Tumgik
Link
Con Cine Splendid en la lista
0 notes
Link
Cuando hacés (también en primera persona) el trabajo de documentar el paso de Paraguay por Mirada 2018. 
0 notes
Link
Nuestro paso por Mirada 2018 nos puso en cartel en dos ciudades: Santos y São Paulo. Recuento (en primera persona, como siempre)...
0 notes
Photo
Tumblr media Tumblr media
Publicación de la Revista Vos: https://www.lanacion.com.py/revista-vos/2018/07/02/el-cine-splendid-vuelve/
0 notes
Link
De cuando escriben sobre la obra... y temblás.
0 notes
Video
Estreno en Paraguay
0 notes
Text
Espera(nza)
Abril a poco menos de una semana de las elecciones generales en Paraguay.
Calor.
Humedad.
Tumblr media
Resaca de memes tras noche de pseudo debate. Tras  la risa que me desata siempre la inventiva… me atropella el desasosiego.  Nosotros (la mayoría) nos quedamos solo en eso… en la burla… No llegamos a la crítica… No… porque  la crítica nos obliga a mirarnos también a nosotros mismos… Nos obliga a ver que no hacemos nada y que todo en nosotros es efímero… hasta el entusiasmo por lo efímero.
No tenemos opciones…
No buscamos opciones…
No creamos opciones…
No nos volvemos opciones…
Así está nuestra política… que es meramente partidista… que escasamente es ciudadana. Así está nuestro teatro también (Mea culpa in extremis y con intento de no levantar el dedo hacia ninguna otra parte que no sea el espejo).
Humedad…
Tumblr media
Y mientras tanto… veo la toma del triplex  de Guaruja que es la razón de que Lula esté condenado. Un triplex que él niega y que la justicia le adjudica… Entonces…  Un colectivo lo toma… El posteo hace un ejercicio simple de lógica simbólica: “Si es de Lula, la gente puede quedarse. Si no lo es, ¿por qué está encerrado?”
https://www.facebook.com/guilhermeboulos.oficial/posts/1016594178491133
Allá la toma… aquí… la resignación…
Al sillón presidencial “probablemente” llegue el heredero de Mario Abdo, quien fuera parte importante del aparato dictatorial de Stroessner. Sí, él es un producto (como yo, como toda mi generación, y las que vinieron después inclusive) de ese sistema que nos privó del uso de la palabra… Pero… a diferencia de mí… "Marito” se jacta.
La dictadura fue tan eficaz… que muchos creen que no existió como tal… que fue una época de paz y progreso… de ventanas abiertas… de trabajo… de Dios, Patria y Familia… y nada más.
PROBABLEMENTE. Me detengo en el uso que hago de esa palabra para hablar de los resultados electorales. Sé que ese PROBABLEMENTE responde a mi espíritu de sobrevivencia, ése que quiere dejar un lugar a la ESPERANZA…
Sí, quiero que se cuele la ESPERANZA que encuentro representada en el saltamontes que apareció de la nada en mi departamento que está en un tercer piso sobre una calle céntrica… Esa que me hace pensar que mi celular quebrado tiene arreglo porque suenan los despertadores programados.
Pienso en “Matar un muerto”, la película en la que colaboro desde la retaguardia, juntando la información necesaria para dar veracidad del tiempo en que se desarrolla…
Pienso en esa conversación con Adri que me invita a ser parte de algo que desde el inicio, me modifica. Veo, busco, leo, pregunto, repregunto… sobre cómo se vivía cuando “El Rubio” era presidente, cuando se emulaba aquí al “Gran Hermano”, en medio de una realidad que la mayoría prefería ignorar…
Vuelvo una y otra vez a la paradoja del árbol, “Si cae y nadie lo escucha, ¿existe?” ¿Qué pasa si la gente sabe que cae… pero prefiere no decir que percibe el sonido… aun cuando toma el hacha y ya está cortando la leña?
La reflexión sobre ese pasado reciente que todos nos empeñamos en olvidar (o en “reproducir”)… me asalta…
“No es necesario estrenar Cine Splendid antes de las elecciones”.
Esa premisa para mí era (es) refutable.
Cine Splendid tomará forma en su edición paraguaya, pero en julio… no antes…
Ya habrán pasado las discusiones sobre las decisiones en las urnas… No quedará rastro de la atención que se pone sobre cada palabra dicha ante las cámaras de televisión de un simulacro de exposición de propuestas de gobierno.
Las funciones serán en julio…
Me pregunto ¿seré sólo yo, la que encuentre eso tarde, o a destiempo?
Esperanza… Sí, parece que sólo yo pienso que una pieza teatral sobre el cotidiano del régimen puede despertar el pensamiento de esos mis compatriotas más jóvenes, de esos que nacieron después del 89, de esos que escuchan todo a través del mareo de los nostálgicos.
Yo creo en la urgencia… Pero en Paraguay, como todo es urgente… todo deja de serlo… también…
Entonces… trato de no pensar. Si bien no tengo la ingenuidad tan intacta como para creer que un estreno puede causar un cambio de rumbo en las urnas, sí siento que traiciono mi intención de sentar postura antes.
Sí. La investigación para el filme me lleva a escuchar y leer detalles de encierro y de tortura.  Y eso me coloca en cierto lugar.
 Mis entrevistados me hablan de muchas cosas, tantas, tan duras, que la mayoría (me incluyo nuevamente) prefiere no escuchar. Ellos también repiten tantas veces algo que casi estoy creyéndolo: “El arte es la mejor manera de hacer conocer una realidad, una historia, y crear memoria”.
No, no pienso que vayan a volver las picanas (aun cuando en toda Latinoamérica en medio de las “democracias” se están dando desapariciones), pero le temo… le temo mucho al olvido…
El olvido nos hace recorrer los mismos caminos en círculos sin permitir los avances. La desmemoria no nos permite construir futuro porque desconocemos el pasado y lo repetimos, lo repetimos, lo repetimos, tal vez con otros envases… pero siempre con el mismo contenido.
Recuerdo (en medio de mi mudanza y debido a que por unos momentos encuentro el programa que vuelvo a perder) la pieza teatral que vimos en esa nuestra última noche en Belo Horizonte.
Mientras sostengo esa hoja fotocopiada vuelvo (en tiempo presente) a ese sábado de noviembre.
Llueve… Diro y yo recién retornados de São Paulo nos sumamos a Diego y vamos al Palacio das Artes a la obra de final de tecnicatura de actuación, en la que Cristiano hace luces.  Nos conmovemos… los tres. La apuesta es decididamente política, pero no la de los pañuelos, no la de las polcas, sino la del pensamiento, la del análisis de la realidad (un poco panfletaria, sí, pero qué importa) que fue y que hace que el hoy, sea lo que es.  Deconstrucciones de Fridas (de decoración), de Ches (de remeras y discursos), de Cristos (de escenas rockeras).
Recuerdo (en medio de mi mudanza, que hace días fue escenario del retorno al trabajo con Hernán y que deja en evidencia mi búsqueda propia de la “Tierra sin mal”, aunque esta sea a pocas cuadras de distancia) que me sentí afectada por la sinceridad de esa mujer negra -como se llamaba ella a sí misma- que hablaba de la marginación de los suyos. Recuerdo a la chica desnuda cantando en ese guaraní que también está más allá del Paraná. Recuerdo el discurso de ese manifiesto escénico estrenado en BH, tan alejado de las propuestas en la cartelera asuncena por estos días… Recuerdo… y el recuerdo es volver a vivir.
Salta hoy, este saltamontes al que en Paraguay decimos ESPERANZA, por toda mi casa. Quiero creer que en julio…  Cine Splendid -eso que sé que no es más que una “encenação”- todavía sentirse como mi personalísimo modo de sentar postura. Sí… aunque me convierta yo misma en ese árbol que cae sin existir, porque nadie lo percibe.
0 notes
Text
Conexión São Paulo-Asunción
Tumblr media
Húmedo e inexplicable febrero. Sacudido, inconformista, alterado… con ese calor absurdo que nos enlentece… y que al mismo tiempo nos vuelve irascibles, complejos, como bombas a las que sólo les falta que le aceleren el reloj detonador para hacerlas estallar…
Febrero… Hoy -sin embargo- estás fresco, con la noche calma, con olor a plantas mojadas, con brisa… En el balcón crecen mis aromáticas y unas flores me prometen zapallos que no sembré, pero que brotan igual. A lo lejos... el croar de las ranas, el titilar del otro lado del río... En la ventana de un edificio, unos amantes recortados entre la luz y la sombra... Asunción se “abuena” conmigo... intenta soplar sobre mí… un poco de paz.
Estoy atosigada por tantas cosas que pienso/quiero/tengo/debo hacer. (Vivo con) agenda repleta de proyectos, el diario y sus responsabilidades nuevas, una carpeta sin completar, Final Cut Pro a medio aprender, el hilo de un relato escénico todavía sin enhebrar, las palabras para un guión trancados en la garganta (mientras tanto mis nalgas que se ablandan contra las sillas en la oficina, en casa... como necesito caminar por horas, como lo necesito). Mis cursos de varios idiomas están abandonados (Duolingo.... soy tan poco realista… mirá que Francés/Portugués/Inglés…) y mi portugués desmejorando hacia absolutamente “ruim.  
Paro un minuto... y me dejo ser.  
¿Pero acaso tantos pendientes no muestran una necesidad increíble de estar en movimiento, Santos?, me cuestiono. “¿Los momentos de inspiración y el mismo proceso creador no le han proporcionado minutos de felicidad?”, pregunta esa mi porción de Nina a ese remedo de Trigorin que también llevo adentro. La Gaviota... Chejov... siempre...
Mi portugués es ya “muito ruim”, pienso antes de tomar caminos demasiado ostentosos o raros. “Muito ruim” al punto de tener que usar el Translate de Google para contestar las frases más simples.
Con Cine Splendid en compás de espera (fechas corridas para mediados de año...), caigo en cuenta que tengo una promesa incumplida…
Tumblr media
 “Ese relato por favor”, dice el mensaje de Diro en Instagram, en respuesta al posteo de esa foto de nuestro reflejo en el metro de San Pablo (como diríamos en correcto español latino). “De los creadores de "Te muestro como viajo con onda y sin plata" llega... "Miren cómo no nos perdimos en São Paulo", se lee, con un “no va a terminar la semana sin eso”.
El relato increíble (pero absolutamente verdadero) de nuestros recorridos tiene que darse entonces en las líneas siguientes… Pero, ¡cómo vuelvo atrás y repaso todo, sin mentir, sin olvidar, sin llenar de esos juegos de memoria que cubren de capas de polvo (o purpurina) los hechos, los lugares y los rostros?  No sé… pero una promesa es una promesa… Seguramente el recuerdo no es exacto, pero retomar -como si fuese hoy- ese caminar tan intenso de ¿cuatro días? tal vez me salve de convertirme en una ojiva nuclear para mí misma. Tal vez me salve...
Tumblr media
Vuelvo entonces a Belo Horizonte, a ese dormitorio en lo de Chris, a esa tos terrible de la última función (que el universo me permitió adormecer por una hora), que me sacude mientras preparo mi maletita azul de manicurista. Estoy mal, pero tengo el pasaje comprado, los escasos (pero suficientes reales) y la ilusión intacta de reconciliarme con esa ciudad que conocí a los 15 años (después de pasar por Río de Janeiro), que siempre es sólo una escala de vuelo y que me parece tan gris. Voy a ir a ver museos, obras, calles, parques… todo lo que este cuerpo mío tan abatido me permita, declaro en silencio. Tardo más de lo debido en el baño. “Estamos atrasados”, dice Diro como en la obra. “Vamos a llamar un taxi, un Uber, un avión”, contesto. “No, el tráfico no nos va a dejar avanzar, tenemos que caminar”, resalta. “Sí”, digo… Sí, pero mi cuerpo está frágil, mis piernas temblorosas y tengo fiebre… pero eso no importa. “Sí”. Corremos por el barrio, por la pasarela hacia Contorno, por las calles y yo voy quedando atrás. “Corré. Llegá vos y pedí que esperen”, suplico.  Lo veo desaparecer pronto y yo no doy más. Casi me dejo caer al suelo para llorar mi estado, pero no, yo digo “Sí”.  Cuando vuelvo a ver a Diro ya estamos adentro del bus que por 7 horas alberga nuestras confidencias, las fotos infantiles de nuestros piececitos contra el vidrio (calces 44 1/2 y 36 de la misma marca deportiva, que debiera empezar a auspiciarnos). Nuestro: “Casi no lo logramos, pero, sí”, se repite. Respiramos ese “somos felices” que ya es mantra: 
“SomosfelicesSomosfelicesSomosfelicesSomosFelicesSomos”...
Tumblr media
En el camino, la incertidumbre… No tenemos asegurado albergue para todos los días. Me siento, mal, estoy… francamente mal. Mis costillas parecen hundirse en cada respiración y no quiero decirlo, pero tengo miedo de tener que salir a buscar hostel con la valijita en este estado. “No te preocupes. Nos van a recibir para todos los días”, insiste Diro, tan confiado que le creo. Y “su fe lo puede todo”, me convenzo. Desde la terminal nos comunicamos con Diogo que muy relajado nos contesta que ya nos espera. “Van a amarnos y nos van a cobijar”, dice Diro. Y yo... le creo. Hago bien en creerle. Cuanta más fe haya... mejor.
Tumblr media
Metro (bajamos en Vila Mariana y cuando debimos hacerlo en Sumaré, aunque la dirección que nos dieron es en Perdizes) y caminata en subida… En una tienda naturista doy con unos caramelos de jengibre que son desde ese momento mis amigos más queridos. La primera sonrisa paulista -para nosotros los niños aventureros- se nos brinda allí cuando busco “troco” y el señor hace un comentario sobre las carteras de las mujeres.
Despreocupado, como si siempre hubiese sido parte de nuestro entorno, Diogo “Di” –director de arte, amigo de Ricardo- nos recibe, nos muestra el departamento, el barrio, vamos al súper. Hablamos de la realidad social, de los refugiados sirios presentes en Brasil, del arte, de la música (paraguaya y brasileña), del “ForaTemer” (que es el nombre de la mayor parte de las señales inhalámbricas con las que nos topamos desde que llegamos), de la vuelta antes de tiempo de Dayse, que lleva más de medio año trabajando en películas y que comparte casa con él. Es en su dormitorio en el que nos acomodamos.
Casi como un papá (pero que dice “cara” a mitad de cada recomendación), Di nos hace prometer que no vamos a usar el metro después de las 21:00 (”Você vai voltar em Uber, cara”) ni ir más arriba de la Praça da República (”é muito perigoso”) después de las 18:00. Preguntamos si podemos caminar hasta la Paulista porque ”não é muito longe” y nos dice que “não há nada a ver, apenas o cemitério”. Prometemos todo eso y después rompemos con todo lo prometido, menos con lo de caminar por la zona del cementerio. Perdón, Diogo... Perdón.... 
Tumblr media
Dejamos nuestras cosas lo más ordenadamente posible y salimos. Tomamos el metro en la estación Sumaré con destino a Consolação. Nos sentimos invencibles… tenemos una docena de mapas, las sonrisas bien puestas, el portuñol en la punta de la lengua y la seguridad de que nos nos vamos a perder, a menos que querramos hacerlo. “Dois perdidos numa noite suja”...
Tumblr media
Con la Paulista a la vista vamos buscando WiFi para ubicarnos mejor. Llegamos a un shopping, hacemos unos descubrimientos gastronómicos útiles en la Rua Augusta (donde comemos sendas porciones de pizza artesanal) y tomamos el metro de vuelta antes de las 00:00. Somos felices. Diro tiene fotos del primer día y una cama acorde a su más de 1,80 de altura. Yo duermo junto a la ventana, con un caramelo en cada mejilla para no toser.
Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media
Tras pasar por la Casa das Rosas -repleta de poesía tan oportuna- llegamos a Ibirapuera. Parques y museos en un solo lugar. Vemos de vuelta niños pequeños en contacto con obras de arte contemporáneo… la naturaleza nos envuelve… “Travalho escravo nunca mais”, leo en una pared... pienso en el diario.  Una chica de Colombia nos cuenta que vive en SP hace un tiempo. Bebemos agua de coco gelado, pero sin coco y nos tomamos las fotos de rigor frente al lago con la ciudad de fondo. Nos volvemos expertos del “casual wear”, del “Street style”, del “strike a pouse”, dejando a un lado las mochilas... Somos “tortugas ninjas” desde la mañana hasta la noche. Empezamos temprano vestidos con el “outfit” todoterreno  y el “chip”  del “siempre listo” puesto para saltar del parque al teatro, al cine, a la conquista de lo desconocido... 
Tumblr media
El corte de pelo en la barbería Hatada (muy cool) atendida por descendientes de japoneses para Diro (con cerveza incluida), me permite tomar un café mientras espero y falo... ¿El almuerzo? Ñoquis, un 29 de mes, por una suma más que razonable, sobre la Paulista, “como nos merecemos”.  Somos felices. 
Tumblr media Tumblr media
Una escapada al Sesc de Pinheiros para ver danza/teatro (una cosa de monas viejas y discursos grandilocuentes), nos permite acceder a una muestra fotográfica sobre tragedias humanas (estoy conmovida en grado sumo). Al terminar comemos un asadito “chic”, un sándwich de lomito y un bundicito coqueto en un lugar en el que se reúnen hombres con corbata para ver las eliminatorias de algún torneo de fútbol que para nosotros es intrascendente.
“São Paulo les va a comer”, es la frase que nos da risa a cada paso. ¿A nosotros, los caminadores extremos? A Diogo le contamos nuestras aventuras y pensamos la agenda del día siguiente. Conocemos también a Déborah, su novia. Sonreímos todo el tiempo, porque el tiempo nos sonríe a nosotros.
Tumblr media
La Pinacoteca nos fascina durante horas. Cada uno se arma su propio recorrido. Encuentro un Livio Abramo por ahí, en medio de tanto, tanto, tanto arte y lo reconozco enseguida. Cuando nos juntamos con el alma henchida de belleza, compartimos nuestras impresiones. Somos felices. Estamos en el centro histórico y llegamos al Monasterio de São Bento, entramos al museo de la lotería, a una muestra de arte negro. Pasamos por la famosa confitería portuguesa (carísima... y que no nos convence con sus colores ni formas)… no comemos nada allí. Entramos a un local de pan de queso para alimentar nuestro cuerpo, porque de pan también viven el hombre y la mujer, no sólo de arte, gente. El GPS entonces se vuelve nuestra brújula. 
Tumblr media
Llegamos al CCBB, tomamos un delicioso café y vemos un documental de creación sobre migrantes en Reino Unido. Hacemos todo lo que no tenemos que hacer. Estamos en el centro de la ciudad muy de noche, no sabemos cómo volver. El CCBB cierra en breve y la chica de la recepción -más sonrisas en portuñol- nos dice que un bus del centro cultural los lleva a todos a la estación del metro. Nos invita a ir con ellos. Nos sumamos. Miramos a través de las ventanas. Calles oscuras, pintatas. Hay manifestación por la suba del pasaje, pero a pesar de todo, estamos vivos, muy vivos. “No vayan a República después de las 18:00″ “No tomen el metro después de las 21:00″. Y es justo, justito lo que estamos haciendo. Nos reímos. De vuelta a la casa, confesamos... y conocemos al ser maravilloso que es Dayse –también directora de arte-, que nos deja su dormitorio para seguir allí, hasta que tengamos que volver a BH.
Tumblr media Tumblr media
Sesc Pompeia y una muestra de arte de todo Brasil, nos cautiva. Bailamos en una instalación, giramos alrededor de piezas, almorzamos de nuevo por casi nada bajo una sombrilla y sonreímos. Somos felices. Tomamos fotos “porque vamos a hacer nuestra guía turística de cómo viajar sin plata”, digna de Traveller (queda para la próxima) y para mandarle todo a Diego . Vamos más tarde a Libertade y en pleno barrio oriental comemos sushi. Buscamos en vano un local de karaoke y volvemos en conexiones y conexiones de metro. Sí, todo es cuestión de conexión. Y nosotros estamos conectados, con la ciudad, con la gente, con nuestro deseo de caminarnos todo, de ir siempre más allá. Siempre.
Tumblr media Tumblr media
Al llegar a casa (porque nos sentimos en casa) tenemos en mente ir al mercado al día siguiente, dormir temprano; pero Dayse nos espera vestida y risueña. Quiere llevarnos a conocer a unos amigos. Vamos sin saber adónde. Un abrazo de Fabio – director de cine de Recife- nos recibe en una casa pintada de rojo con una ventana que recorta una linda porción de la ciudad en el comedor. Saludamos y memorizamos nombres, Ju (productora), Sergio (director), Bruno (fotógrafo), nos reciben como si fuéramos parte.
En la mesa una charla sobre Inhotim (que a una pareja de la que no logré memorizar los nombres, les parece decadente ya... y a mí me gusta tanto-tanto-tanto). En la cabecera de la mesa, un actor en proceso de retorno, él, francés, está decidido a volver al teatro y a quedarse en Brasil aunque ya debiera estar en París, de donde vino para trabajar como consultor de negocios.  Eso es lo que me cuenta Hugo cuando conversamos en una mezcla de varios idiomas sobre Europa, Latinoamérica, Ariane Mnouchkine, el Teatro Oficina, Paraguay, Francia, Cine Splendid y el significado de la amistad y del teatro de este y del otro lado del charco. “La amistad es muy importante”, nos decimos el uno al otro. “El teatro es vital”, afirmamos ambos. “El teatro es mi lenguaje. Tengo mucho que decir”, habla él y es como si yo me hablara a mí misma. Soy yo misma -actualmente- una actriz en proceso de reconocerse, de volver, de decir, de creer, de crecer y de crear.  Lo oigo, como si mi yo interior se estuviera materializando para hacerse escuchar.
Pienso en el hilo rojo de los japoneses, de los chinos... en el cordón del destino. “Estamos donde tenemos que estar, cuando tenemos que estar, con la gente que tiene que ser”. Indefectiblemente es así. Agradezco dentro de mi cabecita, este momento, estas palabras, como si fueran la confirmación de mis propias decisiones y caminos... “El teatro es mi lenguaje”. Merci beaucoup, Hugo (de uma menina de Chekhov, a uma criança de Les Misérables).
Tumblr media
Armamos -con Diro- toda una estrategia para salir temprano y sin molestar a nadie. Estamos disfrutando en nuestras últimas aventuras y las vamos a aprovechar. Al despertar tomamos nuestras cosas y volvemos a hacer el trayecto de Sumaré hacia la Paulista, una vez más. “Tardar demais, uma vez mais”. (Hasta en mi recuerdo mi portugués es “muito ruim”).
Tumblr media
Diro va al MASP (Museu de arte de São Paulo), yo entro al parque Trianon y me siento entre los árboles, salgo y camino de un lado a otro buscando Itaú Cultural hasta que lo encuentro. Entro a una exposición sobre salud mental y voy a un cuarto piso en el que tienen una colección sobre la historia de Brasil. Frente a frente (y sin batería en el teléfono) me topo con unos mapas originales que descubren al espectador cómo se fue conformando Brasil, que pasa de ser una pequeña colonia a un Imperio… Eso es lo que quieren mostrar, yo -en cambio- veo cómo se modifica el mapa de Paraguay que pasa de ser la Gran Provincia del Paraguay (casi la mitad de Sudamérica) hasta volverse este “pedazo de tierra con olor a madera”, producto de tratados coloniales y guerras cruentas. ¡Cómo necesito esa foto!
Tumblr media
Cuando nos encontramos, tomamos ruta hacia la Roosevelt. No me siento bien, pero sigo. Allí, muchos jóvenes, varias salas de teatro alrededor, una “tapioca con dulce de leche” para recuperar fuerzas. Cruzamos todo para ir a la Cinemateca (de la que Sergio es director) y ver “O Dragão da Maldade contra o Santo Guerreiro” que yo pienso que se llama “Antonio das mortes matador de cangaceiros”, no sé porqué. Nos escapamos en medio de un concierto de Ava Rocha y bajo la lluvia intentamos encontrar la manera de ir a algún sitio. Decidimos tomar dirección hacia Rua Augusta, comemos comida mexicana y wafles. Nos hacemos fotos vestidos con mi campera verde militar bordada de flores. Llueve y no tenemos cómo retornar. Vamos a la avenida Paulista (en la que más temprano habíamos visto caminar a la réplica de Lenny Kravitz) con la idea de alcanzar algún bus y coronarnos como los más atrevidos e intrépidos. Desistimos porque no viene ninguno y abordamos un taxi, cuyo conductor nos cuenta su visión de la vida, del trabajo, de la ciudad, de las periferias.
Tumblr media Tumblr media
Con miles de pendientes y medio mapa marcado para una próxima vez, nos preparamos para descansar esa última noche. Sonrío pensando en el señor que me ayudó a poner el ticket del metro la primera vez (” Moça... eu posso ajudar?); en la chica del Itaú Cultural que me sacó de un tirón de brazos del ascensor al que había subido con dos hombres que se comportaban de manera extraña. Sonrío porque esas personas me mostraron que no siempre hay que temer a la “frialdad” de las grandes ciudades.  Mi “muito obrigada” en esas ocasiones recibieron el eco del “Imagina” que me resulta tan bonito como el “de naaaaada” mineiro”.
Dejamos SP a la mañana, con abrazos y agradecimientos a Dayse, con cariños a Diogo. Ofrecemos devolver la gentileza en Paraguay, cuándo quieran, cómo quieran. Somos sinceros. Somos felices... 
La brisa, las ranas, el río, me sacan del recuerdo  de nuestras aventuras en esa ciudad gigante que nos fue grata, generosa, abierta... Puedo seguir escribiendo aún, con más detalles, con más pericia lingüística, pero ya no estoy en SP, sino en Asunción y mañana es día laboral... y tengo que ¡estar conectada!
Tumblr media
Fotos: 1. Naturaleza en Ibirapuera, conmigo de protagonista. PH: Diro. 2. La promesa...3. Té de jengibre, miel, limón para no morir en el viaje. Ph: yo. 4. Equipo “Nuevo Balance” buscando auspiciante... Ph: yo. 5. Elegancia el metro. Ph: ¿yo? (recuerdo que Diro me retó por obvia, jajaja, pero acá veo demasiado sus piernas).6. Diro con el pelo que ya no le gustaba... y a mí... sí. 7. En medio de las luces pre Natal de la Avda. Paulista. Ph: yo. 8. 9. Poesía en Casa das Rosas.10. 11. 12. 13.14.15. Ibirapuera. Ph: yo.16.Cafés con chocolate en el CCBB. 17. Nós en foto de nuestra amiga de la barbería. 18. 19. Rica comidita en Pinheiros. Ph. Yo.20. Esta pequeña belleza que encontré en la Pinacoteca. Ph: yo. 21. 22. Sesc Pompeya. Ph: Diro. 23. 24. Comida en Libertade. 25.Avenida Paulista. Ph: Yo. 26. Metro. Ph: Diro. 27. Tapioca en Roosvelt. Ph: yo. 28. 29. 30. Gastronomía en Rua Augusta. Ph: Diro.
0 notes
Text
Cadê você?
Tumblr media
“Asunción del Paraguay, capital de mis amores… tus naranjos y tus flores… los recuerdos sin igual”.  Aire acondicionado a punto de congelamiento en la oficina, cuarenta grados a la sombra en la calle.  Sin bailes en la sala, sin caminatas… con tecleo interminable.
La cabeza hecha un lío. De vuelta a la redacción (con elecciones internas partidarias y estreno frente a las cámaras de tv en brevísima aparición), sin saber qué, cómo, cuándo, dónde, por qué, ni para qué (todas preguntas básicas para una periodista, para una actriz). 
Tumblr media
Desde la ventana del bus, un anuncio gigante de una pasta dental que pide. “Pensá menos”… Sonrío.  La sabiduría callejera me pide algo difícil en verdad.
Varias semanas de vuelta a la yo que soy aquí. Al lugar que es mío, pero que a veces desconozco. Al que quiero reconstruir.
-      ¿Vamos a retormar?
-      Vamos… pero que signifique.
Conversación de un actor y una actriz en busca de una casa para plantar su (ã)lma.
-      Tenemos que seguir.
-      Vamos a seguir
Conversación de otro actor y la misma actriz en busca de restituir a su familia teatral.
En la bandeja de entrada del email, la grabación de la última función de Cine Splendid.  No logro ver de corrido el video porque no puedo lidiar con la autocrítica (todavía no).
Me escucho unos segundos y trato de no descubrir mis esfuerzos para no terminar tosiendo sin parar (ronquera, tos y malestar general de días, producto de una noche de baile bajo un viaducto de Belo Horizonte, que combatí con unos caramelos de jengibre de la Amazonia que me dio Maria). 
Tumblr media
El encuentro, con Sara, con Pablo, con las historias de los últimos días en Brasil (con viaje a São Paulo lleno de paseos), con los planes de futuro en Paraguay, con el estreno en marzo.
-      ¡Qué no haya fronteras!
-      ¡Nunca más!
La promesa… y no hablamos de geografía. Hablamos de sueños.
Cadê você? Aquí Ó!
1 note · View note
Text
Funcion(ando)
Tumblr media
Sábado de noche, en el último de día de reposo por la gastroenteritis post viaje (¡cómo no me gusta el reposo!).  Día de recuperar tiempo de sueño (¿se recupera tiempo de sueño? ¿Se recuperan los tiempos, se recuperan los sueños?) “Um homem. Un homem livre escolhe um lugar. Um lugar para viver…” Eso leo en la contratapa de IGNORANCIA, el texto de Assis Venevenuto y Marcos Coletta (del Grupo Quatroloscinco. Teatro do Comum), que Maria Mourão– la entrañable amiga, la campeona de hula-hula, la generosa colega y artista- me regaló el día del estreno de Cine Splendid.  Nos obsequió a cada uno de nosotros un texto diferente, para que nos los intercambiemos como figuritas cada vez que terminemos la lectura. “Ele não se sente bem. Então ele se levanta e escolhe outro lugar, outra cadeira. Mas tudo incomoda”.  
Escoger un lugar… para vivir, para ser…  Esa misma inquietud (que tengo como premisa en ãlma, una obra que vengo trabajando hace casi dos años, junto con Hernán), esa misma incomodidad… es la que nos mueve como artistas… como humanos… ¿Estamos permanentemente levantándonos para escoger otro lugar?  ¿Esa es una condena o una virtud? ¿Es irse a un nuevo lugar… o es hacer del lugar en el que se está, uno nuevo?  ¿Puede el teatro cambiar un lugar, un pensamiento, una realidad?
Esas preguntas, una y otra vez… una y otra vez…
“Cada vez más entiendo mi lugar en la vida, que nada es sin propósito, la gente encuentra lo que debe por los caminos...” Esas palabras de Maria en un mensaje para todo el equipo de Cine Splendid, resuenan y se vuelven mías: “la gente encuentra lo que debe por los caminos”.
“En este proceso vivo lado a lado con mujeres (y hombres) increíbles que me confirman la fuerza de la mujer”, dice el escrito en portugués que Facebook traduce de manera automática.  “…la fuerza de la mujer…” 
Pienso en lo que es ser mujer... en el lugar que tenemos en la creación artística... en la historia... en la realidad… En cómo cuando era más joven y muy aficionada a leer y discutir todo, no entendía (todavía no entiendo) que se hablara de “literatura femenina” (además como si fuera una clasificación “inferior” que debía de tratar de temas “femeninos”) cuando la literatura es literatura, esté escrita por un varón o una mujer y puede y debe reflejar las inquietudes de quien decida escribir (nadie debería limitar o marcar norte en este sentido).  ¿Por qué tiene que hacerse esa diferencia?  Y eso se da en tantos ámbitos del arte, del trabajo intelectual... del cotidiano.  Y en cómo me cuesta hasta hoy darme cuenta de la invisibilidad que todavía cae (aunque se lucha y se combate y se señala) como un manto sobre la labor de tantas creadoras, pensadoras, inventoras, luchadoras... tantas, tan importantes, tan diversas, tan trascendentes, tan comprometidas…tan empoderadas... tan poderosas.
Entonces, ¿tiene el teatro la fuerza para cambiar lugares, realidades, personas? Tengo fe en que así es. Que nosotras, nosotros, compañeros y compañeras vamos juntos de la mano como iguales para contar historias.
Función tras función, salimos todos a escena después de bailar juntos algunos minutos en el escenario.  Función tras función, dejamos atrás la ansiedad que produce ver entrar al público para poder crear una ficción “Porque ésta es una ficción”. Función tras función, escucho el mismo monólogo de Diro como si fuera la primera vez, oigo de fondo a Diego como si nunca antes hubiera dicho esas líneas… olvido que Guada está parada en una esquina vigilando, todo para vivir una verdad, para que la verdad que vivo, pueda llegar más allá de esa luz que me enceguece.
“Hablamos toda la noche, durante la cena... del espectáculo de ustedes, de lo que es ser artista, del estado del mundo”, llega al inbox de mi Facebook tras una función. Hoy, releo esas líneas.
Tumblr media
Entonces, vuelvo a IGNORANCIA todavía no leo el texto.  Leo y releo el proceso creativo. “Esta obra teatral foi criada a partir do chão”.
El piso… no despegarnos de él… pero la mirada… la mirada tiene que ir, ir a donde sea necesario, al menos eso pienso yo. (¡Qué mucho pienso!).
“Larga vida al teatro y que cada vez menos necesitemos hacer milagros con el poco dinero, que podamos ser reconocidos y trabajar con dignidad”, menciona el final del largo texto de Maria.  Un texto que nos conmueve a todos.
“María, quiero encuadrar tu texto para sacar a luz cada vez que tenga que explicar el teatro”, contesta Guada.
Todos queremos encuadrar este texto… por ahora, lo releo. Decido que el reposo no es mi estado. “Cada vez más entiendo mi lugar en la vida, que nada es sin propósito”. Gracias, Maria, por ser parte de Cine Splendid, por ser parte de nuestro descubrimiento del teatro que hermana, por hermanarte, por ser amiga, por ser parte de nuestras vidas, por ser.
Tumblr media
Entonces, La Gaviota…
“…yo sé, comprendo que en nuestro oficio, tanto si trabajamos en el escenario como si escribimos, lo principal no es la gloria, ni el brillo, todo eso con lo que yo soñaba, sino el saber soportar… Saber llevar tu cruz y creer… Yo creo y no siento ya tanto dolor, y cuando pienso en mi vocación, no temo a la vida.”
Fotos:
1. Diro y yo en escena, en foto de Luiza Palhares.
2. Diego, Maria, Diro, yo y Cris (y la chica que sabía que éramos los humanos más geniales de la fiesta y quiso salir en el fondo).
3. Nosotras dos, jugando como lo que somos: umas crianças (Selfie tomada y editada por María).
1 note · View note
Text
A rota do açúcar (o tres adictos a los postres de paseo por BH)
Desde mi lugar de confinamiento y sentada en mi cama (he vuelto a Paraguay y me ha tomado una infección virósica intestinal con diagnóstico médico DX Gastroenteritis Aguda, por lo que guardo reposo de 72 horas, en mi casa, con dieta astringente) decido recopilar lo que en su momento denominamos “A rota do açúcar” o cuando los adictos se encuentran y... tres son multitud…  En fin… como no puedo ingerir nada (porque nada me apetece y todo me duele)… voy a recordar tiempos mejores (al menos hasta que salga del reposo).
Tumblr media
Hoy -voy a contar todo como si fuera hoy, aunque todo pasó hace 15 días y en Belo Horizonte- los planes son desayuno en el Mercado Central de Belo Horizonte.  La invitación de Fabrício es para todos, pero terminamos conformando un triunvirato él, Diro y yo.  
Son las 10:30 y el auto se enfila no sabemos hacia qué destino.  Llegamos a Pampulha, lugar que queríamos conocer y pensamos que ya no veríamos. Pasamos frente a la iglesia, a la laguna y bajamos frente al museo.
Tumblr media
 Vemos –entre otras cosas- “Merde d'artiste”, de Piero Manzoni, correctamente numerada.  Tomamos fotos, mandamos fotos y subimos al auto.  Vemos la casa de Kubitscheck y hablamos sobre la avenida que hay en Asunción con su nombre.  También comparamos (para encontrar las semejanzas) las clases “pudientes” de nuestras ciudades y reímos en coro del Yacht Club sobre la laguna…  ¿Ven allí algún yate?  Recuerdo nuestro propio Yacht (pero que está sobre un río y el náutico que está sobre un lago…).  Reímos todos.
Tumblr media
Pasamos frente a los campus universitarios y los puntos más icónicos antes de volver hacia el centro e ir hacia al mercado.
Los pasillos que ya conocemos toman otro significado en esta visita.
-          Este mercado que es el antiguo, pero parece el nuevo, es un punto importante de reunión. Comer aquí siempre estuvo bien visto. Está cerca del Palacio de Justicia y los magistrados venían a discutir cosas de importancia.
Eso nos cuenta el ex abogado de una transnacional minera que dejó todo para hacer arte (hasta el nombre, que acortó para pasar música como Dj).
Tumblr media
Nos acercamos al balcão de la Tabacaría Sabiá. Nuestro guía pide pan con pernil, bolo de tangerina, un brioche (pero de maíz como se come en Minas Gerais) con queso mineiro derretido en el medio y café con leche.  Comemos mezclado, así, lo que venga primero… y no podemos creer que estuvimos tantas veces en el mercado y nunca hicimos esto. Queremos una ronda nueva de todo, pero Fabrício nos pide calma… porque éste es solo el desayuno (Son las 13:00). Le decimos que no, que no nos va a dar el alma para comer tanto y después actuar.  Se ríe.
-          Vamos por el postre, pero antes voy a conseguir requeijao en barra con raspadura para que compartan con los chicos.
-          Los chicos no merecen nada… Vamos a comer todo nosotros dos.
Se ríe de nuevo de esa nuestra maldad tan de crianças (mía en realidad, porque Diro es bueno). Habla con el encargado de la tienda para que nos explique sobre los tipos de cafés que hay allí (con más fuerza, con más sabor, menos concentrado, con aroma a chocolate, con sensación de frutos rojos), todos de la región, en su mayoría premiados nacional e internacionalmente.  Hacemos una segunda vuelta de bolo de tangerina y caminamos en lo que llamamos “la degustación”.
-          Es normal que se pida para probar.
Entonces comemos cocada branca líquida en cada puesto que encontramos, también chocolate, dulce de leche… Fabrício se ríe… Sí, supongo que se ríe porque descubre que en realidad somos crianças asombradas, siempre.
Tumblr media
Volvemos al auto. Vamos a las alturas, de vuelta al mirante de Mangabeiras… pero esta vez desde otro ángulo, que nos avisa F da mejor vista… y no nos miente.  Mientras tanto, los tres hablamos  de las elecciones de vida, de los ángeles de la guarda que son esas personas comunes que te sacan de un aprieto en la calle, de la familia, de la presión social, de nuestros trabajos, del arte, de viajes anteriores, de Paraguay, de Brasil, de Belo Horizonte, de Porto Alegre, de Santa Catarina, de Londres… de lo que es ser sudamericano, paraguayo, brasileño, mujer, hombre, humano… de las inquietudes que tendremos toda la vida… toda la vida…  Ojalá… que toda la vida…
Arriba, yo pregunto cosas generales, cosas artísticas, cosas personales… y después me disculpo (soy periodista, es mi naturaleza, digo).  Fabrício responde a todo.  Pienso en cuántas personas con nuestros mismos cuestionamientos andan caminando por ahí, sin conocerse, sin hablarse, sin saber que no están tan solos. Tenemos suerte, pienso (¡Qué mucho pienso!).
Tumblr media Tumblr media
Intentamos varias veces que funcione la “curiosidad” (que con esa denominación está señalada en un cartel) de una calle que aunque tiene una subida, hace que el coche se mueva solo hacia adelante, sin encender el motor… Varios autos están en el mismo intento. No pasa nada. Reímos. “Curiosidad que funcionaba hasta octubre de 2017”, decimos.  A esta altura el paseo es ya “A rota do açúcar”.
-          Van a probar la mejor cocada blanca del mundo.
Vamos a una confitería con decoración que alude a los Alpes, pero que se llama Sabor Alaska (sobre Bandeirantes) y casualmente encontramos a una amiga de nuestro amigo, que pronto se convierte en la cuarta en el diálogo.  Estudiante de Psicología en los últimos años, quiere trabajar con niños, habla en portuñol con nosotros (ella habla español, pero ahora está fuera de práctica y nosotros “tentamos sempre falar, mas não conseguimos”).  Nos despedimos con promesa de vernos a la noche, en la función. Ella cumple.
Seguimos hacia el lugar en que vamos a encontrar la torta de chocolate que va a desbancar al de Inhotim (no lo consigue porque es diferente, es rica, deliciosa, pero es diferente...).  En Fany Bombons (en Sion), pedimos cada uno de nosotros una porción, hacemos las fotos pertinentes, para el registro, para la “pureación”, para el recuerdo.  
-          ¡Cómo no hicimos esto antes! Somos felices. ¡Muito obrigados por esto!
Encontramos una revista, nos descubrimos adentro (con foto grande y descripción de Cine Splendid), todo mientras miramos chocolates.  Pedimos permiso para llevar la publicación.  Salimos contentos por el paseo, por los dulces, por la charla.  Tenemos que volver a la casa, tomar nuestras cosas e ir al teatro.  
Tanto dulce, termina siendo energía para caminar desde Floresta hasta Praça da Liberdade. Tanto dulce termina siendo energía para una buena función (la mejor).  Tanto dulce termina siendo energía para bailar hasta las tres de la mañana bajo el viaducto… Pero… esa… ya es otra historia.
Fotos: La torta de chocolate de Fany con ganache, revista y todo incluido (tomada con Diro antes de que muera el cel). Pampulha en foto de Diro. Registro de la existencia de Mierda de Artista en el Museo de Pampulha (tomada por mí con poca destreza). En el Mercado Central... el pan con pernil y queso que nos voló la cabeza. Beagá desde el Mirante de Mangabeiras, que no es el Mirante de Mangabeiras porque es más arriba y en otro lado (con clic mío). Los chicos en dos versiones: tapa de disco y foto para la posteridad (obviamente tomada por mí, que no aparezco en la foto... porque sostengo el celular).
0 notes
Photo
Tumblr media
"Pyragues" en fotografía de Luiza Palhares. Luz: Jésus Lataliza
0 notes
Link
0 notes
Text
Bajo la lluvia
Tumblr media
Terça (el portuñol se adueñó de mi ser). Día libre tras primera semana de obra en el CCBB. Paseo para ser felices, para seguir conociendo Minas Gerais, para no sentir que ya nos estamos yendo. Tras la noche de genial pijamada (que no fue, pero casi) en casa de Maria (con tapioca, cachaça de Pará, confesiones varias, interpretaciones de “Ana Julia” y “Me voy”, incluidas), despierto con esperanzas. Con la cabeza en lo que tomo como un juramento: “Vamos a salir de la Rodoviaria en el bus de las 10:00”; empiezo a prepararme.
A las 8:00, soy el único ser humano que respira de manera consciente en Itaúna 540. Llueve… pero… “¿Qué es la lluvia, sino bonanza?, pienso (¡qué mucho que pienso!). Mientras me baño… espero las batidas de puertas que no llegan, espero el reclamo por el baño, espero el “se nos va a hacer tarde” (que finalmente sé que sólo puede salir de mi boca). Decido que las cosas tienen su tiempo, su espacio, su lugar. Sé que Ouro Preto nos espera, lo sé.
“Estoy muertita”, es el mensaje que marca la primera deserción. María me escribe a las 8:34, con emoji incluido, y como buena productora (como amiga preocupada) me manda la captura de pantalla que muestra el pronóstico del tiempo para Ouro Preto que marca lluvia a todas horas, todo el día.
“Creo que iremos igual… es nuestra última oportunidad”, contesto. “Es nuestra última oportunidad”, me repito. Después quedan una semana de función y unos días en São Paulo, que van a ser una realidad (aunque vivamos comiendo pão de queijo de 2 reais en esos días) gracias a que Ricardo habló con alguien que nos va a dar asilo político en su casa (mandamos una foto en la que parecemos niños bien portados… Somos niños bien portados, en realidad).
Llueve… Me tomo todo el tiempo que necesito para desenredar este cabello que valdría sus buenos guaraníes si lo vendiera (tiene más de 40 centímetros de largo y nunca se sometió a tratamientos químicos), que podría convertirse en “pelucas solidarias” para varias cabecitas… pero que por ahora sigue unido a mí y es parte de mis personajes de Cine Splendid.
Silencio. Llueve. Las gatas van y vienen mientras yo decido lavar “toda” mi ropa sucia. Silencio. Llueve. Mientras el ciclo de lavado sigue su curso, yo tomo ese vestido de lino bordado que me hace “madre” y en una champañera (único recipiente en el que entra) lo meto en agua con jabón en polvo para que esté en condiciones para la segunda semana.
Hago bastante ruido con la esperanza de que algún movimiento se genere, que alguien más retorne a la vida -acá entre los mortales- y deje el mundo de los sueños. Silencio. Llueve. Segunda tanda de ropa y comunicaciones varias con Asunción del Paraguay, con ese 7% de batería que me queda.
Hago varias otras cositas hasta que decido tocar la puerta de los muchachos para pedir el cargador, el único que le sirve a mi teléfono (traje uno que se descompuso y compré otro que corrió la misma suerte)…
-¿Qué hora es?
-9:30
-¡María!
-No va. Ya avisó.
-¿Llueve?
-Sí, pero nosotros vamos igual.
-Vamos igual, claro. Estoy listo en media hora.
-No. Se preparan y salimos en el del medio día.
-¡Pero va a ser tarde!
-Vamos a llegar igual.
Llueve. Silencio. La idea de caminar hasta la Rodoviaria se disipa, llamamos un 99Pop y nos resignamos, vamos a salir a las 13. Compra de boletos: poltronas 3, 4 y 7. Diro y yo hablamos todo el camino: que la vida, que el teatro, que el paisaje, que las fotos, que los planes, que las funciones, que el aprendizaje, que la felicidad… Diego nos mira unos minutos y después duerme (Tantas veces tuvimos nosotros también conversaciones de esas).
Llegamos. Llueve. Silencio. Yo voy al banheiro (por 0,50 reais tras leer que la administración de la terminal está privatizada), mientras los chicos preguntan por un tour (sale 30 reais y el pasaje hasta allí nos salió 32,30) decidimos calmarnos. Ya son casi las 15:00 (o eso creo en mi imaginación, porque no tengo batería en el teléfono celular).
-Vamos a caminar y ver todo sin pagar nada. Y vamos a disfrutar igual.
Llueve. Vemos a un hombre alto, entrecano, todavía joven, con todo el perfil del personaje de telenovela brasileña que vuelve a su pueblo después de media vida en la gran ciudad para recobrar al amor de su juventud que sigue en su mente y en su corazón… Nos reímos de nuestra fantasía. Nos reímos a pesar de todo, y en el único enchufe de la terminal Diro carga su cel (porque él tiene internet, el mío falla) y baja un aplicativo turístico que después ni miramos.
-Hay que ser rápidos y efectivos con las fotos, si queremos ver todo.
Acto seguido… 15 minutos (bajo la garúa) en la misma iglesia haciendo fotos porque “acá no salgo bien”… “no estoy lindo”… “no es buena la luz”… “el edificio no salió entero”. Me río… Yo no puedo sacar una sola foto… el cel sin internet, pero con batería, no tiene espacio (no puedo borrar nada porque no pasé nada a otro sitio y no puedo reenviar las fotos porque… ¿dije que no tengo internet?); el que tiene internet y espacio, no tiene batería; el que tiene espacio, no tiene batería ni internet. Y así… sucesiva y extensamente… Tantos celulares… y ninguna flor…
Estoy en una ciudad que es Patrimonio de la Humanidad… y una vez más juego a Blanche Dubois “Siempre he dependido de la amabilidad de los extraños”.
-Chicos… no puedo sacar fotos. Voy a disfrutar todo esto con mis ojos y mi corazón, pero si en algún momento les parezco fotografiable… métanle. Así puedo decir que estuve aquí.
Tumblr media
Callejuelas adoquinadas y angostas, edificaciones majestuosas y casitas pintorescas. Iglesias, iglesias, iglesias. Autos (deberían prohibir los autos…), caminantes propios y ajenos.
Vamos los tres maravillados. El grupo DND (Diego, Natalia, Diro) que en mi cabeza es “Los Donde”, un grupo de balada rock, que a veces tiene temas salpicados de ritmos latinoafricanos mezclados con guarania, pero medio chill out funky reggeatonero (Sí, y con letras melodramáticas). ¿Guada? En Itaúna 540 con Alice (Alici, he´i) y Lais –léanse las gatas- espera la hora para almorzar con su mamá que llegó a BH para verle actuar y que ya se va.
Tumblr media
Subimos por las empinadas ruas, fotos aquí, allá…
-Quiero que tomes este encuadre… pero que se vea todo…
Entonces sostengo el celular y sé de entrada que jamás llenaré las expectativas. Disparo. Veo los intentos de selfie en el mismo sitio (porque seguro no entendí nada) y seguimos. De tanto en tanto “caradureo” y pido un cel para hacer una foto. Ellos me hacen otras tantas.
Tumblr media
La palabra chocolate nos atrae, pero pido un pan de queso para pasar el hambre que me generó la caminata, miro la carta, muestro las opciones y nos prometemos el retorno para esa “Caneca de chocolate quente” que se ve tan bien en las fotos.
Después de unas horas de pasear por todos los caminos, de sonreír a la gente, del “Vôce é Julieta en su balcão” de Diego a una señora octagenaria que se derretía en coquetería mientras él la retrataba; efectivamente cumplimos la promesa.
Tumblr media
Pedimos eso que alguna vez fue elixir para los dioses… Brindamos por BH, por Ouro Preto, por los viajes, por la curiosidad, por la amistad, por Guada que no está, por Brasil, por Paraguay, por el teatro, por Cine Splendid, por la gente que hace Cine Splendid, por los sueños que son realidad.
Tumblr media
“- Soy una gaviota. No, soy una actriz”.
Llueve. Silencio. Ya es Quinta (Jueves) por la mañana y debería sacar los reciclables al cesto de la basura. Suena ese teléfono que decidimos no atender jamás (de todas formas Cris está de gira, no sabemos por donde, nadie entiende lo que explicamos cuando hablamos en portuñol… En fin).
La lluvia nos acompaña… Está en esa maravillosa noche en casa de Gabi, cuando descubrimos que los brasileños juran que “Galopera” e “India” son canciones sertanejas (tenemos que bailar y mostrar el nombre de los autores en internet para que nos crean). Está cuando tengo la osadía de salpicar una muy amigable conversación en la que Fabrizio “explica” que el tereré fue llevado por los gaúchos a Paraguay… y yo negando aquello, tiro sobre la mesa (perdón, perdón, perdón) la Triple Alianza y la apropiación de nuestras costumbres tras las invasiones y la toma de territorio… Está cuando me preguntan sobre si hay comunidades agroecológicas y yo (perdón, otra vez) hablo de la soja transgénica, del problema de la tierra, del latifundio, de las empresas multinacionales, de la tensión en las zonas fronterizas… Está cuando pregunto sobre el racismo… (perdón) y Gabi (nuestra compañera que hace subtítulos y enseña español) me explica todo con gentileza, con mucha generosidad. 
 -El 55% de la población es negra. No es una minoría, pero la gente no acepta. Hay una gran matanza de jóvenes. Muchos no van a llegar a los 40 años. Hay racismo, pero nadie quiere que se le diga ... es una gran ofensa que te digan racista. La sociedad es hipócrita en cuanto a eso. 
La lluvia está cuando reconocemos nuestro desconocimiento del otro, nuestras diferencias, nuestras similitudes y nos hermanamos todos en una sonrisa.
Tumblr media
Fotos: 1. Floresta en jueves de lluvia desde mi celular. 2. Ouro Preto en clic mío, pero con cel de Diro. 3. Los Donde, autorretrato por Diro. 4. Ouro Preto en mi mirada con cel de Diego. 5. Chocolate caliente para el alma, por Diro. 6. Antes del atardecer en Ouro Preto, retratada por Diego. 7. Haciéndome la modelo para Diro.
0 notes
Video
vimeo
El teaser
0 notes
Photo
Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media
Guadalupe, Diego, Diro y yo, en fotos tomadas por Pablo Lamar y retocadas por Estudio Lampejo.
0 notes
Text
En la prensa...
Tumblr media
http://www.otempo.com.br/mobile/pampulha/um-passado-que-ainda-%C3%A9-atual-1.1541192
Tumblr media Tumblr media
0 notes