#pero me niego a ir a la cama

[poisonlove]

—Nuevos sentimientos; Wednesday Addams (p.2)

Autora: capítulo algo corto... pero me haré perdonar con la tercera parte

Disfrutan el nuevo sentimiento de Addams, la celosía.

Wednesday addams x lector

—Realmente T/N?- Pregunta sonriendo Enid.

Levanté la cabeza de las notas tomadas de Miércoles y miré confundida a la chica rubia.

¿Qué tenía de extraño copiar las notas de alguien más?

—¿Qué pasó?- Puse mi pluma contra el escritorio, al lado de los papeles. Miré a Enid y a la vampiro con lentes sentada a su lado, Yoko.

Estábamos fuera de la academia y decidí pasar la tarde copiando mis notas. No niego que me distraigo fácilmente a causa de las continuas habladurías y chismes que se intercambiaban los chicos, pero a pesar de todo seguía escribiendo.

—¿Estás haciendo tu tarea ahora?- Pregunta retóricamente la chica lobo, haciendo una mueca.

— Déjala en paz rubia, ha tenido un brusco despertar esta mañana, no es el momento- el tono de voz de Xavier era divertido. Le di un codazo en el costado. —¡Auch!- se frota dolorido la zona afectada, mirándome con indignación.

—Cállate- Miré hacia abajo y traté de ocultar mis mejillas enrojecidas.- ¿Por qué? ¿Qué pasó? - pregunta curiosa Yoko, dando un trago a su bebida.

— miércoles la tiró de la cama- responde rápidamente Xavier, haciendo reír a la mesa. — No es gracioso– dije avergonzada —Lo es- afirma Ajax, inclinándose entre risas hacia delante, colocando involuntariamente la mano sobre la de Enid.

Ambos se miran con las mejillas enrojecidas y rompen el contacto.

—Como sea, no teníamos tarea... así que, ¿qué estás haciendo? - Ignoré la pregunta de Xavier, enfocada en mirar a los dos tortolitos.  El artista aprovechó la oportunidad para tomar el papel de mi escritorio.

—¡Eh! Devuélvemelo- me volví hacia Xavier, alarmada y preocupada.

— Mira... son las notas de Addams- susurra, mirando hacia arriba desde el papel girando hacia mi dirección. Sus ojos miraban con sorpresa a los míos.

—Hablando de miércoles, ¿dónde está? Pregunta Enid. —No tengo ni idea... la última vez que la vi estaba en la clase de Thornill– contesté distraídamente, mirando a la rubia.

—Después de todo, esa chica es rara... pueden esperar cualquier cosa, interviene Ajax.

Abrí mi boca tratando de responder y defender a mi compañera de cuarto, pero no se me ocurrió ninguna respuesta. Me quedé en silencio, resignada

—notas de addams...- repite Xavier, como si estuviera en un estado de confusión.

—Sí, ¿y? Es solo papel... - dije encogiendo los hombros.—papel que me gustaría devolver- termino rápidamente, levantando una mano para agarrar los papeles.  Xavier se mueve rápido, arruinando mi intención de recuperar mis notas.

- ¡Vamos! - Dije fastidiada.

Estaba empezando a enojarme.

—Cálmate tigre, solo estaba mirando- Xavier voltea los ojos y deja los papeles sobre la mesa. — Gracias- Contesté sarcástica.

—bien, ¿quién tenemos aquí?- interviene alguien.

Me volví completamente hacia el sonido de la voz y me encontré con dos hermosos ojos azules. La muchacha me miró con una sonrisa deslumbrante,  jugando mientras tanto con el collar que tenía en el cuello.

—hola?- respondí insegura.

—Y/N?- preguntó, inclinando la cabeza hacia un lado.

Asiento con la cabeza lentamente.

—Soy Bianca— Extiende la mano. La miré durante una milésima de segundo y decidí devolverle el saludo, cuando tomé su mano la sonrisa en sus labios se hizo más extensa.

—¿Qué quieres Bianca?- pregunta Enid, girando los ojos molesta

— ¿Qué hay gatito, no puedo hablar con la recién llegada?- pregunta retóricamente Bianca, dedicándole una sonrisa burlona.

—no me llames gatito- gruñe la loba.

—Enid... calma, sólo me dijo su nombre- me confundí por su reacción.

Enid cruza los brazos y resopla, mirando desde otra dirección. Inevitablemente una pequeña sonrisa se extiende en sus labios cuando vislumbra la figura de miércoles caminando hacia su dirección, con un asunto apresurado y enojado.

Miércoles PoV

Estaba regresando del bosque, tenía ganas de ir a mi habitación para continuar mi novela, cuando una voz que me era familiar me hizo bloquear en el lugar

Me di la vuelta y vi a lo lejos a Y/N con sus amigos.

Volteo los ojos

Que asco  las relaciones humanas.

Casi se me abren los ojos como platos cuando veo a Bianca, la misma Bianca que me ganó y me humilló en esgrima, hablando con Y/N. No solo estaban hablando, estaba agarrando su mano.

Aprieto los labios y cierro las manos a puño, tan fuerte que los nudillos se vuelven blancos.  Me limité a respirar pesadamente, confundida pensaba en lo que me estaba pasando. Sentí una sensación desagradable en el pecho, un ardor y un deseo incontenible de matar a Bianca.

Y es extraño porque no es el deseo habitual de matar a los demás.

Que diablos me está pasando?

Aplasto los dientes y cierro la mandíbula. Por alguna extraña razón tengo que ir allí y alejar a Y/N de ese... ser

Y/N pov

- Y/N- me volví hacia el sonido de la voz y vi dos ojos negros mirándome fríamente. Miércoles Addams estaba frente a nuestra mesa. Una ligera sonrisa se extiende en sus labios para ver sus notas... pero lo reemplaza con una mirada más seria.

-oh Hola, Addy...- le sonrío.

Los ojos de Miércoles cayeron hacia abajo y cuando noté el rayo de su vista, noté que estaba mirando fijamente las manos unidas entre Bianca y yo. Rompo el contacto inmediatamente,ruborizándome.

Ni siquiera me dijo que no la llamara Addy.

—Mira un poco, filtro de instagram- dice Bianca con una media sonrisa. —Y/N vamos a la habitación, te ayudaré con la tarea, –dijo  Miércoles, ignorando completamente a Bianca.

—ok?- me levanté de la mesa y agarré los papeles.

—Vamos Cariño, quédate un poco... nos estábamos divirtiendo- Dice Bianca haciendo un puchero.

— Vamos- repite más agresivamente miércoles, apretando la mandíbula.

-será para la próxima...- digo avergonzada— ¿y si salimos esta noche? - propone maliciosamente.

miércoles ronda la mesa, caminando y parando a mi lado —estará ocupada, conmigo- remarca este último, mirando sin pestañear a Bianca.

Busqué ayuda con la mirada a Xavier o a Enid...pero vi que todos se habían ido sintiendo la tensión de guerra que había entre estas dos chicas.

-Toma las hojas y vamos- repite  miércoles, desafiando con la mirada a los ojos azules.

Sin decir una palabra tomo los papeles y miro tímidamente miércoles. La aura que transmitía Addy era más oscuro y aterrador de lo habitual.

— decide,Y/N- afirma con desafío Bianca.

Addams se queda callada, mirando fríamente a la chica frente a sus ojos.

Miércoles agarra instintivamente mi mano y trenza nuestros dedos, se gira y camina lejos de su rival dejándola con la palabra en la boca, arrastrándome a lo largo de los jardines. Recuperé el equilibrio y sonreí por la agradable sensación de sus dedos alrededor de los míos, su mano estaba notablemente fría, pero no era desagradable.

miércoles addams continuaba imperturbable su camino hacia nuestra habitación. Ignorando la agradable sensación que sentía en su mano y el calor que se extendía a lo largo de su cuerpo.

Y era diferente a la ira.

#wednesday addams x reader #miércoles addams

[ocasoinefable]

¿Cuántos años tienes?

¿Qué haces con tu vida, o que has hecho..?

¿Qué vas hacer..? ¿Qué eres? (Un avión de papel sobre la boca del agua, a veces medio floto, pero luego suelo hundirme, efecto de mi estructura natural, y quizás por terquedad me hago espuma hasta que me junto sobre la orilla y me vuelvo hombre o quizás lucero)

No sé que responder antes las preguntas que son directas a mí, me gustaría responder con alguna parábola y reír hasta que me olviden, pero no es un juego me repito mientras golpeó las motas del polvo de la mesa con las curvas que hago al soplar de la nariz... Bueno, pues... Tengo un problema con el tiempo, debería de ir con menos prisa. Ya verás que me adelantó a él y termino en su final, cuando era niña me convertí en adolescentes en dos noche y hice un revolución que terminó con mi rostro contra las almohadas llorando y echando a perder el maquillaje de dos semanas, destroce los tacones y los arroje con los maniquíes burlando sus pieles de metal, luego golpeo el reloj y me hice adulto, anduve por los parajes preguntándome sobre el sentido de la vida, la risa de una sombra, la inquietud de sentirse existir y no hallar respuesta a los dos contrapuestos del ser humano, el eje del bien y el mal o en su caso la percepción educada del mismo. De la nada, pero es más un ahorro de procesos (el saltar y decir de la nada), en cuestión, me vi en un trabajo anotando fechas y números esquivos al borde de las mesas, me vi detenido el bus mientras escuchaba conversación de largas horas de disputa; ¿Y ahora qué haré del almuerzo..? sí todo lo he consumido, sí los sabores saben a gastado, y que decir de el costo que tienen babear entre gustos y preferencias... ¿Qué haré al llegar y ver el tedio de la misma cama?, es la cama la que talla y pica. Pero quizás pienso sin ganas de que me vean; que es la costumbre de encasillarse y no ver, de ahorrar procesos y llamarle a cada segundo uno más, una horas más, un repetición de lo mismo y no ver si es diferente, así que hay que buscar cambios en días y no en minutos. Quiero contar varias cosas y las apunto en pequeños recordatorios. He dado la vuelta y he respondió: -tengo de 3 a 5 días que le toma una crisálida romper, tengo lo que dura un minuto para hacerse nieve un grano de lluvia al caer al mar, tengo un siglo para ser considerado historia, aunque no te niego que me gustaría tener lo que dura el sol en un día, pero al contrario duró lo que dure un puesta del mismo sol, lo mismo que le tomo a la mariposa, y esto sí que es curioso. sabes que más tengo, tengo unas antenas clavadas en las clavículas cómo las que tiene la carnaza de pez, y a veces tengo entre las manos la piel roja que deja flor al estornudar-, me causa algo de risa. Atendiendo de forma sería, "tengo 23 años de huida, y de recuerdo solo pocos segundos antes desaparecer" Quizás por preferencia, prefiero que me relegue a la espuma, o en palabras concretas me libera que no se me tome tan enserio o sería culpable de causar una idea incesta solo al pedir que tire de su propia voz y la vean, sería de piel y hueso y al final me enrollaría en un discurso que suele causar enojo solo porque no es lo esperado, sería bueno sí no estuviera tan casada de pensarlo en sus dos contrarios y saber que nadie me escucha porque no cumplo con la posición de ser escuchado, no tengo eso que catalogan como inteligencia (al no tener un fila de años, un renombre y un título en mi pared, solo un loco más, un letra y un minuto agregado al tiempo)

Tengo algo de sueño y quizás al despertar encuentre el porqué de esta idea enredada entre metáforas y fantasía.

#una carta

[fuckindamnrih]

✨🌙

No sé si esto es algo para mi, para ella o si es para las dos. Dejaré que salga como sea. Ahora mismo estoy sentada en la cama, escuchando Repeat Until Death de Novo Amor, y siento que necesito sacarlo fuera de alguna forma, quizás así esta presión en el pecho se vaya, o se relaje un poquito, no lo sé.

Releyendo todo lo que tengo escrito de todos estos meses me cuesta reconocerme, es como si en este último año haya disociado mi personaje de la persona que soy realmente, como si antes fuesen de la mano y ahora estuviesen separadas.

Siempre me había categorizado como una persona complicadita, quizás porque era un comentario recurrente dentro de mi familia. Desde lo de mamá, con la adolescencia tan solitaria que tuve, siempre he tenido un sentimiento y un pensamiento muy claro de soledad, que había nacido para estar conmigo misma y que lo normal era ir perdiendo gente por el camino, amistades, familia, personas especiales… Tan segura estaba que autosaboteaba las relaciones que iba formando, generaba lazos demasiado intensos, creo que eso a veces despertaba tanto interés en los demás que llegaba a ser tóxico, lo daba todo por la gente y me deshinchaba, era un tanto infeliz, aunque tratase de evitarlo a toda costa. Imagino que todo lo que viví de niña me ha llevado a tener esos pensamientos y esos comportamientos, pero también me ha ayudado a no tenerle miedo a la soledad, quizás por eso nunca doy un paso por nadie hasta que no estoy completamente segura.

Creo que esto me ayuda a entender el por qué no soy capaz de dejarla ir, de no querer perderla, de querer seguir compartiendo parte de mi vida con ella. Creo que cuando alguien como yo traspasa cierta frontera, se desnuda tanto, en tantos sentidos, hace de esa persona una parte de sí misma, es como si un cachito de ella estuviese dentro de mi, como si fuese un órgano vital que necesito para seguir viviendo. Quizás por eso me cuesta tanto olvidarla, por eso me niego y peleo conmigo misma para que no se vaya.

Hoy me desperté y me quedé mirando el techo un buen rato, quería escribirte y contarte qué había soñado, pero no puedo. Y es que, aunque no puedas leerme, aunque no llegues a saberlo nunca, no puedo evitar pensar que no quiero vivir sin ti, no quiero, no quiero volver a mirarte de lejos, no quiero olvidarte, no quiero no poder abrazarte, no quiero tenerte solo en mis recuerdos, no quiero, no quiero dar ese paso porque no quiero perderte. A mis ojos eres tú, tú, y lo tengo tan claro como lo tuve en el tren volviendo de Cádiz, ahí lo supe por primera vez, y nunca he dejado de saberlo. Después de todo lo que ha pasado, de todo lo que nos hemos dicho, sigo teniéndolo igual de claro, y estoy tan segura como no lo he estado en mi vida. No vivo de cosas efímeras, no vivo en una novela romántica, soy demasiado terrenal y he conocido a demasiada gente como para saber que cuando digo esto, es porque lo siento de verdad. Porque si esto ha sido real, porque si yo no me lo he imaginado y tú no me has mentido, yo soy para ti como tú eres para mí, me da exactamente igual todo lo demás, me da igual el momento, la situación, lo que diga la gente, nadie lo entiende porque no lo han vivido. Eres tú, lo eres y estoy tan segura que compraría mil billetes más a Australia, porque no puedo imaginar mi vida sin hacer mil locuras más por ti, como no me puedo imaginar no volver a besarte nunca más.

Escribir todo esto duele, no sabes cuanto, pero duele porque es real. Porque no es solo la música, no, es la forma de entender la vida, son los proyectos de futuro, es la forma de ser, es la forma de comportarse, son los gustos, los objetivos, es el deseo, es el humor, es el pasado, es todo y es más, no puedo obviarlo cuando es algo tan real que no me deja dormir.

El orgullo me puede muchas veces, sé que probablemente, llegados a este punto, no pueda compartir lo que siento y pienso contigo, pero creo que es más real cuando lo escribo que cuando me lo guardo dentro, y a veces hay que escucharse.

Creo que esta situación nos atropelló a las dos, que era difícil dar marcha atrás cuando no había voluntad de hacerlo, y creo que todo ocurrió porque era inevitable. Y eso solo lo entendemos nosotras. Estoy segura de una cosa, y es que de habernos conocido antes, de habernos mirado de esa forma antes, nuestras vidas probablemente serían muy distintas. Creo que ella no acaba de saber lo que quiere porque no quiere saberlo, por eso lo ve todo como si estuviese en una cajita de cartón. Porque no habría arriesgado todo por algo en lo que no cree, por algo que no siente, por algo que no quiere, y ahí yo me equivoqué. Siempre le he dicho que ella no entendía lo que era esto, que se iba a dar cuenta tarde, que, si de verdad lo supiese, no lo dejaría escapar, pero viéndolo con el tiempo creo que sí, que realmente lo sabe, en el fondo lo sabe y es por eso por lo que ha cambiado tanto. Porque cree que es algo que no se va a ir, y que llegará en un momento en el que esté preparada para dar pasos más largos. Pero en el fondo también sabe que la vida no es una película. Porque cuando piensas que algo va a pasar, es porque quieres que pase, no porque sabes que va a ocurrir. Creo que se le entrelazan tantos sentimientos que se le escapan, creo que siente una culpabilidad tan grande que la ahoga, creo que quiere tanto que se le empañan los ojos y no puede ver nada más, creo que es tan cobarde como lo he sido yo toda mi vida, creo que no quiere darse tiempo porque necesita caminar sobre una tabla firme, creo que cuando tienes algo que te sostiene, no es fácil dejarlo, y te agarras a todo lo que haga falta, porque si todo ha ido bien antes, ¿por qué no iba a ir ahora? Porque lo vivido pesa más que el futuro, mucho más. Y es que cuando se tiene delante la perspectiva de sufrir, aunque sea por algo que está hecho para ti, es muy difícil afrontarlo.

Creo que lo que no es capaz de ver es el porqué de todo esto, el dónde podría llegar y todo lo que traería consigo, ahí es a donde he llegado yo hace ya unos meses.

Estos días he soñado mucho, y en muchos de esos sueños estabas tú. Me pregunto si te seguiría soñando si te pudiese ver todos los días, quizás es la forma que tengo de recordarte. En este último sueño todo era tan real que creo que ese fue el motivo por el que me quedé mirando el techo tanto rato, porque no quería despertarme. Lo apunté para no olvidarme: Estábamos en una cala en San Vicente, habíamos cogido una pizzas, unos vinos y unas toallas, lo curioso es que las toallas eran exactamente igual a las que tengo en mi casa. Veníamos de estar con Edu, mi hermana Diana y la hermana de mi cuñado, habíamos estado jugando con las olas gigantes de la Lanzada y yo había intentado surfear haciéndolo estrepitosamente mal, ahí me di cuenta de que estaba soñando, era imposible hacerlo tan mal. Recuerdo que cuando llegábamos a la cala yo llevaba la sudadera blanca, esa que siempre te da ternurita, y te explicaba por qué me gustaba tanto ver la puesta de sol en Galicia, porque el sol te da en la carita, pero el viento frío del atlántico te hace estar acurrucadita en sudadera. Habíamos puesto música y no sé muy bien de dónde salía, pero como es un sueño, podemos imaginarnos que las piedras de la playa son altavoces. Yo ahí te contaba por qué creía que siempre me había fijado en ti, y por qué siempre me daba vergüenza saludarte. Era un sueño tan real porque el tacto era el de siempre, porque nos reíamos como siempre, y porque el sexo era igual de intenso que siempre.

Lo que más me duele de todo ese sueño es que podría ser real.

Creo que no me quiero desprender de ella porque queda mucho y porque no ha pasado nada. Porque quiero que siga aquí, porque quiero abrir mil botellas más y que no sea capaz de acabarse ni la primera copa, quiero volver a jugar al pádel con una pelota de fútbol a las 2 de la mañana, quiero seguir mandándole glovos al trabajo porque necesite chocolate, quiero volver a recoger mi cuarto porque viene a verme y que se piense que soy más ordenada de lo que realmente soy, quiero volver a cancelar un billete de tren por pasar 3 horas más con ella, sorprenderla en Sevilla en cualquier momento, quiero que se siga metiendo con mi acento cuando me enfurruño, quiero seguir mandándole puestos de trabajo hasta que pueda salir de un sitio donde no la merecen, quiero que me siga respirando fuerte en el cuello, quiero volver a mirar la luna con música de fondo y perder 30 pendientes por el camino. Quiero que sigamos haciendo competición de quién es más torpe de las dos, que me cueza una pizza porque el horno no funciona, que me lleve a la estación a 200 km/h porque es que no llego al tren, que me siga llevando a sus sitios favoritos, y yo llevarla a los míos. Quiero que me vuelva a sonreír con los ojos, quiero seguir diciéndole que cuanto más alborotado tiene el pelo, más bonita está, que el pelo recogido solo les sienta bien a las guapas, quiero que me siga contando historias que no le puedo contar a nadie más. Quiero seguir sentándome con las piernas abiertas porque es la única persona en el mundo a la que le parece sexy. Quiero seguir diciéndole lo mucho que la quiero y lo poco que me ha costado hacerlo.

Me encantaría tenerte conmigo ahora y hablar de por qué hemos llegado hasta aquí, pero creo que has decidido no saberlo.

No he podido borrar nuestra conversación. En los últimos destacados tengo un mensaje que me empuja hacia ti, y otro que me echa para siempre, a día de hoy no sé a cuál agarrarme, por eso trato de no leerlos. Lo que sí sé es el primero que destaqué, y es una de las veces que más te abriste conmigo, cuando lo leí la primera vez no me lo acababa de creer, a día de hoy me creo más a esa Ana que nunca. A aquella que se plantó en Madrid porque pensaba que le iba a decir que se acababa. A la canija que ni corta ni perezosa me cogió de fiesta y me largó todo lo que sentía sin titubear ni un segundo. A la que me metió un dibujo en la chaqueta con una carta que me hizo darme cuenta que me había metido en un jardín del que no quería salir. A la que me llevó a una sala de Jazz por primera vez en mi vida. Y a la que me dejó entrar en su vida de esta forma, pasase lo que pasase. En alguna ocasión me has dicho que ojalá pudieses darme todo de ti en algún momento, como si no me lo hubieses dado ya Ana.

Ojalá poder explicarte por qué para mi eres tan especial, por qué completas todo lo que soy y por qué el destino me arrastró a ti, aunque al principio escapase porque sabía que algo tan perfecto, no podía acabar bien. El otro día escuché On My Mind y creo que hay una parte de la letra que explica esto mejor de lo que lo hago yo:

Why on earth would I leave If you were everything I wanted you to be?

Eres tú. Lo sé.

[joalilujambio]

Hipervigilancia.

"Es cuando el cuerpo de una persona se pone en alerta máxima después de que algo le recuerde un trauma. El cuerpo actúa como si el peligro fuera real, aunque ya no esté presente."

Creo que por mucho tiempo he sido presa de la hipervigilancia, claro que no lo sabía. Ahora que se lo que es y como se manifiesta en mi todo tiene sentido. El mas mínimo roce distinto, un olor intenso, un sabor extraño, una sensación que no se siente lo suficientemente "bien". Examino mi actuar, me detengo, no se que hacer, me paralizo.

Trato de hacerlo a un lado, de concentrarme en el presente como me dicen mis doctores. Acepta, fluye, no te aferres, suelta. Soltar, aceptar, fluir. Creo que a veces lo logro pero el más mínimo detonante me pone en alerta. Al parecer alguna parte de mi cerebro piensa que estoy en constante peligro. ¿De qué? Tengo algunas teorías pero pareciera a veces que tengo miedo a todo y a nada a la vez. Escenarios que podrían parecer normales, cosas cotidianas, simples pero engrandecidas en mi cerebro al grado de causar temblores y hormigueos, dolores de cabeza, picazón, taquicardia, falta de respiración y un dormir inquietante. A veces puedo detenerme un segundo para evaluar la realidad. Me cuestiono constantemente si estoy siendo racional o irracional, loca o certera. A veces logro dejarlo ir y vivir el presente. Al menos tanto como me lo permite esa voz que llevo dentro a donde vaya.

Hoy pensé que fue un gran día a pesar de esa voz. Pude ignorarla pero debo reconocer esta ahí. Incluso pude darme cuenta de lo satisfactorio que es poder ver una película, leer, bañarme y estar a solas sin miedo, sin miedo a mi, a mi mente, a mi destino fatídico, a esa voz que no se calla, no se va por mas que lo intente. Esos instantes no son muchos, esta en aumento pero siguen sin ser muchos. Y a decir verdad no se cuanto durará esta etapa de flujo mental.

Ha querido atacarme con viejas obsesiones en las que los matices de mi sexualidad, moralidad y realidad quieren distorsionar lo que estoy viviendo. He logrado esquivarlos pero solo por un poco. No niego que hay ciclos que me atrapan sin darme cuenta, es tan fácil que me domine. Basta un reflejo, una imagen, un sonido. Hipervigilancia.

Hipervigilancia a la vida, a los instantes, a mis acciones, pensamientos, sensaciones, percepciones, a los demás, a mis sentidos, a mis miedos, a mi dicotomía irreconocible, a mi catastrofismo y básicamente a todo lo que pudiera representar un riesgo para mi por algo que al parecer esa voz sabe y yo no.

No se si me gustaría saber o esa voz solo peca de precaución pero el estado en el que me mantiene de huir o pelear me agota a un grado que pensar duele, hablar cansa, dormir cuesta y aún así me sorprendo a mi misma brindando cálidas sonrisas, abrazos, amor y más incluso en días que no quisiera poner un pie fuera de la cama. Quisiera dormir, apagar mi cerebro y encenderlo a conveniencia.

La hipervigilancia es como una adicción, tu cuerpo vigila más aunque tu ya no quieras ni puedas. Es una alarma encendida todo el dia incluso al dormir en donde puede soltar todas las posibilidades y aumentar mis obsesiones existentes o ser un poco mas creativo y pintarme escenarios nuevos que al menos en mi consciente no habían pasado hasta que me los muestra en lo que deberían ser sueños y no pesadillas.

Pueden preguntarme como lo hago, como se soporta esto y honestamente la mayoria de las veces ni yo se. Es difícil tratar de ayudar cuando no se tienen todas las respuestas a todas esas interrogantes. A fin de cuentas yo misma estoy conociendome a mis 35 años. Yo sigo equivocandome, teniendo miedos, angustias, días desesperados en donde no se que mas hacer y la hipervigilancia solo lo empeora, porque si no lo he mencionado, vigila solo lo malo o lo que cree puede salvarme. Llegado a este punto no se si es mi amigo o mi enemigo.

Aunque honestamente lo veo como un enemigo de un tamaño sumamente mayor al mio, negro, redondo, pesado que podría aplastarme sin dificultad. Y ahi estoy yo en la punta de un acantilado hablando de frente a esa cosa, esa bola pesada, como un ente sin forma pero que me intimida pero fomenta mi coraje para no dejarlo ganar.

Al menos hoy la batalla se ganó. Mi mente pudo ignorar esos escenarios obscenos tan vividos en mi imaginación pero tan lejos de mis anhelos.

#escritos de noche #toc #talktoc #trastorno obsesivo compulsivo #salud mental #reflexión #hipervigilante #psicologia #cuentatutoc #rompiendoestigmas #ocdvocate #ocd #lacaradeltoc #saludmental #saludemocional

[lyubimaboginya]

|| Don't you worry child ||

Observó la estación del tren.

Después de muchos años al fin había regresado a esa isla que tantos recuerdos le traía.

°•○●○•°

One shot inspirado en la canción 'Don't you worry child'

Este escrito esta narrado por Leo, contiene Fooligetta implícito, pero no se centra en la pareja.

Hubo un tiempo, hace algunos años, en el que Leonardo era feliz.

Solía tenerlo todo, tenía muchos hermanos con los que vivir aventuras, tenía tíos que lo cuidaban como si fuera su hijo, tenía un lugar al que llamar hogar y, sobre todo, tenía una familia que lo amaba.

Tenía a su papa Vegetta, un hombre con la fuerza de 100 guerreros, las habilidades de un elfo (ventajas de ser parte hibrido) y que además era el hombre más inteligente de toda la isla y sus alrededores.

También tenía a su dada Foolish, un híbrido de tiburón que fue bendecido, con una esperanza de vida mayor a la promedio, por los dioses gracias a su devoción a ellos a traves de sus construcciones.

Si, definitivamente Leonardo lo tenía todo; incluso sus hermanos solían bromear diciendo que él era una especie de rey y que había nacido en un trono de oro.

Pero esos días en los que lo tenia todo se habían ido hace mucho tiempo.

Llegó al primer lugar que iba a visitar ese día, su cuarto en la torre de su papa.

Observó la estructura desde afuera. El pasto había crecido bastante, el ascensor de afuera ya no funcionaba (posiblemente porque el del balcón se encontraba destruido), a la derecha pudo observar un hueco en la muralla del zoo, lo más seguro todos los animales se fueron hace tiempo, de su casa del árbol solo quedaba una parte del tronco.

Contuvo las lágrimas y entró a la torre. Subió directo al último piso, no quería imaginar lo que había pasado con los pobres aldeanos.

Al llegar al que por mucho tiempo llamó su hogar lo atacó la nostalgia. En cada rincón de esa habitación podía ver los recuerdos de lo que fue su familia.

La chimenea frente a la que jugaba al pilla pilla con sus papás, la esquina donde ponia la cama de su gato Chipotl, los espacios vacíos donde antes estaban los cuadros de su familia y, en la parte de arriba, su cuarto. Si cerraba los ojos y se concentraba aún podía escuchar a su dada contándole una de sus peculiares historias.

Una lágrima cayó por su mejilla al pensar en que todos esos recuerdos ahora solo existían en su mente.

Todavía recordaba comó todo cambió.

La Federación del QSMP había citado a todos los habitantes junto con sus hijos en el centro de la isla para darles un anuncio.

No recuerda muy bien lo que pasó cuando estuvieron ahí, era demasiado pequeña.

Recuerda su emoción al enterarse de que iba a poder pasar tiempo jugando con sus hermanos. Recuerda haber visto a sus padres un poco preocupados, pidiéndole que se pusiera su armadura y no se la quitara en ni un momento. Recuerda haberse aburrido de esperar a que llegaran todos.

Incluso recuerda tomar una foto en la que se veía de fondo la torre en la montaña de su papa y el dragón en el mar de su dada, foto que aún tenía en su álbum junto con las pocas que había logrado salvar.

Después de eso todo es borroso. Tiene algunos flashes de lo acontecido. Pequeños fragmentos del evento, pero nunca la historia completa.

'La dragona ha vuelto y...' '...deberán entregar a...' 'Me niego a dejar que mi hij...' 'Si no lo hacen ellos suf...'

Pero si hay algo que nunca podrá olvidar es la sensación de su corazón rompiéndose al escuchar las palabras de su papa cuando todo empezó a ir mal.

—Don't you worry my daughter —vio a su dada arrodillarse para estar a su altura mientras su papa apoyaba una mano en su hombro y con la otra sostenía una de las manos de su dada.

—Leo, mi niña —podia ver la tristeza en los ojos de su papa, tenia la misma mirada de cuando tuvo el accidente con una ballena, esa misma mirada que prometió no permitir de nuevo. — Quieren que vayas con tu mamá dragona.

Abrazó con fuerza a sus padres, se negaba a ir con ella, no le importaba si era su madre, ella los había abandonado a su suerte y prefería quedarse con sus padres.

—Don't you worry my daughter —la voz de su dada, usualmente juguetona y despreocupada, sonó más seria que nunca.— We won't let her take you.

De fondo escuchó un fuerte rugido y pronto los gritos comenzaron.

Observó la mesa junto a su cama encontrando la pulsera que solía usar todos los días para que sus padres supieran sus pronombres sin tener que preguntárselos.

Había dejado de usarla desde ese día.

Hubo un tiempo en el que solía identificarse seguido como Leonarda, se sentía cómoda siendo una niña y nadie en la isla había tenido problemas cuando un día sus padres les dijeron que ahora ese era su nombre.

Ahora llevaba unos años siendo solo Leonardo pues cada vez que pensaba en ese nombre lo asaltaban los recuerdos de su infancia y todo lo que había perdido en unos pocos minutos.

A veces creía que nunca se sentiría completamente feliz volviendo a ser Leonarda.

Guardó la pulsera en su mochila y continuó su viaje a su segundo destino, el dragón de su dada.

Llegó a donde solía estar la gran estatua de un imponente dragón, encontrando ahora solo un fozo de obsidiana donde antes había un hermoso mar.

Contuvo un sollozo al ver el trabajo de meses de su dada arruinado por el capricho de una dragona que no tenía el derecho de que la llamaran madre.

Con el pecho doliendo apartó la vista del lugar y empezó a caminar a su último destino pues no quedaba nada que ver del antiguo hogar de su dada.

Le tomó un tiempo subir la montaña; sabía que podía usar sus alas para llegar más rápido y sabía que su papa la regañaria si supiera que no estaba usando todas las habilidades que tenia para ser más eficiente, pero no se sentía correcto usarlas en ese momento.

Al llegar a la cima vio la figura de las 2 personas que lo estaban esperando en su último destino.

—Ey Leo, ¿estas listo? —asintió sin poder formular palabras pues sentía que si lo hacía empezaría a llorar.

Tomó a ambos de la mano y juntos entraron los 3 al pequeño monumento que había creado la Federación poco después de ese día.

Al llegar al centro dio una mirada a cada uno y se separaron para acercarse a diferentes estantes. De su inventario sacó un ramo de claveles blancos y tulipanes morados y naranjas que colocó con cuidado en dos floreros junto a una foto.

De fondo pudo escuchar a Dapper susurrando algunas palabras con la voz entrecorta y también pudo escuchar a Bobby sollozando, pero no prestó atención ni volteó; a pesar de haber ido los 3 juntos llegaron al acuerdo de que dejarían que cada quien se desahogara sin interrumpirse.

Observó de nuevo la foto y, por primera vez en el día, se permitió llorar.

—Dada, papa... don't you worry about me. You taught me to be strong and I will stay strong —cerró los ojos y susurró. — I love you —levantó la mirada leyendo el grabado abajo de la foto.

'En conmemoración a Vegetta y Foolish. Dos grandes guerreros que dieron su vida defendiendo a la isla.'

#fooligetta #foolgetta #foolish x vegetta #qsmp leonarda #qsmp vegetta #qsmp foolish

[mashihope]

[Goodbye tests, hello summer! 1/2] || Bangchan, Stray Kids

• Miembro: Bangchan

• Grupo: Stray Kids

• Aviso

• Sinopsis: El curso está a punto de acabar, solo te quedan tres exámenes para ser libre durante el verano. La parte mala es que son todos el mismo día... Y la parte todavía más mala es que ese día es mañana. Tu novio, Chan, te está animando más que nunca para que te salgan bien.

"¡No puedo seguir con esto!", dijiste tirándote en la cama con el libro sobre la cara. "¡Estoy harta!"

"Y/N. Aún no hemos terminado. Si acabamos pronto te dejaré elegir la próxima película cuando vayamos al cine.", dijo Chan sentándose en el borde de la cama. "No. Me niego. Como vea una sola ecuación más voy a lanzar el libro por la ventana.", dijiste sentándote de golpe amenazando con tirar el libro al otro lado de la habitación. "Mira, justamente, toda esa energía que quieres emplear en romper el cristal de la ventana, la puedes usar para seguir estudiando.", dijo quitándote el libro de las manos, sabiendo que eras capaz de hacerlo.

Te dejaste caer otra vez sobre la cama, tapándote la cara con las manos. "¿Y si no soy lo suficientemente buena y suspendo los tres? ¿Y si no me acuerdo de nada cuando tenga la hoja delante? ¿Y si...?" "Bueno...", te interrumpió y cruzó los brazos, "En ese caso me aseguraré de no volver a decirte nada sobre ir al cine en todo el verano. Porque te quedarás estudiando hasta que empiecen las clases otra vez." "¡Chan! ¡No es justo!", te levantaste una vez más y agarraste su brazo, protestando. "Lo que no es justo es que estés perdiendo el tiempo quejándote en vez de estar estudiando para evitar eso de lo que te estás quejando precisamente. Levanta el culo de la cama y ponlo sobre la silla antes de que me enfade y te deje aquí sola con todos los libros y los apuntes.", decía al mismo tiempo que tiraba de ti para llevarte de nuevo al escritorio.

"Eres insoportable a veces.", murmuraste mirando el cuaderno tras hacer un sonido de disgusto. "¿Cómo dices, Y/N?", la cara de Chan se asomó por encima de tu hombro, frunciendo el ceño. "¡Decía que te quiero mucho! ¡Tanto que voy a seguir repasando la parte esta de las ecuaciones!", señalaste varias veces el cuaderno, tocándolo de forma agresiva. "Eso pensaba.", se separó de ti y volvió a sentarse en el suelo, ordenando la montaña de apuntes que habías dejado en un rincón. (...) "Eh, Y/N, la cena está lista, puedes...", hizo una pausa después de mirarte, cerrando la puerta a sus espaldas. Se acercó a ti y se sentó a tu lado, en el suelo. "Has terminado por hoy. Siempre te digo lo mismo, pero, no necesitas sacar la nota más alta de la clase, solo tienes que aprobarlo.", empezó a decir mientras te acariciaba la cabeza. Te habías rendido un cuarto de hora atrás, poco después de que Chan saliera para preparar la cena. Tus padres no habían llegado todavía y había preferido encargarse él de eso y dejarte tranquila para que pudieras seguir estudiando. Pero, de un momento a otro, el estrés había llamado a tu puerta una vez más y habías dejado todo de lado para sentarte en el suelo a llorar, con la cabeza sobre los brazos y estos sobre las rodillas. "Es inútil. Voy a suspender.", pensabas una y otra vez. "Has hecho todo lo que has podido y más... Aunque hayas sido tan cabezota y te hayas rendido cada día unas... ¿Seis veces?", negó para sí mismo y dejó descansar la mano sobre tu hombro. "Míralo por el lado positivo." Levantaste la cabeza para mirarlo durante unos segundos, con los ojos hinchados y rojos. Las lágrimas seguían cayendo por tus mejillas y Chan las secó suavemente con el pulgar. "No hay nada positivo en esto.", dijiste volviendo a bajar la cabeza. "Sí lo hay. Mañana harás los exámenes, después de eso podrás descansar, y cuando recibas los resultados te darás cuenta de que estabas exagerando porque habrás aprobado los tres.", dijo dejando un beso dulce en lo alto de tu cabeza. "Piensas que soy más inteligente de lo que soy en realidad.", dijiste limpiándote los ojos con las manos, dejando ver tus mejillas sonrojadas por el beso. Chan dejó escapar una risita al darse cuenta. "Bien, hagamos algo. Si apruebas, ¿hay algo que quieras o algún sitio al que quieras ir?", dijo confiando en tu respuesta. "¿Recuerdas ese parque de atracciones al que fueron Minho y Jisung hace un mes?", Chan asintió en silencio, intentando esconder la sonrisa que se estaba empezando a formar en sus labios, "Bueno, me habría gustado ir. El problema es que anoche estuve intentando pedir las entradas por internet y estaban agotadas... Así que, olvida eso. Minho me dijo que abrieron hace poco una cafetería de esas con gatos por aquí cerca. ¡Tenemos que ir!"

Chan te dedicó una sonrisa finalmente y se levantó, tendiéndote una mano, "Levántate, es hora de cenar." (...) Ha llegado el día. Estás delante de la puerta, en cuanto pases por ella te enfrentarás al primer examen. "Quiero que entres y salgas de aquí sin arrepentirte de nada, ¿vale?", dijo Chan poniendo las manos sobre tus hombros con una expresión seria. "¿Y si...?", empezaste a decir de nuevo y Chan puso un dedo sobre tus labios, interrumpiéndote. "No. Vas a entrar ahí y te vas a comer el examen." Tu barriga dejó escapar una queja, recordándote que los nervios no te habían dejado desayunar. Chan soltó una carcajada, "No lo decía tan literal." Te apoyaste sobre la pared, deseando que el timbre sonara por fin para poder entrar y empezar el examen. "¿Qué pasará si suspendo todo? ¿Me quedaré aquí otro año mientras tú vas a la universidad?" "En ese caso me acordaré de cobrarte las clases particulares para el próximo curso.", se encogió de hombros, con una sonrisa. "¡Oye!", le diste un golpe en el brazo, haciendo que se riera. "Al menos tendré más dinero para comprarte algo que te guste.", volvió a reírse. Estabas a punto de darle otro golpe cuando el timbre sonó. "Salvado por la campana.", dijiste girándote hacia la puerta. "Suerte. Lo vas a hacer bien, cariño, ya lo verás. Confío en ti. Nos vemos a la salida.", lo viste alejarse por el pasillo, después de darte un beso en la mejilla. "Suerte a ti también...", murmuraste cuando ya no te podía escuchar. Sabías que él también tenía que hacer un par de exámenes, aunque no hubiera dicho nada para que no te preocupases por él. Dejaste escapar un suspiro y entraste a la clase. (...) "¿Y bien?", dijo Chan con una sonrisa, dando saltos en el sitio como un niño pequeño, tras verte salir de la clase. Acababas de hacer el tercer y último examen, era hora de volver a casa. "Lo sabré mañana.", encogiste los hombros al responder y te quedaste quieta, mirando el suelo. "Ya está. He acabado por fin.", te llevaste las manos a la cara para esconder las lágrimas que habían empezado a salir. Chan se acercó a ti rápidamente y te abrazó, dejando un beso en tu frente. "Sí. Lo has hecho muy bien y estoy muy orgulloso de ti."

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[lyon-amore]

¿Qué pasaría sí...? Duskwood Capítulo 25

Capítulo 24 ------------------------------------------------------------------------------------------

*Macie POV*

No... No podía ser su voz...

Levanto la vista de la pantalla y veo que de una de las puertas de un cuarto está Jake asomado. No puedo evitar en llorar al verle. Lo primero que hago es correr hacia él, abrazándolo.

Jake cierra la puerta y me abraza con fuerza. Estoy temblando. Son demasiadas emociones juntas.   —Hola Macie —me contesta con voz suave, pero puedo notar su cuerpo nervioso. Está temblando. Como yo.   — ¡Jake! —vuelvo a repetir su nombre, enterrando mi cara en su cuerpo.    Me aferro más a él. No es uno de esos momentos de mi imaginación ¿verdad? Él está aquí. No dejo de llorar. Pensaba que él... ¡Dios mío! ¡Está bien! ¡Está bien y me está abrazando! ¡No es mi imaginación!   —Lo siento mucho —me dice mientras me acaricia el cabello, tratando de calmarme—. De verdad que lo siento mucho.    Niego con la cabeza. No tiene que disculparse, lo ha conseguido.   — ¿Has combatido el ataque de los hackers? —pregunto, mirándole a los ojos.   —Sí —Jake pasa su mano por mi cabello, quitándome los mechones que se me han pegado a la cara por mis lágrimas—. Los he parado en el último segundo.   —Tenía tanto miedo —admito, intentando controlar mi respiración. Está demasiado agitada—. Desapareciste y... Ahora me hackean...   —Es todo mi culpa —no para de mirarme nervioso. Le estoy poniendo nervioso, pero no puedo evitarlo, tras las palabras de Brian, no me sentía segura estando sola—. Lo siento Macie —me sienta en la cama poniéndose él en cuclillas, en frente de mí, cogiéndome las manos—. Déjame que intente explicártelo —asiento intentando controlarme. Me duele el pecho de tanto llorar—. Tuve que desaparecer, tal y como veía venir. Y había subestimado a los que me perseguían. Estaban más cerca de lo esperado.   —Pensé que estabas muerto —confieso— ¡Pensé que algo te había ocurrido!   — ¡No! Mira, lo ves —coloca mis manos en su cara.    Le acaricio con cariño, para apoyar mi frente en la de él. Suelto una risa nerviosa, pero feliz.   —No vuelvas a hacerme esto jamás —le digo entre sollozos.   —No lo haré, no te preocupes... —me acaricia la mano con cariño— Seguramente te habrás podido imaginar que programé Nymos para protegerte.   —Sí, fue bastante obvio —poco a poco comienzo a calmarme.   —No podía descartar que los que me persiguen iban a ir a por ti —me confiesa—. Aunque me pareció poco probable.    De no haber sido por Jake y su programa, quizás no estaría aquí. Me ha salvado la vida.   — ¿Por qué no me avisaste? —le pregunto en lo referente a Nymos— A lo mejor entre los dos hubiéramos podido pensar en algo.   —Porque no pensé que llegaríamos a tanto —es increíble que pueda controlar su voz calmada, pero estar temblando. Quiere intentar ocultarme que también ha pasado miedo—. Seguramente no era el plan de presionarte de los que me persiguen, me los volví a encontrar antes de venir a Duskwood, por eso tardé en contactar contigo, aún seguía sin ser seguro.   — ¿Eran los mismos que de la última vez? —pregunto, para saber si Brian estaba en el equipo o no. Quizás me ha mentido y se lo había encontrado de nuevo.   —No, esta gente era otros —cambia de sitio, sentándose en la cama a mi lado—. Estaban buscándome bastante de cerca, tenía que ser más precavido. Pude ver claramente a través de cómo actuaron y procedieron que de repente estaban cambiando su estrategia.    Respiro con calma. Eso significa que aún sigue funcionando el plan de Lilly y mío.   —A eso solo digo: I Am Jake —digo, intentando relajarme.    Veo como poco a poco se le forma una sonrisa.   —Lo vi, Macie —noto como deja de temblar, ahora parece más bien emocionado—. En el metro. En las calles. En cachos de conversaciones de gente —le sonrío feliz de forma de hablar—. Tu mensaje me acompañó durante todo el tiempo.    ¿Entonces también ha leído mi artículo? ¡Qué vergüenza! Pensaba que como no podía conectarse a internet, quizás no lo podía haberlo leído ¿o lo habrán sacado a papel?   —Querías que Lilly y yo trabajáramos juntas —pongo los ojos en blanco, recordando cómo antes Lilly y yo discutíamos antes. Estoy segura que para él, era importante que trabajase con su hermana— ¿Te ha ayudado?   —Claro —suelta una risa, nervioso—. Me ha dado una ventaja de tiempo enorme. Esto no lo había hecho nadie por mí en mi vida... Me refiero a algo parecido —me río sin poder creérmelo. Creo que estaba exagerando—. No sé cómo expresarte lo agradecido que estoy.    Aparto la mirada, un poco avergonzada. Todas esas veces que había imaginado con él, ahora no podía hacerlo, era demasiado. Aun así, estaba feliz de tenerlo de vuelta. Creo que con eso me bastaba como agradecimiento.   —No hace falta —contesto, dedicándole una sonrisa.   —Espero que algún día encuentre las palabras adecuadas para ello —su sonrisa es cálida. Echaba de menos esa sonrisa.    Nos quedamos un rato mirándonos.

Cojo su mano y entrelazamos nuestros dedos. Echaba de menos volver a tener este contacto con él. Despacio, nos vamos acercando y para cuando nuestros labios se rozan, el ordenador emite un sonido.   — ¡Ya está! —se aclara la garganta, nervioso. Se levanta y maldigo en mi cabeza al ordenador—. Perdona, cuando veía que fallaba, como dije, paré el ataque mientras puse el programa a repararse —escucho cómo de rápido teclea ¡Ah! ¡Cómo echaba de menos ese sonido! Todo su cuerpo tapa la pantalla. Uf... Echaba de menos estas vistas... Vale, me estoy pasando... Pero es que le echaba completamente de menos ¿al menos puedo disfrutar de eso?—. Nymos me informa en el momento que hay alguna actividad sospechosa en tu móvil —apaga la pantalla y vuelve a mirarme, apoyándose en la mesa—. Suerte que lo primero que he sacado en el ordenador.   — ¿Y cuándo has llegado? —pregunto, intentando secarme la cara todavía mojada.   —Hace no mucho, se podría decir que acababa de entrar al cuarto —dice mirando a su alrededor—. No es muy guay, pero está bien.   —No pensé que vendrías aquí...   —Podría decir lo mismo de ti —noto un poco de molestia en su voz— ¿Cuándo has llegado?   —Seguramente antes que tú, había regresado de comer un poco. Y estoy aquí por trabajo —contesto, con un pesado suspiro—, a mi superior le encanta ver cómo la gente que ha sido falsamente acusada pueden ir a por ella los habitantes del pueblo —no puedo evitar sonar enfadada. Si no fuera por la idea de Christian, creo que ni si quiera hubiera venido y no hubiera visto a Jake... Bueno algo positivo en todo esto.    Me fijo que no tiene tanto material de trabajo como antes. Solo el portátil.   — ¿Y el resto de tus cosas?    Mira el ordenador y luego a mí.   —Pude llevarme algo de mi equipo más importante, pero tuve que dejar el resto —suelta un largo suspiro—. Al menos lo preparé para que no se pudiera acceder.   —Me alegro —sonrío aliviada— ¿Qué tengo que hacer si vuelven los atacantes?   —No te preocupes por ello —se acerca a mí, pero esta vez se mantiene de pie. Alzo la vista para verle hablar—. Seguiría recibiendo un mensaje por parte de Nymos. Pero te dejarán en paz —sonríe con orgullo—. Ya me he ocupado de ello.    Noto como mi cara arde. Esta posición no es para nada buena. Me levanto de la cama, caminando por el cuarto, imitándole.   —Y por esos enigmas... —comienzo a decir, hasta parar de caminar y mirarle con una sonrisa— Fueron divertidos.   —Me alegro de que lo digas —se rasca la nuca, algo incómodo. Era el momento de hablar del gran secreto de Jake... Lo que ha estado ocultando todo este tiempo—. Tenía la sensación de deberte la verdad —su voz suena ahora triste. El ambiente feliz había desaparecido—. Y no sabía si aún podría decírtelo en persona.    Pues lo único que hizo fue que me sintiera peor.   — ¿Pero por qué los tenía que resolver justamente con Lilly? —finjo estar molesta. Jake no sabía que ahora éramos amigas, estoy seguro de que se alegrará de la noticia cuando se lo diga.   —Porque pensaba que esto haría que dejarais de discutir —me mira firme. Ay Dios... Me derrito—. Teníais que trabajar juntas no en contra —se ablanda un poco, sonriendo—. Y como habéis resuelto el enigma, por lo visto ha funcionado.   —Oh, créeme, funcionó el trabajo en equipo, ya nos llevamos mejor —suelto una pequeña risa—Y... Has elegido mi nombre como clave —recuerdo cuando puse mi nombre, me sentí como la persona más especial del mundo—. Y me he alegrado.    Veo cómo se sonroja y cuando habla, le tiembla un poco la voz.   —Esperaba que te gustase —admite—. Aunque me sentí raro con ello.    Pienso ahora en todo lo ocurrido hasta ahora. Los ataques, Brian... No tiene sentido... Brian es el único que sabía de mí y de Jake, porque ningún compañero suyo ha venido de momento a por mí y estoy segura que el otro grupo que me contó no deben de saber mucho sobre mí o ya me hubieran detenido.

  — ¿Y por qué me han atacado a mí? —pregunto, intentando buscarle el sentido.   —Porque eres la única persona que me importa.    Miro a Jake quedándome sin aliento. Cuando se sincera conmigo sobre lo que siente, hace que me atraiga más. A pesar de todos nuestros momentos, sigue sin cruzar esa línea. Pero quizás... Con tan solo escucharle decir estas cosas, puedo conformarme de momento.   —Aún no he podido localizar el origen —continúa con un temblor en la voz. Se ha puesto nervioso con sus propias palabras—, si han podido ver parte de nuestras conversaciones o si han visto la relación entre tú y yo a través del vídeo de Lilly.   —Esperemos que no —me arreglo el cabello, preocupada—, ya bastantes problemas he tenido con los mensajes como para que tú tengas que soportar lo mismo, en serio, no se lo perdonaría a tu hermana y esto lo digo en serio.    Suelta una risa. No parece molesto con Lilly y supongo que lo entiendo. Si ella desde un principio hubiera sabido la verdad, quizás nunca hubiera habido un vídeo.   — ¿Sabes que después de verlo lloré? —Confieso, abrazándome a mí misma— Recordé todo lo que te dije, de Hannah y de Lilly —le miro y siento que quiero llorar de nuevo—. Jake, lo siento mucho, de haberlo sabido, quizás hubiera cuidado mis palabras.   —No, no, tranquila —se aproxima a mí, acariciando mis mejillas con cariño—. Nunca me molesté, tus investigaciones son importantes —inspiro con dificultad y me sonríe con tristeza—. Ahora entiendo por qué siempre te veía llorando-   — ¿Qué?   —Nada —Jake se separa deprisa ¿Qué me veía llorando? ¿Significa que a pesar de estar lejos estaba pendiente de mí? Se me escapa una sonrisa al pensarlo. Solo a Jake se lo perdono.   — ¿Hay alguna novedad que deba saber? —pregunta, olvidando el tema.    Momento profesional. Echaba de menos también trabajar con él.   —La policía ha detenido a alguien —empiezo a contar.    Jake me mira sorprendido por la noticia y puedo ver que empieza a ponerse nervioso.   — ¿Qué? ¿En relación con Hannah? —pregunta con rapidez.   —No lo sabemos.   — ¿Y ya sabes de quién se trata?    Arqueo una ceja, con una sonrisa de orgullo.   — ¿Ya has olvidado con quién estás hablando? —Veo cómo Jake pone los ojos en blanco, soltando una risa floja— Phil Hawkins, si te suena el nombre.   —Sí —Recuerdo entonces las palabras de Cleo diciendo que Phil habló mal de Hannah. Para él debe de ser otro sospechoso nuevo—. Ahora mismo no quiero decir nada al respecto, primero quiero tener una visión global —asiento entendiendo lo que quiere decir. Son muchos chats que leer después de tanto tiempo. Al menos son solo los que están relacionados con Hannah—. Que seguramente has averiguado un montón en todo este tiempo.   — ¿Y ahora cómo seguimos? —estoy emocionada. Otra vez a trabajar juntos como antes.   —Dame un poco de tiempo hasta que hayamos hablado de todo lo demás —responde con calma, intentando que me relaje—. Primero tengo que montar el resto de mi equipo y leer los chats.    Miro mi móvil para ver la hora. No sé si me dará tiempo.   —Y yo tengo que avisar a Lilly —suspiro, al recordar que tendría que haberla avisado cuando ya me había calmado—. Estaba súper preocupada por ti.   —Gracias, Macie.    Jake se agacha para sacer cosas en su mochila. La bolsa de viaje no la tiene. Seguro que ahí era donde tenía la torre y las pantallas.

Me acerco a él y le abrazo por detrás. Él deja la mochila para apoyar una mano en mi brazo y acariciarme.   —Te he echado mucho de menos... —susurro, apoyando mi cabeza en su hombro.    Jake me separa. Pero se gira para que estemos cara a cara.    —Yo también te he echado de menos Macie —me mira con dulzura, para luego acariciarme la cara con cuidado. Me pierdo en sus ojos mientras habla—. No podía pensar en nada más que en ti. Todo lo que quería decirte cuando volviéramos a vernos. Cómo sería cuando todo esto acabe. Cuando hayamos encontrado a Hannah —suspira y el miedo aparece—. Pero sobre todo, he tenido miedo de perderte.   —A mí me pasaba lo mismo —admito. Lo único que quería era volver a estar con él—. Siempre que sonaba mi móvil pensaba que eras tú.     Jake apoya su frente en la mía y cierro los ojos escuchando su respiración calmada, mientras que yo estaba nerviosa de volver a tenerle tan cerca. El tiempo había hecho que me volviera más dependiente de necesitarle a mi lado. No pienso dejar que vuelva a desaparecer como lo hizo, no podría soportarlo otros dos meses sin saber que está bien.   —Te he dejado sola —me centro en su voz. Resuena por toda mi cabeza, guardándolo de nuevo su sonido—. Quería protegerte y lo he empeorado todo —No, Jake... No lo has empeorado— ¿Me perdonas este error, Macie?   —Sí Jake, claro que sí.    Nos separamos y veo su sonrisa.   — ¿Vas a ir a ver a tus amigos? —me pregunta con curiosidad.   —No a todos, quiero ver a alguien en especial —contesto, apartando su flequillo con cuidado— ¿Me avisarás si me necesitas?   —Sí, te volveré a contactar lo antes posible.    Asiento y cuando voy a levantarme, Jake me detiene. Me sorprende dándome un beso cerca de mis labios. En la comisura. Un escalofrío recorre mi cuerpo y me agarro a la moqueta del suelo con fuerza.   —Mi... —me aclaro la garganta, nerviosa— Mi cuarto está al lado del tuyo —le miro a los ojos, con la respiración entre cortada—, por si quieres ir a buscarme más tarde.   —En este cuarto siempre serás bien recibida.    Asiento y me ayuda a levantarme del suelo. Me tiemblan las piernas, estoy nerviosa.

Me acompaña a la puerta sin soltarme la mano. La situación se me hace graciosa, es como si me marchase de su casa.   —Hasta luego Jake —abro la puerta y hago un esfuerzo para alejarme de él.   —Ve con cuidado ¿de acuerdo? —me dice casi autoritario.   —Lo tendré.

Cuando salgo de su cuarto, escribo a Lilly, que espera con ganas a que Jake le escriba en cualquier momento y después al grupo. No puedo parar de sonreír tras nuestro reencuentro.

Llevaba puesta la capucha para evitar ser reconocida, de momento no quiero llamar la atención, quiero ir tranquila. Recibo un mensaje de Jessy sobre la dirección que había ido. La casa de Iris. La que suponemos Jake y yo que es madre de Jennifer. Se sorprende que lo sepa cuando se lo cuento. ------------------------------------------------------------------------------------------

Jessy Hannah ha estado realmente aquí y habló con ella sobre su hija Jennifer Aún estoy un poco Bueno, la conversación me ha dejado algo chafada Iris es una mujer encantadora y qué tranquila habla de todo lo ocurrido, de toda la historia horrible Macie Puedes llamarme un momento? Jessy Sí, claro ------------------------------------------------------------------------------------------

Veo su cara de sorpresa cuando me ve, al reconocer las calles.   — ¡¿Macie?! ¡¿Estás en Duskwood?! —me pregunta, distrayéndonos del tema principal.    Ella está sentada en su coche, lista para volver a casa.   —Sorpresa, sorpresa —digo, un poco nerviosa—, pero no se lo digas a nadie ¿vale? Y también si es posible, como no quiero que nadie sepa en dónde me alojo, ¿puedo usar tu casa como ejemplo?   — ¿No sería demasiado peligroso para mí? —Jessy me mira con miedo. Tras lo ocurrido con el tipo de la máscara del 'El hombre sin cara', estaba ahora más alerta.   —Si fuera peligroso para ti, ya habría pasado algo más —contesto, un poco dura—, no quiero decir que lo que te pasó no fue nada, pero quiero probar una cosa.   — ¿Ya estás de nuevo con tus cosas raras? —frunce el ceño, molesta.   —Tan solo vuelvo a ser la misma —la sonrío. Por fin puedo estar en acción— ¿Y bien? ¿Qué me puedes decir de tu investigación?   —Han pasado casi diez años desde que Jennifer desapareció sin dejar rastro en Duskwood —comienza a narrarme —. Entonces se encontraba en camino a casa de su padre, pero nunca llegó —asiento para que continúe—. Todo Duskwood la buscó sin descanso durante días hasta que su cuerpo fue encontrado por casualidad por un empleado del aserradero. La policía había puesto en todo momento que se trataba de un asesinato. Hasta que la autopsia reveló que Jennifer tenía lesiones que no podían haber sido causadas por un asalto.   — ¿Contaron en alguna parte cómo eran esas lesiones? —pregunto con curiosidad.   —Aguanta un poco, ahora lo cuento —contesta con calma—. Resulta que Jennifer había sido golpeada de frente por un coche y falleció a causa de sus heridas en el lugar del accidente.   —Dios mío... Qué horror...    Veo como Jessy intenta calmarse. Debe de haber sido duro para ella escuchar esto.   —El conductor del coche no debió de ver a Jennifer en las oscuras carreteras de las afueras de Duskwood. Y para ocultar su horrible acto, la enterró en lo más profundo del bosque para que nunca la encontraran —Jessy se mueve en el sitio, nerviosa—. Pero aquí está la parte extraña: Iris, como es lógico, le preguntó a Hannah el motivo de su visita. Hannah le dijo que creía que la perseguía el mismo hombre que había matado a Jennifer.   — ¿Y eso cómo podía saberlo Hannah?   —Eso es lo raro Macie, si no fue un asesinato planeado, sino un accidente, entonces ¿por qué el mismo asesino iba a ir a por Hannah?    Intento pensar un poco. Hannah fue con alguien a casa de Iris y le contó que el mismo hombre que mató a Jennifer le está siguiendo. Pero en realidad se ha dicho que fue un accidente por las heridas de Jennifer.   —Porque Hannah está metida en este caso —contesto, analizando la situación.   —Sí yo también lo creo —Jessy mira con decepción—. De alguna forma.   — ¿Y ahora qué vas a hacer?   —Primero voy a volver a Duskwood, quiero hablar con la policía.   —Pero ves cuidado con lo que dices —le digo preocupada—, sobre todo porque estoy aquí, podrían venir a preguntarme a mí.   —Sí, claro —asiente—, pero prefiero hacer preguntas a contar algo. Me colgaron cuando llamé preguntando por Phil y el abogado tampoco me ha contactado.   —Te quería preguntar por él para saber cómo está...   —Pues lo siento decepcionarte Macie, ojalá pudiera decirte algo... ¡AH! Y también quiero pasar por el taller de los Roger —exclama—. Iris me dijo que el modelo del coche que estuvo en el accidente, un AMC Gremlin.   —Ah, ese modelo lo conozco —menudos recuerdos me están viniendo. No he vuelto a ver ese modelo desde la universidad. Mejor no decirle esto a Jake.   —Sería como música para los oídos de Richy —se ríe. Me alegro que se anime un poco—. Es que hace tiempo, la responsable de la contabilidad era la madre de Richy y lo que también es una ventaja: Antes no existía el Tool Tastic.   —Lo que es algo bastante bueno para nosotros.   —Y el taller de los Roger era el único de Duskwood en aquellos tiempos.   —El coche estuvo entonces en el taller de Richy después del accidente.   — ¡Sí, es posible! —se emociona incluso más que yo— Pero seguramente antes del accidente el conductor habrá pasado por el taller de los Roger. Y así deberá constar en los papeles. Bueno y yo por casualidad soy la secretaria del jefe actual y tengo acceso a la documentación del taller de los Roger —guiña el ojo, a modo broma.   —Mejor imposible —sonrío, comenzando a pensar.   —Sí —parece un poco mejor que antes. Se recupera rápido—. Vale, me voy entonces.   —Hasta luego, Jessy Holmes.   —Más bien Jessy Watson y Macie Holmes.    Me río y nos despedimos.

Esta nueva información me va a venir bastante bien para lo que quiero hacer y debo darme prisa antes de que Jessy termine en la policía. *Jake POV*

Cuando Macie se marcha, decido ponerme al día con los chats. Lo primero que hago es buscar en su móvil el chat con Phil. Tras saber que le han detenido, es importante leer qué es lo que le ha contado a Macie para entender el porqué de su detención.   —Bien, veamos qué es lo que Macie ha averiguado... ------------------------------------------------------------------------------------------

Phil Hola Macie Macie Hola Phil Phil He conocido tu número cuando llamaste Eres una persona famosa en Duskwood Macie Un autógrafo? Phil Jaja Claro, lo pondré en la pared del Aurora ;) ------------------------------------------------------------------------------------------

Aprieto la mano al ver el guiño ¿de qué va este tío? El tema es serio como para reírse de la situación. De Macie lo entiendo, ya está cansada de ser reconocida, pero ¿él? No es ''famosa'' porque quisiera, sino por mi culpa. ------------------------------------------------------------------------------------------

Phil Bueno Macie, en qué te puedo ayudar? Macie Me gustaría preguntarte algo Phil Qué mona :) ------------------------------------------------------------------------------------------

¿Es ilegal ponerle un virus en su móvil solo porque le ha llamado 'mona'? ------------------------------------------------------------------------------------------

Phil No, Hannah no está en mi sótano Justo acabo de mirarlo ;) Macie Oh, menos mal Phil :) Quieres hablar de algo más? Macie Bueno, ya que estamos Por lo de tu sótano Ya les he leído la cartilla a esos dos Phil Ya me lo contaron Cleo y Thomas Solamente te quería dar las gracias por ello Si no hubieses hablado con ellos, hubiera llamado a la policía Macie Bueno, eso se hace y ya está Phil Anda Pues no te pareces en nada a Jessy y los demás ------------------------------------------------------------------------------------------

Por supuesto que no, es mucho mejor que ellos, es más especial.   —Debo controlar mis sentimientos —me digo, leyendo cómo Phil explica lo malo que es la situación—, esto no es bueno...    Es la primera vez que me pongo celoso ¿así que es así como uno se siente? ------------------------------------------------------------------------------------------

Macie Cuando hablaste por última vez con Hannah? Phil Déjame pensar El día de su desaparición Macie Y por qué? Phil Me llamó y me preguntó si nos podíamos encontrar Le dije que sin problema. Que venga al Aurora. Que conocía el horario Pero no quiso. Insistió en que nos viéramos en mi piso ------------------------------------------------------------------------------------------

¿En qué pensaba Hannah? Con la mala fama que tiene Phil en el grupo, no entiendo por qué hablar con él ¿para qué querría hacerlo? Pero al final no fue a su piso. Me da alivio de que mi hermana no fuera, a saber qué haría este tío con ella... ------------------------------------------------------------------------------------------

Macie Sabes por qué se quería encontrar Hannah contigo? Phil Sinceramente Macie? Macie Te lo agradecería Phil He pensado que vendría para distraerse un poco Macie Cómo?! ------------------------------------------------------------------------------------------

Por favor, ¿dime que no insinúa lo que está insinuando? ------------------------------------------------------------------------------------------

Phil Pensaba que tenía suficiente de él y que quería pasárselo bien Macie Y cómo se te ha ocurrido eso? Phil Porque hace unas semanas vino Thomas al Aurora Normalmente no viene sin los demás No dijo nada, pero pensé que algo no estaba bien Macie Por qué esperabas este comportamiento de Hannah? Phil No sé, es lo que pensaba de ella Por qué me pidió ir a mi piso y no al Aurora? ------------------------------------------------------------------------------------------

Tranquilo Jake... No eres un criminal... Recuérdalo antes de quieras ponerles pruebas en contra de él por decir esas cosas de Hannah...

Continúo leyendo, de momento, parece ser que tanto Phil como Cleo ambos actuaron mal en comportarse como no era debido. Pero esto ya viene de antes, no se llevan bien. ------------------------------------------------------------------------------------------

Macie Has invitado a Hannah a alguna copa de vez en cuando? Phil Las mujeres guapas me van ;) Admito que me parecía una chica muy mona Pero no es alguien con quien empezaría una relación seria ------------------------------------------------------------------------------------------

¿Quieres mi consejo Phil? No tengas ninguna con esa actitud, si ya insinúas que Hannah quería verte en tu piso porque se quería acostar contigo, entonces no te mereces que te traten con respeto. ------------------------------------------------------------------------------------------

Macie Esos emoticonos que usas... Solo conozco a una persona que los pone Phil Ah sí? Me has pillado Soy anticuado Es verdad, pero hoy en día nadie los utiliza así Jaja, en qué cosas te fijas ;) ------------------------------------------------------------------------------------------

Macie... ¿Tanto me echabas de menos que por ver unos emoticonos pensabas que era yo? Niego con la cabeza. No puedo creer lo sola que debía sentirse sin mí. Me buscaba en cualquier cosa pequeña. Tengo que recompensárselo de cualquier manera, no puedo evitar sentirme mal por todo lo que ha pasado. ------------------------------------------------------------------------------------------

Macie Ya no tengo más preguntas Eres muy simpático Ante personas desconocidas que te preguntan uno puede ser escéptico, o no? Phil Bueno, ya no eres tan extraña ;) Siempre me mantengo abierto a personas que no conozco ------------------------------------------------------------------------------------------

Pues mantente cerrado con ella... Y a ser posible: Cien metros de ella. ------------------------------------------------------------------------------------------

Phil Cuándo vendrás a Duskwood? Macie La semana que viene a lo mejor Phil Bueno, pues pásate por el Aurora :) Macie Por supuesto 🙂 Phil Me alegro, Macie ------------------------------------------------------------------------------------------   —Eres demasiado cruel al haberle dado esas esperanzas, Macie —sonrío, porque esta conversación fue hace un mes y ella nunca llegó a ir a Duskwood hasta ahora—. Bien hecho.    Es entonces cuando veo que tuvieron otra conversación. ------------------------------------------------------------------------------------------

Phil Oye, me mentiste Dijiste que vendrías Macie Lo siento, no puedo tener un trabajo tan chulo como el tuyo Phil No es fácil llevar un bar, lo sabes? Te lo puedo demostrar si vienes, Princesa Y después pasar la noche los dos solos, cuando no haya ningún cliente Macie Tu bar no es el único del planeta Para de llamarme así 😤  Phil No puedo hacer eso Porque no encuentro otra manera mejor de llamarte ;) ------------------------------------------------------------------------------------------

No quiero leer más. No quiero leer cómo este tío continúa hablando con Macie. Leyendo cómo la invita a salir. Leyendo que él tiene la total libertad de poder estar con ella a la vista de todos sin miedo a que puedan detenerte o hacerla daño.

Aprieto los dientes, enfadado. Estoy también celoso. Con Phil podría tener una relación normal, sería fácil para ella estar con él. Pero no quiero perderla... Si la pierdo, creo que no podría continuar... Macie es lo que más me importa. También sé que no puedo obligarla a quedarse conmigo.   —Estos sentimientos están siendo demasiados confusos para mí —suspiro y paso a otro chat, queriendo olvidarlo.

Me pongo a leer los chats de Lilly y Macie, para ver cómo les fue en mis puzles. No les fue nada mal, parece que lo hicieron bastante bien, aunque había un poco de tensión.

Ah, sí... Borré los emails de cuando me escribía de Hannah. Ya era más que suficiente con todo lo que Lilly había infiltrado de mí. Puedo entender mejor porqué Macie estaba algo incómoda con que Hannah y yo hubiéramos sido pareja. Fue realmente incómodo cuando Hannah cada vez estaba más interesada en mí. Las video llamadas que hicimos por suerte es algo que no se pueden guardar. Nunca pensé que Hannah llegase a enamorarse de mí. Alejarme de mi hermana me dolió, pero era necesario. ------------------------------------------------------------------------------------------

Lilly Pero no te parece raro que Jake quiera que vayamos a esa casa ahora? Macie No me parece raro Jake no es un asesino Lilly Vale, voy a esa casa Pero, tienes claro de que si pasa algo, todo se puede leer en este chat, verdad? Y se te relacionará con Jake Macie Ya sabes que Jake es capaz de borrar los chats? ------------------------------------------------------------------------------------------

  — ¿Era necesario amenazarla? —no puedo en evitar en sonreír al ver la respuesta de Macie. No para de defenderme de todo el grupo. Hasta de mi hermana.

Macie consigue darle las correctas indicaciones y adivinar mis enigmas con facilidad. Me siento orgulloso de ella.

  — ¿Uh? ¿Qué es esto? ------------------------------------------------------------------------------------------

Lilly Oye Tú y Jake Salís juntos? Macie Sí, salimos NOS hemos enamorado ------------------------------------------------------------------------------------------

Empiezo a calentarme al leer sus palabras. Claramente se lo dice para molestarla... ¿no? Una sonrisa se me escapa de mis labios.

Tengo demasiadas cosas que quiero hacer con ella y tengo muchos miedos también. Como ahora mismo... Espero que tenga cuidado, no quiero que se tope con el secuestrador de Hannah y le pueda hacer algo.

Capítulo 26

#duskwood #duskwood jake #duskwood mc #duskwood jake x mc #duskwood español #duskwood fanfic #duskwood everbyte #everbyte #everbyte studio

[headless-angel-writes]

Intercambio Equivalente

Resumen:   

 Intercambio equivalente representa el precio a pagar a cambio de obtener algo. Simon debe pagar si realmente desea probar lo que Baz trajo desde su casa.

Palabras:  1280

Los personajes pertenecen a Rainbow Rowell

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Wattpad:  https://www.wattpad.com/1290642228-carry-on-one-shots-intercambio-equivalente

Ao3:  https://archiveofourown.org/works/43320258

Fanfiction:  https://www.fanfiction.net/s/14166435/1/Intercambio-Equivalente

@carryon-countdown​

Baz

Utimamente, mi madre ha estado aprendiendo a hornear. Empezó cuando, en la escuela de Mordelia, le pidieron que llevara algún postre para la recaudación anual de fondos. (Es una 

escuela privada. Y cara. ¿Para qué necesitan el dinero?) Nunca antes lo había hecho y desde entonces le agarró el gusto. Además, parece tener un talento natural para ello. 

Vera le ayuda, pero quien hace la mayor parte del trabajo es Dafne. Me alegra verla tan emocionada. Suele enviarme a Watford un poco de lo que prepara.

Por el cumpleaños de las gemelas, me invitó a ir a casa el fin de semana para que pudiera probar su más reciente creación. O, mejor dicho, la reinvención de una receta que perteneció a su abuela. Pastel de naranja, suena simple, pero en realidad no lo es. Y realmente le quedó delicioso. Es esponjoso y el sabor es intenso. 

Dafne notó lo mucho que me gustó, así que me mandó de regreso a Watford con un tupper grande, bien lleno de pastel. Me miró con seriedad antes de despedirse de mi

—Cuida mucho el tupper, Basil. Por favor. -- Y debajo de su tono suave, había otro un poco amenazante. Ella suele ser tranquila, pero creo que podría matarme si llego a perder su traste. 

Ahora estoy en mi habitación, a solas.  Me siento sobre mi escritorio despejado. Tengo un té Earl Gray listo para acompañar mi bocado. Todo eso, mientras leo un poco.  Es un plan perfecto para una tarde de domingo otoñal.

Todo eso se arruina en el momento en que Simon Snow abre la puerta. Me mira como si me hubiera atrapado cometiendo un asesinato. Hemos estado en una especie de tregua desde que inició el año, pero los viejos hábitos tardan en desaparecer.

—¿Por qué nuestra habitación huele a naranjas?—dice. 

Hasta ahora, pude ocultar lo que me envia Dafne aprovechando las ausencias de Snow para comerlos, pero ahora me atrapo. (Me niego a decir que “Con las manos en la masa)

—Pensé que estarías afuera con Wellbelove ¿No se supone que estaban en una cita?—contesto.

Se encoge de hombros. Eso me frustra.

—Si fui a verla, también a Penny. Pero no fue una cita. Agatha y yo ya no somos novios. 

No sabía eso. Pero a estas alturas es normal; van a reconciliarse en un par de semanas.

—Lo lamento. 

 En realidad, estoy mintiendo Me alegra un poco que estén separados.

—Mientes—dice, a veces puede leerme con facilidad—Ahora tienes el camino libre para ir por ella.

—No estoy interesado. 

Ojalá lo estuviera, las cosas serían mucho más fáciles. Snow levanta ambas cejas, sin creerme, y va a sentarse a su cama.  

—Lo que digas, pero no me respondiste ¿De donde viene el olor, Baz?

Suelto un suspiro. Ya que está aquí es imposible esconderle que hay un pastel en la habitación. Pareciera que es un sabueso cuando se trata de encontrar dulces.

—Pastel de naranja. Me lo envió mi madre.—respondo por fin.

Eso despierta su interés.

—Huele delicioso.

Estoy jodido ¿Cierto? 

—Lo sé, estaba a punto de comerlo.

Snow se acerca a dónde estoy sentado y se para frente a mi. Sonríe, de la misma forma en que duele hacerlo con sus amigos. Puedo oler su sangre y su olor particular. Es tentador tenerlo a unos pocos pasos de distancia.

—Oye Baz… ¿Podría probarlo? 

No me sorprende escucharlo. En cuanto lo vi entrar supe que iba a querer comérselo. Es un poco divertido.

—Eso depende Snow. ¿Qué puedes ofrecerme a cambio?

La verdad podría pedirme lo que sea, literalmente cualquier cosa y yo se la daría. Aún así, tengo una reputación que cuidar. Él se queda pensando. Sus mejillas se ponen un poco rojas por la emoción antes de hablar. 

—No sé, supongo que puedes pedirme lo que quieras. Y lo cumpliré sin quejarse.—se muerde el labio cuando termina de hablar. Se ha puesto nervioso

Está  intentando matarme. Lo digo en serio. Mi mente se queda en blanco ante el mundo de posibilidades que me ha abierto. Estoy empezando a sentirme culpable por ponerle una condición en primer lugar.

—Me impresiona lo que estás dispuesto a hacer por comida, Snow.

—Bueno, por el olor parece que vale la pena. Y sé que no vas a lastimarme con lo que pidas.

Creo que tengo bien claro lo que le pediré. Lo miro una vez más para darme valor.

—Snow, Simon, si te invito un poco de mi pastel… ¿Me dejarías darte un beso?

Lo dije. Si reacciona mal, siempre puedo decir que era una broma y ya. Lejos de lo que esperaba, no parece que quiera asesinarme. Puedo escuchar como su corazón está acelerado y sus mejillas están aún más rojas que antes. Da un paso atrás, pero no se aleja demasiado.

—P-pensé que ibas a decirme que no podía abrir la ventana por un mes o algo así.

 Mira al suelo, evitando. No se ha negado. No aún. 

—Lo consideré, pero un beso me parece una mejor opción.

—¿Por qué quieres hacer eso conmigo? Pensé que me odiabas. 

—Nunca lo hice de verdad, Simon. Y quiero experimentar.

Decir que tengo curiosidad es mejor que revelar que llevó al menos dos años enamorado de él. 

—Tampoco te odio.

Ambos nos quedamos callados durante unos segundos que se sienten eternos.

—¿Cómo vamos a hacerlo?—dice al fin.

—Tal vez deberías empezar por acercarte a mí. 

No voy a morderlo. Al menos, no con intención de herirlo.

Se para frente a mí, listo para una batalla. Jalo su brazo hasta que queda sentarse sobre mi regazo. Espero que la silla pueda soportar el peso de ambos. De inmediato, él rodea mi cuello con sus brazos. Coloco mis manos sobre la parte baja de su espalda.

Acerco mi cara hasta que nuestras narices se tocan. Su respiración se siente cálida. En pocos segundos comienza a ser demasiado para mi. 

—¿Puedo hacerlo ahora?

—Si.—dice.

Su boca está entreabierta, como una invitación. Tomo aire una última vez antes de, por fin, besarlo. 

Mi experiencia es nula, pero he imaginado esto varias veces. Empiezo simple, con nuestros labios deslizándose y la boca un poco abierta. No quiero incomodar a Simon metiendole la lengua en la garganta sin aviso alguno. También acaricio su espalda, por debajo de la playera que usa. Su piel se eriza bajo mis dedos.

Él comienza a responder con entusiasmo, suspirando mientras sus manos jalan mi cabello. Pronto, es él quien profundiza el beso buscando mi lengua y  moviendo un poco la barbilla. Se siente tan bien que se me escapa un gemido.  ( Si Wellbelove le enseñó a besar así, debería mandarle un regalo de agradecimiento. Pero no es momento de pensar en ella.) 

Después de varios minutos de explorarnos la boca, me falta el aire. Rompo el contacto, pero sin alejarme. Bajo por su mandíbula,dejando un camino de besos. Pego mis labios al lunar que tiene en el cuello y doy un mordisco. Simon jadea, incluso si no usé mis colmillos. Su estómago hace ruido y ambos nos reímos.

—Lo siento, tengo hambre.

Pellizco una de sus mentiras. Adoro lo suaves que son.

—Creo que te ganaste tu pastel.

Mi té está helado y mis planes se arruinaron por completo. Pero ahora tengo a Simon Snow sentado sobre mi, mientras disfruta una golosina. No puedo estar molesto por ello. Se lleva un trozo de pastel a la boca y un poco de betún queda embarrado en sus labios. Lo limpio con mi lengua y volvemos a fundirnos en un beso. 

Su suave boca ahora sabe a naranjas. Y es lo más delicioso que he probado en toda mi vida.

…………………………………………………………………………………………………

¡Hola!

El prompt de hoy era pastel. Ya tenia (Teníamos) esta idea de Simon dejándose besar por comida desde hace un tiempo y el promt de hoy me pareció perfecto para desarrollarlo.

Estoy feliz, ya que me queda solo un examen y soy libre de la pvta universidad.

Muchas gracias por leer

Ciao!

#simon snow #baz pitch #snowbaz #snowbaz fanfiction #simon snow fanfiction #simon x baz #rainbow rowell #carry on countdown #carry on countdown 2022 #coc 2022

[tengomilpalabrasparati]

tengo 2 perros que los amo como si fueran mis hijos, de 5 y 6 años. Pero cuando hago cosas como trabajar, ir al gym, estudiar,etc me siento culpable porque no estoy con ellos y eso no es sano porque me siento asi? Y como lo cambió

Ese es el problema, que los tienes como a tus hijos y no como animales de compañía.

Yo aquí voy a tirar piedras en mi propio techado, porque yo también tengo a mi perro como a un hijo o incluso mejor que si tuviese un hijo, porque con la excusa de que no habla y en ocasiones no sabes si están enfermos o es algo normal, aún me vuelco más en él, supongo que te pasa lo mismo.

Yo me lo crie con 10 días, ahora tiene 7 años, yo soy su mamá y es muy muy dependiente de mí.

Cuando me voy, cuento las horas para volver y si estoy fuera varios días por trabajo lo paso mal, porque aunque están mis hermanos con él, se que está triste y se la pasa tumbado sin querer hacer nada.

Esto es culpa nuestra amiga.

Llamé a un educador de perros para intentar mejorar la situación, pues así, ni el perro está tranquilo ni yo tampoco y me dijo que si iba a seguir dejándolo subir al sofá, a mi cama, jugar cuando me lo pida etc era inútil el haberlo llamado.

Le doy la razón, pero si tengo un perro es porque amo a los animales, y me niego a tenerlo amarrado a una pared, o no achucharlo cuando me venga en gana ... así que estoy en tu situación.

Tu intenta ver la situación desde el punto de vista de que uno hace compañía al otro, que saben que cuando te vas, terminas volviendo y juegas con ellos.

No están mal y no puedes cambiar tus rutinas o dejar de hacer cosas por estar con rus peques las 24/7 (esto intentaré aplicármelo a mi misma), así que primero es tu vida y obligaciones y solo has de pensar que ellos están bien.

A veces nos preocupamos sin motivos y al llegar a casa te los ves tirados en el sofá o cotilleando por la esquinita de la ventana que da a la calle ... están bien 👍

Son así las cosas porque nosotras las hemos hecho que sean así, puede que equivocadamente pero con todo el amor del mundo 🐶🐶

Aprendes a vivir así y controlar tu dependencia 💚 los perros querida amiga, son muy listos y no te van a recriminar nada, saben que los cuidas y los amas.

#dependencia perros #ask #chat

[kaelucfantasy]

TROCITO 1

“Realmente habia estado temiendo por lo que pasaría conmigo, ya que; mi jefe aparecio por sorpresa en la parte trasera de la taberna sangrando por una herida de la sien y se habia quedado al borde de la muerte… o eso creia”

Una carta me habia hecho ir hacia el viñedo “el amanecer”, lugar que no conocía pero habia algo en el sello de la misma que me hizo que intentara llegar. Me habia hecho un mapa dibujado en un pergamino los compañeros de la taberna para que pudiera guiarme.

Cuando estaba perdido a mitad de camino, maldije hacia mis adentros por que aquello se entendia menos que a los hilichuls cuando bailaban.

Por suerte encontré a unos trabajadores que iban con su carreta hacia alli y me dejaron acompañarles todo el camino. Me alegre muchisimo ver las vides llenas de uvas que estaban madurando a la luz del sol, pero el alma se me escapo del pecho cuando vi aquel enorme edificio que era la mansión que gobernaba sobre aquel lugar, ahi me di cuenta de que el que habia sido mi jefe tenia mucho dinero.

Me despedí de los trabajadores y fui hasta la puerta de la mansion; tragando saliva pensándome por rato largo si llamar o no. Hasta que la puerta se abrio asomandose una mujer vestida de sirvienta con el pelo corto rubio.

—¡Oh! -exclamo con sorpresa aquella mujer —Tu debes de ser Re, ¿no?

Que conociera ese sobrenombre aquella mujer desconocida solo podia deberse por una cosa.

—¿Kaeya le hablo de mi? -pregunte, ya que era el único que me llamaba asi

—Si, es él quien me recomendó que te llamara… ¿no es asi tu nombre?

—No… es un mote que me puso para intentar reirse de mi mientras trabajo… bueno, trabajaba… aun no lo se -dije confuso

—Entiendo… ¿como te gustaría que te llamara?

—Remus, por favor

—Encantada de conocerte Remus, mi nombre es Adeline; pasa por favor

La sirvienta se aparto de la puerta y me hizo pasar hacia adentro de la mansión, solo para corroborar de lo que pensaba nada mas ver el exterior de la fachada.

Aquel hogar era de una persona noble, lo que no me imaginaba es cuanto lo era.

++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++

Iba avanzando hacia la habitación que me indicaron que debía ir, por suerte, aun tenia la bandeja firmemente entre mis manos.

—¡¡LARGAROS!! ¡¡NO OS CONOZCO!!

Me quede plantado en mitad del pasillo viendo como varios sirvientes eran expulsados de la habitación a la que me dirigía mientras varias cosas salían volando por la puerta. Aquella voz era la de mi jefe, o de quien lo fue, o lo que era…

En este momento se podia decir según un dicho de mi pais “tener la picha hecha un lio”.

Fui hacia la puerta, asomando la cabeza para ver como podia acercarme a él; pero de inmediato, tuve que retirarla porque se vino un pesado pisapapeles de bronce para impactar sobre mi cabeza, que por suerte esquive.

—¡¡TIEMPO MUERTO, TIEMPO MUERTO!! -exclame para que no siguiera atacándome

—¡¿QUIEN DEMONIOS ERES?! -gruño Diluc rabioso

Este estaba sobre la cama, con el pijama puesto, el pelo alborotado como si no se hubiera dejado domar por ningún peine y los vendajes sobre sus heridas; sosteniendo otro pesado pisapapeles en sus manos para lanzar.

—Me… me llamo Remus… fui yo quien os encontro desangrandote en el suelo e intentaba frenar tu hemorragia… -dije asomándome por la puerta un poco

Lentamente lo vi tranquilizándose, poniendo una postura mas tranquila sobre la cama y dejando el pisapapeles en la mesita de noche.

—Vale… tu dejas de ser sospechoso… -dijo con voz gruñona

Resople al escucharlo decir eso, me senti molesto que viera que era incapaz de darle un golpe; pero tenia que reconocer que no tenia ninguna disciplina ni era portador de ninguna visión.

—Venía a visitarle… pero veo que ha desatado tanto pavor entre los sirvientes que me dijeron que te llevara la bandeja de comida…

Entre con la bandeja en la habitación a paso normal, pensando que me habia aceptado que accediera a su interior.

—Me niego a comerla…

—¿Acaso piensas que pueden envenenarte? -pregunte sorprendido

—No confió en nadie…

—Pues como no confíes en alguien, vas apañado para sobrevivir…

El me miro de arriba abajo como analizándome, cosa que hizo el primer dia que me conoció; asi que lo conocía bastante bien.

—Pruébala tu

—¡¿Yo?! -dije sorprendido, luego mire la bandeja —solo hay unos cubiertos…

—Prefiero que comas tu con ellos…

—¿No eres escrupuloso? Te prometo que estoy bien de salud pero…

—Arg… si comes con un cubierto diferente, tendré que comer con los que usaste, porque sabré que esos no estan envenenados…

—Ok, ok… lo hare…

Comence a probar los distintos elementos de su comida según a petición de él, intentando que se quedara tranquilo, hasta incluso bebí del agua del vaso donde estaba servido.

—¿Conforme?

El gruño ante mi pregunta pero rapidamente tomo el vaso para beber, se le notaba que tenia sed; preferí callarme sobre lo que pensaba que era beber del mismo lugar en que habia bebido yo anteriormente; pero verlo suspirar aliviado hizo que fuera empatico con su sufrimiento.

—Vas a trabajar para mi… -dijo despues de un largo rato en silencio mientras comia

—¡¿Perdon?!

El plan de Adelina estaba en marcha.

FIN TROCITO

#kaeya alberich #diluc ragnvindr #kaeluc

[caroeve8792]

Después de un rato de hablar y comer hasta reventar, estamos recostados en el sillón en forma de L que tiene Evan en el living, siento que podría quedarme dormida aquí y no saber más del mundo, pero a las 6 de la tarde tengo que ir al trabajo, Evan esta en su celular arreglando algunas cosas de su trabajo y sospecho también hablando con Lili, su nueva conquista.

Solo me ha dado un par de pistas sobre ella, se como se conocieron, donde vive y una foto de ambos en donde se divisa una mujer de unos 25 años, morena y ojos oscuros, cabello rizado, según Evan ella es de Venezuela y que llegó a Canadá por nuevos horizontes. Básicamente es mi historia. También vine desde latinoamerica a trabajar acá, Evan se muere por conocer mi país, el cual lo ubicaba solo porque Pedro Pascal es su amigo y le ha hablado maravillas del norte y el sur de Chile. Siempre he fantaseado con la idea de ir se vacaciones a mi país con Evan, darle un tour completo vestidos como turistas y casi disfrazados para que nadie notará quien es la persona que llevo al lado... Pero como dije, a pesar de ser buenos amigos con Evan, esta amistad jamás dará para algo más, menos cuando estamos por caminos diferentes.

Respiro profundo acurrucadome entre las cobijas que huelen a él, aún me falta una hora para estar en la cafetería y doy gracias al cielo que me queda solo a pasos del condominio de Evan.

"OK, entonces podemos reunirnos mañana a las 7" Abro los ojos curioseando en qué está, se lleva los dedos presionando el puente de su nariz "si, me parece bien" se nota preocupado por algo. "OKok, nos vemos mañana entonces".

"pasa algo?".

suspira pesadamente acercándose a mi lado "no, es solo que mañana tengo una reunión para una entrevista por mtv" se lo difícil que es para él dar entrevistas.

"uhhh ¿y es sobre que?".

"Sobre wish" sonríe de medio lado, esa película lo emocionó tanto que me encantaría verlo otra vez en algo relacionado con Disney, se nota que quiere darle un giro a su carrera. "¿tú que harás mañana?" su rostro esta cerca de mi que su aliento rosa tibio en la punta de nariz.

"trabajar"

"ah pero entras tarde".

"a la misma hora de hoy" Evan se queda pensando un minuto, aunque me ofrezca pasar otro día con él, no puedo, quedé con Agustín de ver un regalo para el cumpleaños de su hermano.

"Podemos ir juntos allí, tu sabes que..." asiento pero rápidamente le doy mi argumento del porqué no puedo ir con él. "oh, olvide que ya no eres una chica soltera"

río histericamente "nononono" niego con la cabeza para darle más sentido a mi negación "soltera estoy, solo que ya tengo planes".

Evan me mira fijo con esos ojos cafés que pareciera que te comerían viva "necesito que me digas algo..."

dios mio.

"que cosa?"

Duda antes de comenzar a hablar de nuevo "él...él te toca como yo?"

Se me cae la cara, las palabras salen a tropiezos "¿q-que?"

"si te toca como yo, quiero decir, eres bastante difícil para él sexo, me causa curiosidad" frunce los labios quitandole importancia a lo que dijo.

"me ... ¿que es esa pregunta Evan?" se ríe encogiendose de hombros.

"me causa curiosidad solamente, ya sabes... hay que saber hacerte gritar en esa cama" señala a su cuarto, en aquel cuarto en donde pasaron cosas más de una vez, no puedo recordar a alguien más que me hayae echo sentir lo que Evan me hace sentir, pero no puedo dejar que él vea que estoy muriéndome por el, que lo único que quiero es que me pida que sea su novia, le daría me lado más salvaje, quiero protegerlo, hasta un hijo le daría.

"me tengo que ir" corto la conversación, Evan sabe perfectamente bien que me da una vergüenza enorme hablar de mi vida sexual, pero por su cara se nota que esta disfrutando hacerme sentir de esta forma.

[lunadediciembre]

Miércoles 31 de enero del 2024.

Hoy si te extrañe, te extrañe desde que desperté y te voy extrañar hasta que me quede dormida.

Obviamente que no será el último día que te vaya a extrañar, estaría loca si lo niego. Te extraño porque amaba tu presencia en mi habitación, en mi cama, en mi almohada, amaba esa presencia en mi silla color negro.

Extraño compartir tazas de café, galletas con leche, extraño cooperar para cenar.

Claro que extraño las risas y las carcajadas antes de dormir. Dios como extraño eso.

El día de hoy fui a casa de un amigo. Y dios si me eche unas cuantas risas, hace mucho no reía, pero lo gracioso es que después de cada risa, me acordaba de ti, de tu rostro. Vaya que si. Aún así, leí de nuevo tus cartas y decidí que era hora de empacar todas tus cartas y envolverlas en un lazo, no para quemarlas, porque seria negarte, si no para guardarte, para siempre.

Leí cada una de tus cartas, de una por una, y aquí dejo tus frases célebres.

“Igual sé que nunca, nunca, nunca, nunca podré olvidarte”

“No hay amor como el nuestro”

“Nuestra historia vale para más”

“Y te deseo que encuentres todo lo que buscas, que tengas todo lo que deseas y seas lo que tú quieras ser. Quiero verte logrando todos tus sueños aunque este o no esté contigo”.

“Tal vez el destino nos vuelva a juntar o tal vez nuestro hilo rojo solo está muy enredado”.

“Y cuando me extrañes no dudes en que estaré queriendo escuchar tu voz”.

“Quiero que logres tus sueños, tus pasiones, que seas una gran arquitecta”

“Si sientes un día que yo soy un obstáculo para tus sueños no te sientas mal si tienes que dejarme ir. Comprendí que si el destino nos quiere juntos nos volveremos a encontrar”.

“Como dos gatitos que están destinados a ser”.

Así que mejor me quedo con ese chico como ese chico que me hizo tan pero tan feliz. Y no con el que me lastimo.

Hasta hoy, siento yo que estoy avanzando, puede que lento, pero avanzo, y sanando.❤️‍🩹

#cosas de la vida #salud mental #melanchaholic #photography #dejar ir

[santpablo]

Convaleciente (una pataleta de Lupo)

Cómo detesto este estado. Puedo darle mil vueltas a la hoja sin saber si quiero o no quiero decir algo. Y es que en el fondo no sé qué quiero o no quiero ahora. Mi única certeza es que no me gusta sentirme así.

Me duele la cabeza. Me pica el paladar. Tengo escalofríos. Me arden los brazos al contacto. Tengo náuseas. Mis pies están hinchados. Me pesa el cuerpo. Creo que tengo alguna alucinación. No consigo secar mi nariz. Tampoco respiro. Me duelen los huesos. Mi frente arde en fiebre. Tengo sensibilidad dental.

Divago a ratos imaginando que mis brazos burbujean bajo la piel y de repente ya no estoy en cama sino flotando en algún cuerpo acuoso y calmo. Me gusta sentir eso. Lo acompañaré escuchando canciones líquidas, como Comfortably Numb (Pink Floyd), Someone to Spend Time With (Los Retros) o Hydrocodone (Cuco).

Mientras tanto me niego a tomar medicamentos. No me gusta llenar mi cuerpo de químicos. ¿Si me desfaso de esta forma apenas con panela y maracuyá, qué me espera con un ibuprofeno? La pregunta es meramente retórica, conozco la respuesta y tampoco me gusta. Se diría que a toda la incomodidad tendría que sumarle un mal viaje. Me niego rotundamente.

Y ya sé que este escrito bien podría llamarse "No me gusta" o "Me niego", pero mi problema es con este estado, con la enfermedad, y todo lo que no me gusta y a lo que me niego es producto de ella. De tal manera que escapo a mi divagar por momentos para escribir algo que me salga fragmentario, o no, y dejar constancia. Además la ira de enfermarse un par de días antes del año nuevo debe desencadenarse de alguna manera. Así es, me niego a pasar la medianoche del 31 de diciembre en este estado, otra vez.

Ya me pasó de alguna manera hace tres años. No estaba enfermo, pero estaba en cuarentena por un posible contacto de Covid. Irónicamente podría ser que hoy tenga la enfermedad, que ahora se trata como una gripa particularmente fastidiosa y por lo menos no tengo que enclaustrarme, aunque lo desee por momentos.

Pero nada como aquel cumpleaños. Yo era todavía un niño. Cumplía 9 años. ¿Es justo que un niño de 9 años pase su cumpleaños con sarampión? Así que allí estaba yo, recostado en mi cama, solo, en una habitación iluminada escasamente por un bombillo rojo (remedio sugerido a mamá por una vecina) y restringiendo mi dieta a una mezcla de sopas y cocteles herbales. La única ventaja ese día fue que no tuve que ir al colegio, cosa que sólo era posible por una enfermedad realmente grave, por la posibilidad de violencia en las calles, o por un censo (debo ser específico, si es que en 11 años no falté a clases más que 6 o 7 veces).

¿Pero qué ventaja podría tener hoy, ahora? ¡Yo me quiero tomar un buen whiskey de año nuevo y amanecer bailando! No me importa si despierto al día siguiente con guayabo, cruda, resaca, chuchaqui, goma, ratón, lo que sea; en ese caso seré un convaleciente feliz porque habrá valido la pena. ¿Pero tener los síntomas antes? ¿Qué clase de karma es este? ¡Me niego!

Y entonces mi cuerpo responde con un ataque de tos seca, de la misma que ya tiene raspada mi garganta y adolorido mi pecho. Mientras tanto yo pruebo con mentas, hierbas, jengibre y hasta con cigarrillos mentolados para aliviar la sensación, pero siempre vuelve. Me desespero.

En mí el desespero desemboca en dos cosas: mucha ira y alguna pataleta. Por supuesto, a medida que uno crece las desembocaduras se refinan y la ira se manifiesta con cierta crueldad fría mientras que las pataletas son una insistencia insolente en la negación. No sé, convaleciente se me olvida cualquier cosa de budismo o estoicismo o lo que sea.

Claro que seguramente llegue un punto en que las desembocaduras vuelvan a su nivel más infantil. Le pasa a los viejos. Ya me imagino a mí mismo cuando lo sea y deba pasar una enfermedad en un hospital. Mi ceño siempre fruncido. Mi exigencia con la comida será máxima. Temo que me escupan la comida o algo, por fastidioso, pero es que seguramente sea inevitable. Es cosa de la incomodidad. Debe ser muy incómodo ser viejo y estar enfermo en un hospital que huele a hospital y está lleno de cosas de hospitales. ¿Mencioné que me desagradan sobremanera los hospitales? Mucha, mucha enfermedad. Es la enfermedad, condición miserable, mi mayor objeción a la vida humana.

En fin, supongo que tendré que concentrarme ahora en sanar. No más pataleta delirante. Que suene la música. Ya no quiero seguir concentrado. Volveré a divagar con mi música. Ahora suena La Distancia (Manuel Medrano), porque los boleritos también son líquidos. Una dama de blanco, sonriente, viene a bailar conmigo. Me despido, voy a flotar con ella.

#escritos #convalenciente #enfermo #resfriado #pataleta

[dreamfyre23]

Últimamente no me he sentido bien.

Realmente me cuesta pararme de mi cama, me levanto tarde y con agonía de sentir que sigo existiendo. No sé si el vendaje que me está sosteniendo de quebrarme en pedazos realmente esta ejerciendo la fuerza suficiente como para mantenerme pegada de por vida. Quisiera renunciar a todo lo que tengo y simplemente desaparecer, quisiera irme sin dolor y sin que nadie se sintiera triste por haber desparecido de sus vidas. Lo único que pudiera mantenerme aquí son dos cosas; el temor de que un Dios exista y me condene para siempre, y la otra es el profundo dolor que causaría en mi mamá. Ella creo que es lo único que me tiene pegada a este mundo. Los que quedan sé que podrían superarme en algún momento y que tan solo fui una estrella fugaz en su vida.

Me avergüenza que tal vez esto no es una depresión y solo es una fase estúpida mía. Algún día me arrepentiré de escribir esto, pero siento que es el único lugar donde puedo desahogarme. Me niego completamente a platicar sobre mi gran deseo de desaparecer. Me incomoda platicarle a mi psiquiatra de las ganas de abandonar el medicamento y quisiera dejar de ir completamente con el psicólogo.

Sé que tengo una personalidad de mierda que se regocija en su propio dolor y detesto eso, tal vez es una conducta aprendida de mi padre y mi anterior pareja.

Pongo en duda mis ganas de tener a mi lado un hombre y querer ser su esposa ¿Se merece que tenga una novia/esposa que tiene la incapacidad de amar profundamente? ¿merezco amor del sexo opuesto? Siento que soy un monstro ¿En qué me convertí? No me reconozco, pero tampoco reconozco a la mujer que fui antes, el punto de quiebre entre el antes y después mío esta borroso.

Mi vida está claramente dividida en dos, como si alguna vez hubiera muerto un Dios en mi alma y marco el antes y después claramente. ¿Por qué le sigo llorando a ese muerto que sigue vivo? Quiero dejar de romantizar y acorarme de todas desdichas provocadas para no tener la duda de que está sucediendo en una ciudad que ya no es mía.

Completamente necesito dejar de creer en la religión, es ella la que me provocó grandes guerras en mi corazón y mi mente. Me transformo en lo que soy ahora, alguien temeroso de volver a permitir amar, las ganas de engendrar un hijo y un rencor enorme hacia todo lo que sea relacionado a Dios

¿Dios? ¿Si todo es Dios, entonces también tuve un Dios que estaba justo a mi lado? Pero ese Dios pareció más ser un verdugo. Claro, al principio llegó como un ser lleno de promesas y calor incondicional, hasta que realmente se transformó en un ser vanidoso, engreído y abusador, definitivamente le recé al mismo diablo. El día que me quito su gracia y que yo pequé, fue así el comienzo de mi castigo. Vaya, deje de ser fiel creyente y aun así me persigue el temor a dejar la religión.

[srbu]

Daño Colateral

El día 29 de noviembre fue un día difícil para mí. Me desperté muy temprano, con el sonido de mi alarma que me recordaba que tenía que ir a trabajar. Me levanté de la cama, con el peso de mis problemas sobre mis hombros, y me preparé lo más rápido que pude. Tomé un café, que no solo me quitó el sueño, sino que también me enfrentó a una realidad que me niego a aceptar.

Trabajé todo el día, sin descanso, sin ilusión, sin motivación. Solo cumpliendo con mis obligaciones, sin importarme nada más. Sentí frustración, sudor, cansancio, fatiga. Un día más de mi rutina, de mi vida sin sentido.

Pero ese día tenía algo diferente. Tenía una cita médica esperada, en el Hospital Ana Maria Beata. A las 21:45 tenía que estar allí, para hacerme una prueba que podría cambiar mi destino. Salí de la sierra por la A-6, pero me encontré con un tráfico infernal que me retrasó. Llamé para avisar, y me dijeron que no pasaba nada. Llegué al hospital a las 21:59, justo a tiempo.

Entré al hospital, y sentí ese aroma que tanto odio. Ese aroma crudo, clínico, fatal. Ese aroma que solo percibo yo, porque he pasado tantos años entrando y saliendo de hospitales, clínicas y pruebas. Pruebas que ya me las conozco de memoria, esperando siempre un resultado diferente, pero que siempre es el mismo. O peor.

Me senté frente a esa máquina tomográfica, que me escaneó el cuerpo durante cuarenta y dos minutos. Cuarenta y dos minutos de angustia, de incertidumbre, de miedo. Cuarenta y dos minutos que se me hicieron eternos. Terminé la prueba, y me fui del hospital, sin ganas de saber nada más.

Pero veinte y cuatro minutos después, recibí el resultado. El resultado que confirmaba lo que ya sabía. El resultado que me recordaba los daños colaterales que me causó aquel hecho de mayo del 2011. El resultado que me decía que mi vida seguía siendo un infierno.

Pero esta vez, había hay algo diferente. Hay una esperanza de una solución. Una solución que podría ser la definitiva.

Así que decido no rendirme. Decido no romperme. Decido seguir adelante, con fe, con fuerza, con fortaleza. Decido creer que todo puede mejorar, que todo puede cambiar, que todo puede ser diferente.

Intentando siempre ver lo positivo sostengo que ese día fue un día más, pero también una esperanza más. Una esperanza que me hace ver que la vida no es solo sufrir, sino también luchar. Una esperanza que me hace soñar que algún día, podré estar finalmente " B I E N ".

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[valentinaceaa]

Electroquímico

Lo mejor es dejarte ir dejar ir estos pensamientos y solo volar cuando sueño que estás conmigo en un cuarto a solas sin ocultar nuestras caras pálidas olvidando las máscaras lo mejor es gritar al cielo que me seguirás gustando aunque tú corazón tenga un afiche que dice prohibido pasar y que se lo lleve todo y poder dormir sin imaginarme tus gestos tus labios tus dientes tu voz tu acento paisa tan marcado y tus canciones que me hicieron olvidar el tiempo olvidé quien era y sucumbí a eso olvidé mis creencias y las tuyas mis ideales y te vi como alguien perfecto y acogedor tierno y artístico espero que cuando esta terrible situación se termine me escribas y me digas que también eres culpable y que te gustaría pasar una noche conmigo escuchando Michelle esa canción que sin decírmelo dedicaste sea en cuatro días cuatro meses cuatro semestres cuatro años que me escribas y yo te disculparé por poner todo el peso sobre mi espalda perdón por no tener otras palabras para expresarte eso que siento mejor sería no haberlo sentido pero qué más da si también soy de carne y hasta mis huesos sienten la electricidad

de estar cerca de vos

escuchándote cantar y diciendome que mis labios son maravillosos fijándote en detalles que nadie nunca más se fijó

sobre mí

lo mejor es callar mis deseos de pecar dejar mis vicios ocultar mis sentimientos apagar el fuego y seguir caminando sin ver atrás en esta ciudad de hombres artísticos y hermosos tan hermosos como vacíos lo mejor es que vuelvas a tu tierra y te olvides que esto alguna vez sucedió y te arrepientas de contestarme el teléfono en la madrugada por faltarle el respeto a tus creencias

sí

no lo niego, yo también lo hice

Dios nos perdonará

pero si me lo preguntan de nuevo... ¿Volvería hacerlo? Por su puesto que sí.

Lo siento,

si pudiera definir lo que sentí sería:

Electrificante.

Sí, tal vez ni exista esa palabra pero es la única manera que encuentro para definirlo y la encontré después de varias noches de sobrepensar evaluar y dar vueltas en la cama pensando en por qué me sucedía esto lo mejor es no escribirnos porque hasta acariciar la pantalla para responderte es electrizante. Y no puede ser. Y tal vez nunca.