petiterebellefleur

[petiterebellefleur]

Cómo tener éxito en tus relaciones amorosas.

o los cinco lenguajes del amor*

Bienvenidx a otro episodio —sí, episodio; esto bien puede ser un podcast mental donde tu voz complementa este texto— donde profundizamos en las pequeñas cosas de la vida en medio de un montón de memes para ponerle ritmo y sazón Maggi #notsponsored a, seguramente, ideas demasiado extensas, wiii (* >ω<)

Realmente puede considerarse una “pequeña cosa” el decidir compartir nuestra insignificante existencia —si la comparamos con los eones que lleva existiendo el universo y no con nuestra existencia como humanidad— con otra insignificante existencia. Emparejarse, acompañarse, arrejuntarse... You name it, baby! Ya has de tener una idea de lo que estoy hablando (͠≖ ͜ʖ͠≖)

Pero antes de comenzar, pensemos （￣＾￣）

Ah, sí. Qué lindo es pensar. Este es mi pensamiento. Lo vas a ver seguido por aquí. Mucho gusto ( ･ω･)ﾉ

¿Sabés qué? Vámonos a la tierra del recuerdo mejor. ¡Recordar es volver a vivir!  ﾟ*｡(･∀･)ﾟ*｡

¿Cuántas veces, en lo que venís existiendo, has dicho/pensado alguna de las frases siguientes? 

En relación a (x)*:

*siendo (x) aquella persona que estuvo/está en tu vida y que encaja con las afirmaciones siguientes.

“no entiende”, “no valora”, “no aprecia”, “no considera” x cosa que hago por ella.

“quisiera que: me quisiera/viera/se expresara/lo que aplique como yo le quiero/lo hago/ya me entendiste” o así y asá, etc.

¿Demasiadas para recordar? ¿Y yo para qué las voy a andar contando? Jenny, mirá no quiero hablar de eso, muy sad ya se me vino a la mente esa persona y AAAA 

ESTOY AQUÍ PARA AYUDARTE, WE. Volvamos.  Tomá mi mano, esto lo hacemos juntxs ヾ(＾∇＾)

¿Es algo que pensás seguido? ¿Te sentís mal por siempre golpearte con la misma fckng pared, no aprender la lección? ¿Ya llegaste a creer que vas a terminar tus días solx, escuchando Avicii 24/7 y siendo un MásterChef con todos los sabores de la Maruchan?*   *no estoy diciendo que la situación anterior es universalmente sad, pero es MI situación sad, así que podés modificarla a tu gusto con lo que considerés sad #creatividad y todo bien, todo perfecto.

¿Y si te digo que, como la estirpe de los Buendía, encontré un modo de que esas frases no tengan una segunda oportunidad sobre la tierra?*  *yo sé que eso es algo triste porque quizás las frases tienen cuentas que pagar, una familia que mantener y hasta una mascota que necesita cuidado especial, pero nosotrxs también merecemos nuestra felicidad. 

Aquí aprenderemos a llevar la fiesta en paz  (─‿─)

¿Te gustaría leerlo? 

Weno, ya llegaste hasta aquí así que...

Olakease ( ͡° ͜ʖ ͡°)

Un pequeño reminder: No menospreciés las redes sociales como fuente de información (y que por cierto no es igual a conocimiento). Seguramente en esta cuarentena buena parte de lo que sos ha de ser gracias a un meme, un tiktok o alguna cosa extraña que mi abuela interior no canaliza del todo por su apatía tecnológica de la que quizás me muero y ni supe de su existencia.

Lo siguiente que voy a compartir lo aprendí en YouTube. Luego de ir a investigarlo (porque me parecía demasiado sencillo) para posteriormente ponerlo en práctica en mi bida (ya que por ser tan izi no podía dejarlo pasar), puedo afirmar queee... me simplificó la existencia (∩_∩)

Puesí, a fin de cuentas, ¿no queremos que las cosas sean más sencillas y llevaderas? Además si a algunx de ustedes se les dificulta socializar y convivir con otros seres humanos, I got you, my dude* . *o dudette, o koala o leche chocolatada —sé lo que quieras ser ♪（〜^∇^)〜

Ahora bien, aquí viene un #protip que mejora todo todavía más: 

Si te esforzás por ver la siguiente info desde otra(s) perspectiva(s), la podés aplicar con cualquier relación humana que te surja en la vida; es decir, que lo que te voy a compartir no se excluye únicamente a la relación en pareja*.

*porquenonecesitásanadiemásparaestarcompletx. **tengoquerepetirlolasvecesnecesariasporqueaveceslavidaseponeinjustayunxesfrágilperodejamerecordartequesosbuenxenelfondouwu

That´s right! 

Entonces, si te abruma, quéseyo, que todxs te presionan porque tengás una relación romántica y a vos no te interesa; o si por el contrario, preferirías compartirla con más de una persona, O SI SOLO LE QUERÉS CAER BIEN A TU CRUSH PARA TENER A ALGUIEN CON QUIEN VER ANIME, o quéseyo otra vez, si te querés ganar a tu vecinx que tiene el palo de aguacates para dejar de robarle desvergonzadamente*... *casos de la vida real #pasaenlaspelículaspasaenTNT.

Esto. Es. Para. Vos*.  *(y para el resto también, claro, solo quería darle un reconocimiento a quien lo necesite uwu)

Aquiles vengo para platicar sobre los lenguajes del amor (◕‿◕✿) ♡

AL FIN VAMOS A HABLAR SOBRE ESTO AAAA*.

*gracias desde el fondo de mi órgano palpitoso por leerte la homilía introductoria —sip, apenas voy comenzando.  **te dejo este animalito como muestra de mi gratitud, te traerá suerte y memes de calidad el resto de tu vida (ฅ'ω'ฅ)

En 1992 —cuando yo vivía en un tomate—, Gary Chapman escribió el libro The Five Love Languages. En él, establece que hay cinco maneras diferentes de expresar y sentir el amor, o sea cinco “lenguajes” ۹(ÒہÓ)۶

¿QUÉ SIGNIFICA*?

*acordemos primero que el amor es universal y se expresa de distintas maneras, todas válidas. QUE NO SE TE VAYA A OLVIDAR ESTA PREMISA, PLS.

Vivimos dentro de la paradoja donde se nos enseña a “tratar al otrx como a unx mismx” y no obstante, a la hora de ponerlo en práctica no funciona. Si intentamos, fallamos más veces de las que triunfamos*. *no creás que es un triunfo ponerte en último lugar TODO EL TIEMPO o no hacerle saber a la otra persona tus propias necesidades TODO EL TIEMPO TAMBIÉN ⋋_⋌

LA FÓRMULA ESTÁ MAL (ﾟヘﾟ)

¿QUÉ PASA CON EL AMOR?

Muchas veces ocurren un montón de desencuentros y malentendidos porque estamos pensando en que la otra persona nos entienda como nosotros entendemos al mundo, y todavía no caemos en el veinte de que ellxs solo pueden ver el mundo desde su propia perspectiva. O sea, nos van a tratar precisamente como ellxs quieren ser tratados.

Si X se pelea con Y porque X nunca lo abraza o le toma de la mano, seguramente es porque a Y no le parece tan importante como a X, quizás lo ve como algo trivial, no sé. La cuestión es que no está en sus prioridades*. *no por eso es una mala persona. Quizás ni tenía idea de que hay otras formas de ver las cosas, de expresar los sentimientos. 

UNA ADVERTENCIA.

El tema de las relaciones es complejo, pero ineludiblemente amplio y extenso. A mí me fascina. Creo que ya te diste cuenta, me perd0nas?

De todas maneras, hago constar que no soy pscicóloga ni terapeuta ni una profesional certificada en lo que estoy hablando. Esto es meramente mi opinión sobre este concepto. La comparto porque el tema me ayudó y quizás también ocurra con vos. Tal vez desde mi perspectiva se te haga un poco más fácil comprenderlo (・ωｰ)～☆ﾟ

LO QUE QUIERO DECIR ES...  independientemente de si solo vas a ver los memes o a leerte todo este mamotreto, te invito a investigar sobre el tema (si te interesa, por supuesto). 

Expandí tu mente ﾟ*｡(･∀･)ﾟ*｡

Ahora procederé a explicar los respectivos lenguajes con manzanitas (y memes —quizás más memes que manzanitas).

Creo que la ventaja de cada lenguaje es que el nombre te da una idea bastante general de su contenido. No hay dónde perderse. 

En este caso, la piedra de Rosetta aquí son las palabras (・ω<)

Probablemente este es para vos si las siguientes actividades* las asociás con el amor: decir “te quiero” seguido —o alguna frase cursi o recitar Benedetti a los cuatro vientos olvidándote de tus vecinxs que exclaman nomás esucharte, con unos diafragmas impresionantes, hasta de qué te vas a morir—, escribir cartas, notitas, o mensajitos “cursis” en Whatsapp (o la red social de tu preferencia), dar charlas motivacionales donde cada palabra acierta como por arte de magia, cantar a todo pulmón canciones que simplemente sudan oxitocina porque se te sale el corazón escuchándolas...

*aclaro que daré pequeños ejemplos con fines ilustrativos a lo largo de la publicación, pls tomá en cuenta que NO son la verdad absoluta. **es solo para que te des una idea de cómo puede ser determinado lenguaje, no de cómo realmente es. ***también cabe mencionar que estas actividades pueden ser cosas que te gusta que hagan para vos o cosas que vos hacés para expresar el amor...

〜(꒪꒳꒪)〜 ¡es una simbiosis! 

¿Qué te puedo decir? 

¡Las palabras son una gran onda para vos! ¡Qué chivo! (◕‿◕✿)

¿¡¿CÓMO LE CAIGO A MI CRUSH*?!?

*si probablemente este es su lenguaje **esto aplica si y solo si querés ir más allá de los ejemplos que ya puse (y va para el resto también) —I GOT YOU, BABY! x2x3xCOMBO

Realmente las palabras son un medio directo, sencillo y contundente para comunicar nuestras ideas. ¿Te has puesto pensar en lo difícil que se nos hace (a veces) expresarnos sin ellas? ¿O lo fácil que nos convencen? Sin querer crecemos y dependemos una barbaridad de que usen las adecuadas para que no se nos rompa el corazón —y ni siquiera empiezo a hablar de cuando no llamamos a las cosas por su nombre, uff...

Quizás para tu crush la imagen no vale las mil palabras, sino que en serio querrá las mil palabras (ﾟｰﾟ; #aiuda Por lo tanto, mi #protip es leerse todo el diccionario actualizado de la RAE y, just in case, las ediciones de los últimos diez años ¡poesía! 

Puede que tu idea de poema se remonte allá por el Siglo de Oro o Shakespeare, ¡incluso Neruda!, pero no hay por qué angustiarse.  Hay solución paratodolodemásexisteMasterCard (・ω<)  

Creo que seguimos viviendo en la posmodernidad actualmente y eso es ventajoso para todxs pooooorque aunque arrejuntés un montón de palabras —procurando tener presente la plena consciencia de que expresan tus sentimientos con la nitidez de unos lentes recién limpiados—, ¡el texto puede funcionar! Consideralo un ejercicio, una práctica. Podés empezar de nuevo las veces necesarias hasta que cobre el sentido que estás buscando.

No obstante, si querés dar el esfuerzo extra y conocer la técnica (sonetos y haikus por ejemplo), ¡dale también! —y qué gusto, por cierto, ¡nunca es tarde para aprender algo nuevo! (・ωｰ)～☆

POR OTRA PARTE... Si en serio, en seeeeerio, no se te da el don de las palabras, podés buscar poemas de por ahí y compartirlos —dando créditos al autor SIEMPRE, pls #defendiendolapropiedadintelectualylosderechosdeautor— en plan...

vi esto y me acordé de vos* ( ͡° ͜ʖ ͡°)  *también aplica a esas imágenes con textos motivacionales o aquellas publicaciones extrañas que tienen como trescientas fotos para acompañar un testamento, me entendés. 

Si no se te da, de nuevo, no worries.  Ya hay varixs afuera echándote la mano (・ω<) 

We got you! ( ͡~ ͜ʖ ͡°)

Puede ser que erróneamente se te tilde de “chicle pegado” porque querés estar constantemente al lado de tu uwu y exprimirle el amor que siente por vos a través de abrazos, besos, caricias y otras cositas boneeetas ( ͡~ ͜ʖ ͡°) 

No te alcanza con las videollamadas, los memes y los stickers. Lx necesitás cerca, respirando tu mismo aire mientras olés su pelo tratando de diferenciar los ingredientes del champú, o para recorrer la tela de su camisa y así memorizar la textura, o incluso te pondrías a unir los puntos con los lunares de su cuerpo desn*... *una buena fanfic continuaría brindando excelentes ejemplos (*・∀-)☆ 

¡Indudablemente tu lenguaje es táctil! ¿Y qué, pues? (◕‿◕✿)

¿¡¿CÓMO LE CAIGO A MI CRUSH*?!?

*supongamos que tu crush ya es parte de tu vida y son lo suficientemente cercanos para el contacto físico —caso contrario, recomiendo ir poco a poco; la cultura latinoamericana es bastante cálida y te permite manosear de manera socialmente aceptable (¡y peor si sos hombre!), peeero, la cultura no define del todo al individuo (eso creo iopueskienmas) así que andá despacito, como dice el maestro Fonsi. **en la situación anterior pueden aplicar coreos de HSM, juegos con las manos —en ambos casos mi coordinación es “excelente”—, acariciar la espalda alta, un apretón en los hombros...   ***para más referencias sobre la misma situación recomiendo kdramas o novelas literarias del siglo XIX donde es un ES-CÁN-DA-LO concebir las topazones que quizás te has encontrado en tus viajes por el mundo exterior (o los memes) —y que btw, no se borran jamás de tu memoria AAAA.

Este es un lenguaje muy poderoso por lo sencillo, directo e inmediato. Acordate que antes de la palabra estaba el gesto, la acción, e l  c u e r p o —se me metieron en el ojo todas mis lecturas de mis años estudiando teatro, perdón—. Vos naciste sin saber ninguna palabra, pero bien que sabías comunicar lo que te pasaba (¬‿¬)

¡Menos es más! #laviejaconfiable

No digo que te pongás a contabilizar los abrazos que das o el tiempo idóneo para un beso inolvidable, más bien, mi #protip es racionalizar este afecto lo menos posible y seguir tus instintos —mi maestro de actuación sonríe con ironía en algún rincón de mi mente porque hasta que egresé de la carrera entendí todo—. ¿Qué tal un abrazo por la espalda? ¿O bailar canciones lentas —y que les valga verga no saber bailar—? 

¡Incluso pueden aventurarse fuera del sedentarismo conocido y ejercitar juntos! ( ͡° ͜ʖ ͡°)  Recomendaría un challenge de yoga jiji (/ε＼*)

LA COSA ES... ¡El momento de aplicar lo aprendido en las fanfics ha llegado!  ╰( ͡° ͜ʖ ͡° )つ──☆*:・ﾟ

Por otra parte, si el contacto físico te incomoda tremendamente —de nuevo citando al maestro—, andá des-pa-ci-to. 

Primero aprendiste a gatear y después a caminar. Mantenete atentx a cómo reacciona tu uwu por lo que estás haciendo, podrías alegrarlx muchísimo y eso podría alegrarte muchísimo a vos también porque lx hiciste feliz. Escuchá tus instintos igualmente, saben qué hacer aun en medio de la ansiedad (・ω<)

ANTES DE CONTINUAR...

Sé que actualmente esto es un tema delicado porque finalmente en todas partes se está alzando la voz (y reconociendo ese mismo alzamiento desde espacios de poder —si da resultados inmediatos o no es otro tema lastimosamente) sobre abusos físicos, sexuales, acoso callejero... Puede ser escarboso aventurarse a seguir tus instintos si no estás del todo segurx del resultado. 

ENTOOONCES... Tu nuevo mejor amigo para esta situación se llama “consenso”. Sé prudente y aplicalo en la medida de lo posible. No sos aburridx o estúpidx por preguntar o pedir permiso. Todxs queremos sentirnos segurxs y si nos vulneran desde nuestro espacio seguro —nuestro lenguaje del amor—, cuesta muchísimo recuperarse*.

*#reminder: vas a sanar, seguí avanzando (─‿─) 

Vos sos de aquellxs que ya trascendió de (y quizás hasta ya se te olvidaron) las frases “no tengo tiempo” y “lo haré más tarde” —habrá más que encajen para este lenguaje perfectamente pero llevo casi una semana trabajando en esta publicación y el cerebro se me está fundiendo siteefayadotepidoprdon seguro que vos me ayudás a completar la idea (・ω<) —, ya es parte de tu ser hacer el tiempo para lo que sea que tu corazón, tu mente y tu alma necesiten además que ya entendiste que el tiempo es una construcción social y otras interesantísimas teorías conspirativas.

Más que buscar innecesariamente los elementos perfectos para crear una “experiencia inolvidable” cual viaje a la siempre congestionada Disneylandia, tu enfoque va hacia otra parte. 

Disfrutás de las pequeñas cosas. Desacelerás, vivís el momento presente.  Es parte de tu persona no dar las cosas por sentado.  Fluís ﾟ*｡(･∀･)ﾟ*｡

Ciertamente es curioso este lenguaje ahora que vivimos una cuarentena mundial —y si me leés desde el futuro, ¡hola! (primero que nada), tenés este pequeño fragmento de un tiempo que ya no existe, escrito por una persona que también ya no existe, espero que te guste ♡— porque indudablemente tenés que ponerte creativx. 

¿Puedo demostrar mi amor atravesando una engorrosa (quizás entrecortada, quizás pixelada) videollamada, extendiéndola a pesar de todo porque está genial pasar el tiempo de esa manera (¿puedo disfrutarla?)? 

¿Puedo conectar con la otra persona —sentirla cerca de mí— a través de mensajitos, stickers, memes, emojis, escuchando su voz mentalmente al leer la conversación mientras te cuenta su día (¡¿puedo disfrutarlo?!)?

E incluso, ¿puedo hacer un hueco en esta insólita rutina (que tuvimos que crear porque nos agarró desprevenidxs) para que nos conectemos a la misma hora y juguemos un rato, aunque puede que no jugués tan bien y viceversa (¡¡¿puedo disfrutarlo?!!)?

¿Qué cosas podemos hacer para disfrutar este tiempo con lxs otrxs? ¿Qué medios tenemos disponibles? ¿Quiénes terminarán con un lugarcito en nuestro corazón gracias al encierro? ¿Qué podemos aprender entonces sobre amor, adaptación, comunicación y otros temas?

Es para filosofar...（￣＾￣）

LA COSA ES QUE TE BASTA CON SOLO COMPARTIR LA EXISTENCIA CON LOS DEMÁS, wiii (◕‿◕✿)

¿¡¿CÓMO LE CAIGO A MI CRUSH?!?

Si a tu crush —después de una buena y meticulosa stalkeada— lo lográs identificar con este lenguaje del amor, congratuleishons! o(^▽^)o (creo*).

*probablemente será el/la/aguacate más izi de los cinco para conquistar. **claro, consideremos que es izi porque no hay verdaderas implicaciones materiales o económicas a menos que decidás tomarlas. ***solo se requiere una cosa ( ͡° ͜ʖ ͡°)

#protippro  —realmente es pro— ser vos mismx.

Aquí sé que se nos puede salir el/la/aguacate adolescente insegurx y tomar control de nuestras vidas porque ¿y de dónde chuchas vamos a ser lo suficientemente interesantes para que nuestrx crush disfrute nuestra compañía?

Amix, dongüorri, we* got you! x3000

*la unión hace la fuerza AAAA entre todxs el mundo es un lugar más chulo ♡

Puede ser que durante mucho tiempo te daba pena ser vos mismx con todas tus manías alienígenas, tics insólitos, muletillas de jerigonza, melodías improvisadas que se te salen inesperadamente, ruidos extraños para expresar ideas porque las palabras ya no alcanzaron, y demás peculiaridades que simplemente te cohibían de compartirte con los demás —estoy obviando a propósito todas las posibles inseguridades propiamente físicas porque así como estás, bb, estás bien wenx y saborsx, grrr ( ͡~ ͜ʖ ͡°)

Puede ser también que una parte de la pena se fue para no volver más, o puede que se la esté pasando tan a gusto que invitó a toda su estirpe a la pachanga (ﾟｰﾟ;

LA COSA ES... ¡Tenés mucho que ofrecer! ¡Somos muy afortunadxs de tenerte porque no hubo, ni hay, ni habrá nadie como vos! Yo sé que estás rolling eyes at me porque algo dentro tuyo no me cree pero te agradezo que sigás leyendo, licuadora (puse eso porque seguís leyendo jeje ok ya).

#otropequeñoreminder las primeras veces son incómodas ⋋_⋌

Decile —poneme atención porque solo eso te estoy pidiendo—, amablemente y con firmeza a tus inseguridades y complejos que quizás llevan AÑOS con vos, que muchas gracias por el trip pero la despedida ya llegó, bais. 

Hasta ahí llegó la atención que les vas a poner.

Cada vez que las inseguridades quieran abrirse paso y regresar a recordar los viejos tiempos, aplicá otra vez la misma fórmula.  Vos tenés el poder, yo creo en vos (─‿─)

AHORA DALE CON TODOS LOS POWERS A LA OPERESHION SEDUCTEISHON ( ͡◉ ͜ʖ ͡◉)

Hoy sí, en serio, solo sé vos mismx, como ya dije. Se va a sentir extraño porque es una nueva experiencia, no tenés otra cosa con qué compararlo —o sea, puede ser LA PRIMERA VEZ DONDE TE VALE VERGA EL QUÉ DIRÁN— y si te nace hablar de tus colores favoritos o de la bolsa plástica que salió volando de la panadería que está cerca de tu casa y se quedó flotando en el aire porque no se quería ir a la Luna o de la inmortalidad del cangrejo, h a c e l o .

Sé que podés ir más allá del ¡Hola! ¿Cómo estás? Me gustás mucho y ya me imaginé el resto de nuestros días juntxs a la par mientras cuidamos del hámster de nuestro tercer hijo porque se le rompió la patita en nuestra partida semanal del Monopoly y reinventar la socialización humana. 

Deomeoh, si vivimos entre memes, ¿qué sueño no podemos alcanzar ya?

¿Sabés? Incluso quizás tu crush tiene complejos como vos, y por eso pueda ser que no se abra tan fácil, pero no por eso perdiste la batalla.  Es más, ganaste XP y subiste de nivel lml (ᴗ ͜ʖ ᴗ)

Vos dale, no vas a saber qué va a pasar hasta que lo hagás (*・∀-)☆

Esto te habla a un nivel espiritual si te encanta ayudar y además te identificás con hacer pequeños favores  (─‿─)

Quizás sos de aquellxs que recogen las cosas tiradas en el piso o los platos después de comer, o también puede ser que acompañás a tu uwu en su cita médica (y quizás hasta le viene bien porque está nerviosx). Aquellas cotidianidades que a muchxs se nos van por pensar en las pestañas y las lagañas son precisamente las que te quitan el sueño —in a #berinais way!  

Simplemente es algo que nace de vos (∩_∩)

Querés asegurarle a tu uwu una existencia más llevadera y una convivencia más armónica para ambxs a través del servicio, la entrega y la disposición. Vos pensás en la otra persona y en qué le gustaría que hicieran por ella. No ves en absoluto esa suma de esfuerzos extra como una carga, sino como un medio de comunicación.

A mí, ponele, me remonta a los (pocos) animes que he visto, las pelis de Ghibli y la cultura japonesa en general. Su nivel de civismo y sentido de comunidad son admirables. En el aire —aparte de nitrógeno, oxígeno y las otras cosas que ya se me olvidaron que lo componen— se respira respeto, responsabilidad, ¡honorrr! OMAE WA M

Entre todxs se aseguran de poner a la otra persona antes que a ellxs mismxs y se rebuscan por hacerlos sentir “como en casa”. Me conmueve profundamente porque, repito, no lo ven como un estorbo —y quizás también porque en mi realidad no es algo que suceda seguido, así desinteresadamente*  *sin chantajes emocionales, conflictos de interés mewoaponersaddd...  

¡Servir es un honor! ¡Servir es amor! (◕‿◕✿)

¿¡¿CÓMO LE CAIGO A MI CRUSH?!?

Tu crush puede que sea un ejemplo de excelencia ciudadana*. Tal vez se involucra en programas de alturismo, voluntariados —o bajándonos un poco de la nube de la idealización, quizás es aquella persona que le da ride a sus compañerxs después de clase o que visita a sus abuelxs los findes sin ninguna excusa familiar o que quizás lo más noble que hace es compartir estados de animales abandonados que buscan un nuevo hogar...

*#reminderjuju no es absoluto, puede ser que solo sea un fulanx que se encierra en su cuarto, jugando videojuegos o componiendo su nueva canción, pero que sale y entra la ropa antes de que la Pachamama anuncie lluvia y el resto, por ende, se dé cuenta #notallheroeswearcapes (ToT) **hacé los ajustes necesarios, solo te estoy dando el denominador común (・ω<)

La verdad es que a veces nos abruma no encontrarnos en medio de las mil facetas que componen nuestras vidas y, puesí, mantener el equilibrio se complica (ﾟｰﾟ; Tu crush, a pesar de todo, considera el servicio algo tan natural como respirar.

Por lo tanto, mi #protip es cualquier acción cuenta —yay!

Quéseyo, podés llevarle la mochila hasta donde la tenga que llevar, ayudarle con las compras —o lo que sea que ande cargando—, cuidarle la mascota (o la planta o el tamagochi)... Pensá en otros escenarios: si ha decidido emprender en x negocio o ha publicado contenido del que se siente orgullosx, ayudalx a difundir la información —e incluso, si ya viven juntxs ya la hiciste solo con volver a lo esencial de LAVAR LOS PLATOS AAAA ⋋_⋌

Existen varias posibilidades. Tu crush va a notar tu esfuerzo (independientemente de cuál elijás). Es parte de su naturaleza identificar grandezas en las nimiedades, además de que causarás tremenda impresión en su día con recoger los calcetines que llevaban cincuenta y dos años hundidos en el sillón una pequeña pero significativa acción (o^^o)

Es probable que tu mente ya esté a la vuelta de la esquina pensando en que este lenguaje se asocia con el consumismo, materialismo, capitalism...  Pero no con Yzma, Yzma estaba soñando con Ricky (●♡∀♡) #sinoentendisteestásmuyjovencitxynecesitásculturizarteconurgencia

Dejame decirte que va más allá de eso. No por nada nos obligaban a hacer las manualidades del día de la madre —donde los macarrones con brillantina en un cartón pintado eran justo el epítome del arte contemporáneo (y nuestras mamás lo sabían). Sé que si te esforzás un poco recordando, segurx que encontrás “regalos” que no van con la definición tradicional, ya sea que signifiquen una demostración amor para vos o no.

Puede ser que te guste invertir tu dinero en —¿viste qué diferencia hay cuando no usás “gastar”?— detallitos para tus seres queridos (o en materiales para hacerlos vos mismx). Ves determinado objeto y de inmediato se te prende el foco: ¡Esto le encantaría a x! 〜(꒪꒳꒪)〜

Pero los regalos van más allá, vengan de donde vengan.

Sabés que ese tiempo invertido en decidir el regalo preciso es necesario para comunicar tu amor de la forma más clara —¡es que este meme no refleja a esta persona, tiene que ser x meme! (y si no lo hallo yo lo hago). Te preocupa muchísimo dejar una impresión memorable, y precisamente por esa misma razón puede que te conmueva muchísimo recibir esa bolsa de tus chucherías preferidas o un buen tiktok del videojuego con el que estás enviciadx —amix, ¡te escuchan! ¡senpai te ha noticeado! ¡ya sos el/la/aguacate prota del anime!

Para vos, la acción de dar/recibir un regalo representa algo más que un medio para conseguir algo de la otra persona, o un chequeo periódico para que la relación esté “de toque” —o una convención social, pues. Es una declaración de amor en sí misma. Ahí le hacés saber que te esforzaste, que te importa, que le prestás atención, que estás agradecidx porque sigue en tu vida...

¡Qué regalo tan lindo expresar así el amor! (◕‿◕✿)

¿¡¿CÓMO LE CAIGO A MI CRUSH*?!?

*antes de entrar en pánico por el presupuesto, quiero recordarte que sos un ser creador. Dentro de vos habitan unas fuerzas potentes, tremendas, voraces, que están esperando a que las despertés.  **si no me creés, preguntale a tus mayores cómo pasabas tu tiempo durante la infancia. Seguro que habrá historias con amigos imaginarios, juegos que solo vos entendías, manchones en las paredes, plastilina en los intestinos — porque era un delicioso pastel—, algo... algo que era una cosa y vos la hiciste otra. ***mucho de lo que te rodea no existía hasta que alguien tuvo una idea y decidió hacerla realidad; poné atención, no estoy hablando de ser artista o artesanx, estoy hablando de hacer que algo distinto aparezca donde antes solo había algo ordinario. ****lo siguiente es para un regalo planificado con anticipación, aunque podrías adaptarlo para algo de última hora igualmente #procrastinación

Mi #protip es conocete a vos mismx.

Sé que la ruta fácil es irse de un solo a comprar lo que sea que le guste a tu crush y kuls, es válido. Sin embargo, quiero invitarte a hacerte la siguiente pregunta antes de decidir sobre cualquier posible inversión con tu dinero disponible:

En lugar de x (comprar/rentar/economía no te estudié con propiedad), ¿puedo hacer algo yo igualmente valioso?

La respuesta (la mayoría de las veces) será sí (・ω<)

Mientras escribo este fragmento en particular, recuerdo que una vez, hace años, uno de mis amigos más queridos nos pidió ayuda a una compañera de clase y a mí con pintarle una camiseta porque se acercaba el aniversario con su novia. Él nos dio el diseño y todo, nosotras solo teníamos que aceptar. Aceptamos. Yo fui el finde a casa de mi compañera y pintamos toda la tarde, ¡sorprendentemente terminamos! Luego, el lunes entregamos el regalo a mi amigo y a la novia le encantó cuando se lo dio —aunque no sé si le dijo que no la había hecho él jejejeje ( ͡~ ͜ʖ ͡°)

Tomate un momento para platicar con vos mismx y preguntate qué podés hacer —se vale hasta la flor arrancada de ese diminuto pedazo verde en la acera. ¿Qué cosas sé hacer y las disfruto? ¿Cocinar, pintar, cantar, bailar, producir? ¿Esculpir, preparar, tallar, dibujar, ilustrar, animar? ¿Grabar, diseñar, actuar, hornear, decorar, jugar? Ya no termino ⊙△⊙

¿Y si nada me sale bien, Jenny? ¿Ni los memes por la molesta marca de agua o los stickers por lo mal recortados? 

Aquí entra en acción la magia de la amistad ♪ (*・∀-)☆

Los regalos son como un símbolo universal del amor y de una u otra manera, todxs entendemos y nos disponemos a ayudar al que lo necesite desde nuestra disponibilidad —quizás incluso aquellxs que solo te dijeron “¡bien por vos!” hicieron su parte en tu obra maestra, solo no te habías dado cuenta. Hay de todo en la viña del Sr., realmente. Puede ser que la persona talentosa (que nació justo para ese trabajo y nada más) simplemente no quiere, peeero tu amix que la ha cagado en grande a tu lado te hace entrega de sus servicios una vez más porque quiere ayudarte a alcanzar tu felicidad (∩_∩)  ¡y eso es lo que realmente importa!

Una vez más, estoy más que segura de que en vos están todas las habilidades necesarias para materializar ese afecto.  Escuchalas (・ωｰ)～☆

¿DE QUÉ ME SIRVE TODO ESTO?

Hasta ahora hemos aprendido que hay distintas maneras de expresar el amor. Estas se manifiestan tanto en la forma en que lo transmitimos a los demás como en la en que queremos que nos lo transmitan #izi

Volviendo a los desencuentros y malentendidos que mencionaba al principio, estos pueden evitarse fácilmente si decidimos ir más allá e indagar tanto en nuestro propio lenguaje del amor como en el de lxs demás. Puede ser que si adquirimos las bases, intuitivamente podríamos ir transitando por todas nuestras relaciones sin tanto cansancio emocional, beneficiándose no solo vos sino la(s) otra(s) persona(s) también (◕‿◕✿)

Nos cuidamos entre nosotrxs (•ө•)♡

Por ejemplo: el lenguaje de tu uwu es actos de servicio y vos sos palabras de afirmación. Quizás seguís esperando en el fondo unas frases cariñosas para salir y devorarte el mundo, pero mientras tanto podés disponerte a recoger la toalla que siempre queda tirada en el baño. Tu uwu estará más que complacidx. Dejate sorprender. Capaz aparece una notita cursi, ahí en el espejo, con esa letra suya ininteligible*. *aaaunque también podría ser un mensajito de texto si de verdad no se lee para nada (ﾟｰﾟ;

LA COSA ES X10000... No podemos cambiar la forma de ser de la otra persona. Tampoco podemos ser cambiados. Cada uno ve el mundo a su manera. 

¿Qué podemos hacer? 

ENCONTRAR UN PUNTO MEDIO.

Se trata de “traducir” un lenguaje a otro. Hablar lo que habla tu uwu y que tu uwu hable lo que hablás vos —además, amix, no olvidemos lo elemental e infalible de PREGUNTARLE QUÉ QUIERE, no cuesta nadaaa (ToT)

Si tanto vos como tu uwu son conscientes de sus lenguajes del amor, les va a ser más sencillo expresar su cariño. Ambxs pueden asumir el compromiso de ponerse en los zapatos del otrx, “traduciéndose” entre sí, de manera que los desencuentros y malentendidos puedan disparse más fácilmente hasta que su relación alcance LA GRANDEZA Y LA PROSPERIDAD AAAA #ÉXITo 

El triunfo está en tus manos ﾟ*｡(･∀･)ﾟ*｡

POSDATA.

Es posible identificarse con más de un lenguaje, en ese caso tenés uno principal y uno secundario. Tranqui, no estás locx si estabas por entrar en crisis porque amás de formas tan diversas (¡bonito, por cierto!) (•ө•)♡

Mi recomendación final es hacer varios tests genéricos para tener una idea general de tu lenguaje del amor. Acordate que no te va a definir a la perfección porque sos un ser único y detergente, pero espero que así consigás las suficientes herramientas para mejorar tus relaciones interpersonales.

Queda todavía un montón de info sobre el tema (solo voy a dejar este video si querés un resumen más cortito jiji). Si tenés preguntas o querés platicarme al respecto, te invito a utilizar mi sección de preguntas aquí en el blog para que ahí me dejés tu comentario —o también podés pasarte por mi ig... ¡Por cierto! Si al leer esto se te vino alguien a la cabeza que podría utilizar esta info, compartila —probablemente le vendrá bien jeje.

Ha sido un gustazo platicarte; creeme, el viaje ha sido pesado para lxs dos, pero creo que al final ha valido la pena. 

Muchas, muuuchas gracias por leerme ♡

#Para vos #Gary Chapman #the five love languages #los cinco lenguajes del amor #review #memes #amor #éxito #relaciones #words of affirmation #physical touch #quality time #acts of service #receiving gifts #palabras de afirmación #contacto físico #tiempo de calidad #actos de servicio #regalos #cuántohashtagomg #sillegastealeertodoestosolodejamedecirtequeteamo

[petiterebellefleur]

Hablemos.

Quiero dirigirme a vos, que me leés, en particular. Aquí y ahora. Sin miedo.

¿Cómo estás? 

Ya sé que me vas a decir bien. 

¿Cómo estás? 

¿Cómo va tu vida? ¿Qué tal el día hasta el momento? 

¿Estás satisfechx, realizadx, contentx? ¿Hace falta algo? Lo que sea, se vale hasta el galón de sorbete. ¿Qué te hace falta? Contame, te escucho.

...

¿Te has equivocado recientemente? ¿Te arrepentís? ¿Preferirías que no hubiese pasado? 

¿Y si te digo que ahí cagándola majestuosamente aprendiste algo valiosísimo? ¿Qué aprendizaje creés vos que perderías de no haber cometido ese “error”?

...

¿En qué tiempo estás viviendo? 

¿Hay algo que te esté costando, alguien que te esté afectando/hiriendo? 

¿Te sentís cansadx? ¿Qué te duele? 

Un consejo: no solo existe el dolor físico. 

¿Qué te duele?

...

Antes de seguir con la crisis existencial, descansemos un poco.

¿Cómo llegaste hasta aquí? El hoy. 

Dejá de leerme un momento y observá tu entorno. ¿Qué ves? ¿Qué es lo más bonito que encontrás? Describímelo, contame. 

¿A qué te recuerda? 

¿Cómo te sentiste en ese momento? 

¿Podés ver el cielo? ¿Está despejado o tiene nubes? ¿Encontraste alguna forma curiosa en alguna nube? Contame, ¿cómo se ve? 

No pasa nada si no pudiste verlo. También existen las manchas por las goteras, las sombras por la luna, las arrugas en las sábanas... De seguro alguien inesperado te acompaña por ahí porque quiere que te riás. Reite. Te vas a sentir más ligerx. 

Te vas a sentir mejor.

...

Dejame decirte que no es casualidad que vos y yo estemos aquí. 

Quizás nunca nos vayamos a conocer pero tengo la confianza suficiente para decirte que tus sueños ya se cumplieron, incluida aquella versión de vos que anhelás ser con todas tus fuerzas y a saber por qué no aparece.

Ya sos esa versión. Ya sos tus sueños. 

Están ahí dentro tuyo. Todas las respuestas que buscás están en tu interior. Escuchate. Ahí está tu verdad. 

...

Tal vez te está yendo muy bien, al fin se te ordenó la vida.

Te sentís genuinamente apreciadx/valiosx y estás orgullosx por los progresos obtenidos hasta ahora. ¡Genial! 

¡Es un buen día! 

Andá y decítelo. Escuchá tu propia voz. 

Date la oportunidad de felicitarte, sos tu mejor compañerx: 

“Mí mismx, estoy teniendo un buen día. Gracias por seguir conmigo.”

...

Si, por el contrario no es tu caso, si, quizás, tu único logro de hoy fue levantarte de la cama, estoy muy orgullosa de vos de todas maneras. Yo veo los pasitos de hormiguita. Me encantan. A ellos les cuesta un montón ser reconocidos. 

A veces pesan los días, cuesta. Tranqui. 

Lo estás haciendo lo mejor que podés.

...

Puede ser incluso que ninguna de las anteriores sea tu situación.

Te sentís solx, perdidx, desmotivadx, triste... Realmente es el fin del mundo y de la existencia. ¿Qué hago ahora? ¿Hacia dónde voy? ¿Vale la pena seguir? 

¡Culpemos a alguien! 

¡A nosotrxs mismxs! 

¿Por qué me pasan estas cosas? ¿Por qué SOLO A MÍ? ¿Por qué nada me sale bien? ¿Por qué, justo cuando todo parecía mejorar, se estropea/lo estropeo?

...

Preguntaba en qué tiempo estás viviendo porque hay varias posibilidades.

La primera es el pasado. Estás pensando en lo que no pudo ser, en cómo hubieses puesto x en vez de y, etc., etc. Tuviste el control y a saber qué hiciste porque todo salió “mal” y estás “pagando” las consecuencias. Pérdidas adonde sea que mirés. Tal vez hay una bola en tu garganta de resentimientos y un peso de culpa en tu pecho. Tal vez no dormís, no comés...

La siguiente es el futuro. Pensás en lo que será, en lo que está por venir. Te preocupás muchísimo porque sea tal y como lo ves en tu cabeza, cálculos milimétricos incluidos, pero en el fondo sabés que al final no lo controlás todo y cualquier cosa puede pasar. Eso te preocupa. Va a salir mal. No se va a poder. Deseás tremendamente que se dé, que ocurra, ¡que los astros te favorezcan, por la gran puta! Y sí, tal vez también no te da ni hambre ni sueño...

La última es el presente. La clave para entenderlo es que es lo único que existe.

...

Quiero invitarte a que te olvidés de quién sos. Salite un momento de vos mismx. Ya no te conocés. En este momento solo sos la persona que me está leyendo.

Yo, que te platico, solo te conozco a vos, que me leés. 

Y me parece que sos un ser extraordinario, único e irrepetible. Es un regalo precioso coincidir con vos y es uno más precioso todavía el que me sigás leyendo.

Pensá en todas las pequeñas imposibilidades que nos llevaron hasta este momento. Desde los dinosaurios hasta los espermatozoides y el wifi. Es una locura. Aquí estamos.

Lo que te sucedió en el pasado te ayudó a definirte pero ya se fue, soltalo.

No sos tus heridas ni tus triunfos.

Lo que está por venir ni vos ni yo lo tenemos seguro. 

¿Para qué preocuparnos?

Nos tenemos aquí y ahora.

...

Levantate y seguí tus sueños. Buscá aquello que te llene y te dé plenitud. Seguilo.

Puede dar miedo pero vas a estar bien.

En todo momento estás segurx y a salvo.

En todo momento estás siendo amadx/queridx. Sos digno de amor.

...

Vale verga lo que digan los demás, vale verga si se te rompe el corazón.

Vas a sanar otra vez. Sos fuerte.

Ya saliste de peores.

...

Sos maravillosx. Cada día que pasa tenés otra oportunidad. 

Un nuevo comienzo. 

Usalo. A tu ritmo, a tu manera.

Solo te pido que sea desde el amor.

...

No estás solx.

Confío en que estás acompañadx de las personas correctas (aunque no lo parezca).

Estás donde debés estar.

...

Lo que es tuyo siempre viene.

Poné atención. Se comunican con vos todo el tiempo. Las respuestas que están en tu interior se reflejan en tu exterior.

Poné atención.

...

Gracias por leerme. Ha sido un gusto que me escuchés. 

Hoy aprendiste lo buenx que sos escuchando. 

A veces tengo miedo o me siento triste. Me incomoda muchísimo sentirme sola.

Pero estás aquí conmigo. Gracias, de verdad.

Merecés todo lo bueno y todo el amor del mundo.

Hasta pronto.

#Para vos #plática #comunicación #pausa #gracias

[petiterebellefleur]

Las ventajas de ser invisible.

siete años después

Lo recuerdo bastante bien, aunque innecesariamente menciono lo enceguecido del mismo por la ternura y el cariño. La memoria del corazón magnifica los buenos recuerdos dice el Gabo. 

Leí sobre Charlie seguramente por una reseña de mis antiguos sitios web que visitaba de adolescente. Ese detalle no importa. Hablaron tan bien de él que me fue imposible evitar lo inevitable: conocerlo.

Tenía catorce años. Catorce, mi número preferido. Faltaba poco para el regreso a clases. Ya me aventuraba a leer en PDF, siendo la sensación extraña pero familiar, como cuando probás algo nuevo del menú de tu restaurante favorito. En el fondo del estómago una mariposa hace cosquillas.

Justamente en un PDF traducido por la maravillosa comunidad del internet conocí a Charlie. Nos reuníamos en la computadora de la sala (Q.E.P.D.) y ya no existía nadie más que nosotros hasta que mi hermano protestaba lo suficiente para seguir jugando Minecraft.

Charlie me compartió su mundo generosamente. Me respondió muchas preguntas que se me estaban volviendo molestas a esas alturas de la existencia, y me alivió tremendamente que su forma de ver las cosas se parecía a la mía. Me hizo ver que no era rara ni estaba loca ni mucho menos merecedora de estar sola, y, quizás como lo más importante, que el mundo también tenía preparado sus regalos para mí precisamente por ser como era. Toda presión o angustia por no estar siguiendo el status quo se había disipado. Me hizo muy feliz. Le di las gracias y seguí viviendo.   

Poco después pude verlo en una pantalla. Compartió algunas canciones que otra vez redefinieron quién era y lo que me estaba sucediendo. El menú incorporó nuevas opciones. Extraño pero familiar. 

Siempre supe que algún día volveríamos a vernos. Nunca sentí un adiós. Quería regresar y platicar sobre esos años incómodos de amores fallidos, amistades perdidas y descubrimientos repentinos. Sé ahora, por cierto, que la incomodidad solo cambia de forma con el paso del tiempo. Afortunadamente, ahí persiste el crecimiento. No existe el retroceso.

Un día hace no mucho, toqué su puerta de nuevo. La puerta era verde. Abrió y sonrió al verme. Me dejó pasar. Dentro olía a plástico nuevo y tinta recién impresa. Las paredes eran blancas con un poco de amarillo en las orillas. No me costó adaptarme, fue como volver al día siguiente de haberme marchado.

Charlie escuchó pacientemente lo que anduve haciendo estos últimos meses donde el mundo se me estaba cayendo. Al terminar mi turno, me dio las mismas respuestas de la primera vez, pero ahora yo intervine en la plática de forma más efusiva; le entendí aquello que quedó difuso cuando era niña. Finalmente lo había vivido. 

Había pasado por alto que a él le gustaba hacer notar las pequeñas cosas que nos hacen imperfectamente humanos, o la curiosa paradoja de sentir de manera contradictoria, o el dejarte a un lado a veces por dejar brillar a los otros pensando que así vas a brillar vos... No sé, supongo encontré algo más mientras desempolvamos juntos las telarañas en las esquinas, abriendo las ventanas atascadas y dejando que la luz entrara ahí donde hacía falta. 

Fue otro alivio. Distinto. Conocido. El menú...

Sé que Charlie entiende que ya no tengo quince años y que lo que me aconsejó quizás se aplica a otra etapa de vida, pero al despedirnos me dijo las cosas irían bien para mí y aunque no fuera así de inmediato pues que pronto se arreglarían. Yo le dije que pensaría lo mismo por él también. Nos lo merecemos.

Es reconfortante encontrar pedacitos de alguien regados en canciones, libros, películas o lo que sea. Creo que cada artista deja una parte de sí en cada una de sus obras así como queda el perfume en la almohada, las pisadas en la tierra o la grasa en la cacerola. Es inevitable. 

Me gusta creer que estoy hecha de pedacitos tirados por ahí que voy añadiendo poco a poco, continuando así la interminable tarea de darle forma a lo que soy. 

Espero que donde sea que estés y por lo que sea que estés pasando, logrés encontrar tu reflejo en el otro. Todos hacemos lo mejor que podemos.

Un abrazo,

Jenny. 

P.D. ¡Feliz año bisiesto! El 2020 sigue dispuesto a cumplirte los sueños. Escuchalo, dale una oportunidad ;) 

#laif #las ventajas de ser un marginado #las ventajas de ser invisible #the perks of being a wallflower

[petiterebellefleur]

Enero en canciones.

Quizás debería empezar diciendo que realmente no son mis canciones favoritas las que voy a describir a continuación. No sé si te ha pasado, pero realmente existen canciones que nos acompañan en un momento determinado y nos dejan con esta impresión fuerte; a veces lo es tanto que volverlas a escuchar nos transporta de inmediato al pasado, a ese mismo momento. 

O quizás debería empezar diciendo que enero ha sido un mes de transformaciones fuertes —como me dijo una persona muy querida hace poco—, de tomar decisiones, de enfrentarme a mí misma —¡¡salvarme a mí misma!!—, de aceptar lo que queda, de volverse a construir...

O quizás y solo quizás empecé ya jejeje.

Being Alive

Tengo una debilidad irresistible hacia las historias cotidianas, aquellas que aburren porque precisamente pasa lo que pasa en la vida; no hay héroe ni princesa en apuros —por cierto, ¿todavía es relevante que los haya?— y el conflicto se resuelve como en la vida: no hay “final feliz”, ni revelación mística, ni música orquestal felicitándote mientras empiezan a salir los créditos y todo se pone negro… con suerte puede haber una porción de semita y un cafecito. En la vida real, claro.

Conocí Being Alive viendo Marriage Story... 

¿Ya la viste? ¿Nel? Mirala si querés. Bueno, no, mirala. Definitivamente, absolutamente, ciertamente. Mirala.

Podría pasarme una publicación entera hablando de lo mucho que me encanta Marriage Story, pero siendo breve (porque se vienen más canciones), me quedo con Being Alive.

Originalmente, la canción viene de este musical llamado Company. Al director y al actor que interpreta la canción en la peli les encanta el musical así que dijeron, yolo, pongámosla. ¿Sé de qué se trata el musical? No. ¿Alguna vez lo sabré? Es posible. ¿Hotel? Trivago. Btw! Sale otra canción del musical en la misma película, pero la interpreta Scarlett Johansson hashtagfunfact

He aprendido que dentro de cualquier pieza artística, no importa su naturaleza, intervienen tres “elementos”: ética, estética y política. Quedándome solo con el último, el político no tiene que ver necesariamente con política. Es más bien el mensaje, aquello que el autor deja en la pieza que habla de quién es en realidad, de lo que le gusta, de lo que lo mueve, de lo que cree… Ahí está comunicando. Me imagino lo que estarás pensando: ¿Qué tiene que ver eso con Being Alive? 

Creo que el director tiene una sensibilidad impresionante (o quizás solo me impresionan profundamente las personas sensibles) y haber escogido Being Alive para su película de cierta manera potencia su discurso sobre lo complejas que son las relaciones humanas. Es que es tan sencillo hablar del otro en la vida, de cómo una hubiera hecho mejor tal cosa, por ejemplo; pero al final ¿de dónde viene esa seguridad?, ¿cuánto dura la garantía?, sobre todo ¿cómo es posible establecer un estándar para las relaciones, cualesquiera que sean, cuando cada individuo en el planeta es distinto (y por ende cada relación que este tenga)?

Supongo que a lo que quiero llegar es que me mueve la humanidad. Me mueve ver a los otros exponerse y vulnerabilizarse, reconocer que no siempre todo tiene que salir perfecto o ir de acuerdo al status quo. En Being Alive encontré ese alivio. Así empezó enero. 

me acabo de dar cuenta de que no conté ninguna historia así que weno aquiles va vi la película en diciembre pero una madrugada sí una madrugada de enero me encontré con la canción y me dije bueno es laurasad demole yessss y no me arrepiento porque después no estaba triste sino reconfortada porque la letra de la canción me hizo sentir que no estaba sola y que todo pasa y me acordé de la tercera ley de newton todo lo que sube tiene que bajar juju ok fin ah no esa no es la tercera ley la tercera ley es que a cada acción le corresponde una reacción igual me perd0nan igual creo que ambas se complementan para gustos colores hoy sí pasemos a lo siguiente jeje

Lights Up

Harry Styles sacó su más reciente álbum en diciembre pasado y sigo en ese engorroso proceso de diferenciar una canción de la otra, de encontrar el AJÁ que me permita decir "yas” o “wah” —reseñas musicales 2020—... 

Un día de enero desperté y esta canción sonaba en mi cabeza, particularmente ahí en el coro donde dice SHINE y luego la micro pausa para llegar al I’MNOTEEEVERGOINGBAAACK. 

¿La habré soñado? Ni idea. 

Me levanté, hice todo lo que hacía en un día normal —otra vez btw ¿qué es normal?— y la canción seguía en mi cabeza. Al final me dejé ir y la escuché unas cuarenta veces seguidas. ¿Qué pasó? Me sentí mejor. Fue la primera vez que me sentí sinceramente bien en el año, o al menos de las primeras veces. Fue como guau, qué chivo es estar viva. hashtagyasss

I’MNOTEEEVERGOINGGGBAAAAAACK.

Cell Block Tango

En mi Spotify hay una buena cantidad de playlists que guardo para “más tarde”. Este “más tarde” en especial se tardó casi cinco años, jé —PERO LO QUE ES TUYO SIEMPRE LLEGA MARK MY WORDS— . 

En esta ocasión la playlist era de teatro musical. Cuando comencé a escucharla, me di cuenta de que había varias canciones de las adaptaciones cinematográficas de los musicales, entre ellas Chicago.

Recuerdo perfectamente que estaba sola en casa —hecho bastante inusual en mi historia de vida—, lavando los platos con la música a todo volumen, y cuando salió Cell Block Tango fue como viajar al 2012 cuando me encantaban los musicales y me obsesionaba deliciosamente —sí, deliciosamente; es una delicia encontrarse con aquello que te alegra el corazón— con las canciones. Me hallé cantando con la misma precisión de esos años y la cocina se volvió mi escenario, mi mundo dispuesto a dejarme brillar. hashtagdisismimomento

Por cierto de nuevo —tomá awita cada vez que escriba por cierto o btw en la publicación—, ¿cómo te sentís cuando tenés la casa sola? A mí me encanta. Aparte de lo obvio que es estar sola —sin gente y sin reglas—, ¡yo tomo las decisiones de la casa! Es decir, yo elijo qué hacer y cómo hacerlo, cuándo hacerlo maigad (!!!1!).

En esa ocasión escogí limpiar y ordenar. ¿Te gusta limpiar? ¿No? ¿Nel pastel? ¿Solo a mí? ¿Trivago otra vez?

Fine Line

Baia baia, regresamos con el Harry. ¿Y qué, pues?

No sé si sea por naturaleza o el mundo me ha tratado mal hashtagmásdrama pero soy bastante escéptica. También bastante ingenua. Esta hermosa paradoja que me constituye me trae unas historias de vida estupendas. Así me quiero.

Fine Line me acompañó en lo más invivible del mes. Contrario a otras canciones que me gustan porque suenan tristes —es que a veces sí lo son, a veces no, lavidaesunatómbolaynuncasabésloquetevaatocar—, esta tiene la peculiaridad de que evoluciona hasta llevarte a la esperanza. La verdad me hacía falta. 

Inicia dándote ese espacio para sentir la tristeza, abrazarla, reconocerla; entiende que necesitás ese momento. Después te toma de la mano y poco a poco, como el amanecer, te enseña que la luz al final del túnel es algo tangible, que existe, pero que es decisión tuya cruzar a fin de cuentas. 

A mí me molesta mucho cuando tratan de forzarme a salir de un estado emocional a otro. Específicamente me molesta cuando reconocen que estás triste y prefieren lanzar la perorata bonitamente vacía para que inmediatamente te sintás mejor (si acaso les importa accionar, claro). 

Si lo pasamos a la infancia, es como cuando te dicen dejádellorarotevoyadarunabuenarazónparahacerlo y tenés que callarte aunque tengás el nudo en la garganta y te pese la pancita. O también puede ser como esa famosísima expresión de esconder el polvo bajo la alfombra. Va a seguir ahí acumulándose, no va a desaparecer por más que lo sigás ocultando. Todo aquel que hace limpieza lo sabe, incluso el que solo ve televisión porque es una imagen recurrente. No hay excusas. Pocos van a querer tomar responsabilidad y todavía menos de esos pocos querrán hacerlo para sí mismos.

Por eso Fine Line se merece el reconocimiento. Es este viaje precioso —parecido a cómo te sentías después de escuchar aquel pop rock del 2006 mientras ibas en el asiento trasero ocultando las lágrimas con la oportuna lluvia y el tráfico, es decir, un desahogo excelente—, cuya única garantía absoluta es que lo que sea que estés atravesando va a pasar, trayendo algo distinto consigo. Depende de cada quien agarrar los remos y seguir avanzando.

Crimen (en vivo)

ABER.

En noviembre pasado estrenó en el cine este concierto de Gustavo Cerati que dio en el 2009 en Monterrey. Yo quise ir a verlo but excusas, excusas, nunca lo hice. Entonces me di cuenta de que estaba en Spotify. 

Decidí escucharlo mientras trabajaba en uno de los interminables proyectos que tengo y tuve esta especie de epifanía cuando sonó Crimen. No sé qué influyó más: que ya me gustaba la canción, que la escuchaba en una bocina impresionante, QUE ESTABA EN VIVO o que Gustavo hablaba entre canciones; la cosa es que encontré un mensaje, un contacto alienígena, y quiero creer que era solo mío, que alguien me estaba hablando. O sea, así sin drama, al fin la entendí.

Pasemos a las teorías conspirativas.

Crimen es lo que pasa cuando se termina una relación. Leyendo los comentarios en YouTube, una persona dijo que es una autopsia de una relación. Brillante. Quedate hasta aquí si no querés ahondar en el análisis. No hard feelings.

UNA VEZ MÁS ESTO ES LA VIDA REAL y las cosas no siempre acaban como una quiere. La mayoría de las veces quedan frases sin decir, cosas sin terminar, preguntas sin contestar y la duda, ohhhh, la duda. ¡Cómo te come por dentro! Es un “crimen” atravesar esos dolores porque aunque te desvivás buscando razones y culpables, el malestar no se va. Al menos no cuando querés que se vaya. Incluso si al final tuviste suerte de encontrarlos. NO SE VA.

Me agarró desprevenida. Enero representó una reconstrucción desde los cimientos y durante esa semana las negociaciones de paz conmigo misma habían progresado considerablemente. Que de la nada venga Cerati, infinito, y me diga (entre otras cosas ojcurs): ¿Qué otra cosa puedo hacer? Si no olvido, moriré. Fue sublime. Un gesto de buena voluntad si sigo con los términos diplomáticos. Quizás el olvido no es en sí olvidar sino únicamente soltar. No sé. Encontré paz. Eso me basta.

Mystery of Love y On the Radio

Estas últimas dos pertenecen al mismo universo: Sex Education. Sí, tiene S3x0 en el título; sí, es de eso. Uyyy. Guauuuuu. Ufffff. 

Está bien si la ves por el morbo. Te vas a dar cuenta de que el sexo es lo de menos. BOOMLODIJEYQUÉPASAAHQUÉPASABOOM.

Casi me explota la cabeza cuando comenzó la primera y me dije OMGESLACANCIÓNDECMBYNOMGNOPUEDESEROMG porque logré identificarla (ahorita me explico: el shock estaba en que no la había escuchado tanto; como cuando me encuentro cantando reggaetón y es como wtf de dónde me aprendí estas letras impúdicas) y me alegró mucho que la colocaran donde la colocaron —valga la redundancia duh—. Parecía que existía solo para ese momento y nada más. Fue otro recordatorio del mundo exterior para reconocer que esas emociones aparentemente incomprendidas seguramente ya fueron experimentadas por alguien más. Esto es, no estás solo con lo que estás sintiendo. Es  v á l i d o. Por algo nos identificamos, ¿no?

La segunda canción te despide en la última escena de la temporada  —final más kk pero canción más beia hashtagreviews2020— y creo que en definitiva me gustó más que lo que estaba viendo. Te voy a dejar algunos versitos para que agarrés color:

This is how it works You're young until you're not You love until you don't You try until you can't You laugh until you cry You cry until you laugh

A esas alturas del mes ya había pasado lo peor. Esa sensación de estar en medio de la tormenta había menguado también. Creo que la canción llegó en el momento indicado. Muchas veces te van a invadir la duda, el desconcierto, la desesperación y otras emociones divertidas... pero a fin de cuentas, son parte de la vida. ¿Quiénes seríamos de no experimentar el dolor o el duelo? Ahí también está el crecimiento. 

Y CON USTEDEEEEEEEEES: ¡el resumen!

Agradeciendo la atención prestada y, por supuesto, quedando a sus órdenes,

Saludos cordiales,

Jenny.

P.D. AHORA PODÉS COMENTAR LA PUBLICACIÓN. 

omgggg khéeeeeeee :’))) yassssssssssssssssssssssssss *hiperventila*

Yes, yes, izi pizi lemon squeezy. 

Si querés dejarme un mensajito o etc. subí al inicio del blog y buscá la sección ???. Tengás o no cuenta en Tumblr, PODÉS COMUNICARTE CONMIGO AAAA KEMOSION TT_TT (obviamente también podés enviarme un mensaje privado si tenés un usuario en Tumblr o incluso saludarme por Instagram — ¡el cielo es el límite, bb!)

Hoy sí, baisssssssssss.

#favoritos #enero #2020 #música #canciones

[petiterebellefleur]

Flujo de conciencia #2

o crónica de un proceso de deconstrucción, as you please 

Postal decembrina, 2019.

Empezó en diciembre, quizás un poco antes. He notado que realmente no hay fechas exactas para las grandes transformaciones o transiciones de la vida. Incluso cuando ya se ha terminado solo sabés que se acabó, no importa el dónde o el cuándo.

Hace un par de años me hice amiga de un extraño. El mismo día que nos conocimos me dijo que se sentía agobiado por lo incierto que es el futuro. Yo no sé de dónde saqué la sabiduría para darle mi respuesta —sé que salió de mí y que después de socializarla por ahí supe que estaba en lo cierto—, pero descubrí que estaba en la misma situación de mi amigo el extraño cuando la recordé y me di cuenta de que se me había olvidado lo que significa. Aquí se las dejo (parafraseada porque tampoco recuerdo las palabras, lo siento):

Las crisis existenciales anteceden los procesos de transformación.

1. Diego

Diego es uno de mis amigos más queridos, aunque desde que comenzamos la universidad nos distanciamos mucho. Mientras navego inevitablemente por el mar de mis recuerdos creo que era yo quien lo tranquilizaba en los primeros años de nuestra amistad, al menos yo me sentía con la suficiente luz para acompañarlo en la oscuridad. Había una certeza en reconocer cómo se sentía y me encantaba ayudarlo porque lograba expresarme claramente.

Después de una eternidad sin vernos, nos reunimos. Desde que me subí a su carro intuí que él sabía cómo me sentía. Tácitamente acordamos en que era mi momento para desahogar. El atardecer ese día era precioso. En Diego encontré a esa antigua Jenny que alguna vez le ayudó filosofando las incertidumbres de la vida.

No obstante, de nuevo interfieren los oleajes de la memoria porque entre las conversaciones que me dijo desde “diciembre”, estaba esta frase que me impresionó tanto como para volverse la semilla de esta publicación. Aquí la dejo:

Tenés una oportunidad aquí para intentar, para empezar.

2. Diana

Diana es el amor de mi vida. Al conocerla realmente —y con esto no quiero decir que sé todo sobre ella sino que logramos conectarnos— nos hicimos inseparables. Luego comenzaron a distanciarse los caminos, pero ella permanece con el título del amor de mi vida.

Me le acerqué una tarde a compartirle un pedacito de la nube que me atormenta. No me metí en detalles, aunque creo que en lo poco que dije le expliqué todo. Ella me contestó citándome unos versos que ya conocía —alguien que ahora no recuerdo me los enseñó en su momento—, pero de los que jamás había comprendido el mensaje que llevaban.

Es curioso, entre esas letras estaba lo que necesitaba (y que quizás todavía necesito):

Caminante, no hay camino, se hace camino al andar.

Al andar se hace camino, y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar.

Caminante no hay camino sino estelas en la mar.

3. Mamá

Una mañana, casi llegando a mi lugar de destino. Mamá me preguntó si creía en el poder de la mente. Dije que sí. Me preguntó después si creía en que si yo por llevar algo en la mente el tiempo suficiente, llegando incluso a pensar en qué hacer para realizarlo, podría hacerlo realidad. Otra vez dije que sí. Entonces me dijo que debía creer en tres cosas:

Soy buena.

Soy inteligente.

Soy capaz de lograr grandes cosas.

Y me bajé del carro.

4. Samuel

Samuel es uno de mis amigos más antiguos. En esta especie de neblina personal que ya me está agobiando porque no sé cuándo acabará me acordé de él y fui a buscarlo. Descaradamente le conté mi preocupación. Digo descaradamente porque a veces una se modera al contar las cosas para que no la tomen por exagerada o dramática (aunque a veces simplemente así se sienta). Me valió. Ignoré la voz en mi cabeza diciendo que solo lo iba a enredar en mi desorden, que ni me molestara en molestarlo, que había pasado tanto desde la última vez que hablaron... Ah, también fue descaradamente el contarle mi preocupación, por cierto, porque estaba tan desesperada en hablarle que le conté todo en una sala de espera de un salón de belleza, con medio mundo mirándome raro.

Samuel me contestó con muchas verdades empapadas de cariño. Genuino, tierno, sólido y visceral. Lo que más me gustó fue que me mandó una nota de voz en medio del caos de gente: gritos, risas, alarmas, celulares, notificaciones... y él impasible, sereno, concentrado en consolar a su amiga. Yo no sé de dónde saca ese ideal que tiene de mí porque no es que le haya dado un riñón para que me estime tanto, de todas maneras se lo agradezco. Me hace falta.  

Epílogo: Palacios

Mientras escribía este post tuve un “colapso”. Estallé. Me encerré en mi cuarto, me tiré en la cama, cerré los ojos y traté de concentrarme en el aire que entraba y salía de mí a la vez que escuchaba la misma canción en repetición. Fue espantoso pero sanador.

Cuando me estabilicé, le llamé a Palacios. A él le gusta cómo cuento las historias y a mí me gusta contárselas. Él escucha. Después de la llamada me pasó un texto y una canción. El texto es precioso, me recordó que podemos ser seres sensibles; corrijo: me recordó que realmente lo somos y solo nos endurecemos con el tiempo. La canción, por otra parte...

Él no me lo dijo, pero creo que me la dedicó. Despertó la omnipresente intuición y me sugirió que debía buscar la letra. Lo hice. Empecé a reírme tontamente leyendo los primeros versos. Es que es como anillo al dedo —y eso que yo tengo estas manos diminutas, no me quedan los anillos—. Luego revisé algunos comentarios y precisamente el primero decía que esa canción no se le dedica a cualquiera. Tiene razón. Nada es casualidad.

                                                            ***

¿Por qué deconstrucción?

Estoy perdida. Llevo tanto tiempo sin saber quién soy que la convivencia conmigo misma se pone cada día más difícil, aunque mantengo esta esperanza —que no termino de enlazar— en la que algún día me voy a volver a encontrar. Es por eso que todavía preservo la risa como un patrimonio cultural de la humanidad.

Realmente escribo esto como un recordatorio —para mí, para vos, para todos— de que ahí están los amigos. Salen de los lugares de la memoria más inesperados, pero indudablemente oportunos. Escuchan, proponen (no solo responden), recuerdan, alientan, brindan certeza. Quizás su cualidad más valiosa es el amor desinteresado que pueden tener. No esperan nada de mí a cambio, no puedo darles beneficios en este momento...

Y sin embargo, como las rocas erosionándose en el mar, permanecen solemnes, esperándome a mí, la ola, esperando aquel retorno donde nos juntamos, reímos y bailamos.

P.D. Gracias, amigos. Este es mi regalo: la inmortalidad. Gracias también a los otros que no logré mencionar aquí pero permanecen en mi pensamiento constantemente. Un abrazo.

#laif #conciencia #amigos #reflexión #gratitud #2020

[petiterebellefleur]

Sorpresas gratas en Spotify.

Hola, buenas. Sé qué tienen algunas preguntas, dongüorri Aquiles salvo:

¿De quién es esta publicación que a saber cómo empezaste a leer? awa

¿Dónde estuve metida todo este tiempo? unu

¿Esta publicación está siendo patrocinada? omo

¿Hotel? Trivago.

Compartir públicamente mis gustos musicales es algo que me incomoda  —y quizás lo haga toda la vida— porque realmente la música que escucho representa una parte muy íntima y mía. Con mis cancioncitas me siento yo misma, me aligero, me transporto, trasciendo... ¿Cómo se los explico? Me es más fácil escribir aquí a la nada que ir donde equis, enseñarle una canción que me gusta mucho y que al final me diga: ah, qué chiva. No, no puedo aceptarlo y tampoco puedo negociar con esas respuestas. Prefiero guardarlas para mí.

Las siguientes canciones que leerán a continuación constituyen “sorpresas gratas” porque se me había olvidado que fueron una parte de mi 2019 lo suficientemente significativa para que llegaran a la playlist resumen que arma Spotify. No fueron las más escuchadas del año, pero me inspiraron para volver aquí a platicar con ustedes.

Comencemos ☺.

1. Porcelain de Moby.

El año pasado llevé un semestre de danza. En dieciséis semanas me introdujeron al ballet clásico y la danza contemporánea. ¿Soy bailarina ahora? No, jamás. Esta canción la usaba mi maestra para dar las clases. En su momento fue tortuosa porque me costaba muchísimo llevar las cuentas al ritmo de la música sin interrumpir el movimiento por estar pensando (yo me entiendo, bichos). Luego la encontré por azar y me obsesioné escuchándola. Aunque me recuerda muchísimo a la clase, poco a poco va más allá hasta hacerme sentir como si estuviera debajo del agua, platicando con los peces.

2. Pecado de Caetano Veloso.

La primera vez que escuché esta canción estaba viendo Moonlight, una película tremenda. Tuve que retroceder algunas veces hasta tener un fragmento de la letra, buscarla en Google y dar con su identidad  —no, no se me ocurrió usar Shazam, es un recuerdo viejo y apenas lo estoy desempolvando—. Desde entonces está conmigo. Es una melodía tranquila, suave, gentil; la letra, por otra parte, es sensual, provocativa, insurgente (?)  —calma, no vuelvo a dar reseñas de canciones—, creando una antítesis muy... placentera. Sí, placentera es buena palabra. Yo disfruto escuchándola. Se queda conmigo bastante rato.

3. The Ultracheese de los Arctic Monkeys.

El álbum más reciente de los monitos puede describirse simplemente como música de ascensor —y está bien porque eso me gusta—, aunque puedo explayarme más y hablar del cine setentero, Italia y la ciencia ficción del siglo pasado, pero no va al caso. The Ultracheese es la última canción del álbum — de mis preferidas ojcurs— y suena a despedida, a modo bien personal es quizás la canción que más se asemeja a AM, el trabajo anterior. Según Genius, en la letra realmente se está comparando Alex (el vocalista la banda que también escribe las letras) del pasado con Alex del presente, analizando cómo están sus circunstancias en el ahora y su aislamiento del mundo debido a la fama. Desde que la escuché por primera vez me ha parecido una canción de amor, y quizás lo sea. ¿Les suena el amor propio?

4. Je te laisserai de mots de Patrick Watson.

A este punto de la lectura creo que se han armado una idea de mis gustos musicales. Otra canción triste y lenta, ¡yay! ¿Qué les puedo decir? En YouTube se encuentran unos videos muy lindos de ver —A MI GUSTO— que te incluyen la letra traducida o son un montaje de escenas de una película. Es una canción corta que apenas dice algo. A mí me hace sentir como que es de noche y estoy en el muelle de Santa Mónica —jamás he ido pero de tanto ver a mi mamá viendo sus películas cursis en ese lugar ya tengo una imagen armada en HD 4k— subida en un carrusel dando vueltas hasta que las luces se difuminan y la única certeza que hay es que estás viviendo.

5. Vals Poético de Natalia Lafourcade y Los Macorinos.

Mis gustos musicales este año pueden describirse como “abuela moderna en una relación tóxica con el internet”. Bastante específico, yo sé. Esta canción es un instrumental precioso, al parecer —lo acabo de leer en Wikipedia porque no sé todo y está bien— es un cover de Felipe Villanueva. A mí lo que me encanta del álbum son Los Macorinos, los guitarristas que acompañan a Natalia.

Colorín colorado, este post... 

PONGAMOS MÁS CANCIONES SÍIIIIIIIIIIIIIIIII.

Pasemos ahora a las canciones que lastimosamente no fueron elegidas por Spotify y tendrán que esperar otro año —donde las escucharé sin parar— hasta que se haga justicia. Es una lista breve, solo para dejarles picados con la curiosidad.

*Le Festin de Camille.

Mi yo del 2007 —o la del año en que salió Ratatouille, mi única neurona no quiere comprobar la info— se quedó con esta terrible sensación de vacío al final de la película cuando se alejaba la cámara del restaurante, enseñándote París, porque esta canción desconocida (pero bastante oh là là) sonaba de fondo. Desde entonces la sensación se mantiene; culpo a la canción, a que está en francés y no la entiendo —como algunas de BTS y otros coreanos que me hacen llorar alv—. Este año en mis aventuras de stalkeada, la encontré y dije omaiga es Ratatouille. No sé si entienden. AL FIN SUPE CÓMO SE LLAMABA. Y poco después encontré la letra traducida. Lloré amargamente. Quizás es la canción de mi vida en estos momentos, no sé. De todas maneras, es hermosa. Ya. Es todo.

*Hallelujah Money de Gorillaz y Benjamin Clementine.

En mis esfuerzos por culturizarme y no rezagarme únicamente con Feel Good Inc. y Clint Eastwood (por decir algo, no solo me puedo esas u.u), estuve escuchando algunos álbumes de Gorillaz, específicamente Humanz y The Now Now. Hallelujah Money fue la que más “se me quedó”. Creo que tengo un “soft spot” por aquello que suene mínimamente “coral” —repito: no más reseñas musicales—. Además la voz de Clementine se compenetra tan bien con el resto de la pieza, es que es un deleite escucharla. Vale la pena cerrar los ojos y solo existir en sus cuatro minutos de duración (sí, ya no tenía nada más que escribir, quiero mi sponsor :c).

*Boots de Greyson Chance.

ESTO SE VA A PONER PERSONAL, YASSSSS (y volvemos al blanco y negro porque #temaserio)

Era 2011 y estaba independizándome de los gustos musicales de la casa. Sin hermano mayor, no tenía una guía por este sendero artístico que me dijera qué sí o qué no, o ALGO al menos. ¿Qué me quedaba? El internet, la vieja confiable. Conocí muchos mocosos pubertos por esos años, uno de ellos es Greyson. Me gustaba muchísimo. Tuve todo su primer álbum en mi iPod nano rosado chillón, hasta las canciones bonus. Si bien me tomé un descanso y dejé de seguirlo porque necesitaba RESPIRAR ALGO QUE NO FUERA POP ADOLESCENTE, regresé porque ambos crecimos y este bicho va con todo. Me enorgullece un montón. 

Boots es su sencillo más reciente. Current obsession y blablablá.

P.D. Este año sacó su segundo álbum Portraits, mi playlist tiene algunas canciones suyas. 

*Maniac de Conan Gray.

Conocí a Conan antes de que explotara su fama como cantante ¿indie? (!!1!!!). Me encantaba su estética y su contenido en el yutub. Hablar de él entonces me pone un poco recelosa porque quisiera tenerlo solo para mí. No obstante, también entiendo que está creciendo el cipote, va, se le han abierto muchas puertas y el chiquillo que conocí ya no está (aunque sigue ahí en esencia).

Como con Greyson, Maniac es su sencillo más reciente. Terriblemente pop. 

*Still Feel de half•alive.

Para esta canción YouTube se lleva todo el crédito. El video musical es una delicia visual. He notado también que la banda se preocupa mucho en ese aspecto para cada presentación, bailan o se visten a juego para que todo constituya una pieza artística por sí misma, como una exhibición andante. 

Hoy sí, pipol. Ya me cansé equisde. No, no les voy a pasar la playlist. Ahí nos vidrios en otros tres meses, cuídense y tomen su agüita. Bais.

vaya pues aquí está la playlist ush

#favoritos #música #spotify #2019 #opinión

[petiterebellefleur]

Descubrimiento semanal #2.

Como aclaración innecesaria que de rigor pongo antes de cualquier publicación —¿quizás porque en el fondo me gusta dar explicaciones?— debo mencionar que este descubrimiento lo hice hoy en la clase donde siempre me da sueño, que por lo tanto realmente no engloba la última semana —y ni le saqué conclusiones de todas maneras—; peeeeero, es seguro que este aprendizaje se quedará conmigo en mi parte consciente por un largo rato. Es decir, los he engañado. #fuerontimados #hashtag #fakenews Es decir, no importa. #nosomosnadalavidaesprestada Igual me van a leer. #narci #influencer 

Aquí estamos y comenzamos.

En mi proceso de formación universitario, una de las lecciones que inconscientemente se me ha vuelto elemental es no casarte con tus ideas. Mil veces lo que tenés elaborado en esa cabecita tan chula no se va a materializar como querés. Tendrás que ceder. Ponele, si querés que tu proyecto, producto o propuesta se desenvuelva integralmente en el entorno, hay que hacer los ajustes necesarios, o incluso un giro de 180º, para valerse por sí mismo. Errar en esa búsqueda no significa que seás un mal creador o que tu idea no pueda realizarse. Prueba y error, bichos, prueba y error...

It is berinais cuando no hay tanto “sacrificio” y lo que sea que solo existe en tu mente se manifiesta en esta realidad tal cual lo habías visualizado. Tampoco hay nada de malo en eso —¿por qué nos empeñamos también en sacarle el defecto al éxito, btw?—. Sin embargo, le voy a dar vuelta a la tortilla. Así como no te casás con tus ideas para estancarte imaginando un éxito que no ha llegado, no te casés tampoco con tus fracasos.

Vos ahorita: Duh, Jenny. Ya sabemos toda esa mierda de ser positivo, evitar lo negativo y blablabla.

Jenny: Sí, guau, qué bien, +1000 por clavarse en cosas que no me interesan. Tu envidia alimenta mi ego, amiwo.

No somos imanes; no podemos reducirnos únicamente a blanco o negro, bueno o malo, ni mucho menos, positivo o negativo. Esta maravillosa complejidad que conforma nuestra existencia es lo que nos ha permitido llegar hasta este preciso momento, donde seguís leyendo y ni terminás de entender adónde putas quiero llegar con este texto.

Pues bien, revelemos el secreto.

Llevo un par de días experimentando nuevamente esta sensación familiar de no sentirme yo misma. Me cuesta concentrarme, no me apetece hablar con nadie y tampoco quiero hacer nada productivo. Además, constantemente siento culpa y aversión hacia mí misma porque no consigo regresar a mi camino. Estoy agotada mentalmente.

Entonces, en mi clase donde casi siempre me da sueño, se dio el click en mi cabeza: está bien estar donde estoy.

Solo porque ahorita me siento perdida no significa que soy una persona perdida o que lo estaré eternamente. Solo porque las cosas no se dieron como quería no significa que aquí me voy a quedar. Más específica todavía: solo porque no puedo evitar mis reacciones ante las actitudes de los demás no significa que debo privarme de sentir emociones socialmente negativas por tratar de “quitarles importancia”. Puedo enfrentar lo que tengo enfrente y lo que se aparece en mi camino; aunque duela en el alma, incomode mi ser o revuelva en las gavetas viejas de mi memoria. #acciónpoética

Al final creo que no somos más que una sumatoria de fragmentos. Todo lo que tenemos en realidad es el presente. Somos nuestro propio filtro. Los traumas y júbilos del pasado ya no existen y no obstante, viven en nosotros. Los revivimos. Los sudamos. Son parte de nuestro ser.

Quedarme con las toxinas del ayer solo me va a impedir seguir avanzando. Pero ojo, esto no significa que no deba prestarles atención ni desvalorizarlas. Si me siguen afectando por algo será. Quiero sanar. Tengo que tenerme paciencia. Tengo que escucharme. Tengo que estar dispuesta al cambio. La vida es una tómbola y nunca sabés lo que te va a tocar —¿les había escrito esa frase antes? #epitafio—.

Tengo, pues, que esperar. Ahí les cuento.

Hasta pronto,

Jenny.

#laif #descubrimiento semanal #experiencias #reflexión #fracaso #malestar #paciencia #escucha

[petiterebellefleur]

Descubrimiento semanal #1.

No me pregunten si esto va a ser constante —ni siquiera me hablan equisde— que ni yo sé qué será de mí en una semana.

Con el paso del tiempo la instrospección se ha vuelto una cosa muy mía, casi que la aplico todos los días. Es chivo. O sea, ¿cómo vas a llegar a tu mejor versión si no te evaluás constantemente? Es gracias a eso que estoy aquí escribiendo. Me quiero sincerar una vez más.

La sección se llama “Descubrimiento semanal” porque pretende exponer el aprendizaje conseguido sobre mi persona en un periodo de una semana con el fin de hacerte empatizar a vos, lector(a), conmigo para tomarte un respiro de la autocrítica, el autodesprecio, la fatiga o yokése. En el fondo está la invitación a que también te evalués y corrás ese riesgo tremendo de conocerte a vos mismo/a. Puede ser por un día, una semana, un mes; también por la casa, el centro de estudios, el trabajo... Para gustos, colores.

No estás solo/a. No sos todo.

Va, inaf paja. Démole.

La gran lección de esta semana es la siguiente: me cuesta escuchar.

Keintenso, ¿verdad? Los que me conocen dirán lo contrario pues realmente es de esas cualidades que más resaltan cuando conversan conmigo. Y es cierto, la verdad disfruto mucho haciéndolo. Pero la moneda tiene otro lado.

Está determinada situación que va a realizarse en el futuro cercano. En mi cabecita hay un escenario perfecto donde todo sale como lo tengo previsto: el cielo es azul, los pájaros cantan, el café tiene lo justo de azúcar y el amor existe. Entonces ocurre que la situación deja de ser imaginaria, se hace inevitablemente realidad et voilà: sale mal. Los vidrios se quiebran, los bebés lloran mocos, las nubes son grises y el pan francés que te venden está quemado.

¿Qué me pasa entonces? Me bloqueo, me cierro, me apago. El mundo ya no existe. Todo sonido que entra por mis oídos es ruido. Empiezo a creer en la nada...

A veces las cosas no salen como las tengo previstas y tengo que adaptarme con renuencia, incluso ceder por completo. “Pierdo”.

Y me enoja. Me enoja tanto.

No obstante, esa fue mi lección de la semana. ¿Y ahora?

Socialmente no nos han enseñado a manejar el rechazo. No se le puede decir manejo al hecho de guardarse las cosas y asumir que no sucedieron o que importan menos. Se nos enseña que los errores son imperdonables y que la perfección es inherente a nuestro ser. Luego, claro, viene la vida y fracasás bicos yes (PORQUE SOS HUMANO, MEEEEEEN #reminder).

¿Cómo seguir después de eso? ¿Cómo te vas a hacer valer si lo que proponés no es lo suficientemente bueno, no funciona, no sirve? ¿Cómo solucionás algo que es más grande que vos? ¿Cómo no tomárselo personal? ¿Cómo no sentir pena? ¿Cómo no ponerse a pelear? ¿Cómo saber cuánto ceder?

Duh, pues lo volvés a intentar. Fin. Hasta la vista, baby! Nos leemos en el próximo...

Puta, qué vergón. Si así de sencilla fuera esta kk no hubiera escrito esto.

No sé si entienden este huevo: me cuesta aceptar que no tengo la razón y que no soy la solución universal. Me cuesta que me rechacen y me digan que tengo que mejorar en algo donde me considero buena. Me cuesta continuar la conversación en el verdadero espíritu de escuchar porque lo único que está en mi mente es “¿por qué no seguimos mi idea?”.

Terrible, oremos.

¿Moraleja? No hay. El solo hecho de descubrirme es una afirmación fuerte. Repito: esta es la intención del ejercicio. Quién sabe lo que me depara el porvenir. Dongüorri, mai frens, teikirisi beri chill que encontraré las herramientas para corregirme y seguir avanzando ligera por este camino llamado vida que transitan conmigo (btw, si estás muerto y me estás leyendo, ahí me explicás cómo es tu mundo, ¿si? salu2).

Weno, bichos/as, nos vidrios. Tomen agüita y lávense los dientes después de comer. Bais.

#laif #descubrimiento semanal #escuchar #experiencias #aprendizaje #autodescubrimiento

[petiterebellefleur]

Carta a Adela.

Queridísima,

Hasta recientemente, no me había imaginado escribiéndote. Sé que nunca nos hemos conocido ni nos vamos a conocer, pero me es imposible imaginar mi vida sin que nuestros caminos se hayan cruzado. Estoy en vos (espero) y estás en mí (como estás en muchas).

Sé que es confuso. No sabés quién soy. No importa. Para cuando ya me haya definido será un concepto obsoleto. Igual lo voy a intentar porque a fin de cuentas solo somos fragmentos de lo que alguna vez fuimos. Algún esbozo de mi yo futuro estará entre estas letras.

Empecemos por ahí. Los fragmentos. Vengo dejando pedazos de mí en todos los que conozco al igual que ellos dejan los suyos. Revuelvo aquí y allá las gavetas ajenas hasta que me adueño de ellas. Antes me dolía partirme en pedacitos. Sentía que estaba suspendida por una cuerda invisible y que nadie me iba a recoger allá abajo en caso de que se rompiera. Ahora creo que mis pedacitos son como semillas que germinan y crecen como especies completamente desconocidas. Es fascinante... no sabés qué va a resultar, solo sabés que ya no será tuyo. Y tener la madurez de aceptarlo y dejarlo ser así es de las gratificaciones más grandes que he sentido en esta vida mía.

Por otra parte, una vez dijeron por ahí que la convivencia es difícil y vaya que sí. Yo añadiría que no solo con los demás, sino conmigo misma. ¡Conmigo misma! Cuántas veces yo me era insoportable... No sabés por lo que he pasado. Tantas decisiones, tantas confesiones, tantas verdades, tantas aquí, tantas allá, tantas... Sé que pude haberme vuelto loca, que pude haber tocado fondo. Quizás lo hice de todas maneras. Quizás he desilusionado tremendamente a quien fui hace tanto tiempo. Pero, ¿sabés? Me sigo sintiendo yo. Es mi victoria. ¿Te pasó también? ¿Estuviste perdida? A veces, por supuesto, era insoportable verme al espejo. No te voy a endulzar las cosas porque la vida es bien amarga. Afortunadamente tenemos azúcar.

Como vos, tengo mis deseos. Deseos fervientes que me quitan el sueño, el apetito, el sentido común... no sé, ¿los convencionalismos? ¿sabés a lo que me refiero? Quiero devorarme el mundo entero. Por primera vez siento que estoy viviendo lo que quiero vivir, que he apagado el piloto automático, que puedo hacer cualquier cosa; y por ello estoy absolutamente aterrada.

Pero es lindo, ¿sabés? Es un miedo mío. Viene por estar forjando mi camino, como vos. Viene de mis acciones, de mis intenciones, de dejar a un lado las suposiciones. Viene de las microguerras mentales, emocionales, físicas y blablablá que ahora me defienden sin vacilar.

Quiero creer —creo— que he vivido desde siempre con esa obstinación que te caracteriza, que solo estaba dormida. Vos hiciste hasta lo impensable por cumplir tus sueños. Yo solo quiero sentir que lo he intentado, que no he vivido en vano, que no es tarde para haber empezado.

Falta una nada para que se acabe nuestro año. Sí, nuestro. También, hasta hace poco, me di cuenta. Me duele pensar que voy a ser mayor que vos porque ya no sé cómo seguir. Aunque, sinceramente, nunca he sabido.

Por eso —me despido— te escribía. Hasta recientemente (otra vez) fui consciente de lo apegados que transitaban nuestros caminos. Si de algo estoy segura es que no soportarías las despedidas, los acaboses. Solo venía a darte las gracias. Espero que alguien más pueda conocerte (o a alguien de tu estirpe), que se vea reflejado/a, que te (lo/la) admire. Es que no tenés idea...

Bueno, basta de cursilerías. Esta carta está llena de ellas.

Hasta siempre,

La otra Adela.

#laif #reflexión #amor propio #gratitud #Adela

[petiterebellefleur]

Disertación sobre el machismo entre mujeres.

ADVERTENCIA: El título no tiene nada que ver con el texto. Seguramente usé las palabras equivocadas. La verdad es que quería tu atención. 

¿Seguís leyendo?

Cuando tenía dieciséis años (o diecisiete, no importa), nos tocó escribir una redacción planeando nuestra vida desde el día siguiente a la fiesta de graduación. En ese entonces no me había sincerado conmigo misma con lo que realmente quería hacer con mi vida así que escribí puras abstracciones. Nos teníamos que proyectar en diversos ámbitos de nuestra vida: profesional, personal, familiar... ya se pueden el cuento, ¿no?

No sé por qué era trabajo grupal. A pesar de que el escrito era individual, había que leerlo a los compañeros para ponerte parte de la nota (porque no se puede hacer omisión del maestro y su autoridad, sin sarcasmo). Después de leer el mío, el único comentario que recuerdo hasta la fecha fue de una compañera (que ya no he vuelto a ver btw), refiriéndose a una oración que hablaba verdades entre las mil ambigüedades que redacté para ganarme la nota y para seguirme mintiendo a mí misma: un niño no es el fin del mundo ni el mundo entero. Ella me dijo que no sabía de lo que estaba hablando porque nunca había estado enamorada. 

En su momento (y sigue siendo maña mía) no le respondí el comentario. No quise tomarle importancia. Pero empezó a darme vueltas en la cabeza, a crecer hasta llevarme a la duda. ¿Y si los niños sí son el mundo entero? ¿y si nunca me enamoro? ¿y si nunca se enamoran de mí? Sigo sin responderle. Quizás la inquietud no tenía que resolvérsela a ella sino a mí misma. 

Más adelante vino la vida, la universidad, la pseudoindependencia con su pseudoautonomía y sigo sin haberme enamorado. Sigo soltera. No soy menos mujer ni menos nada por eso. No me he vuelto loca ni me he deprimido (al menos ya no con esa solemne seriedad de la adolescencia). No tengo nada malo. No tengo por qué seguirme justificando ni dando explicaciones. 

Claro, soy humana. A veces conozco a un chero, me parece interesante, le hablo y exploro, me aburro y se acaba todo. No me disculpo por la falta de tacto, c’est la vie. También, a veces, me siento sola (pero no incompleta) y fantaseo escenarios con “él”, siempre siendo plenamente consciente de que no existe y de que las cosas llegan cuando no se buscan. Si ando en la búsqueda no me dejaría sorprender, ¿o sí? La vida es una tómbola y nunca se sabe lo que te puede pasar... C’est la vie!

Sé que el título dice “machismo entre mujeres” y de momento esto no tiene mucha relación. Pero solo se me ocurrió que desde esta experiencia puedo hablar del tema. 

¿Por qué, si no tengo novio, no puedo hablar de amor? ¿Por qué, si uso una falda corta, me lo ando buscando? ¿Por qué, si tengo más amigos que amigas, soy una puta? ¿Por qué nos ponemos tanta presión? ¿Por qué no podemos solo aceptarnos como válidas y ya? ¿Por qué entre más escenarios donde seamos accesorios, mejor y mayor es nuestro valor? ¿Por qué nos juzgamos por las decisiones que tomamos? ¿Por qué tanta etiqueta? ¿Por qué nos complicamos tanto? 

Antes me pasaba muy seguido que me sentía juzgada. Ciertas risitas, miradas, suspiros y gestos me hacían sentir menos que el resto. Quizás por cómo andaba vestida, por lo que decía, por lo que opinaba, por lo que me gustaba... Ahora ya no me pasa eso. No sé si porque las personas son otras, porque he crecido o por alguna razón que no se me ocurre mientras escribo esto. No quiero que me vuelva a pasar. No quiero sentirme insegura. No quiero, otra vez, dar explicaciones. No quiero estar a la defensiva. No me quiero pelear pero tampoco me quiero quedar callada. No quiero que solo mujeres se identifiquen conmigo. No quiero sentirme elevada en un pedestal. No quiero que me vean frágil e impotente. No quiero ser un objeto. No quiero protestar con las tetas al aire condenando a los hombres solo por haber nacido. No quiero usar ropa ajustada para conseguir la validación del cuerpo femenino. No quiero estar ni en un extremo ni en el otro. No quiero incitar a la revolución. ¿Qué quiero? A saber.

He tirado la primera piedra. No estoy libre de pecado porque he crecido en una sociedad machista y a veces me cuesta no dejar la lengua suelta y no decir todo lo que me pasa por la cabeza. Me cuesta no condenar a hombres y a mujeres. Repito, solo he tirado una piedra. Según las leyes de Newton esa piedra va a regresar al suelo de donde la recogí. Es la gravedad. C’est la vie. Este escrito va a quedar en tu cabeza un par de días y luego la vida se encargará de que lo olvidés o de que ya no te importe tanto. Lo mismo me va a pasar a mí. Esto solo es un flujo de conciencia en un determinado tiempo escribiéndose en un bloc de notas del celular. 

Y ya, es todo.

#laif #mujer #machismo #feminismo #sátira

[petiterebellefleur]

Flujo de conciencia #1.

Qué ondas, kpecsis, kè paciones (¿o cómo saludan los jóvenes ahora?).

Vaya, no sé cómo va a terminar esta publicación. Solo sé que, como muchas otras veces, me vino este impulso y aquí estoy, desahogando el alma.  Entiéndase, si sos nuevo/a por aquí, que el desahogo no es una experiencia “negativa”. Es justo y necesario. Hace tres millones de años creé este blog como plataforma para compartir lo que siento y/o pienso. No ha cambiado. Aquí hay publicaciones más craneadas que otras; el denominador común es que necesito de un estímulo para hacerlo. Pero...

TODO CAMBIÓ CUANDO LA NACIÓN DEL FUEGO ATACÓ.

¿De qué te has perdido? 

En estos momentos acabo de abrir el portón de mi casa para que el carro familiar entrara y me están preguntando que dónde se guardan los víveres del súper y no tengo idea de dón...

No creo que imaginarías que ibas a leer eso. Retomemos.

He pasado las últimas horas escuchando podcasts mientras hacía manualidades. Y mientras me acostumbraba a esa extraña dinámica, LO SENTÍ. Vino con timidez, como ese encuentro incómodo que tenés con tu ex aunque ya no haya malas energías en el aire. Revoloteaba tentadoramente a mi alrededor, diciéndome, ESCRIBÍ, VAMOS, ESCRIBÍ.

Así que me dije, vale verga que no salga perfecto, hagámoslo. Henos aquí.

Voy a ser breve. Voy a hacer preguntas. Si te incomodan es buena señal.

¿Tenés hambre? Yo hasta ahorita estoy cenando. Esto es un aperitivo ligero para empezar. Se va a poner bueno.

¿Qué tal tu infelicidad? ¿Cuánto tiempo te tenés que refugiar en las redes para no sentirte miserable con tu propia vida? ¿O es con la música? ¿O Netflix? ¿O pornografía? ¿O el café? ¿O cualquiera de esos vicios de los que ni somos conscientes de que nos dominan más de lo que los dominamos?

¿Hasta qué punto tu felicidad depende de otros? ¿Qué es éxito para vos? ¿Sos feliz? ¿Estás en paz? ¿Estás viviendo el presente?

Yo tengo una tarea pendiente. Tengo que escribir. La he venido posponiendo toda la semana. En un vídeo que vi hace como 457980 años compartían que la procrastinación realmente es miedo a hacer algo. Hace dos semanas, tertuliando sobre las torturas de la creación artística, concluimos que muchas cosas solo quedan en la mente por el miedo a no satisfacernos a nosotros mismos, a no ser suficientes con nuestra creación.

Hoy, sí o sí, hago esa tarea. Después (en otro día que no sea hoy) me evalúo con dureza como hago toda la vida. Quizás primero me termine la cena, no sé. Quizás primero suba esta publicación.

Mi punto con esta divagación era hacerte pensar. 

Preguntate, ¿en qué tiempo estás viviendo? ¿para quién? ¿para qué? 

Cuando te sentís mal, ¿lo dejás salir? ¿lo compartís con alguien más? ¿te permitís ser vulnerable? ¿con vos mismo o con los demás?

Y, la más importante de todas, ¿por qué?

Pensá, querido lector o querida lectora no voy a hacer esa mamada del género inclusivo. Yo creo en vos.

Yo, Jenny, he cambiado mucho. A modo de intimar comparto que me propuse para el 2019 escribir aquí una vez al mes. Ya fallé, podría dar explicaciones, PERO AQUÍ ESTOY, OMBE. 

Volveré. Es justo y necesario, amén y amén. Quizás me salga algún post deshilachado como este, quizá sea un tratado filosófico súper vergón, quizás sea una lista del súper. A saber. 

Ojalá nuestros caminos se crucen otra vez.

Gracias por estar, gracias por leer.

Hasta pronto.

#laif #presente #conciencia

[petiterebellefleur]

Intento de aplicación etimológica.

Resistencia. 

Del latín resistĕre (siendo re “volver” y sistĕre “quedarse en un lugar fijo”); de las muchas definiciones que tiene esta palabra, me quedo con las siguientes para esta publicación: 

Capacidad para resistir, aguante.

Oposición a la acción de una fuerza. 

Llevo casi tres semanas de regreso en la universidad y vuelvo a tener miedo. Como siempre, se me ha olvidado que también sentí miedo en mis ciclos anteriores, por lo que esta emoción la estoy viviendo de forma muy nueva, como si no la hubiese sentido antes en mi corta vida. 

Sin embargo he dado un giro inesperado (¡algo que nunca antes había hecho conscientemente!) a la situación y sigo trabajando en ello. No he conseguido los mejores resultados  —quizá nunca se puede porque somos criaturas imperfectas pero si me detengo a filosofar aun más, esto no terminará y no se publicará—, pero me siento lo suficientemente satisfecha como para considerarlo un triunfo contra la maldad y la crueldad del mundo. 

Así que, Aquiles vengo, señores, de nuevo. Disfruten el show ☺. 

A principios de año fui al super con mi madre y le rogué que me comprara un libro, el más barato entre el montón que estaba ahí exhibido; le dije incluso  —para terminarla de convencer— que lo terminaría antes de su cumpleaños... 

Estoy hablando pura paja, ¿verdad? Lo siento. Sigo, sigo.

Para no hacer más largo el cuento, el libro es La casa de los espíritus de Isabel Allende y me queda un capítulo y medio para acabarlo. 

Me ha cambiado la vida, es el primer libro que me ha hecho llorar y le he agarrado un cariño casi que maternal, no sé, me fascina. Me ha venido fantástico en la situación que estoy viviendo, me ha dado fuerzas y me ha recordado que la vida sigue valiendo la pena porque hay magia en todas partes... 

Dios mío, qué cursi soy, perdón. Otra vez se me fue la mano equisde.

Bien, vuelvo al asunto.

Hay un pedacito diminuto, en medio del maremoto de palabras que arma la historia, que desde que lo leí me ha dejado una impresión imposible de quitar. Va más o menos así:

Su tío la ayudaba a pensar en todo eso sin llorar, relajarse y no oponer resistencia al dolor para que éste atravesara sin permanecer en ella.

Recuerdo que lo leí sin ganas antes de bañarme, cambiarme y de empezar el día. Recuerdo también que seguí pensando en eso mientras me bañaba, mientras almorzaba, mientras me lavaba los dientes y hasta mientras esperaba a mi mamá para que terminara de pagar en la farmacia...

En otras palabras: no me lo saqué de la cabeza. 

Una cosita chiquita pero acertada. Y si te pega, pues te pega y te hace pensar. Así que Jenny reflexionó y reflexionó y entonces llegó a la siguiente asociación/conclusión/lo que sea: 

El dolor es inevitable. El sufrimiento es opcional. 

Hace años que escuché esa frase y por fin me la puedo tomar en serio. A menos que dejés ser, estar y pasar aquello que te hace mal, lograrás seguir adelante con tu vida. Entre menos resistencia opongás, mejor.

Es muy difícil. No voy a mentir. Creo haber comentado que cuando siento dolor o tristeza, busco deshacerme de esa sensación lo más rápido que pueda. Usualmente son soluciones bastante tontas, que me dan un alivio inmediato pero falso, y al final solo estoy postergando y acumulando, sin resolver ningún problema en realidad. 

Mencioné al inicio que no la estoy pasando de perlas y es cierto. Lo que cambia ahora es que lo dejo ser, estar y pasar. Una amiga me dijo hace poco (quizá sin querer) que todo con calma, todo pasa. También es cierto. 

De nada me sirve clavarme y hacerme creer que el dolor es eterno porque se habrá ido eventualmente. El amor existe, la ira existe, el miedo existe, la alegría existe. El dolor existe, ni modo. Es algo natural y todos pasamos por ello, no obstante entre más lo neguemos, más se arraiga y más morimos por dentro. 

Con esto no quiero decir que vamos a buscar sentir dolor por el resto de nuestra existencia. Ni generalizar ni simplificar; analizar. No tengo garantías con este método, no es la verdad absoluta. No sé si esto seguirá siendo válido veinte años a futuro. No sé nada y está bien. Sin embargo estoy tranquila. 

Tengo miedo, sí. Quiero que termine ya, sí. Quiero no pensar en lo que me pasa y olvidarlo, sí. Pero acepto que no estoy bien y que un día sí voy a estarlo porque todo cambia. Aceptar es una palabra mágica, tenemos que ignorarla menos en la práctica.

No estoy obligada a fingir que no siento nada, que las cosas no me afectan, que siempre soy fuerte e impasible. ¡SE SIENTE TAN BIEN ACEPTAR ESO! Reconozco mis problemas y mis emociones, mi humanidad; además que identifico a mis amigos para que me acompañen y me consuelen en lo que trato de encarar mis problemas porque son cosas mías y no de ellos. 

Sobre todo, trato de dejar ser y estar porque sé que va a pasar.

Por más que leo y releo, esta publicación me parece un desorden. Me disculpo. Todo estará bien ☺. Todo con calma, todo pasa.

Nos leemos pronto, 

Jenny.

#laif #La casa de los espíritus #Isabel Allende #resistencia #etimología

[petiterebellefleur]

El oro de los tontos.

Mentalmente me he propuesto escribir más en el blog —ahuevo, dijo una de las voces en mi cabeza—. 

No me leás con esos ojos desconfiados. En serio. Todavía no escribo mis propósitos pero lo haré. En serio —le respondí a esa voz en un esfuerzo por silenciarla—.

¿Se han dado cuenta de que siempre inicio cada publicación hablando pura paja y es hasta que le dan clic al leer más que lo bueno comienza? JA.

¡Hola! Un placer volver a leernos.

¿Todo bien? ¿Qué tal los propósitos? ¿Han aprendido algo nuevo?

Ha pasado la primera semana del año —digamos que sí porque yo sigo despertándome pensando que es lunes equisde— y he aquí un resumen de lo aprendido de momento.

Al principio estaba viviendo en un sueño y todo era dicha, el mundo complacía mis caprichos. A media semana —el tercer lunes, o el cuarto, no sé— la cosa se puso fea y entré en pánico. Me puse en modo contención de daños y empecé a hacer de todo hasta mover montañas con tal de resolver el asunto. Nunca obtuve una solución real, me abrumé demasiado y me fui a dormir. ¿Qué pasó al final, dirán? Pues nada, que al día siguiente había resuelto la cuestión por alguién más pero la pagué caro.

Y acá estoy reflexionando el respecto.

La angustia, la desesperación y la supuesta urgencia de sacar eso ya (no sé por qué en esta clase de situaciones se me olvida que no se resuelven de inmediato los problemas) me hacían tener una perspectiva equivocada de mi situación. No estaba pensando bien y me dejé llevar por el miedo. Además, una vez me di cuenta de que se había remediado todo, entré otra vez en ese estado de el mundo me complace porque ya había contribuido a la causa —bien chambón pero lo hice—. Eso sí, ya no me sentía bien.

Entonces he pasado haciendo cosas “productivas” y me siento mejor porque ya no tengo esa sensación de culpa de no estoy retribuyéndole al mundo ni tampoco no estoy cuidando de mí misma. Aunque en el fondo siga sintiéndome egoísta, caprichosa y malagradecida...

Tranquilos, mi historia no se ha concluido aún. Es solo la primera semana del año... 

Vaya, chivo, Jenny.

Ahora, ¿qué tiene eso que ver con el título de la publicación? Ya deberían saber que todo acá tiene un motivo, no fue solo para atraerlos a perder su tiempo. Soy mala, pero no tanto jiji.

Creo que se han de familiarizar con el término “oro de los tontos” y frases relacionadas como “no todo lo que brilla es oro”, blablabla, ¿verdad?

Lo mismo pasa acá. No seás tonto, tonta, whateverrr. No te dejés engañar. Sé sincero con vos mismo.

Si has empezado con pie derecho el 2018, ¡bien por vos! Tené en cuenta que eso no significa que vas a quedarte tirado esperando que el universo siga complaciéndote. No, no, no. Hacé algo por la vida. Que esa buena vibra sea un empujón para alcanzar esas metas imposibles y sueños locos.

Si ha sido un inicio medio fatal, ¡bien por vos! Sos el más aventajado del grupo. Sabrás disfrutar como se debe cuando estés en la dicha y también sabrás mantenerte tranquilo si la situación sigue empeorando. Ánimo, que no estás solo en esta vida y todavía podés alcanzar esas metas imposibles y sueños locos.

Si ha sido un inicio feísimo, perverso, cruel, ¡bien por vos! No, no estoy loca ni soy cínica. Y si lo siguiente que vas a leer no lográs digerirlo porque es muy gastado —aunque me haya rebuscado por no leerme tan frase motivacional—. lo entiendo, pero tené en cuenta que no vas a salir de eso haciendo que los demás se sientan como vos ni aislándote del mundo. Sos único, sos valioso y sos importante. El mundo no te odia ni conspira en tu contra, la vida vale la pena, disfrútala. Recordá que las personas a tu alrededor no pueden leerte la mente así que si necesitás ayuda, pedila. No te ahogués en un vaso de agua ni en la pila ni en la piscina. Nada es eterno y vas a salir de eso para ir por esas metas imposibles y sueños locos.

Sea cual sea tu situación, cada una tiene su propio “oro de los tontos”. En cada una podés ser engañado si estás buscando una salida fácil o si estás obrando con maldad —no me gusta ser moralista pero el karma existe, compañeros—. Asimismo en cada una te podés confiar en que la cosa va a seguir así un largo rato y la vida es una tómbola porque nunca sabés qué te va a tocar. El hoy no es definido por el ayer ni te definirá el mañana.

Y lo repito porque se olvida tan fácilmente: no estás solo, estés donde estés. Arriésgate a exponerte, a abrirte, a ser humano. 

Compartite con otros, vas a crecer. Mucho. Muchísimo.

Te lo prometo.

#laif #oro #propósito #2018

[petiterebellefleur]

La pregunta del millón.

Ni crean que intencionalmente decidí publicar esto hoy, último día del 2017. Ni crean en la casualidad de que vengo una vez más a hablar de renacer, de ser una mejor versión de uno y esas cosas. Ni crean que me estoy aprovechando de esa paja que nos venden de empezar de cero el 1º de enero y larilarilá. Eso es un chiste, eso es un cuento —o algo así tratando de citar al maestro Pitbull equisde—.

Quiero hablar, intercambiar experiencias y esas cosas. Creo que esta es la primera vez que en serio siento una curiosidad difícil de ignorar por saber qué piensan sobre lo que les voy a compartir. No sé, ustedes que me leen son personas, yo soy una persona, y cambiamos. No se puede negar.

Así que tiro la primera piedra y les pregunto:

¿Qué aprendieron de ustedes mismos este 2017?

Antes de que se aturdan como candidata de concurso de belleza  —¡pobrecitas! —, me explico. 

Sé que la vida no es fácil y que el mundo es cruel. Sé que existe el mal, el odio, la violencia, la intolerancia, la corrupción y otros males atroces. Sé qué es quedarse dormida llorando porque no entendés lo que estás haciendo con tu vida y tampoco por qué es que seguís viva. Sé lo que es sentirse sola aunque tengás un montón de chats en tu bandeja de entrada y aunque estés en un cuarto con mucha gente. Yo sé, tranquilos, no soy muñequita. Yo sé de las cosas malas. Yo sé.

Sé que cuesta verle el lado lindo y agraciado —no me gusta decir “positivo” porque no soy protón y punto— a cualquier situación horrenda por la que estés pasando. Sé también que no suelo escribir de las desgracias y penurias de la existencia, que siempre mis publicaciones casi que todas tienen moraleja y final feliz. Sé, a pesar de todo, que la vida no funciona como lo estoy vendiendo en este blog. Pero es lo que decidí vender. Ni modo.

Creo en el cambio. Creo en que no sos el mismo que eras en octubre por ponerte un ejemplo. Si fue para bien o para mal no sé porque ponerme moralista me da una angustia existencial innecesaria. Creo en el crecimiento también. Ponele, si en febrero tuviste una experiencia penosa porque se dieron cuenta de que no sabés guardar un secreto, seguramente ya para noviembre alguien se arriesgó a confiar en vos y ahí estás, siéndole fiel. No sé, alguna cosilla idealista de las que escribo siempre, creo que es fácil seguirme el hilo.

Vuelvo y repito —hasta cambio la persona gramatical para que tengamos un diálogo más cercano—: ¿qué aprendiste de vos mismo este año?

Ni se te ocurra decirme que nada. Te leo la mente. Si ya te puedo.

Me parece imposible que en estos 365 días vos no hayás descubierto algo de vos mismo. 

Lo que sea, no tiene que ser el Nirvana ni nada majestuoso: ya no me gusta comer carne, no puedo evitar ser impuntual, intenté verme las películas de Star Wars pero me dormí en la primera media hora, ahora soy más del té y menos del café, la universidad me hizo más sociable, no necesito pareja para ser completamente feliz...

¿Entendés por dónde voy?

En mi caso, creo que soy una persona más sensible.

Estoy más alerta y despierta a mi entorno, por ende, reacciono. Me hace sentir viva y real. A veces me ha dolido porque quería seguir viviendo en mi burbuja y acomodando a las personas a mi forma de ser. No saben lo tranquila que me siento porque ya no me importa eso.

Después de muchos años finalmente estoy a gusto con quien soy —aun siendo consciente de todos mis defectos y de todo lo que no me sale bien— y no estoy viviendo del pasado, recordándome en una disque Época Dorada donde fui la mejor Jenny habida y por haber. Tampoco crean que esta reflexión la saqué con toda la facilidad del mundo y que fue agradable —como dormirse antes de que la almohada se caliente y se vaya a saber dónde el frío tan rico— haber llegado a esta conclusión.

Sé los errores que cometí, sé lo que tengo que mejorar, sé que no soy perfecta. No obstante, sé que soy mejor que la niña del año pasado y eso me basta. Me alivia tanto sentir ese cambio, esa evolución. Siempre me ha dado miedo estancarme y quedarme atrás, vivir algo que ya no puede ser, que no es compatible con la actualidad.

Espero que puedan sacar su aprendizaje, su resumen de quiénes fueron este 2017. Jenny se hizo más sensible y ahora es consciente de muchas cosas que ignoraba. Fulanito también hizo algo. Con solo ser persona y haber sobrevivido otro año creo que algo tuvo que haber pasado.

Me encantaría que me lo compartieran, si quieren por supuesto. No hay nada más mágico que ser testigo de esas pequeñas cosas que suman el todo. Sin miedo, que todos estamos aprendiendo.

¡Feliz Año Nuevo! 

Espero podamos leernos pronto,

Jenny.

#para vos #2017 #2018 #cambios #aprendizaje #crecer

[petiterebellefleur]

Equivocate.

¡Hola, hola!

Se llegó, iba a llegarse, el día en que volví al blog. No sé cuánto tiempo me voy a quedar pero sí sé que tengo mucho de qué hablar y hasta que se me acaben los temas, acá me tendrán un tiempecito jiji.

Retornemos, pues, a cambiar el mundo.

Como una introducción, este ciclo universitario  —sí, el tamagochi humano que soy yo ya va a la u— tuve un catedrático nuevo y desde el primer momento me dio mucho miedo su persona. Aclarando, todo lo nuevo me da miedo y me paraliza horriblemente. La cosa es que trabajar con él fue de lo más desafiante pero al mismo tiempo de lo más gratificante y lo que terminó haciendo que dejara de tenerle miedo y que se ganara mi cariño, no solo respeto, es la frase con la que he titulado este post: equivóquese.

Nosotros en clase teníamos que proponerle actoralmente y él se encargaba de corregirnos y guiarnos en la dirección correcta. Qué voz le hago a este personaje, cómo se mueve, qué ropa me pongo... Siempre era lo mismo: no se quede sin hacer nada, es lo peor que puede hacer, equivóquese, arriésguese.

Creo que es gracias a él que ya no me da tanto miedo regarla porque está bien hacerlo. 

Y así es. Ya lo viví, no puedo negarlo.

Querido lector, 

No sé quién seás ni sé en qué andás metido, pero sé que, como a mí, se te presentan muchas oportunidades —aunque no sean tan majestuosas ni ostentosas como las esperabas— a las que decís no porque te da miedo de fracasar. Y te entiendo. 

Vivimos en un mundo cruel, competitivo, que deja de lado las pequeñas cosas que realmente importan. No estoy diciendo que te volvás un holgazán y solo te dediqués a vivir para los demás, dejando de lado tus sueños. No te estoy diciendo que seás mediocre y uno del montón. Te estoy diciendo que te la jugués y arriesgués porque todo es ganancia en esta vida, en serio.

Para los escépticos, acá comparto una historia.

Tengo un amigo que amo con el alma que quería irse a estudiar su carrera a Argentina. Se subió a un avión por primera vez, solo, para ir a probar suerte y fracasó en su misión. Sin embargo, se topó con un museo de historia natural que le recordó lo lindo que es seguir siendo niño porque vio los fósiles que solamente había conocido en fotos y si yo no le hubiese dicho la ganancia que recolectó de su viaje —ese encuentro con su niño interior—, probablemente hubiese regresado desencantado de la vida y quién sabe qué cosas más.

Quizá es cuestión de perspectiva, quizá es aprender a dar gracias, quizá es ser optimista/positivo —detesto esto último, por cierto—. Para gustos, colores. 

La cuestión es que aquel error monumental, inolvidable, imperdonable; aquella equivocación imborrable, tiene su gracia, su encanto. Todo es ganancia, como ya dije. 

No tengás miedo de pedir más, de buscar ser mejor.

No tengás miedo de dejar ir, de perder o de decir adiós.

No tengás miedo de lo nuevo, de salir a lo desconocido (aquí te hago barra porque también lo intento yo). 

No tengás miedo del miedo ni de los miedos de otros que no tienen por qué ser los tuyos. 

Solo tené miedo, como dijo mi maestro, a quedarte estático y morirte sin haber hecho nada.

EQUIVOCATE, que sos humano y no es nada malo.

Y PERDONATE, por encima de todo.

El perdón es amor y el amor es perdón (entre otras ochocientas mil cosas más).

Yo creo en vos,

Jenny.

La inspiración de este post, el empujoncito que me faltaba, viene de este video que me encontré hoy porque finalmente pude volver a ver YouTube sin sentir culpa de perder el tiempo. Uní los puntos y todo tiene sentido. 

Todo pasa por algo y siacabuche.

#para vos #Errores #Equivocate #Perdón #Amor

[petiterebellefleur]

¿Feliz Independencia?

¡Hola, hola! 

Resumiendo para los que andaban pendientes: no escribo si no me siento lo suficientemente bien para ello y tampoco si no tengo ninguna inspiración. Más adelante les contaré qué fue de mí en todo este exilio.

PERO DESDE HACE COMO CUATRO HORAS ME INVADIÓ ESTA NECESIDAD DE EXPRESARME Y HEME AQUÍ. 

A cambiar el mundo, una vez más.

Hoy 15 de septiembre, conmemoramos el 196º aniversario de independencia de mi queridísimo país El Salvador y sus hermanos Guatemala, Honduras, Nicaragua y Costa Rica.

La pregunta es ¿qué hiciste hoy para celebrarlo?

Seguro la pasaron como yo, (quizá también sobrevivieron la semana de parciales, por cierto) echando la hueva y desperdiciando el divino tesoro de la juventud en las redes sociales, Netflix o alguna otra cosa de esa naturaleza. Capaz ni se bañaron y estuvieron en pijama toda el día... Ay, chichí, ¡si ya me los puedo!

Sin embargo, yo tuve una revelación, como dije, hace un par de horas y por eso estoy escribiendo, para sentir que este día no fue un desperdicio.

Les contaré una historia: yo desde hace algunos años no me emocionaba en lo más mínimo por la independencia, la aborrecía. ¿Por qué celebrar que una minoría criolla se había revelado de su autoridad en España para tomar las riendas y controlar los territorios? ¿Qué era el punto de celebrar algo así, si nada tenía que ver conmigo? Solo agradecía el asueto y los actos cívicos para perder clase y ya. Hasta ahí llegaba mi patriotismo.

Sin embargo, este año cambié.

¿Qué estamos celebrando este día sinceramente? Nada.

Si te dijese, definime qué es ser salvadoreño, ¿qué me dirías? Estoy segura de que sería algo muy lindo, muy alegre y muy positivo. Ahora bien, si le preguntás a un extranjero, que solo nos conoce por los medios de comunicación y las redes sociales, pasarían dos cosas: o no sabe qué es El Salvador o está muerto de miedo porque es el país más peligroso del mundo.

Pero no estoy hablando de ellos, sino de nosotros.

¿Te sentís orgulloso de tu país? ¿Sí? ¿En serio? 

Contame, cuándo fue la última vez que te pusiste un traje típico y bailaste gustoso cualquier canción nuestra o que visitaste las ruinas arqueológicas por puro placer o que anduviste en las fiestas patronales de cualquier pueblito no por obligación de ir a ver a tu pariente que vive ahí. Contame si no te dormías cuando recitaban la Oración a la Bandera o cuando ingresaba el pabellón con todas las banderas centroamericanas en los actos.

Contame, cuándo fue la última vez que compartiste una publicación en Facebook de alguna página que no tiene nada que ver con nuestra realidad o cuándo comiste comida rápida y la preferiste por la cena tradicional de huevo frijoles y pan o cuál fue la última serie/película que viste (seguramente gringa). Contame qué canciones escuchaste hoy, contame qué emoji o filtro de Snapchat usaste hoy; contame, qué hiciste hoy para homenajear tus orígenes. Contame.

Yo no hice nada. No celebré nada y eso me puso triste. Muy triste.

¿Por qué tanta pena hacia nuestros símbolos patrios, nuestro náhualt, nuestro folklore y nuestras tradiciones? ¿Por qué muy pocas veces preferimos consumir lo local? ¿Por qué nos desvivimos por tener lo último en tendencia, escuchar la mejor música en inglés y dejamos de lado todo lo que somos?

¿Por qué seguimos matando nuestra cultura? ¿Qué tiene de feo? ¿Qué tiene de malo? ¿Qué le falta para ser lo suficientemente buena?

¿Qué necesitamos para que todos nos sintamos dichosos de ser quienes somos y de haber nacido donde nacimos y no desgraciados e inferiores en comparación con el resto del mundo?

¿No trabajar más de diez horas en un call center o en un restaurante de comida rápida? ¿Ser capaz de visitar el Centro Histórico de San Salvador sin sentir el miedo que hay por la delincuencia? ¿Que las pupusas los domingos sean gratis? ¿Ponerle tu nombre a una coaster? ¿Aprender a tocar marimba? ¿Comer pan con pavo todos los días para la cena? ¿Reventar cuetes todo diciembre? ¿Que lluevan los zompopos en cantidades exageradas? ¿Que resucitemos a Monseñor Romero, Alfredo Espino o a Roque Dalton para que nos contagien del amor a la patria? 

No sé, no tengo la respuesta. No espero que me respondan tampoco, sé que no es fácil.

Solamente sé que somos mucho más de lo que aparentamos, que valemos la pena tanto como los países con el mejor índice de desarrollo humano, que tenemos una historia hermosa de la cual aprender para no volverla a regar, que somos alguien en este mundo, que no tenemos que definirnos por todo lo que nos bombardea a nuestro alrededor, que nos urge aprender a ser críticos...

Sé que cultura somos todos y sé que los responsables de hacer un mejor El Salvador somos nosotros, los pobres, los ricos, los que leen, los que no, los artistas, los que te limpian el vidrio, los que piden en el semáforo, los que están empezando el kínder, los gays, los negros, los indios, los evangélicos, los ateos, los de San Miguel, los de Chalate... somos todos y punto. Todos somos necesarios. 

Por favor, aprendamos a amar nuestro paisito, y si amar es imposible, a respetar por lo menos. Esta tierra que nos vio nacer no es culpable de todo lo que le sucede, su gente lo es. Su desorden, su caos, su soberbia, su avaricia, su impaciencia, su ira, su intolerancia, su ignorancia, su pereza, su violencia... podría seguir enumerando los males, pero mi objetivo jamás ha sido ese.

Solo quiero que sintás ese amor que yo descubrí hace poco y que tratés (como yo) de contagiarlo a alguien más. 

Así, entre todos, hacemos un mejor El Salvador, una mejor Centroamérica, una mejor América Latina, una mejor América y un mundo mejor.

#sívar #El Salvador #Guatemala #Honduras #Nicaragua #Costa Rica #independencia #15 de septiembre

[petiterebellefleur]

Ahora soy Sofía #2.

Básicamente la inspiración para este post surgió luego de leer sobre el renacimiento. 

Qué lindo eso, ¿no? "Nacer de nuevo". Todos podemos renacer cuantas veces queramos. El límite lo ponemos nosotros. 

Bien, sigamos antes de ponernos más sentimentales. 

El libro explica que a partir de ese momento, no hay vuelta atrás. 

El reivindicado humanismo, la pérdida de poder de la Iglesia, la imprenta y los demás avances científicos impiden que otra vez se haga la vista gorda ante los problemas existenciales que cualquiera de nosotros pueda tener. Y me pareció de lo más interesante que al fin se decidieran a abordarlos como con las matemáticas y las otras ciencias: siguiendo un método sistematizado. 

Ahí entra mi héroe, Descartes, inaugurando el barroco. 

Él siguió los pasos del gran Sócrates y se desvivió por abrirles camino a los demás filósofos modernos. Reconozco que él contribuyó enormemente a la causa, pero mi favorito de lo que he leído desde la última vez que escribí ha sido Spinoza. 

Spinoza, un campeón sin lugar a dudas, es descrito en el libro como un "estoico moderno". 

Voy a frenar un poco para explicar brevemente sobre el estoicismo y blablabla. 

Esta corriente filosófica surgió en la Grecia Antigua y se caracteriza por llevar una vida moderada, controlando las pasiones humanas para ser recompensado con plenitud y felicidad en la vida. Además afirma la existencia de un poder superior o Dios que se encuentra en todas partes y que no es ajeno a su creación, sino que existe y está habitando con ella. 

Como dato curioso, se dice que una persona es estoica cuando logra mantener el control ante una determinada situación, es decir, que no se deja llevar por las circunstancias o por sus emociones. 

Qué bonito, ¿verdad? 

Continuando con Descartes, Spinoza y el barroco, la problemática principal de este periodo de contraste era explicarse la relación entre el alma y el cuerpo.

Durante toda la historia surgieron interrogantes relacionadas a lo que ya mencioné y había dos grupos o posturas al respecto: los que pensaban que el alma y el cuerpo eran independientes entre sí y representaban dos realidades diferentes (Descartes) y los que pensaban que eran ambas cosas eran partes de un todo (Spinoza). 

Eso sí, cabe mencionar que tanto Descartes como Spinoza afirmaban que existía un Dios y que esto no chocaba con todos los procesos sistemáticos y demás descubrimientos científicos/filosóficos que hicieran. 

Quisiera haber vivido en esa época y haber sido testigo de toda esa revolución de pensamiento. 

No sé, este libro me hace sentir que soy parte de algo mucho más grande que lo que puedo imaginar, e incluso así no me dejo intimidar o me siento inferior por eso. Es más, me siento importante, como si cargara la historia del mundo en mi cuerpo. 

Me inclino más por la postura unitaria. Aunque no la apoyo del todo porque sí creo que el alma y el cuerpo son dos mundos completamente distintos que se complementan para hacernos a nosotros lo que somos. Además que últimamente he tenido unos sueños rarísimos (otra cuestión que dialogar: ¿cómo saber si esto que vivo no es un sueño?) y lo único que me da consuelo es esa idea dual. 

Por otra parte, me gusta pensar que todo lo que somos y todo lo que es está conectado y que todo pasa por algo, porque tiene que pasar para seguir en el camino. Pero me irrita la idea de que mi destino ya está trazado y yo solo estoy respondiendo mecánicamente. Me asusté en un momento, porque el libro llega a afirmar que como somos parte de un todo, realmente nosotros no somos más que eso, una parte, un pedazo de algo más. ¿Y la individualidad? 

¿Mis decisiones, ideas y pensamientos realmente no son mías sino que son producto de las leyes de la naturaleza o las concepciones de la sociedad donde vivo? 

La verdad es que es algo denso lo que estoy escribiendo y no es una problemática que se resolverá cuando termine la publicación o cuando termine de leer el libro. Pero creo que estar compartiendo mis reflexiones y argumentar/contraargumentarlas significa algo, ¿no?

#favoritos #El mundo de Sofía #Descartes #Spinoza #Renacimiento #Barroco