Tumgik
#ya me quiero mudar
cas-is-my-bestie · 2 years
Text
.
0 notes
pupuseriazag · 4 months
Text
> ears hurt from wearing headphones too many hours daily
> decides to unplug them for a day
> puts some music to relax and make the house more livable
> dad, as always, puts the most annoying videos on max volume in his phone from the kitchen and stays there
> If I want to not hear it, I have to wear headphones
> keeps wearing headphones because dad does this EVERY. SINGLE. FUCKING. DAY. And is unemployed
> days later "oof... My ears hurt, Ill put the headphones away today"
0 notes
mantecol · 2 years
Text
LIMPIE CON EL BLEM HACE 10MIN. MI HERMANO VA AL ALTILLO Y YA TODO LLENO DE POLVO DIOS HIJO DE PUTA QUEDATE DONDE EST- *implota*
0 notes
biwifeenergia · 7 months
Text
me pone muy nerviosa siempre que me corrigen algo en el laburo pq me dijeron que son medio hincha pelotas y necesitoooo quedar y pasr los tres meses pq me quiero mudar 🙃 encima ni pasó un mes y ya me mandaron a hacer algo re desafiante tengo un re miedo
15 notes · View notes
miseriangelical · 1 year
Text
no son las 10 y esto ya es un horno, me quiero mudar a la antártida
38 notes · View notes
annetorres-blog · 1 year
Text
No seas idiota (parte III)
Me pasé toda la educación media durmiendo en el pupitre. O rayando los libros. Cuando el profesor me preguntaba, yo respondía correctamente, provocando su furia. Y la risa de mis compañeros. Me juré una y mil veces que yo misma iba a ser profesora. Porque tenía mis ideas sobre la educación. Mi amigo Paco, siempre me decía: "Nunca podían contigo". Y luego se reía a carcajadas. Quiero decir, la mayor parte de mi vida he vivido en resistencia. Por una cosa. O por otra. Solo algunos instantes en los que parecía acariciar la felicidad... Ay, caray. Paco: no podían conmigo hasta que pudieron. Al final, nadie es infinito. Definitivamente, me voy a tener que mudar para el curso que viene... Quería sacarme el carnet de conducir... Tomarme las cosas con calma. Pero ya, me importa un carajo... Sé que me sobra coraje y determinación para cumplir mis objetivos. De aquí a la Dra. Torres hay 25 quiebres, 40 meteduras de pata, 40.000 decepciones, tres países y tres continentes. Me he dejado la piel y la juventud. Me caigo y me levanto. Subo las escaleras agarrándome a la barandilla porque no puedo con mi alma. Y aun así no he dejado de trabajar ni un solo día. Quiero tener voz. Me merezco tener voz. Me caigo y me levanto. Ciertamente, estoy hecha a base de terquedad y resiliencia. Si no valoran eso, lo siento. Señoras: estamos perdiendo el tiempo. Yo ya no estoy para que me desprecien y me ninguneen como ya ha pasado otras veces.
Nota mental: sé rotundamente que me sobra coraje y determinación para cumplir mis objetivos...
Tumblr media
17 notes · View notes
growing5-99 · 11 months
Text
Una de muchas historias.
En una ocasión, leí una frase para el 8 de mayo que decía; “Si los hombres supieran cuantas mujeres han sufrido acoso, se darían cuanta que sus hermanas, novias, tías, primas, abuelas, vecinas, compañeras de uni, compañeras de trabajo, mejores amigas, incluso sus mamás han sido victimas, y si todas las mujeres publicaran las historias que han sufrido estarían aterrados”
Es por eso que vengo hoy a contar mi historia, porque siento vergüenza y aunque siento que ya lo supere, aún me siento culpable, después de 5 años, siento la valentía para contar lo que me sucedió en aquella noche cuando salí del trabajo y esperaba algún bus que me llevara a mi casa.
Eran 9:30 de la noche y recuerdo que solo cargaba el suficiente dinero para tomar bus y aunque quisiera tomar taxi no me alcanzaba, recuerdo bien que tenía miedo de estar tan tarde en la calle y sin dinero, lo único que quería era llegar a mi casa, era nueva en ese pueblo, nos acabábamos de mudar, y por más que mi madre siempre me había dicho que no me suba al carro de desconocidos, estaba desesperada por llegar a casa, estaba cansada, y después de dos horas de esperar al bus que nunca llegó, y en el momento que un desconocido se acerco amablemente diciendo que iba al lugar donde yo iba acepte a subirme, No puede ser que ingenua actúe. 
En ese momento me sentí aliviada, pero...
Mi tranquilidad solo duro unos minutos, el conductor parecía muy amable, conversaba con normalidad y no actuaba de manera extraña, hasta que después de unos minutos se desvió y de repente sentí un dolor en el pecho, es como esos presentimientos que dan cuando sabes que algo malo va a pasar, pero era muy tarde porque algo malo estaba pasando.
Solo recuerdo que el conductor empezó a agarrarme y yo intentaba soltarme con la voz entrecortada le pedía que me dejara, que por favor no me hiciera nada, rogaba para que no me lastimara, pero el solo quería lastimarme, como pude logre abrir la puerta y quise saltar, pero el me agarro del cabello, para así evitar que yo me escapara, y de manera rápida logre salir del carro pero el ya estaba encima de mí, con sus rodillas al lado de mis caderas y con mis muñecas en sus manos, sus horribles manos que me aterrorizaban, y que empezaron a golpearme, sus espantosos ojos que me miraban de una manera aterradora. 
Realmente no sé como pude pelear con él y logre esconderme debajo del carro, mientras el trataba de sacarme de debajo del carro, estaba dispuesto a atropellarme con el carro, en ese momento corrí, corrí como nunca había corrido, con todas mis fuerzas, pero con todo el miedo que consumía mi cuerpo, corrí no quería voltear, dolía y sabía que él venia atrás de mí, fue en ese momento que apareció una moto y sentí miedo pero confíe que la persona de la moto me sacaría de ese lugar de mis pesadillas, no estaba segura de confiar o temer, que esta persona también tuviera los mismos pensamientos que el hombre que me lastimo, a quien le había creído minutos antes.  Y fue así, fue un señor de unos 40 años aproximadamente que me llevó a mi casa, y a la única persona que le conté lo que me sucedió esa noche.
Desde ese entonces decidí cortarme el cabello, a no volverlo a usarlo largo, para evitar que me lastimen , deje de usar algunas prendas de ropa por miedo, pero he vuelto a usar faldas, shorts, blusa de tirantes, y he tratado de no cortarme el cabello y espero que esto sea una manera de ver como poco a poco voy superando ese miedo, y quiero lograrlo, quiero vivir sin miedo, a ser libre de usar lo que yo quiera, a peinarme como me guste.
No me considero a mi misma como feminista.
Me veo como una mujer con derechos y sentimientos, a las feministas las respeto y siento un gran orgullo por ellas, es admirable que pueden expresar sus disgustos y luchar por nuestros derechos.
Tengo sueños, anhelos, miedos.
Considero que puedo vivir sin un hombre como apoyo, pero también quiero detalles y disfruto del amor que me pueden dar, quiero casarme, viajar, no quiero hijos pero soy provida.
Y en redes sociales descubro que personas que han sufrido de algún acoso después de tantos años se atreven a contar o alzar la voz, y es gracias al esfuerzo de todas las feministas que luchan fuertemente.
Y así como yo existen muchas mujeres que no han contado su historia, que tiene miedo, vergüenza o muchas se sienten culpables, quiero decir que aquí te escuchamos, te entendemos,  Te Creemos y te apoyamos. 
9 notes · View notes
Note
No es fácil Rosa. Quiero salir adelante pero tengo miedo de no poder sola porqué también me quiero mudar algún día, y no quiero pedir ayuda, ni tocar esa plata que tengo en el banco. Todo el tiempo que perdí lo tengo que recuperar ahora, enfocarme sólo en esto. Pensé en hacer feria y hacer algún curso para tener un emprendimiento propio, hacer de todo para conseguir la plata. Me voy a ocupar en estudiar y trabajar. No se bien que estudiar, seguiré buscando cursos. Sé qué te tengo harta Rosa, perdón. No sé sí esta bien pero lo que me consuela es que hay mucha información y cursos gratis y marketing y esas cosas, en mí pais virtualmente, y eso me va a servir. Me mudare dentro de 10 años más o menos. Ya no quiero evadirme. Quiero levantarme temprano y estudiar mucho. Sé que cuando quiere salir adelante encuentra la forma pero me angustia el no poder sola, el no tener una estabilidad económica x mí misma. Y aunque no me creas, ya no le tengo miedo ni a mí familia, si ellos no me ayudan que no estorben.
Kari 🤗💜💛
Para hacer todo esto te ayudaría mucho ir a Terapia
La terapia ayuda a construir sentimientos positivos, como la confianza en uno mismo, la valentía y la esperanza. Los terapeutas ayudan a la gente a sentirse motivada mientras aprenden. También la ayudan a ver lo bueno de sí misma y a encontrar sus puntos fuertes.
Mejora la calidad de vida. Aumenta el bienestar personal, social y familiar. Aumenta la relajación y emociones positivas. Disminuyen las emociones negativas (ansiedad, tristeza, ira, irritabilidad, etc.)
Hay veces que es bueno pedir ayuda y dejar que te ayuden y orienten 😽
1 note · View note
loveofmysoulaa · 9 months
Text
Tumblr media Tumblr media
1
Me amé en vos. Me ví con esa carcajada de nena descontrolada, arriba de la mesa. Con ese corazón un poco roto, que parecía estar sanando. Conocí mi templanza, mi espera y mi armonía. Mi fidelidad inquebrantable y mi deseo deseando desde las entrañas. Encontré mi simpleza y mi amor desinteresado. Mi mirada cómplice y mis consejos más sinceros. Confirmé mi carencia de abrazos y me descubrí gozando de tus ojos, clavados en mis pupilas.
Viajé con mi cabeza a todos los lugares del mundo de tu mano. Me ví en la playa, en la montaña, en el frío y en el calor. Aunque con un café entre las sábanas y un poco de música de fondo, tenía ya todos los viajes viajados.
Me escuché la voz que nunca me había oído. Te hablaba con una dulzura que se me impuso sin calcularla. La ansiedad de verte me devolvió las ganas de pedirte que no te vayas. Que te quedes. Que me salves.
Me miré por dentro y descubrí que estaba amando mejor. Mejor que cuando evidentemente no amaba. Te extrañé y me propuse animarme a dar ese salto al vacío, a la nada y al todo.
Con vos quería mandarme a mudar de todo lo ya establecido.
No me comió una sola duda, no tuve una sola pregunta. Solo mis propias respuestas. Acá me quiero quedar. Al lado tuyo. Al lado mío. Dormí en vos.
2 notes · View notes
treeofliferpg · 2 years
Text
Ideas de rol: Compañeros de piso
Recordamos que el siguiente texto no ha sido redactado por el staff de ToL, solo lo hemos traducido para que pueda llegar a más personas. La autoría pertenece @creativepromptsforwriting. Podéis leer el post original en su tumblr así como en nuestro tumblr bajo la etiqueta “idioma original”.
Hay un apagón en todo el edificio y ahora tropezamos por nuestro apartamento, tratando de encontrar algunas velas.
Todos queremos salvar el planeta, pero quizás empezar por reciclar sea una idea más razonable que ducharte con tu compañero de piso para ahorrar agua.
La noche de juegos es un evento muy importante en nuestro departamento y seguimos encontrando nuevas formas de competir entre nosotros.
Decidimos hacer una limpieza profunda y ordenar todo nuestro apartamento, no puede ser demasiado vergonzoso lo que encontraremos, ¿verdad?
El casero todavía no ha reparado la calefacción de nuestro apartamento y ya llevamos varias capas de ropa, tenemos que encontrar otras formas de mantenernos calientes.
Terminar accidentalmente una llamada telefónica con tu compañero de cuarto con un "te quiero" casual parece ser una muy buena razón para mudarse.
Tengo trabajo por la mañana y no puedo dormir mientras tú estás haciendo música en la habitación de al lado, componiendo canciones de amor para tu enamorado secreto.
Con un grupo de compañeros de cuarto, las mañanas realmente pueden convertirse en el exitoso programa Game of Toilets de HBO .
Mi alarma es lo suficientemente fuerte como para que puedas escucharla a través de la pared, así que cuando no quiero levantarme, vienes para apagarla y sacarme de la cama.
La tormenta de nieve hace que sea imposible salir, así que construyamos un fuerte de mantas y pasemos el día allí.
Los dos nos mudamos al mismo departamento con un amigo en común, pero no nos conocíamos y a primera vista es incómodo, pero ahora tenemos que vivir juntos.
¡Había una araña en mi habitación y sí, la rescataste poniéndola afuera, pero aún así no dormiré en esta habitación esta noche!
Comenzar una relación de amigos con beneficios con tu compañero de piso rápidamente desdibuja algunas líneas…
Apoyamos a diferentes equipos deportivos y creo que quizás nos excedimos un poco con nuestra competitividad antes del gran juego.
Te quedaste atrapado en el baño otra vez, te dije que tenemos que llamar al propietario para que arregle la cerradura de la puerta, ¿por qué nunca escuchas?Pero sí, voy a buscar un destornillador.
Me llegan cartas de amor por correo pero sin nada escrito por fuera, ni siquiera un nombre, así que siempre te las doy, porque asumo que son para ti porque creo que te he visto sosteniendo uno de los sobres antes y eres el tipo de persona que tiene un admirador secreto, definitivamente no soy yo…
Nos acabamos de mudar a un departamento compartido y descubrí que te gusta cantar mientras haces tus tareas y me gusta mucho tu voz,
Me gustan los gatos, pero nadie debería amar esas bolas de pelo tanto como tú, pero ahora hay una tormenta afuera y el gato no está en casa y estás devastado, así que ahora corremos bajo la lluvia, gritando por tu gato.
No tengo ningún problema en compartir mi cuenta de Netflix contigo, pero si cambias mi lista de observación una vez más...
Cocinamos al mismo tiempo y tenemos que movernos uno alrededor del otro
Tenemps que reunirnos con el propietario que a ambos nos disgusta
Vemos al otro jugar un juego y que nos pide que nos unamos
Tenemos que hacer algunos mandados para el apartamento y tenemos que hacerlos juntos.
Los amigos de tu compañero de piso te piden que los ayudes a organizar una fiesta sorpresa en vuestro apartamento compartido
Tratamos de no golpear nada o entre nosotros, cuando hay un corte de energía y está demasiado oscuro
Limpiamos el apartamento juntos y acabamos haciendo una fiesta de baile.
Ayudas a tu compañero de piso con una cita pegajosa que simplemente no quiere irse
Te das cuenta de que el otro está enfermo y le llevas algo de té y algo de comida
Pintando el pasillo juntos
Lavar la ropa juntos o llevarla a una lavandería y esperar juntos
Ayudando al compañero de piso escondiendo algunas cosas que sus padres no deberían ver, cuando llegan sin avisar hay un detector de humo defectuoso en el edificio y tienes que salir de la casa hasta que el departamento de bomberos haya autorizado volver a entrar para salvar
Decorar el apartamento juntos para una fiesta o unas vacaciones
Haces demasiada comida e invitas a tu compañero de piso a compartirla
Un compañero de piso se quedó afuera y ahora tiene que ir al lugar de trabajo del otro para obtener la llave
La persona A sigue terminando en la cama de la persona B, su compañero de piso. Es solo cuestión de tiempo hasta que el "error de borracho" ya no sea una excusa creíble.
Como compañeros de piso, siempre juegan juntos a juegos multijugador en línea. Las personas que juegan con ellos regularmente solo asumen que son una pareja.
La persona A ha estado viviendo en el extranjero durante un año y ahora se muda de nuevo al departamento que ya compartía con la persona B antes de irse. El año de diferencia parece cambiar mucho entre los compañeros de piso.
Mientras cuida a la Persona B, que ha estado enferma durante algún tiempo, la Persona A comienza a cambiar lentamente de la mentalidad de un compañero de piso a la de una pareja más romántica.
La Persona A quiere hacer un álbum de fotos para el cumpleaños de la Persona B y al mirar las fotos se da cuenta de que, con el tiempo, se parecen cada vez más a una pareja.
Después de un viaje a Ikea para comprar muebles nuevos para el apartamento, pronto se dan cuenta de que después de ensamblar con éxito un estante sin matarse el uno al otro, básicamente están listos para el matrimonio.
La persona A tiene la costumbre de no usar mucho (o nada) para dormir y se está volviendo muy incómodo para la persona B cuando ambos terminan yendo al baño por la noche.
La Persona C quiere tener su momento "y eran compañeros de piso" e intenta juntar a los compañeros de piso, la Persona A y la Persona B.
Si te gusta su blog y quieres apoyarla, ¡puedes invitarla a un café o hacerte miembro ! Y echa un vistazo a su Instagram ! 🥰
20 notes · View notes
backinangst · 1 year
Text
30 de Abril, 2018
Hace exactamente cinco años atrás, una Zoe celosa y amurrada me abandonó en nuestra cita de Rabbit, aclamando estar cansada de mis “señales mixtas.” Recuerdo haberme sentido un poco desconcertado por su outburst, pues más allá de estar consciente de que ambos sentíamos cosas por el otro, no éramos más que mejores amigos.
Para poner las cosas en contexto, existieron momentos claves en los que yo fui determinando que lo nuestro no era solo una buena amistad, que la afinidad que compartíamos era algo mucho más intenso. Recientemente descubrí que ella no creía que los piquitos eran cosa de amigos, y que en realidad, al igual que yo, lo usó como una excusa para poder normalizar las ganas que teníamos de robarnos un par de besos. Naturalizábamos mucho el flirteo, el trato de pareja, los celos, el llamarnos “amor de mi vida” y el decir que nos íbamos a casar algún día. Para el resto de la gente era muy evidente lo que pasaba ahí, pero para nosotros era simplemente un juego. O al menos de eso nos queríamos convencer, y lo encuentro tan ingenuo e inocente que todavía me da ternura.
Teníamos miedo de reconocerlo porque no queríamos que las cosas cambien. O al menos eso me pasaba a mí, porque después de tantas malas experiencias con el amor estaba simplemente aterrorizado. No quería perder una de las relaciones más maravillosas que me había concedido este lugar.
Entre esos momentos claves que mencioné, hay dos que fueron cruciales para el giro que tomó nuestra relación. El primero se trata de nuestro primer beso. Sí, ya nos habíamos dado muchos piquitos de mejores amigos antes, y no le tomábamos ningún peso. Pero esa vez se sintió distinto—no voy a entrar en detalles, ustedes háganse una idea—se sintió real, se sintió serio. Me encanta saber que para ella significó lo mismo, pese a que lo haya vuelto un meme y algo con lo que le encanta molestarme porque mi reacción fue demasiado… Cursi.
El segundo es, justamente, el momento del que les hablé en un principio. Fue digno de un drama. Cuando se salió de la sala fui corriendo a buscarla y preguntarle qué pasaba. Recuerdo haberla estado mirando con ojitos de amor mientras se desahogaba. Estaba genuinamente enojada, frustrada, celosa, casi que al borde de las lágrimas. Me preocupé y nuevamente me inundaron esas ganas de besarla, de abrazarla fuerte y no soltarla nunca más. Para ese último mes reconozco haber estado flirteando con ella descaradamente, así que no puedo decir que no entendía del todo eso de las señales mixtas. Llevábamos mucho tiempo en la misma situación. “Te amo, pero no quiero hacer nada con eso.” “Te amo, pero no estoy listo para una relación ahora mismo.” “Te amo y quiero estar con vos, pero no quiero poner en riesgo nuestra amistad.” Y me atrevo a decir que la noté exhausta.
Esa noche nos quedamos hablando hasta las más altas horas de la madrugada. Recuerdo haberle confesado mis miedos, y ella me prometió que aún si todo salía mal, siempre íbamos a ser mejores amigos. Entonces finalmente acepté. Finalmente me animé a perder el miedo y darle una oportunidad a lo nuestro, porque para ese punto yo moría de ganas de estar con ella.
Zoe siempre me inspiró una confianza que no sentí con nadie más. Si ella me dice que la tierra es plana y que el cielo en realidad no tiene ningún color, yo le voy a creer. Así como le creí ese día. Si ella me dice que todo va a estar bien, sé que lo va a estar.
Y acá es cuando vuelvo a agradecerle por la perseverancia, por no rendirse conmigo, no solo cuando éramos mejores amigos sino que también ahora. Sé que a veces es mucho más fácil empacar todo y mandarse a mudar, pero ella sigue acá, pegadita a mí. (Siempre que pienso esto termino cantando el rap de As long as you love me, it’s our silly little joke but it’s actually so accurate).
Entonces hoy realmente quiero celebrar, porque por más que estos cinco años hayan sido medio turbulentos, yo no lo cambiaría por ninguna otra cosa. Son siete años desde que conocí al amor de mi vida, y cinco desde que decidimos dar un pasito más, nunca dejando de ser mejores amigos sino que pasando a serlo todo el uno para el otro. Por eso lo digo y lo repito, me considero el tipo más afortunado del mundo por haber encontrado todo lo que siempre soñé en la personita que tengo a mi lado.
Por más que los años pasen, yo me enamoro todos los días un poquito más de ella. ¿Y cómo no hacerlo? Si es hermosa por donde se la mire. De verdad, es la mujer más maravillosa que me pude cruzar. Tiene un corazón de oro. Siempre me entiende y trata de hacer de este un lugar seguro para ambos. Un lugar donde los dos podamos estar tranquilos y felices. Con ella aprendí a hablar de mis sentimientos, a controlar (un poco) mis emociones, a perder el miedo. Me enseñó tantas cosas que no me va a alcanzar la vida para agradecerle, sin ella como referente quizás me hubiese conformado con la mediocridad, la banalidad, la monotonía. Me inspira siempre a seguir creciendo, a mejorar, a surgir, a formarme como adulto funcional y aprovechar todo mi potencial. Sé que no lo tuvo nada fácil conmigo, pero espero que pronto pueda ver que todos sus esfuerzos valieron la pena, que dieron frutos.
Pasamos por tantas cosas que de verdad es imposible volcarlas en un solo post. Solo quiero decirte que al final del día me encanta que sigamos siendo ese par de mejores amigos que se la pasan juntos, que se llaman todo el día para no sentir tanto la distancia, que se acuestan a mirar Los Simpson y usan sus referencias—las que solo los verdaderos fanáticos pueden entender—para todo, que les gusta compartir chismes, memes, reels como personas que se niegan a descargarse TikTok porque estamos viejos, y así con cada cosita que a simple vista parece simple pero es muy-muy nuestra. Y faltan un montón de cosas que no voy a mencionar porque se supone que esta es una carta apta para todo público. Pero me permito hablar de los cuchareos, del nanai, los mimitos en la oreja y el que me busques piojitos en la noche para dormir. Las maratones de Shrek, las pelis de terror, las noches jugando al Free que tanto extraño o ahora al UNO. El que me hagas bullying, que me digas que te doy cringe y que te rías de las cosas que menos espero. Me encanta nuestro espacio, nuestro bunkercito.
Verte crecer durante estos últimos siete años fue todo un privilegio. Y acompañarte como tu pareja en los últimos cinco es uno todavía más grande. Espero que sepas que no tengo intenciones de darlo por sentado nunca más. Me siento honrado de tenerte como mi pareja, mi compañera, mi partner in crime, mi alma gemela y mejor amiga. No quiero que nunca dejes de ocupar todos espacios que te pertenecen, y te van a pertenecer hasta el final.
Te amo infinitamente, Zoe.
Nunca había amado a nadie de la forma en la que te amo a vos, que de verdad siento que es infinita, interminable, indestructible. Si bien me gusta creer que estamos unidos por ese hilito rojo y que estamos destinados a volvernos a encontrar cuando nos separamos, la verdad es que yo deseo desde lo más profundo de mi corazón no volver a perderte nunca más. Quiero ser digno de vos, quiero estar a tu altura, quiero darte cosas buenas, hacerte feliz, encontrarte siempre a mitad de camino y ser todo lo que necesitás.
Feliz aniversario, mi princesa.
Cinco años son un montón, pero comparado con la eternidad que quiero pasar a tu lado en verdad no parecen nada. Que sean muchos, muchísimos años más, mi amor.
2 notes · View notes
Diciembre
Una batalla cuesta arriba, una escalada interminable, un cielo nublado que no es lo suficientemente gris para que llueva, pero tampoco lo suficientemente azul para llamarlo despejado, así se ha sentido diciembre para mí, 30 días de correr constantemente hacia un destino desconocido y detrás de esa frontera borrosa e inalcanzable... Y está el constante esfuerzo, una constante sonrisa falsa y ese tono de voz suave que intenta no llamar mucho la atención y que ahora llega a mí con naturalidad. Tal vez es por eso que a veces olvido que todo es falso, que solo estoy actuando, que ésto, este momento, estas personas, estas sensaciones, no son reales. Todo lo que está lejos de ti no es real. 
Pero volviendo a lo que decía... supongo que es por eso que dicen que ser amable es un arma de doble filo, el cuchillo que nos clavamos y blandimos ante los demás, rogando que no nos lastimen y al mismo tiempo... listos para lastimar. Así que esta noche llego de la clínica y me siento en la cama todo lo larga que soy. Trato de relajarme sin apretar mis puños contra las paredes, sin rasguñar la pintura con mis uñas cortas, sin batallar por respirar, sin sentirme tan jodidamente inútil. Al final del día, aunque otras veces ha sido peor, todavía se siente demasiado, así que trato de no pensar mucho en ello, de no pensar en la que dicen es mi enfermedad. No quiero recordar a las enfermeras clavándome agujas en la piel. Todo el día que pasamos en urgencias sintiéndonos tan pequeños y frágiles como en realidad somos los humanos, siempre tan propensos a rompernos. No quiero pensar en lo seca que estaba mi boca, incapaz de tragar ni el más mínimo bocado, con los recuerdos pesando sobre mi espalda como pesaban las sábanas en mi cuerpo en la unidad de cuidados intensivos hace un par de años, cuando el bullicio de los aparatos a mi alrededor era más fuerte que mi propia respiración.
Enfrentar tu propia mortalidad puede ser una de las más grandes epifanías humanas y mientras paso de médico en médico, creo que puedo entender por qué el universo se volvió... bueno, el universo. El universo solo después de estallar en un millón de pedazos, pudo mudar en otra cosa; solo puedes convertirte después de romperte y eso es maravilloso y aterrador al mismo tiempo. Uno de mis libros favoritos tiene una frase al respecto, sobre como el pájaro debe romper el cascarón para nacer y como ese cascarón realmente es el mundo, pero realmente no recuerdo muy bien cómo va... Entonces no pienso mucho al respecto y como quien entra en una cueva llena de murciélagos dormidos, paso a través de la vida con mucho, mucho cuidado, andando con la punta de mis pies, con palabras no dichas en la punta de la lengua, intento no romper el cascarón y ese delicado equilibrio que no me pertenece. Las cargas que nunca fueron mías para empezar, aunque me criaran para llevarlas. Cómo sé que ella nunca será feliz, y cómo dejé de preocuparme temporalmente por eso y solo hacerlo por mí, que estoy aquí metida. Lo que tal vez me haga una mala hermana, una mala persona, mala en todo en general y cómo ya eso tampoco importa demasiado porque, de qué sirve ser buena después de todo?
Todavía quiero intentarlo, ser feliz en momentos efímeros, sentirme completa, aunque eso no signifique nada en especial. Solo quiero demostrarme a mí misma que la vida puede ser mejor que la muerte, porque esta vida magullada, con un nudo en la garganta, con las rodillas raspadas, con las manos heridas porque él no está... es mi vida, mi hermosa vida, con mi tobillo malo que torcí sobrepasando mis límites, con la cicatriz en una parte escondida de mi bajovientre, cuando alguien decidió que no estaba destinada a dar nacimiento a mis propios deseos egoístas. Mi puta vida con el dolor fantasma en mi ojo izquierdo que guardo como un recuerdo de cuando mi cerebro hizo cortocircuito. Esta es mi vida y todo este dolor es una prueba de lo mucho que quiero vivirla y sé que suena raro viniendo de la misma niña que se llevó un cuchillo a la muñeca y una cuerda al cuello y se tomó un montón de pastillas cuando no tenía nada más. Pero aquí estoy yo, quien no pudo morir así que decidió seguir viviendo, porque no hay mejor forma de aprender a tener compasión de tus enemigos que cuando tu enemigo eres tú mismo, los químicos mal equilibrados de tu cerebro y tu sangre que parece fluir en tu contra.
Así que me separé, me desconecté y dejé mucho atrás porque es difícil avanzar con el peso de todos arrastrándote hacia abajo, especialmente en la cuesta arriba que ha sido este mes. Y me di cuenta de que no puedo llevar el mundo en mis hombros, así que le dije adiós a la esperanza de ver las cosas mejorar. Su salud, mi mente, la negación sigilosa de mi hermana a decir 'gracias' y mi negación impertinente a pedir 'perdón' por todas las veces que deseé morir delante de ella. Adiós a mi amiga que todavía cree que puede resolver todo con un abrazo, adiós a los hombres que pensaron que podían aprender de mí a amarse a sí mismos, adiós a cada persona que nunca ha preguntado cómo estaba, incluso cuando sentía tanto dolor. Ahora ataré una cinta de terciopelo a mi tobillo y me iré hacia un camino tomado muchas veces, pero desconocido en su totalidad para mí. 
Voy a sobrepasar esta montaña y cuando acabe intentaré estar mejor, lo juro, porque aunque el estetoscopio de las enfermeras mal pagadas nunca pueda oír bien mi corazón, juro que está latiendo dentro de mí, salvajemente, mientras lucho por llegar junto a ti, amor.
6 notes · View notes
ares-49789 · 2 years
Text
Cap 1
<<
6/3/2018
Hey diario, cuanto tiempo sin escribir, no?
Bueno, la verdad es que no lo hago por qué me apetezca, Pythy me ha dicho que lo haga, dice que me ayudará a manejar mis emociones mejor, como si fuera una niña pequeña.
La verdad es que se lo agradezco, es protectora conmigo, quizás será porque en parte es culpa suya el no haberme avisado de que mis padres podrían salir heridos hace dos semanas.
Digo heridos pero bueno para que mentir. Están muertos al parecer durante la pelea el edificio donde he vivido toda mi vida se derrumbó, aún no sé porqué pero Tobías está peor que yo
Dice que es su culpa aunque yo no lo veo así. Como decía mi padre la muerte llegará cuando y como tenga que llegar. Creo que son las palabras más sabías que dijo en su vida
Ahora vivo con mis tíos, es decir, los padres de Clara, obviamente no me voy a mudar a Argentina y perder todo lo que tengo aquí, además tengo que seguir entrenando con Pythy porque sí, a pesar de lo que parece sigo queriendo pelear, no voy a permitir que muera nadie más por mi inexperiencia.
Es difícil pero intento ir todos los días al campo de Tobías por suerte tras los ataques se cortaron las clases y lo he podido colar como un grupo de estudio especial, eso no significa que no estudiemos, de hecho Cristian ha resultado ser un buen profesor, es como si fuera a clase pero con un solo compañero y un único profesor que además nos enseñará a pelear.
Lo voy a echar de menos porque sí, mañana empiezan las clases normales de nuevo, ya quiero ver a Diana, hemos estado hablando por teléfono y está algo alterada desde ayer, cuando le pregunté me dijo que me lo diría mañana.
>>
TOC TOC TOC
Pythy se escondió rápidamente en un cajón de la mesa justo a tiempo. La puerta de la habitación se abrió tras los toques y Clara entró
-¿Cómo estás?
Preguntó la chica rubia
-Estaba actualizando mi diario, hacia mucho que no escribía en él
Contestó Helena levantándose de la silla del escritorio solo para sentarse en la que ahora era su cama ojeando un poco sus antiguas entradas en la libreta de tamaño cuartilla forrada con cuero negro
-¿Puedo leerlo?
Preguntó Clara, Helena la miró haciendo como que se lo pensaba a pesar de que su respuesta ya estaba clara
-¿Y eso que has venido a visitarme?
Preguntó Helena, su prima no solía ir a la pequeña habitación que ahora ocupaba ella
-La comida está lista, mi madre dice que después nos iremos tu y yo a hacer un par de recados porque tiene turno de tarde
Helena asintió para darse por enterada del plan. Cuando Clara salió de la habitación Helena la siguió poco después tras esconder su diario bajo el colchón de su cama
Las dos chicas caminaron por el pasillo hasta llegar a la cocina donde Aitor, el padre de Clara las esperaba, el hombre alto y pelirrojo, abogado ganador de mil y un juicios estaba vestido con un ridículo delantal rosa y blanco a rayas en el que las palabras "KISS THE COOK" estaban bordadas. A Helena le hizo gracia como siempre que lo veía así y comenzaron a comer.
La comida fue agradable como siempre, buena comida y buena compañía además como siempre Helena logró meter un par de trozos de pan en sus bolsillos para Pythy.
Una vez recogieron y limpiaron la cocina cada uno hizo lo de siempre, Aitor se tumbó en el salón para tomar una siesta hasta que llegara la hora de volver a la oficina. Clara fue a su habitación a estudiar un rato y Helena entró al salón y cerró la puerta, como si fuera un fantasma Pythy entró atravesando la pared. El kwami se tiró sobre la comida que Helena le tendía y pasaron el rato. Helena habló con Tobías, vió videos y en general se aburrió. Pythy por su parte estuvo entretenida con un circuito de vuelo que había creado entre los muebles de la sala
Unas horas más tarde Clara y Helena caminaban por la calle, mientras Helena cargaba con un carro de la compra Clara ojeaba la lista de la compra. No tardaron demasiado en llegar al supermercado, una vez allí empezaron a buscar los objetos anotados en la lista antes de ser interrumpidas por una voz familiar
-Hola chicas, ¿a vosotras también os han mandado a hacer la compra?
José empujaba un carro pequeño en el que había amontonaban diferentes tipos de comida precocinada
-Sí, pero ¿tu no estabas trabajando con tu padre?
Preguntó Helena
-Si bueno, solo por las mañanas, por la tarde me encargo de la casa
Explicó José
-¿No te ayuda Lukas?
Preguntó Helena mientras dejaba caer su peso en el carro que llevaba y había estado empujando
-Si me ayuda pero a lo que no es salir, ya sabes, hace las camas y limpia lo que toque, pero hoy solo está haciendo un trabajo de robótica
Explicó José
-Tiene sentido... Oye clara, ¿tu no ibas a robótica también?
Dijo Helena, Clara que había estado en silencio mientras cargaba el carro de la compra asintió
-¿Qué has hecho tú?
Preguntó José
-Un sigue-líneas
Dijo la chica antes de irse a buscar el siguiente punto de la lista para echarlo al carro
-¿Como te va?
Preguntó José a Helena, la chica se lo pensó un poco
-Es cierto que podría ir mejor pero no me puedo quejar
Dijo la chica tras su momento de pensar, era cierto que había sufrido un buen golpe con lo de sus padres , eso junto a la pelea que había tenido con su hermano mayor pero la ayuda y atención que había recibido por parte de Tobías y su abuelo
-Bueno, yo tengo que seguir haciendo la compra e ir a casa, no quiero que Lukas acabe por los aires de nuevo
Dijo José alejándose de la chica Helena miró a su alrededor en busca de su prima que había desaparecido de su campo de visión
No le tomó mucho tiempo encontrar a Clara y continuar con la compra, cuando esperaban a la cola para pagar en la caja registradora Helena pudo saludar a José de nuevo que ya salía del supermercado. Una vez pagaron todo fue cuesta arriba nunca mejor dicho, el carrito de la compra pesaba bastante y para ir a casa de Clara había que subir cuatro calles en una cuesta de 35°, básicamente la principal razón por la que se quejaban los habitantes de la ciudad. Esto era debido a la naturaleza del terreno en el que la ciudad fue construida, es decir, alrededor de una gran montaña, esto provoca que el centro de la ciudad esté en cuesta
-Helena, ¿Que tal va con Tobías?
La pregunta de Clara la pilló desprevenida, ambas estaban subiendo por el ascensor hasta casa de Clara en silencio cuando la rubia habló haciendo que Helena se sonrojara
-Bien
Contestó la chica, Clara sonrió de forma pícara, algo que solo hacía a solas con su prima
-¿Solo bien? Que yo sepa estás con el todos los días por lo menos diez horas, ¿Hay algo que no me estés contando?
Clara, la chica silenciosa que siempre se quedaba callada en cualquier situación social no era así en realidad, había una parte de ella que solo sus familiares conocían, la parte de la chica que adora molestar amigablemente a los más cercanos a ella y los romances, aunque para estos últimos prefería ser una mera espectadora
-N-no, ¿porqué debería?
Helena se llevó inconscientemente la mano a su bolsillo donde acarició el llavero que ahí guardaba
-No está tomando ventaja de tu pérdida para acercarse a tí ¿verdad?
El ascensor se detuvo en el piso de Clara y las chicas bajaron, Helena se sentía nerviosa igual que siempre que hablaba de estos temas con su prima
-No, ni siquiera le intereso
Dijo la chica, Clara seguía con su sonrisa grabada en el rostro mientras sacaba las llaves para abrir la puerta del piso
-¿Cómo lo sabes?
Helena pensó un poco mientras empujaba el carro dentro del piso cuya puerta Clara acababa de abrir
-Quizás porque te pidió salir hace apenas un mes
-Tienes razón per...
Clara dejó de hablar cuando sus ojos se detuvieron en la puerta abierta del salón, Helena siguió instintivamente la mirada de su prima y definitivamente no le gustó lo que vió
En el salón habían dos personas, la primera era el padre de Clara, Aitor que estaba sentado en el sillón frente a otro hombre que estaba de espaldas, Helena no necesitó que se girara para reconocerlo. Pelo castaño del mismo tono que el suyo, hombros caídos, baja estatura...
Aitor se levantó y con cuidado ayudó a una Helena demasiado pálida a entrar en el salón, cerrando la puerta para dejarla sola con el invitado
Este se giró y miró sonriendo de forma melancólica a Helena. Sus ojos remarcados por grandes ojeras y su pelo despeinado dejaba claro que no había tenido un buen día a pesar de lo bien planchada y perfecta que estaba su ropa
-Hey Helena, ¿Cómo te va?
La chica lo miraba con los brazos cruzados y una dura mirada en su rostro, como si quisiera hacer que desapareciera de la faz de la tierra. Porque así era
-¿No tienes una herencia que meterte por la nariz?
Palabras duras que normalmente no saldrían de la boca de la chica golpearon fuerte al joven de no más de 30 años
-No vine por eso
Contestó el hombre mirando a Helena fijamente
-¿Y a qué has venido entonces?¿A pedir más?
Contestó la chica, pegada a la puerta
-Solo quiero que pienses lo de venirte conmigo
Dijo el hombre levantándose de la silla, iba a caminar hacia la chica pero cuando esta levantó su mano él se detuvo
-No me voy a ir contigo
Dijo la chica, lágrimas saladas formándose en sus ojos. El hombre dió un paso adelante lentamente
-Eres mi herm...
-NO SOY NADA TUYO... No te me acerques!
Helena volvió a hacer al hombre detenerse, notaba como la velocidad de su respiración aumentaba poco a poco. Pero a pesar de ello intentó aparentar estar lo más serena posible
-¿A qué has venido?
Preguntó ella vigilando al hombre que tenía enfrente
-A pedirte que lo pienses de nuevo
Contestó el hombre con un movimiento exagerado de manos
-No hay nada que decidir, no me iré a país Vasco contigo, prefiero mil veces quedarme con el tío Aitor
Dijo la chica decidida. El hombre bajó la mirada al suelo
-¿No crees que te estás comportando como una niña malcriada?
¿Malcriada? Eso había dicho, y esa fue la última gota que necesitaba para colmar la paciencia de Helena
-¿Malcriada?¿Es enserio? Y encima lo dices tú, el idiota que durante años tiró las ganas de vivir de su padre por la basura. El gilipollas que sólo pensaba en la forma de conseguir dinero para pagar sus adicciones. El inútil que fue enviado con sus abuelos maternos porque su padre y su mujer no eran capaces de soportarlo un día más. El mismo al que un día de verano la policía vino a buscar a la puerta de casa y al que solo se le ocurrió fingir un desmayo para salvarse de la situación. El mismo que no llamó ni una sola vez en seis años, que ni siquiera hizo acto de presencia en el funeral de su padre... No te mereces ni que pronuncie tu nombre porque das asco, si, asco
Lo había hecho, había explotado, Helena no pudo detenerse a mitad de camino y cuando terminó su discurso solo pudo apretar los dientes mientras las lágrimas que había estado conteniendo ahora corrían por sus mejillas. Helena se dió la vuelta y salió del salón cerrando tras de sí la puerta con un fuerte portazo.
Clara, que había estado con su padre en el pasillo había escuchado todo y cuando Helena pasó a su lado corriendo en dirección a su habitación la intentó detener. Pero esto solo quedó en un intento porque su padre la detuvo y le indicó que entrara a la cocina. Clara hizo lo que su padre pedía y cerró la puerta detrás de ella para evitar la tormenta que se avecinaba.
Esta tormenta no tardó en llegar, Aitor era un hombre tranquilo y ordenado, cualidades que en su trabajo eran muy apreciadas, eso no significaba que no supiera ser "duro", todo lo contrario, era un hombre de mucha paciencia que era capaz de quemar todo lo dañino a su alrededor cuando explotaba. Y, en este caso, eso era Álvaro, el chico no tuvo oportunidad para defenderse, en veinte minutos se encontró en la puerta del apartamento.
Aitor había hecho que se sintiera mal por lo que había hecho de alguna forma que no podía comprender y es que el hombre no había usado la violencia en ningún momento, sino la forma de hablar que usaba cuando tenía que tratar con un caso difícil en el trabajo, es decir, de una forma tan arrolladora que el chico perdió la noción del tiempo.
.............................................................................................................
Helena pasó el resto de la tarde en su habitación pensando. Desde que tenía memoria siempre había admirado de alguna forma inherente a su hermano mayor pero nunca supo porqué. Pero entonces lo vió caer y recaer más de mil veces, haciendo que la vida de sus padres e incluso la suya se volvieran miserables de forma lenta. Así fue hasta que el sentimiento de admiración que sentía hacia él se volvió repulsión a la misma velocidad. A tal punto que él acabó por ser la razón por la que ella estudiaba, no quería acabar como él. Esto solo se volvió más fuerte cuando su padre lo mandó con los padres de la madre de su hermano. Fue ahí cuando Helena se decidió completamente a que nunca sería como él y ahí estaba, derramando lágrimas de nuevo por culpa de aquel idiota.
El único consuelo de la chica durante aquellas horas de soledad fue el conocimiento de que había gente a la que le importaba y que eso ya era más de lo que su medio hermano tenía. Además, la ayuda emocional que le daba Pythy solo por estar junto a ella era más de lo que podía pedir.
Al final la chica acabó por coger el sueño abrazada a la mosca gigante sin tomar en cuenta la humedad de su almohada que, debido a las lágrimas que había derramado ahora estaba empapada.
No escuchó tampoco el sonido de alguien tocando a la puerta de la habitación con cuidado, por suerte Pythy tuvo tiempo de esconderse antes de que Clara entrara silenciosamente. La chica caminó con cuidado antes de sentarse en la cama junto a su prima, Clara comenzó a presionar el hombro de Helena para hacer que esta despertara
Esto funcionó porque en cuanto la consciencia de Helena volvió a la realidad comenzó a buscar confusa a Pythy por un momento hasta que notó la presencia de Clara
-Oye, la cena está lista
Dijo Clara con su sonrisa amable en la cara para tratar de tranquilizar a Helena por los acontecimientos anteriores
-Vale, gracias
Contestó la chica incorporándose para ir a la cocina. Ambas caminaron por el pasillo en silencio respetando un acuerdo tácito que no tenía porqué mencionarse. Al final llegaron a la sala donde los recibió un sonriente Aitor, definitivamente Clara había heredado esa costumbre de sonreír en todo momento de él.
La cena estuvo bien, no hubo nada muy memorable porque la gran mayoría del tiempo fue un silencio algo incómodo interrumpido por algunos intentos por parte de Autor para animar a su sobrina. Intentos que a pesar de no ser totalmente efectivos siempre sacaban una pequeña sonrisa de Helena. Al final no fue mucho más que eso, ya que pronto llegó la hora de acostarse para poder levantarse pronto al día siguiente. Helena tenía que hablar con Tobías.
-----------------------------------------------------------------
Capítulo siguiente
Arcos | Introducción
2 notes · View notes
entrelineasyversos · 2 years
Text
Esto es algo que va más allá de mí, no sé que tengo sólo sé que me estoy ahogando en mí misma, mis pensamientos me están inundando poco a poco y que mi respiración se está acabando, mi corazón se siente más agitado, que por más que trato de dejar de pensar en ti ahí estás presente, una y otra vez. Me niego a buscarte pero lo quiero hacer y no lo voy a hacer.
Ya me cansé; por otro lado tengo el futuro mis manos. Soy la culpable, la responsable de mi futuro. ¿Cómo quieren que me haga responsable si no me dejan nadar contra la corriente? al contrario siento que la corriente me está llevando en un camino de perdición, uno en dónde tarde o temprano no voy a poder salir.
Todo me esta ahogando, mis propios pensamientos, mi propia respiración, la garganta se me cierra y mis pensamientos empiezan nublarse al igual que mis ojos. Quiero llorar pero, qué gano haciéndolo. Es lo mismo que buscarte. Para cuando regreses (si lo haces) será muy tarde y para cuando yo traté de buscarme a mí misma espero no lo sea.
Tengo miedo de vivir y cuando estaba muy segura de hacerlo era porque estabas a mi lado o al menos eso fue lo que siempre creí, ahora que trato de hacerlo por mi cuenta siempre estás presente indirectamente
¿Qué tengo que hacer para dejar de pensarte? acaso me tengo que mudar a otro planeta, dejar de ser yo y convertirme en otra persona. El tiempo es la mejor cura a todas las enfermedades y no quiere decir que estoy enferma de amor por ti, quizá me obsesione con una vida junto a ti y ahora estoy pagando caro las consecuencias
3 notes · View notes
inestablesad · 2 years
Text
Monologo 
Hola, soy yo; este adolescente casi adulto qué está en proceso de práctica, cerca del título (del tan esperado título por el qué muchos se desvelan en este país), pronto a terminar la carrera y qué no tiene ninguna huea más qué hacer, porque no tengo trabajo ni contactos a los qué recurrir para qué me ayuden a buscar trabajo. Es verdad qué hago clases particulares, tres días a la semana; una hora por día, pero no me generan lo suficiente como para comer tranquilo.
Como decía, soy un adolescente casi adulto qué no hace ninguna huea y al qué la etapa de estudiante se le está acabando po y fue aquí cuando me nacieron una serie de preguntas, yo con mis TOCS tengo la necesidad de ordenar todo así que hice una lista de las preguntas qué me nacen.
 Número uno: ¿Qué mierda voy a hacer cuando termine la práctica? La respuesta qué mis profes me dieron fue “hacer el proyecto de título” y si, pero después ¿qué chucha hago después?. Y me acordé qué debo el CAE, así qué voy a tener qué buscar trabajo para pagar eso. También pienso ayudar a mis papás, ellos me han dado todo y ahora me toca a mi aliviarles la vida. No he pensado tener hijos, porque es un gasto extra a plata qué no tengo y porque el instinto de papá aun no me nace. Eso de mudar guaguas, de preparar leche, levantarme en la noche, sacar hora al pediatra y todas esas bellas acciones, a mi no me han tincado. 
Mi abuela insiste en qué tenga el bendito hijo, pero yo primero quiero viajar, conocer distintas partes del mundo, después comprarme un departamento, estudiar otra vez y ahí recién tener un hijo, sorry guela pero no hay bisnieto todavía.
La segunda pregunta nace, precisamente, de mi abuela: ¿Dónde voy a vivir, ahora qué termine de estudiar? Insisto, si mi pega actual no me da para comer tranquilo menos me da pa´ arrendar un departamento. Y pensé, podría volver con mis papás pero sería como volver al huevo. Así qué llegue nuevamente a la conclusión de buscar un trabajo. 
Y la primera pregunta qué me encuentro cuando busco trabajo  es ¿Quién es usted? aquí nace mi tercera pregunta.
 ¿Quién soy? pues, pa´ responder esta pregunta tengo qué contar mi vida.
 Yo vengo de una familia bien pobre, qué ha salido adelante a punta de esfuerzo; qué muchas veces tenía la comida justa para qué solo uno comiera y me dejaban esa ración a mi. 
Tengo a mi papá, mi mamá y yo. No hay hermanos ni hermanas, si apenas teníamos comida pa´ uno de tres, no íbamos a tener para cuatro o cinco.
De chico fui bien feliz, porque yo no me daba cuenta de muchas cosas qué si ahora las pienso bien eran bastante tristes. Vivíamos con mis abuelos hasta qué yo cumplí cuatro años, de ahí nos independizamos porque la vecina me tenia mala. Esa vieja, mas mala qué el diablo, me tiraba agua cada vez qué me veía, me decía chuchas sin qué yo entendiera qué significaban y cuando le daba dulces a todos los vecinos a mi me dejaba mirando. Como yo era chico me iba llorando hasta donde mi mami y le preguntaba porque a mi no me tocaban dulces y usted cacharan que  una familia pobre muchas veces no tiene la plata para comprarle dulces a su hijo, o son los dulces o el pan. 
La cosa es qué mi mamá sufría al ver qué la vecina me tenía mala, así qué un día con mi papá se pusieron de acuerdo y empezaron a juntar monedas ps, hasta qué tuvieron lo suficiente como para una media agua. Mi abuela les dió un pequeño terreno y ahí nos instalamos, en literalmente cuatro paredes. Les juro, cruz pal´cielo, qué fui el cabro chico más feliz en esa media agua. Porque es verdad, nos entraba aire por todos lados, no teníamos baño con estanque de agua, ni ducha dentro de la casa, pero teníamos felicidad y amor. Y eso importa bastante, porque es muy difícil de encontrar en estos días.
La cosa es qué vivíamos en esa media agua. Mi papá trabajando por aquí y por allá, con el tiempo pudo ampliarla y convertirla en la casa qué ellos querían tener. Y cuando ya la tenían lista, vino el terremoto de 2010 y la hizo mierda, literalmente la partió en dos y la dejó inutilizable. No recibimos ayuda gubernamental de ningún tipo y mis papás tuvieron qué hacer otra casa con sus propias manos. Yo tenía catorce años en ese tiempo y estaba pasando además por un periodo bastante difícil.
Resulta qué a mi de chico me dejaron ser yo mismo, mi familia a pesar de ser un modelo patriarcal, machista y criado “a la antigua” me enseñaba a respetar a todas las personas. Mi mamá y mi abuela me enseñaron a ser yo mismo siempre, a no criticar a los demás y respetar las opiniones de cada persona. Pero a mis compañeritos de clase, en medio del campo, no les enseñaron lo mismo; y resulta qué yo siempre fui catalogado como afeminado, como maricón o fleto y no solo por mis compañeros, también me lo decían los adultos y los profesores. Llegó un punto en qué las frases como “Haste hombre” o “Eso lo hacen las mujeres” se volvieron bien comunes de escuchar y comenzaron a pesarme, a volverse molestas y a opacar mi esencia.
Llegó un punto en qué yo no quería ir al colegio, en qué no quería comer porque pensé qué estaba gordo (de cabro chico nomás pensé eso), un punto en qué cambiarme frente a otras personas o qué alguien viera mi cuerpo me producía temor, pero un temor cuatico qué me hacia hasta vomitar. Y era todo gracias al daño qué los comentarios le hacían a mi autoestima, a mi amor propio. 
Lo más triste es qué yo nunca le dije nada a mi familia, y qué varias veces ocultaba todo bajo sonrisas falsas y cólicos fingidos. Mi mejor amiga intentó decirle a mis papás pero yo insistí en qué era mentira lo qué ella contaba, y entonces las burlas se volvieron más intensas; a veces llegaron a golpes y empujones. Después se volvieron humillaciones y la vez qué me atreví a hablar con un profesor me dijo qué esas cosas me iban a servir para ser “Más hombre  porque me hacía harta falta”. Y no me ayudó ni una mierda.
Y crecí con esta autoestima de soy feo, valgo poco, nadie me va a pescar y varias cosas más. Cuando llegué al liceo las cosas no cambiaron mucho, porque seguían los mismos comentarios y las mismas preguntas. 
Pero había una pregunta a la qué yo le tenía terror, esa pregunta qué dice ¿tú eres gay? y qué evité por harto tiempo, haaaarto, así mucho. Sucede qué un día, en pleno tercero medio, me hice la misma pregunta. ¿Soy gay? y me respondí con mucha inseguridad: SI, SOY GAY.
 Contrario a lo qué yo pensaba, la respuesta no me dio tanto miedo. Lo qué la respuesta me entregó fue calma y entonces les dije a mis amigos y amigas (más amigas porque de chico tuve más amigas qué amigos): Saben, soy gay. Me gusta el niño del curso de al lado. Ellos no reaccionaron mal, ellos me abrazaron y hasta lloraron de felicidad. Ellos por primera vez me hicieron sentir correcto conmigo mismo.
Y después les dije lo mismo a mis papás y a mi abuelos, a mis tíos y a todos los qué me preguntaban. 
Conocí individuos en la universidad qué me hicieron crecer como persona, qué me aceptaron y me entregaron todo el amor qué mis compañeritos de básica no eran capaces de dar. Y me empecé a dar cuenta qué lo qué menos me importaba de mi persona era la sexualidad, qué eso daba lo mismo. 
Yo soy Patricio, de 21 años, 1,85 de altura, con 63 kilos. Al qué le gusta leer poesía y lo qué venga por delante, me gusta escribir y dibujar, bailo con Gloria Trevi, escucho a Joaquín Sabina, qué estudié psicopedagogía porque le gusta, qué tiene unos TOCS con el orden, qué le gustan los hombres, qué tiene muchos animales en su casa, vive en pleno campo, y tiene una familia qué lo apoya en cada decisión qué toma. ESE SOY YO.
Y me dí cuenta qué las dos mujeres más importantes en mi vida, mi mamá y mi abuela, nunca se habían equivocado. Qué ellas me enseñaron a perdonar y levantarme cada vez qué me caía. A no esperar qué alguien hiciera las cosas por mí, porque si ellas quieren algo lo hacen ellas mismas. Mi abuela siempre ha sido una mujer fuerte y de carácter firme y mi mamá siempre ha sido puro amor, perdón y compasión.
Ellas me enseñaron a ser libre y mi familia completa me aceptó. Mi papá lloró de alegría cuando le dije, porque por fin me estaba viendo de verdad; sin ninguna careta, sin ninguna sonrisa falsa.
Y así respondí a la pregunta de ¿quién soy?, soy PATRICIO, nunca menos qué yo mismo. y esa respuesta me sirve para saber qué voy a hacer ahora, al final del proceso de estudios y de práctica voy a seguir siendo yo. Viviendo de la manera en qué más cómodo me siento y no olvidando de donde vengo ni quien soy.
Por eso hago un llamado a los jóvenes a no limitarse en cosas como que preferencia sexual tenemos, qué color de piel nos tocó o quien es mas lindo. Hago un llamado a los papás para qué no le enseñen a sus hijos qué hay cosas de mujer y otras de hombre  porque eso puede ser utilizado para dañar el autoestima de un pequeño niño. Y hago un llamado a los profesores a no callar las injusticias, a no hacer vista gorda cuando los niños ponen sobrenombres a sus compañeros y enseñarles qué la identidad es lo más importante y qué no tenemos derecho de criticar al otro por ser diferente a mi. Y el llamado general es a ver la diversidad como la principal característica de cada individuo, gracias.
6 notes · View notes
nemominis · 8 days
Text
Siento haber tardado tanto en escribirte, me he tenido que mudar a otro edificio, ahora estoy en un noveno y tardo tres minutos bajando las escaleras, así que espero que te alegre saber que hago algo de ejercicio, aunque no salga mucho de casa. Zecille, mi primavera, desde que no estás París no es la misma. El otro día estuve con Paul y él también siente que todo ha cambiado. Nos pasamos toda la noche asomados por el balcón bebiendo vino y recordando todo lo que hemos vivido, escuchando jazz de fondo. Cuando el París de la posguerra se convirtió en el centro del arte y la cultura internacional, nos mezclábamos todos con todos y nosotros, unos simples estudiantes exiliados, nos creíamos los últimos artistas varguardistas. La facultad siempre estaba llena de inmigrantes eminencias en todos los campos debatiendo sobre absolutamente todo. Era como si todos los días se convirtiesen en domingo para un creyente. Era todo, Zecille. Sin parar de leer y estudiar para poder seguir el ritmo, porque tuve el privilegio de que el mismísimo Manuel Vallejo fuese mi profesor y me invitase a una de sus tertúlias en su estudio para conversar con escritores hispanohablantes de la talla de Emilio Borges o Amanda Bazán y que eso me cambiase la vida. Tenía que ir con una libreta a todos lados porque en cualquier momento se me ocurría un verso y no podía dejarlo escapar, para luego deshacerme las yemas de los dedos tecleando en la máquina de escribir hasta que me daba cuenta de que se había hecho de día. Era un no parar maravilloso. Y maravillosas eran aquellas tardes en las que Paul, tú y yo a hacíamos pícnics en el Champ de Mars y veíamos el atardecer frente a la Torre Eiffel; eran aquellas noches en las que se me deshacían las suelas de los zapatos por acompañarte a bailar al Barrio de La Latina; eran aquellas mañanas en las que despertaba a tu lado y eran los días enteros en los que no hacíamos nada más que fumar mientras tú me pintabas y yo te escribía, estudíandonos los cuerpos y las almas. Zecille, hiciste que el tiempo se parase cuando te fuiste. Ya no quiero escribir poesía si no te la puedo leer, ni ir a museos si no me vas a explicar las obras de arte, ni quiero París sin ti, por eso voy a dejar que mis lágrimas inunden el Sena y París se convierta en la Atlántida. Sin ti no hay estaciones, meses ni días, sólo un concurrir de horas vacías. Sólo deseo que un día salgas de uno de tus cuadros en el que nos pintaste y duermas conmigo.
Siempre tuya,
Nemominis.
0 notes