Tumgik
Text
Proyecto Octubre
Tumblr media
0 notes
Text
0 notes
Text
EL DESALOJO de Florencio Sánchez
El desalojo
Florencio Sánchez
PERSONAJES
ENCARGADA.
VECINA 1.ª .
VECINA 2.ª .
INVÁLIDO.
GENARO.
JUAN.
INDALECIA.
CHICOS.
UNA NENA.
PERIODISTA.
FOTÓGRAFO.
VECINO.
COMISARIO.
Escena I
ENCARGADA.-  (Saliendo de una de las habitaciones.)  Ya sabe, ¿eh? Bueno; que non se le orvide. Son cansada de esperar que hoy e que mañana e que de aquí a un rato...
VECINA 1.ª.-  ¿Qué le hemos de hacer? ¡Cuando no se puede, no se puede!
ENCARGADA.- Antonce no se arquila los cuartos, ¿sabe? ¿Se ha pensao que estamo en una república, aquí?... L'arquiler es lo primero.
VECINA 1.ª.-  ¡Bueno, bueno!... ¡Basta! ¡No precisa hablar tanto!
ENCARGADA.- Eso digo yo. Non precisa hablar tanto. A la fin de mes se paga e nos quedamos todos callao la boca...  (Alejándose.)  Sí, señor. E non precisa tanto orgullo... Se quieren vivir de arriba, se compra el palacio del congreso, ¿sabe? ¡en la calle Entre Ríos!... (Tropieza con un mueble.)  ¡Ay!... ¡Dío!...
VECINA 1.ª.-   (Aparte.)  ¡No haberte roto algo!...
ENCARGADA.- ¡Ay!... ¡Madona Santísima!... ¡Uiii!...  (Golpea el mueble con rabia, volviéndose a INDALECIA.)  ¿Y osté también se ha pensao tener todo el año esto cachivache ner patio?... Non tiene vergüenza...
INDALECIA.- ¡Pero, señora...! Si yo...
ENCARGADA.- ¡Un corno! Se le hubiesen tirao esta porquería de muebla a la calle, non estaría tanto tiempo sen buscar pieza. Parece mentira. (Quejándose.)  ¡Ay, ay, ay!...
VECINA 2.ª.-   (Aproximándose.)  ¿Se lastimó mucho, señora?...
ENCARGADA.- ¡Qué sé yo!... Un gorpe tremendo.
VECINA 2.ª.-  ¡A ver! Esos golpes saben ser malos...
VECINA 1.ª.-   (Burlona.)  ¡Ah!... Se le puede formar un cáncer... Llamen a la Asistencia...
ENCARGADA.- Mire, mire, doña Francisca. Venga.
(Se oculta detrás de los muebles para enseñarle la pierna lastimada. Dos inquilinos que salen rumbo a la calle, se detienen a mirar.)
VECINA 2.ª.-  ¡Ay, qué temeridad!...
ENCARGADA.- Ner mismo güeso... Vea.  (Viendo a los vecinos.)  ¿Y ustedes qué quieren? ¿No tienen nada más que hacer?...
VECINA 2.ª.-  ¡Ave María! ¡Tanta curiosidad!...
(Los dos vecinos se alejan riendo.)
VECINA 1.ª.-   (Deteniéndolos.)  Diga, Juan, ¿no sabe si dan baile este sábado los «Adulones del Sur»?
JUAN.- Creo que sí.  (Mutis de ambos.)
VECINA 2.ª.-  Lo que es usted no faltará.
VECINA 1.ª.-  No estoy invitada. La fiesta es pa ustedes los socios, no más... ¡ja, ja!...  (Mutis.)
VECINA 2.ª.-  ¡Dispará no más, comadre!...
ENCARGADA.- ¡Déquela!... Non vale la pena...
VECINA 2.ª.-  Tiene razón. Venga a mi cuarto. Le daré una frotación de aguardiente... Venga... También, la verdad es que ni se puede caminar en este patio.
ENCARGADA.- Naturalmente. Con toda esta porquería de cachivache adentro...
VECINA 2.ª.-  Un día, pase; dos, también; pero más, ¡es demasiada pachorra!...
INDALECIA.-  (Tristemente.)  ¡Ay, señora; ruéguele a Dios que no se vea en nuestro caso!
VECINA 2.ª.-  ¡Pierda cuidado!... Mientras él me dé salú para trabajar, puedo estar tranquila. No ha de ser esta persona quien se quede de brazos cruzados esperando que las cosas caigan del cielo.
ENCARGADA.- Eso, eso digo yo. Mire, doña Indalecia; crea que no lo hago de gusto, porque el buen corazón lo tengo, ¿sabe? Ma non se puede estar estorbando a la quente todo el tiempo...
INDALECIA.- ¿Qué debo hacer?... ¿Quieren que me tire al río con todos mis hijos?
VECINA 2.ª.-  No decimos tanto. Pero... moverse, caminar, buscar trabajo... En este Buenos Aires no falta en qué ganarse la vida.
INDALECIA.- ¡Pero señor! Si no he hecho otra cosa que buscar ocupación. Ustedes bien lo saben. Costuras no le dan en el registro a una mujer vieja como yo. Ir a la fábrica no puedo, ni conchavarme, pues tengo que cuidar a mis hijos...
ENCARGADA.- Ma dícame un poco, ¿qué le precisa tener tanto hijos?... Si no hay con qué mantenerlos, se agarran y se dan.
VECINA 2.ª.-  ¿Y los asilos?
VECINA 1.ª.-  ¡Oh!... ¡Eso es muy fácil decirlo!... ¡Pobrecitos!...
ENCARGADA.- Pobrecito, pobrecito, e mientras tanto muerto de hambre como los gatos, robando la comida en casa de lo vecino...
Escena II
GENARO.-  (Que ha aparecido momentos antes con un paquete en la mano.)  ...Y hacen bien, cuando los vecinos son tan agarrados. ¡Mándesén mudar de aquí!... ¡No tienen vergüenza!... ¡Estar embromando a la pobre mujer!... ¡Bruta gente!...
VECINA 2.ª.-  ¡El terremoto de la Calabria!... Vámonos, señora.
ENCARGADA.-  (A GENARO.)  Me diga un poco, ¿qué se ha pensao osté? Me diga.
GENARO.-  (Rezongando, sin hacerle caso.)  ¡Bruta gente! ¡Bruta gente!... (A INDALECIA.)  No te aflija. ¿No vino ninguno?...
INDALECIA.- Nadie.
GENARO.-  (Se encamina hacia su cuarto, segundo izquierda.)
ENCARGADA.-  (Deteniéndolo.)  ¡Eh!... Me diga un poco, ¿qué se ha pensao?...
GENARO.- ¿Parlate a me?...
ENCARGADA.-  (Alterada.)  ¡A lei, sí; a lei, a lei! Sí...
GENARO.-  (La mira fijo un instante y le hace la mueca característica de los napolitanos. Se va a su cuarto dando un portazo al entrar.)
ENCARGADA.-  (Furibunda.)  Furbo... ¡Mazcalzone!
VECINA 2.ª.-  Está borracho el botellero. No le haga caso. Venga.
ENCARGADA.- ¡Canaglia!
VECINA 2.ª.-  Venga a curarse esa pierna. Déjelo.
ENCARGADA.- ¡Mazcalzone!  (Volviéndose a INDALECIA.)  Usté también, ¿qué está compadriando así?... Mañana mismo le hago tirar eso cachivache a la calle... ¡Tanto embromar, también!...
(Se va rezongando conducida por la VECINA 2.ª.)
Escena III
INDALECIA.-  (Deja la costura y se aproxima a la cuna.)  Vamos, nena. ¡Arriba!... ¡No se va a pasar durmiendo todo el día!... ¿No?... Entonces u... upa!...  (La levanta.)  ¿Quiere pancito?...  (Saca un mendrugo del bolsillo y se lo da.)  Esta noche traerán centavos, bastante plata, y vamos a comer mucho, ¡mucho!... ¿Tiene hambrecita?...
GENARO.-  (Reapareciendo con un grueso pan y una navaja en las manos, se acerca a INDALECIA y corta una porción.)  Toma... ¡Mangia!...
INDALECIA.- ¡Oh!... ¡Para qué se ha incomodado!...
GENARO.- ¡Mangia, te digo!...  (Saca un bollo de bolsillo y se lo da a la NENA.)  Mangia vos. ¿Dove sono i ragazzi?
INDALECIA.- No sé. En la calle tal vez...
GENARO.-  (Se aproxima a la puerta del foro y llama a voces.)  ¡Eh!... ¡Tú!... Vieni. Angue, tú!...  
(Aparecen tres CHICOS. GENARO da un trozo de pan a cada uno.)
 Toma... ¡Mangia... tú, mangia!... ¡Mangia!...
(Los muchachos reciben el pan con alborozo y se ponen a comer.)
INDALECIA.- ¡Mal agradecidos!... ¿Cómo se dice?...
UNO DE LOS CHICOS.-   (A boca llena.)  ¡Muchas gracias!...
GENARO.-  (Indicándoles la puerta.)  ¡Vía!  (A INDALECIA.)  No hacen falta cumplimientos. Hay hambre, se mangia y se acabó!...  
(Los CHICOS hacen mutis. GENARO se sienta en cualquier parte, saca salame del bolsillo y se pone a comer. Pausa.)
 Estuve en el hospital. Le han hecho la operación a tu marido...
INDALECIA.- ¿Cómo?... ¿Otra?...
GENARO.- Naturalmente.  (Alzándose.)  Toma. Mangia un po de salame.
INDALECIA.- ¡Oh!... ¡Me lo van a matar!...
(Toma el salame y se lo pasa a la NENA.)
GENARO.-  (Volviendo a sentarse.)  Sería mecor, si ha de quedar paralítico.
INDALECIA.- ¡Pobre Daniel!... ¿Habló con él?...
GENARO.- No lo decan ver. No hace falta tampoco...  (Pausa.)  ¿Qué decía la encargada?
INDALECIA.- ¡Oh!... Lo de siempre. Rezongar... Insultarme...
GENARO.- ¡Bruta gente!...
INDALECIA.- ¡Son tan malos!... Vea: a ella le disculpo, porque, al fin y al cabo, es patrona; pero a las otras, a las demás vecinas... ¡Gente desalmada!... ¡Si fueran más felices o mejores que una, no diría nada, ¡qué diablos! Tendrían derecho. Pero no. Son pobres como yo, tienen hijos como yo, y maridos que trabajan expuestos a que los destroce una máquina o caerse de un andamio, y en vez de pensar un poco que podrían verse en mi caso mañana o pasado, se ponen a la par de la otra para mortificarme. Y todo por adularla, ¡nada más! ¿Usted cree que ha habido uno solo en esta casa capaz de ofrecerme un poco de caldo para la nena? No, señor; prefieren tirar las sobras por el caño...
GENARO.- ¡Bruta gente!
INDALECIA.- ¡Es lo que más me desconsuela!...  (Afligida.)  Me dan tantas ganas de llorar... Ver que una no es nadie... Que de repente se queda sola en el mundo, aislada... abandonada de todos... peor que un perro...  (Llora.)
GENARO.- ¡Ma no!... ¡Ma no!... ¿Qué se gana con afliquirse?... ¡Cállase la boca!... ¡Bruta gente!... Decate de llorar, ¿sabe?...  (Se oye un tumulto y gritos afuera.)  ¡Viejo loco!... ¡Viejo borracho!... ¡Viejo loco!...
(Aparece un grupo de pilluelos, entre ellos los hijos de INDALECIA, acosando a un viejo soldado, inválido de la guerra del Paraguay.)
Escena IV
INVÁLIDO.-  (Persiguiendo a los muchachos con el bastón enarbolado.)  ¡Mal enseñados!... ¡Con eso van a hacer patria!...
INDALECIA.- ¡Tata!...
GENARO.-  (A los CHICOS.)  ¡Vía!... ¡Caramba, caramba!...¡Fuori!... ¡Sinvergüenza!...  (Los corre.)
INVÁLIDO.- ¡Muchas gracias, don!... ¡Parece mentira!...
GENARO.- Son cosas de ragazzi...
INVÁLIDO.- No ve, hombre, a qué extremo hemos llegado. Los gringos tienen que defender a los servidores de la patria. Vea, amigo; aquí ande usté me ve, ¿sabe?, yo soy el cabo Morante, y pregúntele a cualquiera de los que estuvieron en la guerra, si llevo al cuete esta cintita y esta otra...
GENARO.- ¡Eh, bueno! ¡Qué le vamo a hacer!
INVÁLIDO.- ¿Cómo qué le vamos a hacer? ¡Que lo respeten, canejo!  (A INDALECIA.)  ¿Cómo te va diendo, m'hija?...
INDALECIA.- Aquí estamos... Y usté, ¿qué hace por acá?...
INVÁLIDO.- A verte, pues... Y así no más me recibís... ¿No digo?... Hasta los hijos son unos ingratos...
GENARO.- ¿Ése es su padre?...
INVÁLIDO.- ¿Y cómo le va?... Y legítimo, ¿sabes, che, gringo?... Lo que hay es que ya no me va reconociendo...
INDALECIA.- ¿Y cómo ha venido a dar conmigo?...
INVÁLIDO.- Por tu desgracia... Esta mañana en el boliche del tuerto Ramos, allá en Palermo, ¿sabes?... y oí que un mocito leía en el diario que te habían desalojao y que levantaban una subscripción pa vos... ¡Pucha, digo, si es m'hija!... ¡Pobre mujer!... ¿Adónde vive?... Calle tal... me dijo el mozo. ¡Vamos a ver a mi Indalecia en la missiadura! Y agarré p'acá... Si en algo puedo servirte, ¿sabes?, aunque manco, no me olvido que sos m'hija...
INDALECIA.- Podías haberte acordado antes...
INVÁLIDO.- ¡Qué querés!... Te retobaste; te empeñaste en juir con ese zonzo de tu marido...
INDALECIA.- Bueno; no hablemos de él, ¿eh?...
INVÁLIDO.- No hablemos, si querés. Pero yo te dije que ibas a ser desgraciada con él, y ya ves cómo salió cierto. ¿Se cayó de un andamio, no?...
INDALECIA.- Sí, señor.
INVÁLIDO.- No ve, pues... ¡Cuando yo te lo decía!... ¿Esa nena es tuya?... Venga p'acá, mocita, con su agüelo...  (La chica, asustada, se recuesta a la madre.)  No, ve, pues... Pucha cómo está el país, amigo gringo... Los nietos no las van con los agüelos... Ya no se respeta la familia ni nada... En nuestro tiempo, había e ver... Y esos otros mocosos, ¿son tuyos también?... Con que ustedes eran los que venían insultando a su agüelo, ¿eh? ¡Ahora van a ver, mocosos!...
(Va hacia ellos.)
INDALECIA.- ¡Tata!...
GENARO.-  (Deteniéndolo.)  ¡A ver!... Décate de embromar.
INVÁLIDO.- ¡Oh!... ¿Y a vos quién te da vela?... Che, Indalecia, ¿éste es otro yerno?... Amigo; podía pagarle el cuarto, cuando menos...
GENARO.- ¡Décase de embromar!  (Se va a su cuarto.)  ¡Bruta gente! ¡Bruta gente!
INVÁLIDO.- Miralo al gringo... Hinchao como un zorrino...  (A voces.)  ¡Ché, Musolino!...
INDALECIA.- Déjelo, tata. Si ha venido para fastidiar a la gente, podía haberse quedado...
INVÁLIDO.- Bueno, me viá sentar, ya que no invitas...  (Se sienta. Pausa.) ¿Te trajieron la plata e la suscrición ya?
INDALECIA.- No, señor.
INVÁLIDO.- Ya sabés: no te puedo ayudar con nada, porque ando muy misio y vivo en el cuartel del 5º; pero si querés, te puedo buscar la pieza pa mudarte. Hoy he visto una en la calle Soler...
INDALECIA.- No se incomode...
INVÁLIDO.- ¿Y qué pensás hacer?...
INDALECIA.- No sé. ¡Nada!...
INVÁLIDO.- Esperate un poco. Hay un asilo de güérfanos militares ¿sabés?... Allí... ¡pucha madre!... Si yo no estuviera tan desacreditao con el coronel... le podía pedir una recomendación.
(Sale la ENCARGADA.)
INDALECIA.- ¿Para qué?
INVÁLIDO.- Pa que metás toda esa colmena de muchachos... ¿Qué vas a hacer con ellos?...
Escena V
ENCARGADA.- Eso es lo que digo yo. Que lo meta nel asilo... No sirve más que pa trabaco...
INVÁLIDO.- Salú, doña...
INDALECIA.- No, señor; no me separo de mis hijos. Si ustedes no tienen corazón, yo lo tengo, y bien puesto...
ENCARGADA.- Ma diga un poco. No es peor que se mueran de hambre de no tener qué comer...
INVÁLIDO.- Ha dicho la verdá. Choque esos cinco.  (A INDALECIA.)  ¿Quién es ésta, che?...
ENCARGADA.- Sono la encargada de la casa...
INVÁLIDO.- ¡Che, che, che!... ¿Y vos la pusiste de patitas en la calle, no?...
ENCARGADA.- Eh... Naturalmente, si no pagaba l'arquiler...
INVÁLIDO.- ¿Y todavía te metés a dar consejos?... ¡Ya podés ir tocando de acá, gringa!
ENCARGADA.- ¿E osté qué se ha pensao? Yo soy la dueña acá, ¿sabe?...
INVÁLIDO.- ¡Qué vas a ser dueña, desgraciada!
ENCARGADA.- Bueno; déquese de embromar...  (A INDALECIA.)  ¿E osté sa creído que esto e una sala per recibir la visitas?... Haga el favor da sacar de aquí a ese vieco borracho...
INVÁLIDO.- ¡Tú madre, gringa el diablo!...
Escena VI
GENARO.- ¡Madona del Carmen! ¡Dequen en paz esa pobre muquer!... (Enérgico, tomando por un brazo a la ENCARGADA.)  ¡Haga el favor, mándese a mudar de aquí!... ¡Ya!... ¡Ya!... ¡Váyase, porque te rompo la facha!... ¡Caramba!...
ENCARGADA.-  (Volviéndose furiosa.)  ...¡Dío Santo!... ¡Porco!... ¡Canaglia!
GENARO.-  (La empuja con violencia.)  ¡Fuori!...  (Volviéndose al INVÁLIDO.)  ¡Usted también; mándese mudar!... ¡Hombre bruto! ¡Gente bruta!...
INVÁLIDO.- ¡No me toqués!... ¡No te me acerqués, gringo!... Porque te...
(Tumulto. Salen vecinos. La ENCARGADA vocifera.)
INDALECIA.- Sosiéguese, don Genaro...
GENARO.-  (Amagándole un sopapo a la ENCARGADA.)  ¡Bruta gente!...
INVÁLIDO.- Ladiate, Indalecia, que entuavía puedo con un gringo...
Escena VII
Aparecen el COMISARIO y el PERIODISTA, seguidos de un grupo de CHICOS.
COMISARIO.- ¿Qué desorden es éste?... A ver... Sosieguense...
ENCARGADA.- Vea, señor Comisario... Esta canaglia de un botegliero, me ha pegao una trompada tremenda...
INVÁLIDO.-  (Cuadrándose.)  ¡A la orden, mi jefe!...
GENARO.-  (Yéndose a la pieza.)  ¡Bruta gente, per Dío!...
ENCARGADA.- No lo deque dir, señor comisario, me ha pegao, me ha pegao, é un senvercuenza!...
COMISARIO.-  (A GENARO.)  ¡A ver, deténgase!... ¿Qué ha pasado?...
ENCARGADA.- Mire, señor comisario, llévelo preso.
COMISARIO.- Cállese la boca.
INVÁLIDO.- Yo soy testigo, mi comisario. No ha pasao nada, mi comisario... Todo ha sido de boca, no más. ¿Basta la palabra?
COMISARIO.- Bajá la mano no más. A ver... Despejen ustedes un poco...
ENCARGADA.- No, señor comisario...
COMISARIO.- ¡Despeje, le he dicho!...
ENCARGADA.-  
(Se va refunfuñando y antes de desaparecer mira con odio a GENARO y besa la cruz, jurándole venganza.)
COMISARIO.-  (A INDALECIA, que está rodeada de sus hijos.)  ¿Quién es la dueña de estos muebles?...
INVÁLIDO.-  (Indicando a INDALECIA.)  Es una servidora... Mi hija...
COMISARIO.- Bien, señora. Yo soy el comisario de la sección, y el señor es un repórter de «La Nación». Hemos sabido que usted se encontraba en esa situación y...
PERIODISTA.- Nuestro diario ha sido el primero en dar la noticia...
INVÁLIDO.- Me costa. ¿No te dije, m'hija, que lo había leído?...
PERIODISTA.- Usted ya sabrá que iniciamos una suscripción en su favor. Vengo a traer lo que se ha recibido hasta hoy. No es mucha cosa, pero le permitirá alquilar una pieza y atender las primeras necesidades...
INVÁLIDO.- Da las gracias, pues, mujer...
PERIODISTA.- Aquí tiene estos sesenta pesos y la lista de las personas que han mandado al diario... Sírvase.
INDALECIA.-  
(Se echa a llorar estrechando a la NENA. Pausa. Emoción. GENARO se seca los ojos con la manga.)
PERIODISTA.- No se aflija, señora. Ya ve usted... Las cosas se remedian. Cálmese. Tome su dinerito...
INVÁLIDO.- ¿Sabe que está lindo esto? Cuando te train la salvación te ponés a llorar. Lo hubieses hecho antes.  (Toma el dinero y se lo ofrece.) ¡Agarrá y da las gracias, pues!...
LA NENA.-  ¡Mamita!... ¡Mamita!...
INDALECIA.-  (Serenándose.)  Está bien... Muchas gracias... No llore, mi nena... No llore... ¿Ve?... Mamita ya no llora tampoco... A ver... Séquese esos ojitos.  (Le limpia la cara y le suena los mocos con el delantal.)  Sea buenita... ¡Esos hombres son muy buenos! ¡Muchas gracias, señores, muchas gracias!...
PERIODISTA.- El comisario por su parte ha hecho algunas diligencias en su favor... Él le dirá...
COMISARIO.- Es cierto. He conseguido colocarle a sus hijos... ¿Son éstos?... ¿Éste es el mayor?... Bueno, a éste lo mandaremos a la Correccional de menores...
GENARO.- ¿Cómo dice, señor comisario?...
COMISARIO.-  (Prosiguiendo sin contestarle.)  Allí aprenderá un oficio y se hará un hombre útil... Para los demás he conseguido que el asilo...
INDALECIA.- ¿Cómo?... ¿Mis hijos?...
COMISARIO.- Sí, señora. Ya está todo dispuesto. La Sociedad de Beneficencia los tomará a su cargo.
INDALECIA.- ¡Mis hijos!... ¡No!... ¡No!... ¡No me separo de ellos!... ¡No, señor! ¡De ninguna manera, pobrecitos!... ¡Son míos, son muy buenos!...
COMISARIO.- Señora, comprenda usted que en su caso...
INDALECIA.- ¡Mis hijitos! ¡Qué esperanza!... ¡No! ¡Ni lo sueñen!...
GENARO.- Natural. Y tiene razón...
COMISARIO.- Retírese usted. ¡Nadie tiene que ver aquí!
GENARO.- No tengo que ver, pero digo la verdad, ¿sabe?...
COMISARIO.- ¡Que despeje, le he dicho!...
GENARO.- ¡Eh, bueno!... Está bien. Ma es una incustisia... ¡Bruta quente!...
PERIODISTA.- Tiene que resignarse, señora. Es natural que le duela separarse de ellos, pero preferible es que se los mantenga la Sociedad a que mañana tengan que andar rodando por ahí...
INDALECIA.- Tendrá mucha razón, señor. Pero yo no puedo separarme de ellos...
INVÁLIDO.- ¡Pero ha visto qué rica cosa!... Es la primera vez que la patria se ocupa de proteger a este viejo servidor, manteniéndole a los nietos, y vos te oponés. No seas mal agradecida, mujer... Mire, amigo, este brazo lo perdí en Estero Bellaco, y aquí en esta pierna tengo otra bala más, ¿sabe? Bueno, y ya ve lo que he ganao... Que mis hijos y mis nietos se vean en este estao. ¿Ahora se acuerdan? Está bien. Hay que agarrar no más... Vale más tarde que nunca, ¿no le parece?...
COMISARIO.- Es natural. Bien señora: tiene usted que resolverse y...
INDALECIA.- No, señor... Estoy bien resuelta. No me separo de mis pobres hijos... No puedo, no puedo... Nunca podría...
INVÁLIDO.- ¡Pucha, mujer zonza! No parece hija mía...
COMISARIO.- ¿Prefiere usted verlos morirse de hambre o convertidos en unos perdularios?
INDALECIA.- ¡No! ¡No!... Ya me han ayudado a tomar pieza. Ahora, demen trabajo sí quieren; demen trabajo, que a mí no me faltan fuerzas, y yo me encargaré de mantenerlos y de educarlos...
GENARO.- Eso, sí está bien dicho...
COMISARIO.- Le he dicho que no se meta usted.
INDALECIA.- Y después, no son míos solamente. ¿Qué cuenta le voy a dar al pobre padre, que tanto los quiere, que se ha desvivido por ellos; qué cuenta le voy a dar cuando salga del hospital?... ¡No! ¡No!... ¡No es posible!... ¡Mis hijitos!...
COMISARIO.- ¡Oh!... A ese respecto debe estar tranquila. Su marido está muy mal y difícilmente saldrá del hospital. En todo caso, quedará paralítico...
GENARO.- ¡Oh, bruta quente!...
INDALECIA.-  (Se echa a llorar.)
Escena VIII
El FOTÓGRAFO de «Caras y Caretas».-   (Al PERIODISTA.)  Hola, amigo.
PERIODISTA.- ¿Cómo le va? ¿Viene a sacar una nota?...
FOTÓGRAFO.- Precisamente. Una linda nota, por lo que veo... ¿Esta es la víctima?...
PERIODISTA.- ¿Usted conoce al señor?  (Presentándolo.)  El comisario de la sección... Un repórter de «Caras y Caretas».  (Saludos.)
FOTÓGRAFO.- Llego en un lindo momento.  (Al mensajero que lleva los aparatos.) A ver... sacá pronto eso...  (Al COMISARIO.)  ¡Qué cuadros! ¿no?...
COMISARIO.- Ésos se ven a cada rato... Es una cosa bárbara la miseria que hay...
(El FOTÓGRAFO rodeado de pilluelos y vecinos, acomoda la máquina sobre el trípode buscando la luz conveniente.)
FOTÓGRAFO.- Aquí queda bien. Así...  
(Los vecinos toman colocación frente al foco, tratando de salir en la vista.)
 Le tomaremos uno así llorando. Es un momento espléndido...  (Enfoca.) Ustedes tendrán la bondad de retirarse... Más... Más lejos.  (Al INVÁLIDO.)  Usted también, retírese...
INVÁLIDO.- Yo soy el padre de ella, pues; ¿por qué vía salir?...
FOTÓGRAFO.- Está bien, disculpe...  (Cuando se vuelve, todos se acomodan de nuevo.)  He dicho que se retiren...
COMISARIO.- A ver... ¡Despejen!...
FOTÓGRAFO.- Ya les ha de llegar su turno. Pierdan cuidado... Bien... No se muevan... Un momento... Ya estuvo...
INVÁLIDO.- ¿He salido bien yo?...
FOTÓGRAFO.-  ¡Macanudo!...  (Al COMISARIO.)  Ahora podrían ponerse ustedes. Y si la señora quisiera levantar la cabeza...  (A INDALECIA.) ¡Señora!... ¡Señora!...
GENARO.- Métanme preso y hagan lo que quieran... Ma esto es una barbaridá... Mándase mudar... ¡Per Dío!... ¡Qué bruta quente!... Deque tranquila esa pobre muquer... ¡Caramba!... ¡Caramba!...
PERIODISTA.-  (Al COMISARIO, que quiere intervenir.)  La verdad es que no le falta razón... Sería mejor...
FOTÓGRAFO.- Por mí... La nota importante ya la tengo...  (Se pone a empaquetar su aparato.)
INVÁLIDO.- Pero han visto este gringo, ¿qué se ha creído de la familia también?... ¡No faltaba más, hombre!...
COMISARIO.-  (A INDALECIA.)  Bueno, señora, no se aflija más y resuélvase.
INVÁLIDO.- Déjela. Sí ya está resuelta.
INDALECIA.- ¡Mis pobres hijitos!... ¡No es posible!... ¡No puedo, me moriría!...
PERIODISTA.- Piense que es un egoísmo suyo. Por el momento, podrá mantenerlos si trabaja; pero puede ocurrirle que mañana no tenga que darles de comer... Enfermarse... morirse... ¿Qué va a ser de ellos?... Usted no pierde, dándolos al asilo... Los podría ver a menudo... Allí se formarán, aprenderán un oficio...
COMISARIO.-  Y mañana serán hombres útiles para usted y para todos...
INVÁLIDO.- ¡Claro está!... ¿Preferís verlos en la cárcel por bandidos?...
INDALECIA.- Bueno... Sí... Hagan de mí lo que quieran... ¡Sí!... ¡Sí!... ¡Pobres hijitos míos!...
COMISARIO.- Eso es entrar en razón... Bueno. Con ese dinero alquílese una pieza y mañana véngase por la comisaría con los chicos, que iremos a colocarlos, ¿eh?
PERIODISTA.- ¿Nos vamos?... Bien... Adiós, señora. Tranquilícese usted... Sea razonable...
INVÁLIDO.- Da las gracias, pues, y saludá...
PERIODISTA.- Déjela... Le mandaremos por el comisario la plata que se reciba... (Al FOTÓGRAFO.)  ¿Salimos?...
FOTÓGRAFO.- Sí, ¿cómo no?... Buenas tardes, señores.
COMISARIO.-  (A GENARO.)  Y a ver vos si te dejás de andar zonciando...
(GENARO le vuelve la espalda.)
INVÁLIDO.-  (Al COMISARIO.)  Diga, mi jefe... Habrá unos níqueles pal milico viejo...
COMISARIO.- ¿Para mamarte, no?...
INVÁLIDO.- ¿Qué quiere, pues? Es lo único que me ha dao la patria... Un vicio...
COMISARIO.-  (Riéndose.)  Tenés razón. Tomá...
(Mutis. Los muchachos y vecinos salen también detrás.)
INVÁLIDO.-   (Volviéndose a INDALECIA.)  ¡Che, mi hija!... Hoy no he morfao nada, ¿sabés?... Refílame un nalcito de esos que te dieron...
INDALECIA.- Tome... Tómelos todos... Yo para qué los quiero ahora...  (Se abraza sollozando a sus hijos.)
TELÓN
1 note · View note
Text
GÉNERO DRAMÁTICO
GÉNERO DRAMÁTICO
El género dramático es el conjunto de textos literarios que tienen como fin ser representados (en un teatro o cualquier otro escenario que funcione como tal).
Drama deriva de la palabra griega drao que significa “hacer” o “ejecutar”. Por lo tanto el término engloba a las obras que sirven para ser dramatizadas mediante el diálogo a un público, siendo la acción el elemento sobre el que precisamente gira este género.
La tensión dramática se logra a partir del desarrollo de fuerzas en conflicto.
El género dramático puede escribirse en verso o en prosa en el universo de la ficción, pero queda inconcluso si no se lleva a la representación ante un público y con un escenario para ello.
Estructura externa del texto dramático
Actos: Los actos están marcados por las acciones principales de los personajes. Los clásicos dividían la obra en cinco actos; conforme pasó el tiempo, se redujo a tres. Generalmente el primer acto sirve para la presentación, los antecedentes; es decir para ubicar al espectador o al lector en el desarrollo de las acciones (planteo). El segundo acto desarrolla el conflicto, el cual va adquiriendo mayor intensidad (nudo). Finalmente el tercer acto expresa el clímax del conflicto, con su posterior resolución (desenlace). La división en actos también se asocia a los saltos temporales de la ficción. Se suele marcar con la bajada del telón o dejando el escenario a oscuras.
Escenas: Las escenas son divisiones mucho menores y se distinguen por la entrada y salida de los personajes. Corresponden al tiempo en que permanecen los mismos personajes en el mismo lugar.
“El texto impreso de una obra teatral apenas es más que el plano de un arquitecto para una casa que no ha sido construida aún”
(Tenesse Williams)
2 notes · View notes
Text
Actividad de cierre del Género Lírico, de evaluación
-ELIGE UNA CANCIÓN
-DEFINE EL TEMA DE LA CANCIÓN
-INCLUYE UNA REFLEXIÓN Y COMENTARIO DE TODA LA CANCIÓN
-BUSCA EN ELLA DOS RECURSOS LITERARIOS. DEFÍNELOS, Y ANALIZA SU FUNCIÓN EN LA CANCIÓN
1 note · View note
Text
CONSIGNA PARA LA PRÓXIMA CLASE (SEMANA DEL 24 AL 28 DE AGOSTO)
CONSIGNA:
A) Asigna un título a cada estrofa del poema “Todavía” de Mario Benedetti
0 notes
Text
POEMAS QUE TRABAJAREMOS POR EL CENTENARIO DEL NATALICIO DE MARIO BENEDETTI E IDEA VILARIÑO
TODAVÍA
No lo creo todavía Estás llegando a mi lado Y la noche es un puñado De estrellas y de alegría
Palpo gusto escucho y veo Tu rostro tu paso largo Tus manos y sin embargo Todavía no lo creo
Tu regreso tiene tanto Que ver contigo y conmigo Que por cábala lo digo Y por las dudas lo canto
Nadie nunca te reemplaza Y las cosas más triviales Se vuelven fundamentales Cuando estás llegando a casa
Sin embargo todavía Dudo de esta buena suerte Porque el cielo de tenerte Me parece fantasía
Pero venís y es seguro Y venís con tu mirada Y por eso tu llegada Hace mágico el futuro
Y aunque no siempre he entendido Mis culpas y mis fracasos En cambio sé que en tus brazos El mundo tiene sentido
Y si beso la osadía Y el misterio de tus labios No habrá dudas ni resabios Te querré más Todavía
MARIO BENEDETTI
¿Qué les queda a los jóvenes?
¿Qué les queda por probar a los jóvenes En este mundo de paciencia y asco? ¿Sólo grafitti? ¿rock? ¿escepticismo? También les queda no decir amén No dejar que les maten el amor Recuperar el habla y la utopía Ser jóvenes sin prisa y con memoria
Situarse en una historia que es la suya No convertirse en viejos prematuros ¿Qué les queda por probar a los jóvenes En este mundo de rutina y ruina? ¿Cocaína? ¿cerveza? ¿barras bravas? Les queda respirar, abrir los ojos Descubrir las raíces del horror Inventar paz así sea a ponchazos
Entenderse con la naturaleza Y con la lluvia y los relámpagos Y con el sentimiento y con la muerte Esa loca de atar y desatar ¿Qué les queda por probar a los jóvenes En este mundo de consumo y humo? ¿Vértigo? ¿asaltos? ¿discotecas? También les queda discutir con dios
Tanto si existe como si no existe Tender manos que ayudan, abrir puertas Entre el corazón propio y el ajeno Sobre todo les queda hacer futuro A pesar de los ruines de pasado Y los sabios granujas del presente
MARIO BENEDETTI
PAUSA
De vez en cuando hay que hacer una pausa contemplarse a sí mismo sin la fruición cotidiana examinar el pasado rubro por rubro etapa por etapa baldosa por baldosa y no llorarse las mentiras sino cantarse las verdades.
MARIO BENDETTI
Comparaciones
I
Como un jazmín liviano
que cae sosteniéndose en el aire
que cae cae
cae.
Y qué va a hacer.
II
Como un perro que aúlla interminable
que aúlla inconsolable
a la luna
a la muerte
a su tan breve vida.
Como un perro.
III
Como el que desvelado
a eso de las cuatro
mira con ojos tristes
a su amante que duerme
descifrando la vieja eterna estafa.
IV
Como aquel que se saca los zapatos
y suspira
y se deja caer con ropa y todo
y sin mirar
sin ver
fija en el techo
anchos ojos vacíos.
V
Como un disco acabado
que gira y gira y gira
ya sin música
empecinado y mudo
y olvidado.
Bueno
así.
Idea Vilariño
Pobre mundo
Lo van a deshacer
va a volar en pedazos
al fin reventará como una pompa
o estallará glorioso
como una santabárbara
o más sencillamente
será borrado como
si una esponja mojada
borrara su lugar en el espacio.
Tal vez no lo consigan
tal vez van a limpiarlo
se le caerá la vida como una cabellera
y quedará rodando
como una esfera pura
estéril y mortal
o menos bellamente
andará por los cielos
pudriéndose despacio
como una llaga entera
como un muerto.
Idea Vilariño
La metamorfosis
Entonces soy los pinos
soy la arena caliente
soy una brisa suave
un pájaro liviano delirando en el aire
o soy la mar golpeando de noche
soy la noche.
Entonces no soy nadie.
Idea Vilariño
2 notes · View notes
Text
GÉNERO LÍRICO: MÉTRICA
GÉNERO LÍRICO
La lírica es el género literario del que se sirven los poetas para transmitir sus
vivencias más íntimas: los sentimientos, emociones o sensaciones que les
producen las personas, los elementos de la naturaleza, los acontecimientos o los
objetos: la amada (o amado), el mar, la muerte de un amigo, un monumento, etc.
Se llama género lírico porque en la antigua Grecia este género se cantaba y
se acompañaba de un instrumento llamado lira. Su forma más habitual es el verso
y la primera persona:
Los recursos más importantes de la poesía lírica son:
a) La métrica: La organización de un poema se percibe claramente en la
métrica y en el empleo de sus unidades básicas:
el verso: grupo de palabras de extensión determinada;
la estrofa: agrupación de versos;
la rima: asonante o consonante
el ritmo: conseguido al repartir sabiamente los acentos.
ANEXO
• Métrica: rama de la Lingüística y de la Teoría Literaria que se ocupa de la
naturaleza, propiedades y combinaciones de los versos.
• Poema: conjunto de versos concebidos como un todo unitario.
• Verso: trozo breve de discurso separado del siguiente por una pausa, que
coincide o no con la pausa sintáctica.
Nombre de los versos según su número de sílabas:
Versos de arte menor
Versos de arte mayor
1 No existe. Los monosílabos son
palabras agudas y sumarían una
sílaba más.
9 Eneasílabo
2 Bisílabo
10 Decasílabo
3 Trisílabo
11 Endecasílabo
4 Tetrasílabo
12 Dodecasílabo
5 Pentasílabo
13 Tridecasílabo
6 Hexasílabo
14 Alejandrino
7 Heptasílabo
15 Verso de quince sílabas
8 Octosílabo
16 Verso de dieciséis sílabas,
Modo de contar: se cuentan las sílabas y se añade una más si el verso acaba en
palabra aguda, o se resta una si acaba en palabra esdrújula.
La rima:
Rima consonante o perfecta: a partir de la última vocal tónica todos los sonidos son iguales; ej. Luna y cuna.
Sueltos: no riman pero van en una composición donde los otros sí riman;
ej. los versos impares de los romances.
Rima asonante o vocálica: solo coinciden las vocales; ej. luna y blusa.
Blancos: no riman pero guardan el mismo número de sílabas.
Semilibres: no riman pero tienen un número impar de sílabas (5,7,9,11,etc.)
Libres: ni riman ni tienen límite silábico. Se llama tb. versículo.
Las estrofas: conjuntos cerrados de versos con una estructura métrica.
2 Pareado:
3 Terceto:
4 cuarteto
1 note · View note
Text
GÉNERO LÍRICO
Tumblr media
1 note · View note
Text
PROPUESTA DE LITERATURA PARA TERCEROS 3 Y 4, ALUMNOS QUE NO PUDIERON REALIZAR PARCIAL, CUENTA COMO TAREA DOMICILIARIA. EXCEPTO PARA LOS QUE NO ASISTIERON POR SEGUIR DESDE LA VIRTUALIDAD CON JUSTIFICACIÓN
PROPUESTA PRUEBA PARA ALUMNOS QUE SIGUEN DESDE LA VIRTUALIDAD 3°1 y 3°2
Fecha entrega Lunes 10/08 próximo
CONSIGNA: Lee el siguiente fragmento de la novela de Mario Delgado Aparaín “La taberna del loro en el hombro” y responde las preguntas a continuación.
Tumblr media
CONSIGNA: Lee el siguiente fragmento de la novela de Mario Delgado Aparaín “La taberna del loro en el hombro” y responde las preguntas a continuación.
PREGUNTAS:
1) ¿Qué tipo de título tiene la obra, según la clasificación trabajada? Explique
2) ¿A qué género literario pertenece este fragmento, y explique sus características?
3) ¿Qué tipo de narrador tiene el relato, según su participación en la obra y según el grado de conocimiento de los hechos en este fragmento? Explique
4) ¿Qué personajes identifica en este fragmento, explique qué es un personaje y si hay algún participante que en este fragmento que no lo sea, y en caso de no serlo cómo se le denomina?
5) ¿Cuál es el argumento del fragmento?
6) ¿Cuál le parece que es el tema?
7) Identifique dos recursos literarios de los trabajados en clase. Si no logra identificarlos o poder relacionarlos al menos identifique en qué momentos podemos decir que el lenguaje está utilizado poéticamente (o sea diferente a cómo hablamos comunmente)?
1 note · View note
Text
GÉNERO LÍRICO
Tumblr media
1 note · View note
Text
QUASIMODO
       Yo quiero a Quasimodo. Lo crié yo porque mi madre murió al nacer él, porque salió muy grande y deforme y ella no pudo con el esfuerzo. Y porque mi padre siempre estaba borracho y no se preocupaba por nosotros si no era para mandarnos a buscar vino. Tomaba tanto vino que un día fui a despertarlo y me encontré con que había reventado y lo único que quedaba era una masa sin forma desparramada por todos lados. Los vecinos vinieron y lavaron el piso, y me dijeron que llevara a Quasimodo al orfanato. Pero yo no quise separarme de él, por más que a mí no me daban trabajo en ningún lado, porque de chico tuve poliomielitis y tengo que andar con bastones, pero nos quedaba la casita de mi madre, donde vivíamos, en Playa Pascual. En verano venían turistas y la gente siempre decía que era un buen lugar para los muchachos jóvenes que querían progresar. Entonces pusimos un puestito junto a la carretera y hacíamos limonada pero nadie nos compraba porque decían que éramos unos sucios. Nosotros no éramos sucios, lo que pasaba era que Quasimodo se tiraba al suelo a jugar y también se hacía las necesidades en la ropa y yo no podía lavarlo. Él se me escapaba a cada rato. Lo que más le gustaba era cazar pájaros y comérselos, porque era tan grande que siempre tenía hambre, pero a mí no me gustaba que se me fuera porque lo agarraban los gurises del barrio para tirarle piedras y reírse de él y yo no podía correrlos porque apenas puedo caminar. Entonces, para que no se fuera le conseguí unas campanitas de esas que se ponen en los árboles de Navidad y se las até a un palito, y él se entretenía haciéndolas sonar con una cucharita. Se pasaba horas escuchándolas con la boca abierta. Yo lo miraba y pensaba que éramos felices y me acordaba que mi padre decía que habíamos salido mal repartidos, que Quasimodo era grande y bobo y yo era normal y raquítico. Yo digo que por eso somos tan unidos. Yo subo a sus espaldas y él me lleva, y entonces somos una sola persona, yo soy su cabeza y él es mi cuerpo. Por eso compartimos todo, aunque Quasimodo lo único que puede compartir son esos pajaritos que caza que tampoco son muchos, y yo sé que a pesar de que tiene mucha hambre no se los come todos con tal de traerme uno o dos para mí.
      Yo sé también que fue por eso que empezó a robar gallinas. A los vecinos no les hubiera molestado mucho que él les robara un pollito de vez en cuando, pero no soportaban verlo comérselos vivos, piando los pobrecitos mientras él los masticaba. Pero no era culpa de Quasimodo, sino de Dios que lo hizo tan grande y hambriento. Los vecinos querían denunciarlo. Yo les pedí que no lo hicieran y ellos al final dijeron que sí con la condición de que lo encerrara. Así que lo metimos en la pieza de papá y clavamos maderas en la puerta y la ventana, dejando solamente unas rendijas para que pudiera mirar afuera. Quasimodo pasaba llorando todo el día y a mí se me partía el alma cuando me llamaba o cuando, por la noche, se ponía a aullar como un perrito abandonado. Solamente cuando la luz de la luna entraba por las rendijas de la ventana él se calmaba, y entonces comenzaba a hacer sonar sus campanitas como si su pobre alma estuviera en ellas. Muchas veces me dormí escuchando su sonido.
      Pero no podía durar mucho así. Los vecinos protestaban porque el olor a orín y caca se sentía desde lejos y atraía las moscas que formaban una nube negra alrededor de la casa. Al final pasó que unos gurises vinieron a molestarlo pinchándolo con un palo que pasaron entre las maderas de la ventana. Quasimodo se puso a gritar, y uno de los niños metió la mano dentro para tirarle una piedra. Él se la agarró y le arrancó el dedo de un mordiscón. Cuando el padre vio a su hijo con el muñón ensangrentado y llorando a lágrima tendida fue a hablar con un juez para que se llevaran a Quasimodo al manicomio.
       Mañana lo van a venir a buscar. Pero yo no voy a dejar que se lo lleven. Ahora, cuando se duerma, le voy a clavar en la cabeza una lezna vieja que tengo. Yo sé que voy a ir a la cárcel, pero no me importa. Voy a llevar sus campanitas y las voy a hacer sonar en las noches de luna. Entonces será como si su alma se desprendiera de ellas y se quedara jugando allí, en el aire, mientras yo me duermo y sueño con ángeles raquíticos y demonios que comen pájaros.
HENRY TRUJILLO
1) Quién es Henry Trujillo?
2) Puedes relacionar el nombre del personaje del cuento con algún otro personaje de libros o películas? Investiga: historia, época, si fue real o literario
Profesora Ana Ballesteros                                                                                        LITERATURA
-Se trabaja con el título y la intertextualidad, permitiendo establecer vínculos con el Libro “Notre damme” de Víctor Hugo. 
-Se relee para encontrar otros vínculos además del personaje
-Se reflexiona sobre el personaje colectivo “Los niños” y “los vecinos”
-Infancia, adultez, desamparo, vulnerabilidad
-Narrador interno y subjetivo
-Se trabaja la complementariedad entre los hermanos y el desenlace.
1 note · View note
Text
INTERTEXTUALIDAD
Intertextualidad
Surge cuando un texto se construye en base a otro texto. Es una técnica narrativa que transforma un texto en múltiples significados. Se utiliza para responder, dialogar o negar otros textos pre-existentes.
Escribir sobre un texto anterior supone que el escritor fue receptor de esa obra, la descifra, y al escribir sobre ella “declara”
Al lector, lo obliga a recurrir a ese Texto A (origen) para entender el texto B (actual)
Ejemplo: El cuento “Quasimodo” de Henry Trujillo, no sólo desde el nombre, sino desde otros elementos de la trama establece una intertextualidad con el texto “Nuestra Señora de París” escrita por Víctor Hugo en 1831. También actualmente conocida por la película de Hollywood “El jorobado de Notre Dame”.
1 note · View note
Text
LAS FLORES de Eduardo Galeano
Para los chicos que siguen trabajando desde la virtualidad les cuento que estuvimos trabajando el texto Las Flores en clase. A través de preguntas que se repartían una por alumno y luego colectivizamos con el grupo, tomando apuntes en el cuaderno. Les dejo el texto para que puedan contestarlas y enviármelas por foto por whatsap, ya que es el modo de continuar conectados.
Texto:
Las flores El escritor brasileño Nelson Rodrigues estaba condenado a la soledad. Tenía cara de sapo y lengua de serpiente, y a su prestigio de feo y fama de venenoso sumaba la notoriedad de su contagiosa mala suerte: la gente de su alrededor moría por bala, miseria o desdicha fatal.Un día, Nelson conoció a Eleonora. Ese día, el día del descubrimiento, cuando por primera vez vio a esa mujer, una violenta alegría lo atropelló y lo dejó bobo. Entonces quiso decir alguna de sus frases brillantes, pero se le aflojaron las piernas y se le enredó la lengua y no pudo más que tartamudear ruiditos. La bombardeó con flores. Le enviaba flores a su apartamento, en lo más alto de un alto edificio de Río de Janeiro. Cada día le enviaba un gran ramo de flores, flores siempre diferentes, sin repetir jamás los colores ni los aromas, y abajo esperaba: desde abajo veía el balcón de Eleonora, y desde el balcón ella arrojaba las flores a la calle, cada día, y los automóviles las aplastaban.Y así fue durante cincuenta días. Hasta que un día, un mediodía, las flores que Nelson envió no cayeron a la calle y no fueron pisoteadas por los automóviles.Ese mediodía, él subió hasta el piso último, tocó el timbre y la puerta se abrió.
Cuestionario de análisis
1) Mencione la ubicación espacial y temporal (coordenadas de espacio y tiempo)
2) ¿Qué tipo de narrador es el de este cuento? Explique
3) Quiénes son los personajes? Clasifíquelos
4) Crees que el narrador se coloca desde el punto de vista de algún personaje? ¿Por qué?
5) Cuál es la grafopeya y etopeya de Nelson?
6) ¿Por qué creés que no se describe a Eleonora? ¿sabmos algo de ella?
7) ¿Cómo definirías la actitud de Nelson durante 50 días y la forma en que elige las flores?
8) Y la actitud de Eleonora ¿cómo es?
9)¿ Por qué creés que el narrador no concluye el final? ¿Buca destacar algo? ¿qué es?
10) ¿Qué mensaje o reflexión te sugiere este cuento?
COMPARA ESTE CUENTO CON EL POEMA, a continuación, de MARIO BENEDETTI eligiendo uno o dos versos que creas que definen este cuento: 
No te rindas
No te rindas, aun estas a tiempo de alcanzar y comenzar de nuevo, aceptar tus sombras, enterrar tus miedos, liberar el lastre, retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso, continuar el viaje, perseguir tus sueños, destrabar el tiempo, correr los escombros y destapar el cielo.
No te rindas, por favor no cedas, aunque el frio queme, aunque el miedo muerda, aunque el sol se esconda y se calle el viento, aun hay fuego en tu alma, aun hay vida en tus sueños, porque la vida es tuya y tuyo también el deseo, porque lo has querido y porque te quiero.
Porque existe el vino y el amor, es cierto, porque no hay heridas que no cure el tiempo, abrir las puertas quitar los cerrojos, abandonar las murallas que te protegieron.
Vivir la vida y aceptar el reto, recuperar la risa, ensayar el canto, bajar la guardia y extender las manos, desplegar las alas e intentar de nuevo, celebrar la vida y retomar los cielos,
No te rindas por favor no cedas, aunque el frio queme, aunque el miedo muerda, aunque el sol se ponga y se calle el viento, aun hay fuego en tu alma, aun hay vida en tus sueños, porque cada dia es un comienzo, porque esta es la hora y el mejor momento, porque no estas sola, porque yo te quiero.
FIN
0 notes
Text
HACIENDO LITERATURA con recursos literarios dados en cuarentena (glosario al final del cuaderno) Y EL TEMA fue la cuarentena:
3°3 Sub grupo B
LA CUARENTENA
Fue un encuentro con la ausencia,
fue un tiempo de comprensión y
valor a las cosas que uno tiene, fue como una larga ráfaga de fuego helado,
fue más corta de lo que pareció, fue un sin límites de emociones pasajeras,
fue como un oscuro día de verano,
fue como un período inefable,
fue como un invierno cálido ,
fue como los días de lluvia ,
Fue aburrida, Nefasto
3°3 Subgrupo A : 
Fue aburrida como una clase de historia
Fue como un amanecer nublado Fue como una larga historia sin ninguna emoción. Aburrida. Fue como un tren en un carril sin final Fue corta y larga al mismo tiempo Oscura y con suspenso Fue un momento de constantes aprendizajes Fue oscura...
3°4 Subgrupo A: 
Me siento como en una ciudad repleta de vacíos Me siento como Ronaldo Nazário en el 2002 Siento que me ahogo en un vaso de agua Me siento gris cuano afuera el cielo está decorado de blancos algodones Estoy feliz, me siento super bien Me siento encerrado, Me siento buscando algo que no perdí Me siento como si fuera un árbol sin hojas Estoy tan feliz como pez en el mar
3°4 Sub grupo B
Fue una corta añoranza, fue una larga espera, fue como algo inesperado, fue tan divertido que aburrió fue el lugar donde el tiempo pasó más rápido fue un aburrimiento interminable, fue una deseada pesadilla de paz, fue un largo festival,. fue como un golpe en el dedo chiquito del pie para la Humanidad y una larga caricia para la Naturaleza.
0 notes
Text
RETORNAMOS A LA PRESENCIALIDAD
Repasamos:
Concepto de literatura
Géneros Literarios
Genero narrativo
Tipos de título
Narradores tipología
Personajes
Horacio Quiroga
Generación del 900
El almohadón de plumas:
Tema y argumento
Personajes: etopeya y grafopeya,
Recursos literarios del cuento: oxímoron, metáfora, comparación, antítesis, paralelismo psicocósmico, proyección simbólica.
0 notes
Text
RECOPILACIÓN DE MATERIAL
A SOLICITUD DE ALUMNOS SUBO EL MATERIAL QUE LES FUE ENTREGADO POR ESCRITO
Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media
0 notes