raro que lo hicieran después de 9 meses-. No dejo de pensar en lo que pasó anoche; el beso más deseado en mucho tiempo, el beso que me erizo la piel; aun recuerdo como me hormiguearon las piernas cuando me jalaste del cuello para besarme. No se me olvidan las nauseas nerviosas cuando jugaste con mi cabello y me sonreíste. ¿Qué estamos haciendo? Me sigo preguntando.

Sigo caminando y sigo mareada. No uso las escaleras eléctricas, casi corro por los escalones pero las piernas comienzan a reclamarme. Un dolor, un calambre, el tobillo, me falta el aire, no se quien es la persona que vive en mi cuerpo que perdió la condición física de bailarina que tuve tantos años; esto tampoco es un buen síntoma.

Me siento en las escaleras húmedas de lluvia a leer el libro que tanto me pediste que cuidara. 9:55. Corro al trabajo. 4 horas de hacer algo que amo pero en lo que hoy me equivoco. ¿Por qué putas hoy? Hoy que mi mood no está para soportar estas cosas, hoy que la sinceridad me brota por los poros más que el sudor cuando viajas en metro.

La culpa y el letrero imaginario de “PENDEJA” en m cabeza están ahí. Cargaré con eso todo el día, así soy.

Tengo que regresar rápido. Tengo que llegar a la escuela, tengo que hacer esto, tengo que hacer aquello, tengo, tengo, tengo,... mi vida se resume a un montón de responsabilidades que una persona de 21 no debería cargar, pero me encanta la vida dura.

No pienso, o tal vez pienso demasiado, tanto que ni siquiera sé en qué. Mi cabeza va y viene entre ideas incongruentes que no tienen ni un ápice de relación entre si, pero que bien se siente. Mi cuerpo se siente libre de mi mente, es como si flotara.

Llegamos. Me siento en un sillón de piel en medio del ruido. ¿Qué ruido? No escucho nada, el único ruido para mí es el caos dentro de mi cabeza. Termino el libro. Me identifico. De hoy en adelante no voy a descansar hasta tener mi propia copia. Ese será nuestro libro aunque tu no lo sepas.

Mi mente sigue siendo ajena a mi cuerpo, no se cómo empieza a pasar el tiempo, solo siento la adrenalina en los momentos de vómito verbal y creo que he fallado. Arruiné todo. ¿Estás enojado? No sé que quieres, solo sé lo que yo quiero, y juraría saber lo que quieres pero tienes miedo, miedo al compromiso como te dije una vez. No puedes superar tu puto miedo que solo nos trae dudas.

Todo se arregla con un viaje en Uber y un “Quédate conmigo”. Pero tu no estas en el coche. Es increíble que estando tan lejos puedas provocar todo eso en mi. No quiero contestarte. A pesar de que me cuides, estoy enojada contigo, lo único que nos falta es el título pero tu no lo entiendes. No puedo esperarte por siempre. No estoy para esperar a nadie (agradezco ese consejo).

Me quito la ropa y me veo en los huesos. ¿En qué momento llegué a ser tan delgada? No tengo senos, ni nalgas, solo huesos. Costillas, clavículas, cadera, no son suficientes. Cualquier defecto basta, y sigo siendo tan gorda como ayer. Y tengo que tomarme las pastillas, y mañana ahora si no comeré nada después del desayuno.

Tengo frio. ¿Será la delgadez? Tomo una taza de leche caliente, mi sabor favorito, chocolate en mis labios. Y mientras escribo, hago tarea, intento concentrarme, intento seguir viva, intento salvarme,... espero tus mensajes. Por favor ya no te tardes, que cada segundo de espera es un segundo que siento que te pierdo.

22:27

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dulce-needstotalk · 7 years

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Destinatario: Desorden.

Tengo desorganizadas tantas cosas que es imposible encontrar por dónde comenzar; tengo tantos pensamientos, tantas emociones, tantas yagas y tantos motivos, todo parece querer salirse de mi pecho, salir de mi cabeza, salir de mi garganta en forma de alaridos, salir de mis ojos en incontables gotas saladas. Todo al mismo tiempo, peleando por un lugar, peleando por el primer puesto.

De forma sincera, no puedo más. Ejemplifiquemos un poco, hace unas semanas, mientras andaba de vacaciones, las cuales desgraciadamente no disfruté como debí (tal vez si no me desvío pueda explicar un poco), una de las cosas que ofrecía el paquete, era la realización de actividades al aire libre, una de las tantas actividades consistía en formar dos equipos, los cuales tiraban de una cuerda de forma simultánea con el objetivo de obtener un trozo de tela que estaba atado al medio de ella (vamos ya, que todos conocen este juego). El juego comenzó y yo estaba bien al inicio, estaba decidida a ganar, sin embargo llegó un momento en el cuál solamente quedé yo, como única persona tirando de la cuerda, mi necedad me llevó a seguir intentándolo. Definitivamente quería ganar. El resultado: Me hice un daño horrible en las manos (no quise contarte, ya sentía que no te importaba más) y en adición, obviamente no gané, que cómico. Moraleja: me hice más daño aferrándome que soltando, al final obtuve el mismo resultado que si hubiera dejado ir.la diferencia es que tuve la opción de no hacerme daño en las manos

Conectando: Lo mismo se aplica para ti. No mentiré, no hay día en que no te piense, que no te extrañe, que no te quiera. Y cada día tomo la decisión de acordarme de tu risa (y de tus estúpidos hoyuelos), de tus ojos mirándome (tus malditos ojos), de tu mano con la mía, de lo tiernos que se portaban tus labios con los míos, de tu voz llamándome. Aún me aferro a la posibilidad de que tú decidas volver. Sin embargo, no es sano, no es sano seguir enamorada de ti (o más bien de la ilusión que representas), no es sano seguir pensándote, no es sano seguir esperándote, no es sano decidir todos los días desgastarme emocionalmente por ti, un sueño, intangible. (Pausemos esta parte por un momento)

Hablemos de lo que me enoja (aquí todo está incluso más desordenado), tranquila, que no tienes porqué preocuparte, no te insultaré “cariño”. No estoy enojada porqué tomaras la decisión de irte, no puedo obligarte a quererme cuando claramente no tienes ni la mínima intención de hacerlo. En realidad el motivo es más complejo.

Empecemos por la punta del iceberg

1.¿Un mensaje de texto? ¿es en serio? hubiera preferido mil veces que me lo gritaras a la cara, quería ver que era lo suficiente importante para ti para que al menos por ésta única vez salieras conmigo y me lo dijeras. Bueno está bien, no llegué a ese grado de prioridad para ti. Y para terminar de adornar la situación, escribiste un “lo siento” eso me dolió aun más ¿Qué otra cosa podría hacer?

2. Por si fuera poco: decidiste "hablar del asunto" mientras yo tomaba clases, te debo aplaudir eso “cielo”, si tu objetivo era hacerme sentir como mierda, te obsequio todos los méritos. Decidiste enviar el mensaje justo a medio día de escuela. Pero no cualquier día. Mi segundo día de clases. Este punto me hacer hervir la sangre en particular porque, claramente tú sabías que yo no conocía a nadie en la facultad, tuve que tragarme todo lo que estaba ocurriendo e ir al baño a llorarlo de la forma más silenciosa posible. Afortunadamente, sin mentiras (yo sí puedo hablar con honestidad) te lloré dos días, ese y al siguiente. Volví a llorar luego de un mes, sin embargo el llanto ya no fue tan amargo como la primera vez que decidiste dejarme ¿a caso en este momento inicia lo que conocemos como proceso de sanación?

Aquí comienza lo complejo (aún más complejo)

Hasta cierto punto creo que no tomabas en cuenta mis sentimientos, o al menos no tenías en cuenta que yo, también me sentía mal. Calma, que no lo ando inventado. Tampoco trato de justificarme, no fui la mejor persona (pero nena, ahora me doy cuenta de que no fui mala), no estoy acusándote. Sólo cuento la versión que me tocó vivir.

1. Sábado 10 de diciembre de 2016. ¿Recuerdas? El concierto de una de las artistas más especiales para mí, el evento cultural en sí ya era importante, entonces era más que lógico e que yo quisiera que fueras conmigo, digo, evento especial+artista especial+persona especial= Noche perfecta ¿No? Pues ni de cerca. Llegaste, me saludaste y te fuiste, si no hubiera sido por una amiga (yep la del arete en la nariz) yo me iba a quedar totalmente sola, bravo “cielo” por lógica debía estar enojada, sin embargo estaba triste, triste porque elegiste a alguien más sobre mí (esto ultimo es importante) Pero eso no fue todo, al día siguiente cuando quise hacer notar qué estaba triste/enojada tú me volteaste el asunto haciéndome sentir mal, haciéndome creer que yo había hecho algo equivocado. Me disculpé obvio, pero la tristeza no se fue. Llegó el lunes, 12 de diciembre (ansío el momento donde ese día pase completamente desapercibido, sin pensar en el como especial) Seguía triste y sinceramente ya estaba bastante enojada, no quise pasar el día contigo. Cuando te fuiste me hiciste llegar un sobre con cartas, escritos, dibujos demonios (en su momento fue el regalo más especial, más lindo, más dulce, aun lo tengo, pero ya no quiero verlo, me enoja tenerlo pero no tengo el corazón para ponerlas en la basura) esa misma noche me hiciste saber tu enojo. Pero vamos, se supone que eras mi pareja, que te importaba (quiero creerlo pero ahora tengo mis dudas, para ser concretos las dudas ganan a la esperanza) ¿No pudiste notar que estaba herida? Increíble.

2. Esto fue antes de diciembre, no recuerdo si en septiembre o en noviembre, saliste con tus amigas, nunca he tenido problemas con que lo hagas, sinceramente no me enoja, tenías derecho de divertirte, no eres mi esposa y mucho menos mi propiedad, además confiaba en ti (¿confiaba? ¿aba?). Pero ese día en particular ocurrió algo con una de tus amigas, algo que no me daba mi lugar, no es necesario que te lo diga detalladamente ¿verdad?, bueno hasta ese punto no tenía mucho que reclamar, cometí un error similar. Pero lo que vino después fue lo que más me enojó, alguien “torció” la verdad haciéndome quedar mal, como una maldita mentirosa, sabemos quien fue; está bien, no puedo prohibirte amistades y sinceramente, me caía bien. Es una buena chica (supongo) el problema surgió cuando hablaste con ella y otro chico para “sacarme la verdad” luego basándote en esas pruebas, me hacías preguntas, las cuales respondía de forma verdadera hasta donde no se involucrara al chico (él hizo algunas tonterías, no quería lastimarlo, lo sé, no solo tengo la cara de pendeja, también lo soy) Dijiste que creerías lo que yo te dijera, pero nope, no lo hiciste, decidiste creerles a ellos. Interesante, quedé triste, triste porque elegiste a alguien más sobre mí.

3.Me dejaste bastantes inseguridades, no había día en el cual no me levantara y pensara que te fuiste porque yo hice algo mal, pensaba que tal vez no fui lo suficiente persistente o que tal vez no lo intenté al cien por ciento. Incluso llegué a pensar que era estúpida y que quizás encontraste a alguien con más alma que yo. (probablemente sea así sin embargo ya no me lastima tanto), fueron pequeñas cosillas que me dejaron en el suelo, sintiéndome no suficiente para ti. Ahora me doy cuenta de que no es así. Te di todo “cariño” te dí mi cien y un poquito más, te dí más de lo que tenía para dar (y estoy segura de qué pude seguir explotándome y dando más), y si eso no fue suficiente, supongo que la única respuesta para ello es que no eres mi persona y yo tampoco soy la tuya. Me duele porque en el fondo esperaba que fueras tú. En serio esperaba que mi persona fueras tú. Pero supongo que así son las cosas.

Siempre había prioridades antes que yo, tus amigos, alguna cosa etc. etc. y no me importó, mis amigos dicen que fue porque no me veías como algo importante, nunca lo tomé como una posibilidad, siempre te defendí “cariño” siempre, pero ahora claramente lo estoy considerando ¿tenía razón? tal vez no, tal vez ellos eran los que tenían razón. No me enoja que hayas escogido a otra persona, no me enoja que le hayas decidido querer. Me alegro por ti. Estoy enojada porque me hiciste creer lo contrario.

Aun te quiero, aun provocas cosas en mi sentir. Pasará eventualmente ¿no? (en realidad no me gustaría, pero forzar las cosas no es mi estilo)

Remitente -Dulce R.

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