Tumgik
funadiegorozo · 5 years
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Hace rato que quería escribir algo, pero me costó. El año que estuve en la máquina tuve un montón de problemas personales, siempre sentí que Diego me hacía sentir fracasada, le gustaba humillar a las personas y alguna vez me dijo que tenía que bajar de peso o no iba a quedar en las pruebas. Yo (hasta ahora) creia que era una percepción mia, que todo el teatro era así, y que yo con mis múltiples otros problemas capaz estaba sobreexagerando. Ahora me doy cuenta que no. Ese año no quede en las pruebas, y estoy segura que en gran parte por el miedo que el instaura al "hacer en escena". Incentiva la competencia y el miedo, yo nunca quería salir en sus improvisaciones, me incomodaba mucho, se ponía siempre en una situación de poder que te hacia sentir estúpida y que todo lo que uno estaba haciendo estaba mal. Lo único que hizo Diego fue hacerme sentir fracasada (en clases y luego por no quedar), y darme una idea errónea del teatro y la relación con los compañeros.
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funadiegorozo · 5 years
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Estuve en La máquina el año 2013, con 19 años. Ese año falleció el padre de Diego, llevándolo a viajar y a estar bastante tiempo ausente. Aún así, yo formé parte de todos los preuteatrales de ese año, podía pagar para estar en todos ellos, además de pagar más para tomar clases personalizadas (yo sola con las y los docentes), por lo cual estaba de lunes a sábado en la escuela y conocía a la mayoría de les, las y los estudiantes. Al pasar tanto tiempo ahí, me acerqué muchísimo a la Ángela y al Diego, también, fue mi primer acercamiento al teatro, por lo cual siempre creí todo lo que me decían, que las cosas son así EN el teatro, lo que me hizo normalizar los actos del Diego. Al igual que los otros testimonios, las clases de actuación con Diego eran clases donde se exponía a lxs alumnxs preguntando de su vida intima, preguntas reiteradas: ¿Quiénes son vírgenes?, ¿Quiénes se han masturbado?, ¿Quiénes se han hecho un test de embarazo?, etc. Cuestiones que no tenían absolutamente ningún sentido pedagógico. Pero él siempre manipulaba justificando su actuar.Mi relación con Diego fue muy violenta, me di cuenta después, por ciertos traumas o formas de verme a mí misma que desarrollé en la máquina. Me manipuló como a muchxs, convenciéndome que era mi amigo, mi apoyo incondicional, que yo también era alguien “especial” para él, y que nadie me veía como él lo hacía, llegó a controlarme, en el sentido de que no hubo ninguna vez en que yo le haya podido decir que no, sin tener un precio por ello. Defendí al Diego de mi familia, la cual decía que él estaba loco, enfermo, pero yo lo defendí siempre, alejándome también de mi familia. Acoto que conocí a todxs lxs que estaban en los preu ese año, y les aseguro, que Diego habló conmigo mal de cada persona a quien luego le daba la mano o abrazaba (así como también no dudo que hablo mal de mí a mis espaldas). Episodio 1: manipulación relación.Yo estaba teniendo onda con un compañero. Diego lo supo, porque en las clases personalizadas, en su oficina, yo le conté. Diego me dijo que mi compañero era un pendejo, que no sabía que le había visto para besarlo. Tiempo después Diego se acercó mucho a este compañero y también lo hizo “su amigo”. Diego me decía que yo estaba jugando con el corazón de mi compañero y que debía parar, pero siempre volvía a hablar mal de él.Un día, yo conocí a otro tipo, y también se lo conté. Diego, se le contó a mi compañero, diciéndole que había conocido a alguien más alto que él, mas guapo, más grande, mas mino, etc. Yo supe esto porque mi compañero me contó y le dije que era mentira, que si había conocido a alguien pero que nunca le dije al Diego que era todas esas cosas. Le gustaba meterse y atormentar mi relación con mi compañero. Yo no fui buena amiga ni “pareja” con mi compañero, eso lo sé, pero el Diego siempre influenciaba y controlaba todo tipo de relación que sucedía en el lugar. Episodio 2: insinuación. El Diego sabía que yo era virgen. Se lo conté en su oficina, así como conté todo lo que he hecho y qué no, y muchísimas intimidades. Siempre cuando estábamos solos salía el tema sexual. Supo que con mi compañero tuvimos sexo con ropa y quiso saber todo el detalle. Hasta que un día, me empieza hablar si pensaba en tener sexo y como me gustaría, si ocuparía protección, etc. Yo le respondía todo, si me convenció de que era mi profesor y amigo íntimo. A lo que me mira (con esa cara de prepotencia, mirando por encima de uno) y dice (no recuerdo palabras exactas): “nosotros somos amigos, quiero que sepas que yo igual sé harto, tengo experiencia… y que no debes hacerlo con cualquiera, cualquier cosa yo te puedo ayudar en lo que me pidas, sabes que siempre te voy a cuidar…”. Yo interprete eso como una insinuación y fui a comentárselo a la Ángela ese mismo día y ella me respondió: “no, fue que te quiso prestar ayuda para mejor tu actuación y consejos pedagógicos”, sí, la Ángela yo creo que normalizaba también muchas cosas, pero jamás la culpe ni la culpo. Episodio 3: Cosquillas.Una vez, o la vez que recuerdo, en la sala de arriba, estaba con el Diego en clases personalizadas y no recuerdo bien el orden ni que ejercicio hacíamos pero me hizo hacer abdominales y a mi se me subían las piernas por lo que él me sujeto los pies. Después, él me dijo que ahora le tocaba a él y yo también le sujete las piernas y así nos fuimos turnando. No sé que sentido pedagógico tiene eso… Luego, él se cansó y no recuerdo como paso a decirme: “Hazme cosquillas” y yo no quería, me era incómodo tocarlo así porque era mi profesor, pero accedí, y él también me hizo cosquillas pero me sentí muy incomoda pero pensé que eran puros rollos míos. Dentro del tocarse, también me daba palmadas fuertes en el poto, como lo hacia con muchxs y una vez le conté que yo estaba operada de la espalda y me pidió que le mostrar mi cicatriz de la espalda (lo hice porque pensé que era necesario si lxs profes en las pruebas me hacían hacer eso), me levanté la polera hasta el sostén y se la mostré. Después me vio por delante y me tocó una cicatriz que tenia en mi abdomen, y me empezó a preguntar sobre ella mientras me la tocaba lentamente. No tiene ninguna justificación el haber hecho eso. Paso su pulgar por ahí, también en mi ombligo y me toco toda esa zona, me da asco acordarme, de sus manos y su cara. Siempre decía lo guapa que era, que tenia unos ojos preciosos, y me tomaba la cara y me miraba fijamente, que tenia lindos labios, lindo cuerpo, buen poto. Todo eso "lo justificaba" porque "el ser guapa" era una ventaja. Episodio 4: Polola falsa. En ocasiones, las clases personalizadas con él era salir a dar una vuelta y conversar. Me subía a su auto, salíamos por el parque a pasear a los perros. Una vez lo acompañe a hacer un trámite cerca y me hizo ir yo a preguntar algo mientras él esperaba sentada. Y cuando volvía la mirada hacia atrás, él me estaba mirando y después me dijo que todos me miraban, porque era muy guapa y yo que era coqueta y yo de los nervios sólo me reía. En una ocasión me dijo: "hacete pasar por mi polola para ir a molestar a unos amigos". Yo no quería, porque para mí era mi profesor y lo encontraba muy extraño hacer eso, pero me convenció. Me dio la mano (como pareja), y fuimos donde sus amigos: "ella es mi polola". Todos los hombres de ahí lo miraron raro, pero él decía que ellos pensarían que estaba con una mina más joven y muy linda. Yo sólo salude y no hice nada, me sentía un llavero, un objeto. Él sólo se reía. Episodio 5: Boxeo. En una clase personalizada, Diego me dijo que si yo quería quedar en la Chile tenía que tener un "carácter fuerte" porque yo era muy suave y estaba pintada para la Cato. Subimos a la sala de arriba, en esa sala había un lugar como especie de azotea de donde sacó un saco de boxeo y unos guantes para mí y para él. Me dijo que tenía que ser firme y fuerte y que golpeara con todas mis fuerzas el saco. Lo hice, pero él siempre me pedía más... y daba todo de mí, pero nunca le fue suficiente. Hasta que dijo: “Pegáme.” Yo quedé en shock porque no quería hacerlo, una parte de mí sabía que no estaba bien, pero lo hice porque insistió y se justificaba. Yo, que mido 1.50, comencé a golpear al Diego, quien pesaba el doble que yo y media el doble también. De los nervios, me reía, era muy raro todo, y en eso el me golpea, y empieza a humillarme, a sacarme en cara mi persona, mi familia, mis sueños y me empieza golpear para que yo lo golpeara con muchísima rabia, pero no me salía. Me golpeó, me botó al suelo, me gritaba (la voz y los gritos del Diego eran muy potentes: “Levantáte!!!!”, “seguí”, “¿no quieres la Chile acaso?”, “Dale!! Daleee!!!”). Yo me levanté, en llanto, y el continuaba botándome, no me dejaba en paz, y fue así durante mínimo media hora. No se si fue esa vez, pero en una ocasión me aplastó, y tenía que quitármelo de encima, su cuerpo presionaba el mío contra el piso y yo sólo lloraba y gritaba. Después el me “calmo”, nos quitamos los guantes y me tomo como saco de papas, encima de su hombro, y me golpeo el poto y me hizo dar vueltas, muchísimas vueltas, y yo comencé a reírme a carcajadas. No sé quien era yo, todo fue tan distorsionado, mórbido, retorcido, una locura. Episodio 6: El arma.En una clase personalizada, Diego me pasó un texto de Santiago en 100 palabras, me lo tenía que aprender en 15 minutos y entrar a la oficina para ensayar. Entré con el texto memorizado y dice: “empieza a decirme el texto…”. Lo dije, sentada en el asiento al frente del suyo. Dice: “no te sale, de nuevo”. Lo hice de nuevo, pero tampoco me salía. Luego de un par de intentos, él me dice que el texto es acerca de un detenido desaparecido en dictadura. Con eso en mente, lo dije de nuevo una cuentas veces, pero tampoco conseguí hacerlo bien. Luego, Diego saca de uno de sus cajones una venda y me la pone en los ojos, según él era para identificarme más con un detenido desaparecido. Dije el texto a ciegas y tampoco me salió bien. Me quitó la venda y me dijo: “Ven, sentáte en el suelo, al lado de la pata de la mesa…”, cuando ya estaba sentada en el suelo, veo que Diego tiene unas esposas, me las pone en las muñecas, esposándome a la pata de la mesa. “Di el texto…”, lo dije, no me resultó bien. Me puso de nuevo la venda. “Di el texto…”. En ese momento yo estaba nerviosa, y no, no me resultó bien logrado, me continuo presionando pero al parecer no me salía como debía. Cuando me quita la venda, aún esposada a la mesa, lo primero que veo es a Diego de pie al frente mío, apuntándome a la cara con una pistola. “Di, el, texto…”. Yo quedé helada… traté, pero no pude, no puede… En eso, dice con una sonrisa: “Tranquila, si es real, pero no tiene balas”, y después me suelta las esposas…Estos son los episodios de lo que mejor me acuerdo. Siento que hay otros que no los tengo falta de detalle. Por ejemplo, recuerdo que el Diego usualmente ocupaba buzo, y recuerdo que una vez me tomo por atrás y sentí el roce con su pene… fue muy desagradable pero no recuerdo bien todos los detalles. Me hizo comprarme la imagen de que yo era la chica guapa, dulce, virginal, inalcanzable, que manipulaba a todos los hombres, que yo era la chica de la canción Fría como el viento de Luis Miguel, como “un potro sin domar”. Me hizo hablar mal de mis compañerxs. Yo no siento que fui buena amiga haciendo eso, no era yo, y no fue justo ni para mi ni para mis compañerxs. Una vez en su oficina, me dijo: “di este texto de manera erótica…”, no me salió, “dilo, pero ahora soltáte el pelo…”, no me salió. “Hazle cariño al Sefe, de manera sexy mientras dices el texto”, no me salió. Era una mujer de 19 años, me sentía muy incomoda “siendo erótica” a solas con él, me costó mucho no sentirme culposa por querer ser sexy, me llevo años, porque con el Diego sentía que si algo pasaba, podía ser mi culpa.Me dijo: “si yo alguna vez tuviera algo con alguna alumna o sintiera algo por alguna… no podría hacerle clases… pero eso nunca ha pasado.” Eso era su manera de manipular que si a mi me hacía clases, entonces no quería nada conmigo (y todo lo que yo podía pensar eran puros rollos míos).Fueron seis años de silencio… siempre pensaba en todo esto y esperaba el día que hubiera alguna justicia y verdad. No es justo que el teatro sea ensuciado por seres como él. No debe seguir ejerciendo la docencia y deberían internarlo. No culpo a la Ángela ni a las y los profesores, si él tenía una capacidad de control y manipulación gigantesca, todo esta normalizado, todo. La maquina del arte nunca será un lugar seguro si el continua ahí.Gracias por el espacio, por saber que no estoy loca, no estoy sola. Lamento todo los testimonios que he leído, pero al menos tengo la tranquilidad de que saben quien es realmente el Diego.
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funadiegorozo · 5 years
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Yo fui cercano a Diego Rozo durante un tiempo, lo quería mucho, ya que me hacía sentir especial diciéndome lo importante que era para él y lo mucho que me quería, me elevaba el autoestima, y con el mismo poder la bajaba en unos segundos, me hacía sentir mal conmigo mismo, muchas veces porque yo no actuaba como el hubiera actuado, especialmente en ámbitos sexuales. Me obligaba a hacer el intento de estar con compañeras cuando no quería, incluso cuando encontré pareja, y en este tiempo cuando le decía que no, que quería ser fiel, me trataba de tonto. Me ponía a prueba, y cuando no las pasaba me decía que le estaba fallando. Me hizo ver el mundo como él lo hacía y diría que eso me hizo mucho daño, y lo sigue haciendo hasta el día de hoy. Es una persona extremadamente manipuladora, quien te puede mentir a la cara sin pestañear un ojo. Yo le pregunte muchas veces si le había dicho cosas a x persona, y siempre mentía. Creaba cahuines entre los alumnos y se divertía con ello, pelaba a la mayoría, y toda situación la veía como una lucha de poder. Los estudiantes para él, eran una prueba para ver hasta cuanto podía llevar sus habilidades. Me obligaba a hacer cosas que yo no quería. Una vez me presiono para que le preguntara a una compañera si es que a ella le gustaba Diego, con el objetivo de poder manipularla a ver si le resultaba algo con ella. Me decía con quien no me tenía que juntarme y con quien no debería estar. Y el veía hasta que punto lo podía llevar, y cuando veía que lo estaba forzando mucho y podía perder su influencia sobre mí, retrocedía.
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funadiegorozo · 5 years
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Cada vez que me pongo a recordar me salen más cosas así que decidí escribir más: Me decía cuando yo estaba saliendo con alguien que él si estuviera en su lugar me aprovecharía mucho más y hace rato ya que ya me habría llevado a su casa. Y siempre dando a entender con sus historias y todo que él sí sabía darle placer a una mujer y como hacerlo bien. Y te hacía sentir mal si no eras como el que se había tirado a millones de mujeres, según el. Y a esto llega porque al principio para que una no sospeche te dice que cree que tienes un tema con la sexualidad porque él sabe leer a la gente y que él te quiere ayudar porque él sabe mucho de eso y que puedes confiar en el etc. Y dice : “esto no se lo he contado a nadie más pero te lo cuento a ti porque te tengo mucha confianza así que SE que no se lo vas a decir a nadie ni menos a Ángela”. Aveces me intentaba de convencer de que tenía que dejar mal a mis compañeros en clases y me decía lo que les tenía que decir. Me decía como : “ no tienes que quedar bien con todo s, atrévete hacer esto y quedes como la chora y atrevida , nadie se atrévete a hacer esto, atrévete tu” , siempre intentaba sacarme mi lado “oscuro” por decirlo así y yo le decía que yo no era como él y que yo no iba a hacer eso y él en respuesta me decía que yo era muy polla.
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funadiegorozo · 5 years
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Yo fui al preu en el 2014, siempre me cargo Diego, de hecho estar en sus clases y por el trato a nosotros sus alumnes decidí no estudiar teatro y salirme del preu porque rompió todo lo que yo creía que el teatro podía hacer socialmente, el nunca tuvo comportamientos impropios conmigo ya que yo tengo un carácter fuerte y fui alumna de gente conocida en el ambiente del teatro que él conocía , yo creo que esa fue la razón por la que nunca se dirigió a mi de esa forma A una amiga y a mí nos decía que se notaba en la cara quién era virgen y quién no. A mí siempre me pedía masajes y yo se los hacía porque había confianza. Una vez me pidió uno cuando estábamos solos en una pieza y él se había sacado la polera. Me cohibí pero lo hice igual. Otra vez me dijo que le mostrara mis piernas por x tema (tenía que bajarme las calzas) y lo hice. Ahora sé que es rebasar los límites de la confianza y entiendo por qué siempre me dio vergüenza contar que yo había hecho eso.
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funadiegorozo · 5 years
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Yo formé parte de la escuela en el año 2017, donde mi experiencia dejó mucho que desear e incluso en su momento me hizo dudar si la actuación era lo mío o no. Diego es una persona que avala el bullying y demasiado manipulador, yo entre en el preuniversitario teatral donde nunca me sentí cómodo con como funcionaba. Nunca normalice su actuar por lo que nunca forme parte de un grupo de alumnes. Siempre me sentí apartado y excluido. Hasta el punto de perder la motivación por ir. (Rescató que fuera de el pre me volví a encontrar con alumnes que son personas hermosas y gracias a ellos me llevo un lindo recuerdo de esta experiencia)
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funadiegorozo · 5 years
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Yo estuve en la máquina del arte el año pasado , este año en la U de chile a principio de año tuve una charla de abuso y ahí por primera vez me di cuenta de todo, entonces me puse a reflexionar y a recordar y me di cuenta de todas las cosas que había aguantado, justificado , que me había hachado la culpa a mi como que yo era la exagerada o pasada a rollo , y comencé a hablar con gente y me enteré de más cosas que habían pasado. Partiendo porque yo llegue a la máquina del arte muy , vulnerable y necesitada de un apoyo o algo, y él se aprovechó de eso y de mi ingenuidad y siempre me decía que yo era especial y la más linda y que le encantaba mi cuerpo, me pedía que le mostrara la guata y que mostrara más mi cuerpo y siempre preguntándome cosas de mi vida sexual con DETALLES y él a la vez contándome las suyas y historias súper asquerosas que yo no sé porque aguante escuchar, y siempre me decía “no le digas a la Angela” . Siempre así diciéndome que teníamos una conexión y que él estaría con migo si fuera otra circunstancia y algo que recuerdo que lo encontré muy raro fue una vez que lo acompañe a comprar y le dijo al señor que tenía un problema , que me había dejado embarazada y yo estaba para adentro y luego se empezó a reír y le dijo : no si es broma pero ojalá. Y yo me quede con una sensación muy rara. Bueno todo esto , además de la forma en que hacía las clases , lo mórboso todo el como nos hacía competir ,como me ponía en contra de mis compañeras :” cuidado que ella te quiere cagar” , “ella anda hablando mal de ti te tiene envidia , enfréntala “,además de veces que me intento convencer de que me metiera con alguien , que le diera un beso a un compañero que no me gustaba y me daba vergüenza además. Le encantaba meterse en las relaciones de pareja y separarlas y armar otras. Siempre todo lo llevaba a algo sexual y siempre a su entretención. Muy manipulador y mentiroso, cuantas veces que me dio vuelta cosas, o me convenció de cosas. Siempre muy en una posición de poder y de aprovecharse de sus alumnos y tratarlos como esclavos , en la excusa de que le debían un favor y que eran amigos y que mínimo que le hiciera un favor. Yo creo que Diego tiene rasgos de sociopatia, la nula capacidad de sentir empatía, lo narcisista , la necesidad de poder y de tener gente en la Palma de su mano, manipulación, controlador ,mentiroso y morboso.
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funadiegorozo · 5 years
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Conocí a este tipo hace muchos años, tenía 16 años en ese entonces y estuve 2 años en la máquina del arte. Fui mamá a los 15 por lo que cuando entre mi hijo ya tenía cerca de un año. Mis papás con mucho esfuerzo pagaron mi estadía en esa escuela, para mí siempre fue muy importante el teatro y quería a toda costa ser actriz. Diego me hacía sentir muchas veces culpable por no tener dinero y pagar mis mensualidades a tiempo, me decía que tenía que pagarle de otra forma y se reía de mi incomodidad. Para seguir con el tema. Me hacía sentir culpable de mi falta de dinero y me decía como "chiste" que le pagará de otra forma. Otras veces me decir "tallas" cómo que me gustaba poco por haber sido mamá joven, yo no me reía y el también me molestaba porque me enojaba. Habían veces que se molestaba y dejaba de havlarme, la verdad es que para mí era mejor incluso me sentía mejor al no cruzar en palabras, peor luego se desquitaba conmigo en escena. Recuerdo una vez que me llamo a su oficina y me dijo que porque yo no le hablaba, le dije que el me dejó se hablar y yo rogaba a nadie la amistad. Me dijo que era una mala agradecida por qué el me había ayudado con las mensualidades, que pocos autorizaban llevar a los niños a la escuela y el lo hacía (cosa que hice una vez) que gracias a él yo iba a ser actriz y un montón de cosas más. La verdad es que me demostive y deje de ir a mitad del segundo año. Nunca entre a la Chile y menos a la Cato, soy actriz y egrese de la escuela de teatro los leones, lamentablemente siempre normalize este tipo de abusos, Diego es una persona super dominante, sus celos, su misoginia es terrible y solo lo lamento mucho por su pareja y su hijo. Si bien en todos lados existe este tipo de personas culias, el teatro es más que eso y no se puede estar manchando por personas tan nefastas como Diego. Ojalá se pudra (me entró el odio al recordar todo, lo había olvidado)
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funadiegorozo · 5 years
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Luego de leer los testimonios de tantas personas me armé de valor para decir aquello que me molestaba de Diego Rozo. Yo no viví situaciones de acoso tan fuertes como algunos otros testimonios, pero si hubo momentos en los que me sentí incómoda junto a él. Yo estuve 2 años en La Máquina del Arte. En el segundo año recuerdo que luego de la prueba diagnóstico tuvimos entrevistas con Diego y Ángela, en donde te hacían preguntas similares a las que se hacían en esos tiempos en las universidades. Hubo preguntas que no supe responder, y la verdad la actitud de Diego me hizo sentir que era una persona tonta. Además de eso, la última pregunta que me hizo nada tenía que ver con la simulación. "¿Te gusta el ______?". Yo quedé atónita, ¿cuál era la finalidad de preguntarme eso en este contexto? Le respondí que no me gustaba, e insistió una vez más, a lo que nuevamente respondí que no, un tanto molesta. Nunca más volvió a hablar o preguntar sobre ese tema. Recuerdo otro momento en el que estaba tarde en la máquina. Él me dijo que me quedara un rato y me hizo pasar a su oficina. Ahí me hizo probar la absenta (un trago con bastantes grados de alcohol). Accedí a tomar un cortito para probar, y seguimos conversando. Al rato me vuelve a ofrecer otro shot y me negué. Volvió a insistir y le dije que no quería, porque no era una persona acostumbrada a tomar alcohol y el trago era muy fuerte para mí. Luego de eso me quedé más rato porque me pidió que lo acompañara mientras cuidaba a su hijo. Me quedé, pero me sentí incómoda hasta el último minuto en el que estuve ahí. En otra ocasión, Diego hizo que un amigo, alumno de la escuela tambien, me diera un piquito, y luego de eso Diego me dio uno y se fueron rápidamente. Yo no alcancé a reaccionar en el momento. Después de eso me sentía mala persona, de alguna forma fallándole a Ángela por no haberle contado, aunque para mí en ese entonces le estaba "dando mucho color". ¿Cómo iba a estar dándole color si era una persona 20 años mayor que yo, casado, mi profesor, y que me estaba robando un piquito sin mi consentimiento y sin siquiera haber dejado que reaccionara? Lo último que puedo agregar es que varias veces Diego me hizo sentí tonta en clases, y creo que a varies compañeres les hacía lo mismo, sobre todo a mujeres. Siento que en realidad no nos respetaba. Siempre pelaba a compañeres a sus espaldas, nos tiraba cosas si bostezábamos en clases, siempre andaba mostrando videos con mucho morbo. Diego Rozo me parece una persona repudiable, una persona doble estándar. Esto en algún momento iba a explotar, ya que son demasiadas las actitudes que este hombre tuvo con muches de sus alumnes que no correspondían. Mucha fuerza para cada persona que contó su testimonio, y también para aquelles que aún no han contado el suyo. No estamos solxs.
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funadiegorozo · 5 years
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Diego Rozo es una persona que gusta de humillar, maltratar, acosar y abusar de sus alumnxs. Diego no hace las cosas por casualidad o porque sí, el es un sujeto muy inteligente, estratega y calculador. Analiza a la gente con la que puede cometer ciertos actos y con la que no. Es un torturador que siente placer con hacer mal a la gente. Es un maltradador, manipulador y abusador lleno de impotencia y rabia por dentro que disfraza dentro de esta fachada amigable que muches conocemos. Es así como son los abusadores. Él hace sentir que tiene mucho poder y que puede hacer cualquier cosa, amenaza de manera muy sutil que cualquier cosa que suceda el tiene mucho poder en el mundo del teatro.
Fui testigo de muchos sucesos que se nombran en los testimonios. El "No le digan a la Ángela", sus historias retorcidas, sus videos asquerosos que mostraba, el trago en su oficina, como manipulaba a compañerxs para que se dieran besos frente a él, comentarios homofóbicos, racistas, y clasistas. Como abusaba de su poder conmigo y compañeres. A las mujeres las objetibiza y a los hombres los enaltece. Es un macho patriarcal. Yo entre con 18 años a este lugar. El primer día nos dijo "Mujeres mírense entre ustedes" "Hombres mírense entre ustedes": "Ellxs son su competencia". Acto que encontré nefasto. él gusta generar competencia entre sus alumnes, le gusta como competimos entre nosotrxs. También viví el juego de pegarse, en el cual yo me sentí muy incómoda. Cuando finalizó el juego demostré mi repudio a tal acto violento frente a todes. A lo cual responde "No sos para la Chile, eres muy delicada. Sos de la Católica, ahí los tratan mejor" Yo me quedé callada porque no fui capaz de sacar mi rabia para afuera. En el primer simulacro de prueba especial, él daba comentarios personales a cada une. Solo tú y él en su oficina. En mi turno, el me dijo "Te veo mucho futuro. Sos muy guapa y a las guapas les va bien en esta carrera. Enserio, sos guapa" Lo cual me hizo sentir extremadamente incómoda y respondí con un "Gracias" porque quedé helada. Ahora lo pienso más y no le correspondía decirme eso a mí una mujer de 18 años cuando el tiene más de 40 años. A un docente no le corresponde. Me sentí como un objeto y que esa era mi única cualidad para ser actriz. En una ocasión en su afán por querer emparejar a gente, dijo frente a un amigo muy querido mío "Ustedes dos deberían estar juntos, deberían ser pololos" Lo cual me hizo sentir sumamente incómoda y avergonzada, corrí al baño a esconderme porque me sentí muy expuesta. En clases vi como constantemente sexualizaba a una compañera de mi generación, le hacía hacer cosas netamente sexuales en improvisación. Vi como avalaba improvisaciones maquineadas de una manera enferma al punto de ver compañeros míos simular masturbarse al frente de todes. Vi a compañerxs sumamente afectadxs por su actuar y decir. Humilló a mucha gente frente a mí. Se burlaba de sus características físicas y hablaba de todxs a sus espaldas. Tener clases con el me causaba un constante estrés y me ponía muy mal. Salía con jaquecas y dos veces vomité. Sus clases no me enseñaron nada. Era sólo un festín para él. Y ahora estudiando la carrera me di cuenta de toda la mierda que el me metió en la cabeza y me ha costado mucho sacar de mí. .Compañerxs no están solxs.
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funadiegorozo · 5 years
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Estuve en la máquina del arte hace muchos años, cuando estaba en el colegio, tenía 16 o 17 años, y Diego siempre fue muy amable conmigo, queriendo ayudarme, dandome consejos para la universidad etc, recuerdo que un dia, los fui a ver a fin de año cuando estaba dando las pruebas para entrar a la universidad, y con mis compañeras de preuniversitario hicimos un circulo conversando en la salita de la entrada, él se sentó al lado mío conversando con todos e hizo una pregunta, algo asi como con quien creen que pololiaría o me gustaría de uds (lo digo así porque fue hace mucho y realmente no recuerdo la pregunta exacta) pero si recuerdo que todas empezaron a decir nombres jugando y cuando pasó el tema y la conversación se abrió el me dice en la oreja, te cuento un secreto, eras tú. Yo no supe bien como reaccionar, pero debo recordar que tenia 16 o 17 años, no dimensioné la situación ni sus palabras hasta años después. Más tarde cuando entré a la universidad fui a agradecerles, solo estaba el así que pasé a su oficina, no sé como el tema llegó a que yo no estaba pololeando, y él empezó a decir que feliz estaría conmigo, todo como en un supuesto, el feliz estaría con alguien como yo partió pero después empezó a halagar mi cuerpo y la frase q repetía: yo feliz estaría contigo. Siempre me decía que me encontraba guapa, pero esta vez fue demasiado directo todo. Aún así yo no supe reaccionar, no supe como tomármelo. Años mas tarde recién entendí la situación, y siempre recuerdo ese episodio porque me hubiese gustado defenderme, Dejarlo en verguenza, encararlo por estar diciendole ese tipo de cosas a una menor de edad que ademas era su alumna. Por eso no me cuestiono los testimonios, porque perfectamente si tuvo ese comportamiento conmigo lo tuvo con más alumnas, y es muy probable que sea un patrón y que muchas chicas vivieron cosas peores. Tambien dejo en claro que mi funa es para diego, no la escuela ni su equipo docente
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funadiegorozo · 5 years
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Conocí al Diego y a la Angela el 2016, cuando hice el preuniversitario teatral en La Máquina. Ambxs me cayeron muy bien de inmediato y me sentí bien en la escuela los dos primeros meses. De Ángela no tengo nada ke decir, más ke es una profe excelente y mujer bacana, pero a medida que avanzaba el tiempo y conocía más a Diego, más me desagradaba, no me gustaba tener clases con él, lo encontraba prepotente, tiraba "tallas" sexistas y se hacía el bacán, varias veces contó bromas crueles que había hecho con sus amigos y se reía, más de una vez me preguntó si había hecho un trío o si me gustaban las mujeres, tenía muchas actitudes ke hoy en día considero patriarcales. Recuerdo también muchos ejercicios que eran sexualizados en sus clases (ke eran de improvisación), como de tocarse o tener puntos de contacto corporal con otres con distintas partes del cuerpo, varias veces y sobre todo a cabras, nos pegaba fuerte en el poto cuando nos salíamos en un ejercicio específico, siempre recalcaba ke había ke jugársela en la escena, darlo todo y esto para él era sinónimo de lo sexual, de besos, de empelotarse y tocarse, de hacer alusiones a violaciones, abusos o calentura, y en general formas de hacer teatro ke hoy en día considero muy violentas. Recuerdo un día ke al término de una clase yo estaba recogiendo mis cosas cerca de la escalera en el segundo piso y abrigándome cuando el pasa por atrás mío, yo estando semi agachada, y sujetándome de la cintura me puntea, "no te podés poner asi" me dice riéndose y se va. había dos cabros más, hablando entre ellos ke ni cacharon. yo no dije nada, me puse roja y me reí, pero no me sentí bien, "filo". me enojé conmigo por no decirle alguna hueá como una semana después y de ahí lo evitaba cada vez ke podía y me daba entre rabia y pena ver como otrxs cabrxs tenian tanta buena onda con él, era enfermiza la necesidad ke sentía de querer ser su amiga tambien, todo eso, por la posición de poder ke tiene y la manipulación ke ejerce. Cabrxs ke pasaron por weas así con él, les creo y tienen todo mi apañe. en todos los espacios, todos van a caer. Anónima.
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funadiegorozo · 5 years
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Estudio teatro en la universidad mayor y fui alumna del preuniversitario teatral de la máquina del arte. Este lugar fue mi primer acercamiento al teatro, conocí a gente maravillosa y es por eso que no quiero dirigir esta funa hacia esa institución, si no exclusivamente a Diego Rozo, dueño, director y profesor de la máquina del arte. Quisiera partir apoyando lo descrito anteriormente por las otras cabras, ya que yo misma presencié cómo Diego sin pudor les hacía preguntas incómodas e íntimas a sus alumnes delante de todos les demás (preguntas comunes de él eran si éramos vírgenes y que cual era nuestra sexualidad), contaba sus experiencias sexuales, vislumbraba que en su pasado él había sido un mujeriego, hablaba mal de alumnes ausentes en ese momento y todo lo volvía a un ámbito sexual, tanto que en sus clases de improvisación casi las únicas que a él le gustaban eran las de contenido sexual y te incitaba a darle besos a tus compañeres o a sacarte la ropa, todo esto lo normalicé e incluso creí que era parte del teatro, que si no lo hacía no tenía el coraje suficiente para estudiar esta carrera (dentro de ella entendí que no tengo porq exponerme a situaciones que me incomoden) Se acercó a mí porque quizo persuadirme miles de veces para q yo me cambiara a otro curso, el cual costaba casi lo mismo que la carrera, me convenció de que era lo que yo necesitaba para poder aprobar las pruebas especiales y que si no me cambiaba iba a ser muy difícil que yo las aprobara , empezó a hacerse mi amigo, yo como weona le creí todo e incluso le conté cosas mías súper privadas. A mi papá nunca le gustó Diego, me dijo q era turbio y q no podía pagar su curso, el cual él encontraba q era enfermo de caro, le conté esto a Diego y su trato conmigo cambió, ni siquiera saludaba ahora. En fin, pasó el tiempo y al final mi padre me dijo q me podría pagar un mes. Fue él mismo a hablar con Diego y este le dijo q no me aceptaría y tergiversó las cosas dejándome mal con mi padre, me tomó por sorpresa todo esto ya que el frente amo siempre se presentó amistoso. Al final fui yo a hablar directamente con él a su oficina y después de un rato de llorarle y prácticamente rogarle q me aceptara, me dijo q lo haría pero solo con una condición, me miro fijo y estando solos en su oficina con la puerta cerrada me dijo: “sácate la polera” A lo cual yo ultra nerviosa no le respondí, insistió, yo le dije que no quería, que me daba vergüenza (el sabía que a mi me acomplejaba mi físico y sobretodo mis pechugas) me dijo entonces que si no lo hacía, no había nada q hacer y me mostró la puerta, le dije q no, q yo quería quedar en las pruebas y q él me aceptara pero q me daba mucha vergüenza sacarme la polera, entonces llamó a una compañera sin que le dijiera y terminé dándome vuelta y me saqué la polera de espaldas, me dijo q me diera vuelta, lo hice de a poco, no puedo expresar lo ultrajante incómoda que me sentí en ese momento, no sabía lo que estaba haciendo, no sabía si era lo correcto, ya ni siquiera sabía si quería estar ahí, pero seguí adelante de todos modos. Me di cuenta de que ese curso carísimo no valía todo lo q costaba,(a excepción de las clases otorgadas por Ángela Cabezas, quién si me ayudó realmente) ya que las clases con Diego no eran mucho más que acompañarlo en sus quehaceres y conversar con él, siempre hacía cosas a espalda de su esposa y co-dueña de la máquina, una vez me agarró y me metió la lengua a la oreja estando su esposa de espalda y un par de alumnes presentes, yo asqueada pegué un grito y el con sus gestos señaló a Ángela y me dijo que me callara, siempre viví esas pequeñas situaciones, tantas normalicé que ya ni las recuerdo. Pero una cosa que jamás olvidaré fue cuando estuvimos preparando la escena en parejas para la segunda etapa de la Chile, nuestra escena era como de un secuestro, pero Diego lo llevó a algo sexual, entonces yo ya no era una si llene tesecuestrada sino que una esclava sexual, me costaba mucho llegar a la emoción y toda esa situación me tenía ultra incómoda, me tenían q vendar los ojos y solo estábamos en una sala con mi compañero y Diego, después de un rato en el que a mi no me salía nada y Diego me retaba, me dijo que confiara en él y llamo a una compañera, me dijo q empezáramos, entonces me puse la venda y empezamos con nuestra escena, luego empiezo a sentir que me están tocando los senos (el mandó a mi compañera a hacer eso), y toda la circunstancia dada para la escena se me hizo súper real, me acuerdo q terminó la escena y yo estaba llorando, no podía ni mirarlos, me saqué la venda y me felicitó, me dijo que así si iba a quedar y nos dijo a les tres que estábamos ahí, que esto era un secreto profesional y que nunca nadie podría saber esto, me fui traumadísima a mi casa. No quiero que nunca nadie más se exponga a estas situaciones. Saco la voz porque creo que Diego Rozo no puede seguir haciendo clases nunca más.
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funadiegorozo · 5 years
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Bueno desde que yo entré a estudiar al preu teatral, él me intimidó con su simple presencia, siempre lo vi con una posición de poder que normalice por él ser profesor y yo alumna, por ende, siempre hacía caso en todo y encontraba correcto todo lo que él decía o hacía con sus estudiantes. Noté que había una preferencia muy marcada por ciertes alumnes y de alguna manera une también quería encajar en eso, por qué? No sé, creo que dentro de esa misma posición de poder, el te hacía querer ser su amigue. A estas personas les daba especial atención, lo acompañaban a comprar, iban al biobio, iban a arreglar antigüedades, o se quedaban después de clases hablando y a veces tomaban alcohol. También se quedaban ayudándolo en lo que él pidiera, porque parte de su “amistad” era también hacerle favores, sacar al parque al Cefe, Pascua, Titi (perrites), darles agua y comida, cuidarle al hijo, ayudar en la casa de al lado (que compraron y querían hacer solo una casa entre las dos, entonces había que hacer todo el proceso de destruir paredes, etc), etc, en las que no podían negarse porque era “tu amigo” o porque él hacía favores como becar, o ayudar en tus problemas personales, sin embargo, se notaba que había una intención detrás, pero insisto en que su posición de poder no deja decir que no. Esto yo no lo viví, pero si lo vi y escuché siempre desde la normalización, porque nadie se lo cuestionaba. En clases (actuación, casi siempre improvisación) nunca lo entendí, tuve que descifrar yo sola qué era lo que él quería que hiciera, porque al final era darle en el gusto a él para que el ejercicio estuviera bueno. Hablaba mucho del “riesgo” en escena y eso se lograba dándole besos a compañeres y diciendo que si a todo, qué es parte de, pero si te decían que te sacarás el pantalón o la polera (un par de veces, la frase inicial para comenzar la improvisación fue “sácate la polera”) te la tenías que sacar, además de valorar lo bizarro y obseno. Una vez salí como voluntaria para la improvisación y me dijo al oído antes de comenzar que le diera un beso a un compañero, Diego le dice “__ adelante” para que pase a actuar conmigo, comienza la impro y lo hice, porque en mi mente pensaba solo en poder quedar en la U, quería mucho entrar, estudiar lo que amo y a toda costa, entonces a pesar de que no quería, lo hice porque bueno, si es profesor, algo sabrá, obviamente quería ayudarme o eso pensaba. Luego de eso, fuera de clases, me insistía mucho con que estuviera con este compañero para “hacerlo crecer” y yo le dije todas las veces que no. Él se metía mucho en la vida privada de les alumnes, en la mía no tanto porque siempre fui reservada y no contaba mucho, pero igual me afectó porque con otres si era así y eso me involucró. Manipulaba situaciones para que la gente se gustara, se diera besos, terminara amistades, empezara amistades, manipulaba a una compañera para que le dijera a otra que se metiera al curso personalizado (es carísimo), etc. Volviendo a las clases, muchas veces jugamos a pegarnos, era un “ejercicio” en el que todes estábamos muy juntes en el centro de la sala y teníamos que pasar por el centro, sin salirnos del cardumen que teníamos echo, solo se podía pegar en la cabeza, pecho, espalda y poto, y cuando salíamos del cardumen habían compañeres afuera que nos podían pegar si nos veían salirnos. Obviando lo violento del “juego”, el también se ponía a pegar desde afuera, pero solo en el poto y mayoritariamente a alumnas, a una compañera la dejó con un moretón de lo fuerte que le pegó. En otra ocasión estábamos en improvisación y una compañera constantemente daba la espalda, le dijo 3 veces y a la 4ta el le tiro un lápiz a la cabeza que le rozó la cara y perfectamente pudo hacerle daño en un ojo. A principio del curso de mi segundo año (y a raíz de los movimientos feministas) preguntó si nosotres estábamos de acuerdo con darnos besos y sacarnos la ropa en escena porque “posiblemente en la prueba pasaría” y porque “hay riesgo y eso siempre ayuda” en tono muy de presionar o dices que si o dices que si, entonces como une estaba en modo “quiero quedar, quiero quedar”, accedía. Ahora que ya estoy estudiando noto como eso era totalmente innecesario, sobre todo en un contexto de prueba especial. A veces cuando nos quedábamos hasta más tarde comiendo o tomándonos un té o café nos contaba historias, algunas muy bizarras. Recuerdo en específico una en la que él era escolar y tenía un grupo de amigos. Había un chico que todos odiaban por ser molestoso y él y sus amigos lo agarraron, lo llevaron al baño, lo tenían paralizado, y uno de sus amigos (que yo pienso que en realidad era él por todo lo que he visto y escuchado) se bajo el pantalón para “violarlo” (porque según el no era en serio, era solo para asustarlo), el chico pedía que por favor no, llorando, en shock y le dijeron que dejara de molestar y lo soltaron para que se fuera. TODO ESTO RIÉNDOSE. También hubo un accidente frente de la escuela donde las cámaras de seguridad grabaron todo y él mostraba una y otra vez el video a les alumnes. Quiero destacar que muchas veces escuché, respecto a muchas situaciones, conversaciones, cosas que hacíamos, etc, que él nos dijera que no le contáramos a su esposa, muchas, incontables. Esto es lo que vi yo, lo poco que recuerdo porque une olvida cosas (si me acuerdo de otras, volveré a escribir y las pondré) y por lo que yo me sentí vulnerada, algo de mí aún normaliza ciertas cosas en las que me pregunto si estaré exagerando o no, pero escuché más historias que no me corresponde contar a mí y me di cuenta que esto no está bien, ni la violencia, ni lo bizarro, ni la sexualización para conseguir quedar en la U, ni las cosas pervertidas que él hace a otres que podrán o no leer acá, porque existe mucha gente con miedo a hablar, incluso con sus amigues. En conjunto no, no está bien. Fuerza chiques.
Alumna Finis Terrae
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funadiegorozo · 5 years
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Estuve durante dos años en el preu teatral de La Máquina del Arte, la primera experiencia incómoda que tuve por culpa de Diego fue cuando un día llegué más temprano a clases junto a una compañera, en la escuela habían un par de personas más, entre elles un compañero con el que salí a conversar a la entrada del lugar. Luego de unos minutos ahí, alguien cerró la puerta de entrada a la casona, por lo que quedamos con la reja y la puerta cerrada, sin poder salir o entrar del lugar. Luego de eso se llevó al resto de personas a pasear a los perros al parque para que mi compañero y yo quedáramos solos en el lugar, yo dije que también quería ir (no quería pero sabía que algo raro había en la situación) y él me respondió que no, que me quedara ahí porque alguien tenía que cuidar el lugar. En ese momento el chico con el que estaba me invitó a ir a su casa, a lo que yo no accedí. Durante ese período de tiempo Diego me dijo en repetidas ocasiones que fuera a la casa de X, que aprovechara, que para qué estaba pololeando, que X era guapo, tenía una casa increíble y tenía mucha guita (plata); como nunca acepté, dejó de insistir. El segundo año, se volvió a repetir un “ejercicio” que consistía en pegarnos en distintos lugares según él iba indicando (cabeza,pecho, espalda, rodillas, trasero). Aparte de ser un ejercicio completamente violento y sin sentido, era un momento en que él aprovechaba de tocarnos sin ser cuestionado, ya que la mayoría normalizamos ese tipo de prácticas pensando en que así era el teatro. Durante el ejercicio, me golpeó el trasero al menos 4 veces, y una última vez cuando terminada la clase yo iba saliendo de la sala y me volvió a golpear tan fuerte que le dije “Diego, eso me dolió” en voz alta. Su respuesta fue: “Cállate, qué andas hablando webadas”.  Ese mismo año, durante una celebración que hubo en el lugar, estábamos tomando y bailando con la gente de preu, yo estaba algo borracha pero como ese era un lugar seguro, no me preocupaba… una compañera que estaba junto a él, se me acercó mientras yo bailaba y comenzó a subirme la polera hasta sacarmela, yo no le di importancia al hecho hasta que noté que él estaba mirándome desde una esquina. Luego de eso me enteré que fue él quien envió a la chica a hacerlo. Creo es importante destacar que en el lugar hay cámaras por lo que podría revisar cuántas veces quiera las grabaciones. Una de las últimas malas experiencias que tuve con Diego se dió una noche en que saliendo de clases nos pidió que nos quedaramos con él un rato más, éramos 3 personas. Nos quedamos, él puso música en su oficina y nos llamó para que viéramos los vídeos con él. Estando ahí puso una canción que tiene connotación “sensual” y le dijo al compañero que estaba ahí que bailara conmigo y me cantara, él comenzó a cantarme al oído y Diego comenzó a hacerle señas para que me diera un beso, yo me dí cuenta, me alejé un poco y en eso Diego le grita “ahora!”, mi compañero mueve rápidamente su cabeza para darme un beso, pero me corrí rápido y no pudo hacerlo. Todo ese momento me sentí como si no existiera, como si fuera un “algo” que está ahí para hacerle lo que se te antoje sin importar si estaba de acuerdo o no. La Máquina del Arte es para muches su primer acercamiento al teatro, lo fue para mí y mis experiencias con Diego me formaron una visión del teatro completamente errónea, creyendo que el acatar sin cuestionar, la sexualizacion del trabajo y el hacer cualquier cosa que pase nuestros límites “porque somos actores” era el camino para tener éxito. Estudiante Escuela de Teatro UC
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funadiegorozo · 5 years
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Fui alumna del preuniversitario teatral de La Máquina del Arte por 2 años , quiero decir antes que todo que mi funa va dirigida exclusivamente a Diego, nada tiene que ver el resto de docentes de la institución. Empezaré diciendo que Diego es una de las personas más manipuladoras, hipócritas y asquerosas que he conocido en mi vida. Las razones por las que lo califico de esta manera son varias, infinitas, pero me referiré solo a algunas. Yo estuve dos años en el preu teatral de la máquina, partiré relatando lo que ví o viví el primer año, en el cuál entré con 17 años. Yo en ese entonces no había tenido relaciones sexuales,  a lo que Diego hizo alusión a eso todo el año, en un momento me sentí tan presionada por esto, que estuve a punto de pedirle a mi ex que lo hiciéramos, ya que todo ese año por sus “tallas” o comentarios me hizo sentir como que era algo malo “ser «virgen»” . Eso podría decir con respecto a mi primer año de máquina y mi relación con él , ya que fue en Segundo año de preu en dónde me di cuenta la mierda de persona qué es, aquí me di cuenta lo manipulador que puede llegar a ser, siempre estaba persuadiendo a alumnes para que hicieran lo que él quería, para que algunes se comieran, incluso que tiraran, recuerdo haber hablado con compañeras que me contaban que Diego les había pedido tirar con “X” persona para “hacerlo crecer”, constantemente estaba preguntándonos sobre nuestras experiencias sexuales en donde cada vez que lo hacía repetía “qué no se entere Ángela”, esa frase la decía constantemente, quiero decir que todo lo que él hacía lo tenía muy normalizado, sin embargo, siempre me sentí incómoda, algo en mí me decía que nada de lo que pasaba estaba bien. Recuerdo que el primer año , Diego nos hizo un ejercicio que en mi segundo año volvió a repetir; este consistía en que crear un círculo al medio de la sala en donde teníamos que golpearnos -literal- en varias partes del cuerpo, no me acuerdo específicamente de qué partes , solo sé que uno era la espalda, y el poto. El primer año no quise participar mucho ya que lo encontré súper agresivo e invasivo, ya que él lo alentaba, ese primer año lo pasé tan mal durante ese juego que él mismo me sacó y dijo algo así como que yo era muy chiquita y prácticamente frágil. Todo lo que nos enseñaba se supone que era para poder quedar en las pruebas especiales de teatro, así que cuando en segundo año volvió a repetir el ejercicio decidí participar a toda costa, la penitencia para les que perdían el “juego” era una nalgada entre nosotros, pero en un momento él dijo que nosotres no sabíamos pegar y qué el nos iba a enseñar, me usó a mi como modelo diciéndome (como lo manipulador que era) que “entre nosotros había confianza, cierto?” , yo ilusamente accedí. Nunca en mi vida me habían dado una nalgada tan fuerte, fue tanto que caí al suelo del dolor, al otro día me revisé y tenía su mano marcada , en forma de moretón, mi abuela me la vio y me preguntó inmediatamente qué me había pasado, yo no quise decirle la verdad e inventé que me había caído quizás, qué no sabía de donde era ese moretón, ella lo puso en duda porque claramente era una mano la que tenía marcada en el trasero. Cuando volví a clases, le dije que me había dejado un moretón , estábamos en el baño mixto, con más compañeras presentes, recuerdo que se hizo el desentendido y dijo que él no había sido, que no hablara esas cosas , que eran mentiras y que “la Ángela las podía escuchar” . Diego, aparte de manipulador, es muy cínico, siempre estaba hablando mal de sus alumnes y luego cuando llegaban, les abrazaba y decía que les quería, incluso. Recuerdo también que una vez llamó “chanchita piggy “ a una alumna por su peso (obviamente a espaldas de ella) . También supe que hablaba mal de mí con otres,  para que se alejaran de mí, que no fueran mis amiges ,manipulándoles, aunque no lo logró , porque elles sabían que era solo un manipulación más de él .Recuerdo también de una vez que a mí con una amiga nos persuadió tanto para que tomáramos un trago fuertísimo en su oficina, que acepté, no quería hacerlo realmente porque sentí que no correspondía pero finalmente acepté porque sentí su presión, me sentí rara todo ese momento, incómoda ,sobretodo porque nos dijo que no le podíamos contar a nadie, eso me hizo sentir aún más incómoda, aunque bueno, él siempre me hacía sentir incómoda, hasta cuando me saludaba , ya que siempre me corría el pelo detrás de las orejas y me besaba la mejilla, suena muy “normal” , pero él lo hacía de una forma en la cual me incomodaba. Si nombrara todas las cosas que ahora más que nunca sé que estaban mal, no terminaría nunca, realmente nunca, pero creo que con lo que he relatado es más que suficiente para saber que es una persona asquerosa, manipuladora , y todos los sinónimos que quieran ponerle. Esto no lo hago por mí, lo hago por todas las que vendrán, porque ya no nos podemos seguir quedando calladas, ya es momento de decir basta y que esto no vuelva a pasar nunca más.
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funadiegorozo · 5 years
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Hola, soy una estudiante de la universidad Finis Terrae y hace unos años fui alumna de la escuela La máquina del arte. 
Una tarde en la cual estábamos celebrando el término de ciclo en el preuniversitario teatral, donde como contexto estaban todes bebiendo alcohol y bailando hasta no poder más, yo me acerco a la oficina de Diego Rozo, profesor y director de la institución y vi como este se estaba dando un piquito con une compañere en su oficina, luego de eso salen de ahí, se acerca a mí y me toma la cara para darme un beso, yo le corrí la cara diciéndole que no y me decía “es solo un piquito” “te vas arrepentir”, yo nerviosa ya que su pareja y su hijo estaban ahí mismo solo me reí y me corrí, fue un momento bastante extraño he incómodo, luego de los días pensé “quizás hizo eso porque estaba muy ebrio” “quizás yo estoy exagerando, era solo un piquito”, “Yo dándole vueltas a esto y demás que él ni se acuerda”, siempre tratando de justificar y de cierto modo normalizar ese acto. No fui a ese lugar hasta que con una amiga decidimos ir a ver una obra, al término de esta me encontré con una profesora la cual nos quedamos conversando en su oficina, ella salió a ver algo y en lo que ella sale, Diego entra, cierra la puerta y mirándome fijo se sienta al lado mío, desata una rosa que tenía en mi blusa y me dice “que linda te queda esta blusa” tocando mi hombro, yo nerviosa, no le dije nada, solo pensaba en lo mucho que quería que regresara la profesora (su pareja), para sentirme segura, lo bueno es que eso ocurrió al instante. Su mirada y su presencia cuando no había nadie cerca me recordaba mucho a la de un tío que siempre intento propasarse, realmente era volver a ese recuerdo con esa sensación y solo me daba asco, pena y rabia, y más aún en ese momento ya que no fui capaz de decirle nada... Es como si te estuviera analizando constantemente, como si tuviera el poder sobre ti y sobre el de cualquier persona… Luego de eso comencé a recordar conversaciones que tuve con él durante el año, siempre me preguntaba por mi parte íntima y sexual, pedía detalles y yo sin pensar que fuese algo que no correspondía accedía a ello, una vez me dijo que él tiraba muy bien y que ya había sido infiel anteriormente, con qué fin? En el momento no entendía. Siempre andaba viendo y mostrando videos bizarros, una vez contó cagado de la risa que con unos amigos por molestar a otro, simularon una violación casi real, o cuando para una celebración contexto carrete (la misma celebración en la que intentó darme un beso), él planeó que yo me besara con otra compañera (compañera que me gustaba mucho y él sabía), con ella frente todes nos dimos un piquito y fue.. Luego Diego me lleva a un lado y me dijo que me pasaba de tonta, que él me había ayudado y yo ni siquiera fui capaz de tomarle la cara y meterle la lengua. Yo sólo le respondí "Lo siento, es que me puse muy nerviosa", normalizando ese actuar. Ahora que lo pienso y logro darme cuenta de tantas cosas que en su momento dejé pasar o acepté, me hacen escribir esto. Él me hacía sentir incomoda, su manera de mirarme, su modo de actuar cuando había gente o cuando estaba solo, el hecho de que siempre repitiera “Que no sepa Angela”, “No vaya a escuchar Angela” ahora puedo entender más cosas. Jamás fue mi amigo, era mi profesor y nada de eso correspondía, solo espero que no sigamos normalizando esos “detalles” como yo les llamaba. No quiero que esto siga ocurriendo y que el miedo sea más grande, tenemos que hablar y visibilizar estas cosas y estos actos, yo gracias a bellas mujeres que me escucharon y creyeron puedo decir que no exagero y que esto tampoco es un tema a la ligera.
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